2. Definición
Inmovilidad: Disminución de la capacidad para desempeñar las
actividades de la vida diaria, por deterioro de las funciones
motoras.
El síndrome de inmovilidad o desacondicionamiento es un
problema geriátrico caracterizado por una reducción marcada de la
tolerancia al ejercicio, progresiva debilidad muscular y en casos
extremos pérdida de automatismos y reflejos posturales que
imposibilitan la deambulación.
3. Clasificaciones
Inmovilidad Aguda:
Declinación rápida con postración en cama o cama-sillón en 3
días. Urgencia medica.
Inmovilidad Relativa: Llevar una vida sedentaria pero capaz de
movilizarse con menor o mayor independencia. Riesgo de
encamamiento.
Inmovilidad Absoluta: Implica el encamamiento crónico y está
muy limitada la variabilidad postural. Factor de riesgo de
institucionalización, de morbimortalidad y aparición del síndrome
del cuidador.
4. Epidemiología
• Aumenta con la edad.
• >65 años:
Dificultad para caminar dentro de
su casa 6%
Subir escaleras 12.7%
Salir a la calle 12.4%
• >80 años:
Dificultad para levantarse de la
cama 19.3%
• Para ir al baño:17.9%
• A nivel hospitalario: 59%
ingresados en unidades de
agudos inician dependencia en
una nueva AVD.
• Mortalidad:
De los ancianos con inmovilidad
aguda:
33% a los primeros 3 meses.
>50% a los 12 meses.
5. Cambios fisiológicos
Musculoesquelético
Atrofia, perdida de fuerza y
velocidad, reducción
densidad ósea.
Sistema nervioso
• Disminuye sensibilidad
propioceptiva y vibratoria
• Lentificacion reflejos posturales,
presbicia y presbiacusia
7. Ancianos en Riesgos
SEDENTARIO
No realiza ejercicio tiene
poco consumo
energético
FRÁGIL
Mantiene nivel adecuado para vivir en comunidad
pero ha limitado sus actividades extras.
Resistencia y fuerza escasa.
11. Valoración
ANAMNESIS Y EXPLORACIÓN GENERAL:
• Tiempo de evolución y Tipo de
Inmovilidad.
• Impacto en la realización de AVD.
• Condiciones clínicas que contribuyen a la
inmovilidad.
• Historia farmacológica.
• Factores de riesgo.
• Exploración de los sistemas
cardiorespiratorio y musculoesqueletico.
• Pruebas de Katz, Lawton Brodym
Minimental, Escala de Depresión de
Yesavage.
CAMBIOS POSTURALES Y
TRANSFERENCIAS:
• Examinar movilidad en la cama:
Capacidad de girar e incorporarse a la
posición de sentado.
• Evaluar realización de transferencia
cama-silla, cama-baño.
EVALUACIÓN DE LA MARCHA Y
EQUILIBRIO:
• Para identificar precozmente perdidas
funcionales.
• Test Tinetti, Test Up and Go.
12. Tratamiento
Cambios Posturales:
• Seguir una rotación determinada respetando la alineación corporal.
• No arrastrar al paciente para evitar las fuerzas de cisallamiento y fricción.
• Repartir el peso del cuerpo por igual para evitar dolores musculares por
contracturas de compensación.
• En pacientes acostados cambiar de posición cada 1- 2 horas para evitar
presión sobre prominencias óseas.
• En pacientes sentados realizar cambios cada 10- 15 minutos,
sosteniéndolo en pie durante 10 minutos para proteger zona sacra.
Almohadillado:
En las zonas de mayor presión como codo, rodilla, sacro, trocánteres,
escápulas, etc.
13. Higiene:
• Baño adecuado y secado estricto de la piel,
insistiendo en los pliegues.
• Mantener cama y/o silla limpias, secas y sin
objetos extraños.
• Sábanas suaves y no formar arrugas.
• La habitación bien ventilada y a temperatura
adecuada.
Masajes:
• Debe realizarse suavemente, con
movimientos circulares amplios sobre la
piel y el tejido celular subcutáneo
(amasado) o pellizcando y soltando
nuevamente el plano muscular con los
dedos.
Aporte de Líquidos y Alimentos:
• Evitar déficits proteicos.
• Recomendar una ingesta de 1-1,5 litros
de agua al día.
• Conveniente un aporte de vitamina C (1
gr. al día en úlceras ya establecidas) y de Zn
(15 mg/día) en la dieta.
14. Encamamiento:
Si la inmovilidad es total se realizarán cambios posturales pasivos, asegurando
una postura correcta.
Si existe estabilidad médica se puede iniciar movilización articular pasiva
(ejercicios de estiramiento y relajación muscular) evitando provocar dolor.
Cuando el estado del paciente lo permita se pueden comenzar movilizaciones
activas e intentos de flexión anterior del tronco con ayuda de barandillas o del
trapecio, así como la incorporación progresiva de la cabecera de la cama.
Sedestación:
Cuando el enfermo está encamado hay que iniciar la
sedestación al borde de la cama con los pies
colgando enseñándole a hacerlo sin ayuda. Una vez
conseguido este aspecto se reforzará con ejercicios
de control de tronco. La sedestación al borde de la
cama es la preparación para realizar las
transferencias.
16. Dispositivos de ayuda
BASTONES:
• Soportan el 15-20% del peso corporal.
• Utilizarse con la extremidad contraria al lado afecto.
• Altura debe ser individualizada (Apófisis estiloides del
cúbito).
• Puede tener uno o varios puntos de apoyo.
Indicaciones:
• Debilidad muscular de un miembro inferior.
• Aliviar dolores articulares secundarios a la marcha.
• Ampliar la base de sustentación si existe inestabilidad.
• Compensar deformidades o como punto de referencia
si existe deficiencia sensorial.
17. MULETAS:
Hay dos tipos: las que se ajustan al codo y
las axilares.
Complicación: Lesión del plexo braquial.
Pueden aguantar todo el peso del cuerpo,
proporcionan más sujeción, descarga y
estabilidad.
Su uso aumenta el gasto de energía en la
deambulación hasta un 60%, por lo que hay
que potenciar la fuerza y resistencia de
extremidades y tronco.
18. CAMINADORES:
• Aguantan el peso de una extremidad inferior, pero
no todo el peso del cuerpo.
• Existen diferentes tipos: con asiento, cesta,
plegables, de cuatro patas, con ruedas (indicados si
hay dolor en hombros o tendencia a la retropulsión,
pero si hay riesgo de antepulsión están
contraindicados por el riesgo de caídas), etc.
• El caminador produce una marcha en tres tiempos:
primero avanza el caminador, después una de las
EEII y después la otra.
Indicaciones:
Períodos prolongados de inmovilidad con debilidad
generalizada o si la marcha no es estable.
19. SILLAS DE RUEDAS:
• Tienen que adaptarse a la constitución, peso,
discapacidad y pronóstico del paciente.
• La silla tiene que ser cómoda, estable y distribuir las
presiones de forma adecuada, así como facilitar las
transferencias.
• La estabilidad se consigue con la cabeza y cuello en
posición vertical, caderas flexionadas a 100º,
caderas en ligera abducción y hombros en rotación
interna, con los brazos y pies apoyados y la espalda
ligeramente inclinada hacia atrás.