El documento describe un proyecto de estudiantes de química en la Universidad Nacional Autónoma de México para fabricar un rímel casero utilizando ingredientes como hueso de mamey, lanolina, aceite de almendras, vaselina y cera blanca. Aunque el rímel resultante no fue completamente negro como los comerciales, funcionó igual que éstos. Los estudiantes concluyeron que la fabricación casera de rímel es recomendable por el ahorro económico y la facilidad del proceso.