El Imperio Inca se ubicó principalmente en el actual Perú y se extendió también por regiones de Colombia, Bolivia, Brasil, Argentina y Chile. Tuvo su capital en la ciudad de Cusco y estaba dividido en cuatro regiones. Los incas tuvieron una economía basada en la agricultura, especialmente del maíz y la papa, y la ganadería de auquénidos. Practicaron una religión politeísta con el dios sol Inti como máxima deidad.