La Primera Guerra Mundial comenzó en 1914 debido a las rivalidades imperialistas y los nacionalismos entre las potencias europeas, que habían formado dos alianzas: la Triple Alianza de Alemania, Austria-Hungría e Italia, y la Triple Entente de Francia, Gran Bretaña y Rusia. El asesinato del archiduque Francisco Fernando en Serbia llevó a Austria-Hungría a declararle la guerra a Serbia, involucrando al resto de las alianzas y dando inicio a una guerra a gran escala en Europa.