El documento discute la tutela penal de los bienes jurídicos y los derechos humanos. Busca dar las herramientas para clasificar una conducta como un delito y convertir la violación de los derechos humanos en una máxima para los abogados. También presenta tres principios clave de la justicia: humanismo, justicia e imparcialidad frente a la impunidad, violencia y venganza.