La economía ha sido de interés para las civilizaciones antiguas desde tiempos remotos, aunque no surgió como disciplina de estudio hasta 1776 con la publicación de La riqueza de las naciones de Adam Smith. Aunque se observaban aspectos económicos en culturas antiguas como Grecia y Roma, y durante la Edad Media, no existía como doctrina separada hasta que el nacionalismo económico guió a los imperios europeos y llevó a su desarrollo.