August Sander nació en 1876 en Alemania y trabajó como minero antes de convertirse en fotógrafo profesional. A principios del siglo XX, comenzó un proyecto ambicioso para fotografiar sistemáticamente a personas de todas las clases sociales en Alemania, con el objetivo de crear un inventario de los rostros de su época. Aunque su obra fue perseguida por los nazis, reconstruyó su archivo después de la Segunda Guerra Mundial y su trabajo recibió reconocimiento internacional.