2. Rosa Virginia Pelletier nació
en 1796 en la isla de
Noirmoutier, Francia. La
futura fundadora quedó muy
impactada por la profunda fe
de sus padres en medio de la
Revolución francesa.
Estudiante en Tours, Francia,
el corazón compasivo de Rosa
Virginia se sensibilizó hacia las
jóvenes y mujeres de las que se
ocupaban las Hermanas de
Nuestra Señora de la Caridad.
A los 18 años de edad, Rosa
Virginia entró al monasterio
cercano al pensionado y
recibió el nombre de Hermana
María Eufrasia.
3. La Orden de Nuestra Señora de la Caridad fue
fundada en Caen en 1641 por San Juan Eudes
para ayudar a las jóvenes y mujeres en
dificultad que querían dar otro rumbo a su
vida. Cada monasterio era autónomo.
La Hermana María Eufrasia fue nombrada
superiora del monasterio de Tours a los 29 años
de edad. En 1829, bajo su mandato, respondió a
la solicitud de fundar un monasterio en la
ciudad de Angers. En 1831, al finalizar su
servicio como superiora en Tours, fue a Angers
para asumir el mismo cargo en el monasterio
fundado en dicha ciudad. En este tiempo, la
Hermana María Eufrasia fundó una comunidad
contemplativa en ese mismo monasterio.
Conocidas hoy como las Hermanas
Contemplativas del Buen Pastor, su misión es
la de orar por las personas con quienes las
Hermanas Activas ejercen su servicio
apostólico y por la salvación de las personas del
mundo entero.
4. La Congregación creció enormemente. Sin
teléfono, ni fax, ni correo electrónico, sin
poder viajar por avión, Hermana María
Eufrasia fundó en el transcurso de su vida 110
casas en todos los continentes. Murió en
Angers, el 24 abril de 1868.
Su legado, su vida y la obra que el Espíritu
realizo a través de Ella va más allá de la familia
religiosa que fundo, es herencia viva para la
Iglesia Universal. Su doctrina, sus
sentimientos y su vida confirma esta
experiencia de amor que la llevo a fundirse
por entero en el Verdadero AMOR.
“Conserven los sentimientos religiosos que
ahora las animan. Déjenlos en herencia a las
generaciones futuras y nuestra Congregación
será siempre semejante a un árbol plantado
junto a la orilla de las aguas (Sal 122,3),
extendiendo por doquier sus ramas cargadas
de hojas, flores y frutos”.
5. ¿Es posible? ¿Pero es posible que esta
religiosa haya fundado ciento diez
conventos de su Congregación por
todo el mundo?...
Conventos dedicados a un apostolado
nada fácil, como es el de acoger a las
mujeres infortunadas, que las quieran
promover y dedicarse a ellas de por
vida, no es tan fácil encontrarlas.
Y esta Hermana francesa ha
encontrado a miles de valientes que,
como ella, se dan de lleno a esas
personas que son amadísimas de
Jesús. ¡Si, esto parece un imposible!..."
Esos eran los comentarios cuando la
muerte de María Eufrasia Pelletier,
Fundadora de las Religiosas del Buen
Pastor".
6. Hoy como ayer nos dice: “Vivan
felices con su Dios. Ámenlo. No
piensen más que en El. No
busquen más que El. No se ocupen
más que de El. No respiren ni
vivan más que para El, y sea El
como la atmósfera de su persona.
Dense enteramente a Dios y un día
se dormirán en su Corazón para
despertar en el seno de su gloria”
"Es bien sabido que yo no tenía ni
riquezas, ni el talento ni el
encanto exterior, pero yo os he
amado siempre, y yo os he amado
con toda la fuerza de mi corazón".
7. Fue beatificada en 1933 y
canonizada en 1940. Hoy
las Hermanas Activas del
Buen Pastor y las
Hermanas
Contemplativas del Buen
Pastor sirven en 65
países, abrazando el
mundo con su celo por la
salvación de todas las
personas.