SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 548
Descargar para leer sin conexión
,',
PBRO.DEMETlIO ,RAMOS, EHEZ
BRI A
DE MI M TAÑAS
LEO E AS
TRADICIONES, YC05TUMBRE.5 DE MI PUEBLO
VELILLA DE GUARDO
""; (
ti
,1
'.'
r.,':'1,
,.. - ' ,
1 '.:"
. :', ,~. . ~
PBRÓ. DEMETRIO RAMOS, DIEZ
BRiSAS DE MIS
a .1l1I Dr:11I JjJ a IIiI aa I Del. D' Da '11 lIIelS lIaa uIIID.a I D11 uoa UII ••• VII Da 1.llIlIal a 11 alal a 1111.1 ••
MONTANAS· LEONESAS
. TRADICIONES Y C·OS1Ulv1BRES DE MI PUEBLO
VELILLA DE GUARDO
. /'1 i~830~
;2..91)D
BUENOS AIRES'M REPUBLICA ARGENTINA M ANO 1940
...~ .
,i "
.~ :
.í
~' '.
~~______~aR__~'__~~~~~~"~P~"~~~~~MRaa~~..~..~~_~.~~"'~'~."~~.~;"OF'"~~~.~4"~F~;.,,•.~,,..~~&.¡~...e.""~~""••"~".i4.$"",J.""".,,*,'"
~. Ll . .
:,-~ r-;,
.'LL..-I ;:
!.
":",t
L
~..."-, .--,..
::-... "
, _"~J
,i'(: .
'
~".",""'''''~.''''.''Jb-'''''''''''''''''''''"l"'. -:'~"-""":'~~·"·""'~"~·'·.';V;-"'.",,:'-: :'''! -":'~, ."...... _ .
.~<.
, .'
,.'.'"." ...........-"':::";"'~(T:::~?~CT'~;'~,'''''''~r;~7'~'~~'7-~7;~:·~~~~..::r~·~;~??~
. ~~~--~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
~ ..
¡o
o
AL MI QUERIDO PADRE D. MIGUEL RAMOS,
'~'. . .' A LA' lvISEÑOR'A Y HEROICA MADRE
J'~"" 'SEÑORA DOÑA AGUSTINA DIEZ DE RAlvOS
& . . .: .
~ (QUE EN GLORIA ESTEN)
& ,.
I A LOS MIS HERMANOS CONSTI-NCIO, SlMON y ESTEBAN
o
l (CARMELITAS DESCALZOS), .
:
I
:•&
Je
•.~
~
9
RUfO RlM05 üIEZ (lvJSIONERO DOMINICO EjJ CIiINA) . !$
~
o
Y MARCOS y fLORA RAMOS
!~
:o
·9
e
o
A LOS MIS SOBRINOS Y SEÑORES TIOS
. .
y A TODOS LOS MIS PJRIENTES, AMIGOS,
----",
J ..-$
o
e
G
~
o
o .
:o ,
o
,
COMPAÑEROS Y ceNDISCIPULOS DE ESCUE-I::A'.-~8-:-
A TODOS LOS MONTAÑESES Y HABITANTES
DE MI QUERIDO PUEBLO, VELILLA DE GUARDO'
OfREZCO, DEDICO Y PRESENTO.
¡ ESTE MI l}BRO' DE
: "TRADICIONES y COSTUMBRES DE NUESTROPU.EBLO" I
'. . SATURADO DE AROMA . .
DE NUESTRAS MONTAÑA5 LEONESAS'
.. '.·c.·.· .::"~.
<. :';
EL AUTOR
o'. '
.- .., .
..:::.
o,' '::'
.. -
',!
'". ~,
j~t~~;'::;~~~(i,t!~~~t~f~~,;~;i#.:~~·{i¿;á~,~¡il;:i;/}~~i:::)~:;;i~';'~~,::;.;..::., .
,',!
/::i'
>J.:,1
;;1
~.
.~ ':é(
~'(
CX::=~Ji
. ,
Introducción
A los, veinte años de ausencia de España, tengo.
qhora m,ás pura y poética la visión de mi térruño, y esa
visión es laque nLe lia intpulsado a escribir esto que a
."tierruca" sabe. .
P " . "l l ·z· .. ero cosa ttzste, o que aa ganaG o mz sentz-
n2iento de la patria chica, purificándose, lo ha perdido
mi nle7noria en cuanto a detalles, palabras propias,
. giros típicos y expresiones vivas. Ahora es cuando
yo quisiera estar e7( mi pueblo y recoger,como un
te.soro desperdigado, la palabra, la costlunbre y hasta
la' indun2entaria, que se fueron para no volver nunca.
Convencido de que no podré hacer cosa ntayor, me
he propuesto sin embargo recoger "Brisas de mis
montañas" para orear con ellas "Las. costumbres de
. bl "mi plle o.'
Siempre !té sentido entusiasmo por locaracte-'.
rístico (costumbres,tradiciones, vestimentas, etc.) de
cada país~ Me ha emocionado siem¡jre, todo lo qu.e tie'-
ne "color local" a base de costnmbrismo, tanto de
España como del mundo entero, y he sentido' siempre
algo nizly hondo en presencia de las basquiñas y pa-
ñoletas gallegas bailando una "muñeira"~ d(!¡ los Vas- '
cos con sus' "A urrescus", de los Catalanes" con sus
.•Ii~¡;,~,~t,,~~(i;'~~:O.,'~'('.'~,~.:......, .
~" .
,....
;" :"~,
.'. ;,
'1;;
,.
. '. .'; ~ '.. . .: .:. , -. -' ,- :"-:-.-.".. , .:'.-. ;. ,·:,.,c..;-. ~. ".' .
8 "PBRO. DEMETRIO" RAIVIOS DIEZ
,"Sardanas", de los Asturianos con su "'Danza Prima"
y de los Anda.luces con sus "Sevillanas", 'lo lnism.o
que he experilnentado en~ociones ante U1L bretón o un
holandés, U71 napolitano y un -escocés con sus enagüi--
Uas y perifollos. Aquí en América~ ninguna cosa rhe:
entusiasma tanto COlno la presencia de un "gancho",
con bom,bachas, chiripá, botas de potro, espuelas naza-
renas, facón y cinto cuajado de plata~Esla tradic~ón" "
y la tradlcióli infwye sobre mlíde una 7nanera irresis-
tible. N o soy"criollo", alu~que entré criollos he p(Jsa-
do los lnC.10res años de lnivida, pero siempre 7ne
entusiasmó el payador de la pa7npa rasgueando en su
. " 1 " " 'el lO ,,' - ,. l'guztarra c Lacareras y vz a, ztas , y para 7nz, ,e
presenciar los bailes popuiares alnericanos ln:e ha
servido de solaz y entretenilniento. Siempre he sentido
, , ',. . lb' 'l l" .,." l ',,' "emOClon V'l'enc o az al' e perzcon o e:, gato" una
"chacarera" o lULa "santiagueña", ung, "cueca chile-
" " "f l . ,¡)
na o un ,- an(j ango natzvo .
Es por esto sin duda que nunca he encontrado
en la. vida cosa más imbécil-que "la 7noda". Quita toda
,esperarz,za de. humana redención, y nos hace reír eso
'de que h~sta muchos honLbres de talento 1 verdadera·
mente eminentes., sé preocupan de su bigote recorta.J.o
a loCarlitos Chaplín... ' j Vamos, hombre!,
Pues esta moda estúpida; con sus cam,bios, ri-
dículos, ha' penetradq también en mi .tierra, como en
otros paíSes de costumhres, tradiciones: y, vestimentas
patriarcales, bo~ra.ndo lq típico tradicional, lo único
,genllinopor'castita procedencia de. raza pura y 'va'·
.:~
.:~
......¡
BRISAS DE MIS lVIONTAÑAS,LEONESAS 9.
roniZ. Lo repito: no, encuentro en el lluuulo nada
más'ridículo ni nlás z,nbécil que "la m,oda".
.Ella es la culpable de qlie se hayan icT;;- denú
pueblo las capas de paño de loshom,bres y las man-
.tillas severas y elegantes de, las 7nujeres; .l([, llloda ha
hecho desapa,i-ecer las basquiñas, lnanteletas y pa-
ñolones,' escarpines,' blusas y 'gorras, zaragüelles' y
chalécos, bailes y juegos, costlunb,-es y bellezas.
Cllalquier viejo de m,i pueblo podría e_xclalnar
con el poeta:
¡Ay! Yana soy yo quien solía
ni quien yo solía ser...
porque hasta el recuerdo de lo qu·e fué nti' pueblo
ha. desaparecido.
Con esa ntelancolía propia del que se propone
escribÍ7: un libro "regional" y ,.-eunir "notas de co-
lar", m'e propongo yo resl¿citar los recuerdos de mi
pzu¡1Jlo y de, mi tierra, cOlnopaís encantador por SlíS
costuntbrestípicas (bailes, bodas, bautizos, entierros,
tradiciones populares, navidades, carnestolendas, Se-
' . ~. )lllana IJanta, ,etc. ..
Con todos estos elementos he procurado dar a
,este libro regional un ambi,ente que temo no lo én-
contraría ya. en m,i tierra el curioso lector, si a ella
fuese a buscarlo...
Salpicado de: notitas salientes y pintorescas de
costnn'tbres, creencias y leyendas, he procurado reco-
ger algunas palabras' raras y típicas para dar el
., .:'. ,-
>v ,."
. ; ','
JO PBRO. DEIVIETRIO RAMOS DIEZ
alnbienlie y la visión de mL tLerra, e.vocando a veces,
lnás" que recuerdos, la frase, la7nanera propia de
decir del pueblo, para, ajustar a e.lla el tema de la
composición. "Lo del vulgo está en el 'senti7~". Ha')"
.·'vulgo" que sie7ú~' con finura y delicadeza, ,Y "gente.
, fina" qlte no sabe lo que es sentir finamente. .
Jyo he'· buscado e.stilo 'afiligranado ni léxico de-
erudición, ni piruetas Y acrobacias de lenguaje. Pre-
.fiero. lo vivo, lo qlle me llena de sentir y me mnociona
,y 7ne 'estrelnece, y escribir quiero lo ,que vi J' lo qne
sentí y' lo que· gocé durante los años de mi n,iñez, y
lo qzie ya, ni vivir ni .se.ntir pueden los'niños actnales
de 7ni pueblo, porque... ¡pasó!... ' ¡pasó!... iY todó'
pasó.tal vez par.a no volver ya lnás!...
Y, justalnerLte 'pOrque todo eso. ya pasó, es por
lague yo quiero re.cordarloaquí, para que al. n1enos
sepa;¡nos que existió, y' para guardar esos fragmentos
que ya pasaron; para eso son esas urnas sagradas
qUe llam)u,mos bibliotecas, lnuseosy libros.' Para eso
he escrito este libro, y no para otra cosa.
¿Que se fué lo típico? .. iEs cierto!, pero po~
:" rlelnos evo~arlo todavía, poden10s. hacerlo revivir, y al
.! '. hacerlo así- hacemos historia, Y todo cuanto pienso
decir de lni pueblo Y de.7nis montañas teone.,sas, no se~ ,
rá otra cosa que evocación, historia.: ¿Qué son los lnu-
, s(?os, lalite.ratura clás.ica, antigua, arcaica? .. ¿Por qué
desenterram,os hoy~scrupulosa Y escudriñadora,mente
Zas tumbas de los' Faraones y de Tum-Tam-Ka7nón? ..
Para evocarlas y haceiZas revivir, después de tantos
"""'"'.':.:¡--
" .... " .~' '"
"
.:. 1
,.
1,
"
"
.
"
.
"
"
:.. ,
,:,,1
.:·.,~·1
'."y
, • • 0
, '
, ,,', - ': ",.~:':"''-"'~"'~'~'¡:<"C'>>i,<".;-;,",;':7.C;'?JjG'i'07.'C;?¡;:':;.~~:,~'!;;~o/'...:i::':;i;i.,./:;,:;X,>:¡;)<~¡))~'~):ir»;~~~j;~?:::·.;it.,.;':;f;~~
:.::/;
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 11'
y ta.ntos siglos de haber desaparecido. La ciencia no
hace. otra cosa que recoger lo que pasó. DefendanLos
Y" cons'ervemos nosotros también, 'en lo' P?sible, '"la
gracia rústica" de nuestra tierra, que' es "nuestra
lnadre", la qne nos hace exclamar con el paeta: .
Acuden a mi memo;'ia
los recuerdos:
mi infancia, mi Hwcedad,
7nis padres lnuertos.
y es la tierruca "la tierna madre" a la que con
cariiio recordamos desde lejos, y por ella sentimos
'la nostalgia que nos ha.ce senti., y llorar y apreciar
en su, justo" valor lo mucho que' vale, obligándonos
a exclanz,ar:
"
"1rse lejos para verte:
para qnererte, dejarte;
)' perderte, tierra mía,
para sabe]' lo que vales".
El poeta JlIluTciano tenía. corazón y tenía senti~ ,
rniento al 'escribir estos versossobre "la patria, chica":;
y lo núslno que Vicente Medina, siento yo tristeza
al cantarla, y siento lo mJsmo que él los ojos hume.~
(lecidos, las nz,ismas ansias y los mismos deseps:
./
"i1!T ··Z·11'1 e pongo tnste a cantarle
y se llze mojan los ojos...
Tierrecica, tierrecica...
es que al cantarte te lloro.
• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • l . • • • . • • • •
:.' .......
l,,",0'[;/X" .
. :..l
.....,._~;:,'il
, , ..
• . ,o. .... ~.
12 PBRO. DEMETIUO RAMOS, DIEZ
Que ·7Jwabrigue·· mJ cuerpo.
mi tierra;
lni .tierra del. alma..."
.El qne no tenga el" corazón ninerto~ no podrá
lnr:>nos de sentir un cosquilleo al encontra.rse con esto:
. CWI.(zclo nrihorica li'LC' llegue
. quiero m~orir7J1e en mi tierra,
... 'verla al cerrarse mis ojos
y tener un hoyico en ella.,
AUá lejitos, Tlw/y lejos,
en. un 'Vtllleéito ameno,
están mi pueblo y mi casa...
e,slán ]ni c:[(sa y mi pueblo...,
i Quién Juera águila, )' volando.
J l ,,' l' ,uera eJllos, muy· ,e]os....
j Allá donde está lni casa!
j Allí donde está mi pueblo!
Es 'Por eso tambiéh que me entra una pena lnuy
grande al contemplar a mi púeblo sÍli süs antiguas
costulnbres patriarcalf:!:s hoy desaparecidas, y' en este
libro por lni recordt;tdas,y al recordarlas lanzo este
quejido': . .
Jl!lipro1.Jincia ]ne da 'pena,
mi pueblo me da dolor:
i Ay! j provincia de mi vida!
¡Pueblo de ¡ni cora~ólLL.
y esa rn.i puebló;y a los seres queridos de mi
pueblo a quie'nes dédicomilibrocon todas sus cosas
-, . "':--.
-'.' ....~ ."
.• r~..r...:'"-~'~~";'.·f ~f,." ...... ~~:. r' ~y,,, ",;_~!~••• k!(IP~:, :.':;_"·.·I~:!'·Hu.~':;:."í.''!:,~,!:--'~I,,~~:,~···~~:~'!-::?-~1¡,:~f.:;'~':::;:-~'§'~~~~~{';.~~;:.+'I!f~::J~~
. o: .0 '" •• ; . .0 O ' . ¡. : ~~'.' o:.. , .: ; .' . ~..
O·' ; ...
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 13
regionales, .típicas, características, pintorescas y sen-
cillas, con todo su colorido, ingenuidad, gracia' agres-
te, viveza y frescura, y he querido defender y' conser-
. '.:',.
... val· en lo posible esa "gnacia" rústica y pueblere~a
de mi tierra. .~ .
Al escribirle, no he pensado para nada en la.
ciudad, porque a las ciudades. las repudio y no las
acepto como representantr;s, genuinas .. del pueblo. El
puéblo es, y' sera siempre, el campo, el río, la fuen/'c,
la huerta, el prado, el valle, el bosque y la, cOlina; la
tierra qUe da el pan, la nladre: tierra que lo da todo,
., todo: el pan, el fruto, la flor, la .lana, la. hierba )' el
trigo, 'hasta las patatas y el repollo. Y la ciudad . ..
¿qué, da?... malicia, pillería, engaño... La 'ciudad
contamina y borra lo genuino' de: la tierra. La ciudad
no da, ¡quita! y ¡traga! La ciudad se ha traga.do a
¡ni pueblo y a' m,i tierra... i Por eso no la quiero!
Quiero a mi tierra leonesa y a mi pueblo en'ce-
rrado e.ntre m'ontañasleonesas, y en señal de que los
quiero, a ellos les envío mli libro saturado de "Brisas
{le mis n10ntañas". Se ~quivocademledio a medio
el que creyere qZle al escribir lnilibronle han, en~pu­
ja.do, la gloria o el dinero... j El dinero!... EI editar
hoy un· libro no da dinero, sino que cuesta dinero...
¡Si lo sabrem,os los' que tenp:nLos la chifladura de
-b' Z'b ,escrl zr l ros....
Ei'L cuanto a la gloria... lo único que' confío es
, que 'alguna vez jJlbede que enmíJiueblosp~ acuerden
., de. mí, y con esto ",:,e doy por satisfecho.
'. ,', • • o •
l. : . ."
PB)W. DEMETRIO HAMOS DIEZ
Quedamos, por lo tanto, en que'. este libro' es
enviado y va dedicado a "mi tierrllca" y a mi pueblo:
Tierra leonesa
Por nú cantada,
.Tan admirada,
Tan suspirada,
.Tan deseada...
Est.a corona fe envío· ..
En oro fino' labúl(la. ,
DElVIETRIO HAMOS DIEZ
Bne'nos 4áes, ~J 940.
.." ..
" , . "
, .~ .
) .:,::.
.:~.~ -',"
.-:'
..,.:c.,.,:,.,_...,.,,:.=:",.t~.~:;,: ',.:,: ;;~i:..'.::: ~'~";:>::'.'::"';'.",-/,__.<._.'.:::..:,::.~.>..:.)i.~';" ~:" .:";_';~>:;;;.c:<:r;;~,':!;:~:~:~;t," .', '
.Prólogo
. . Si triste ha ~ido. · y será ·slenlpreel oficio de
sepulturero, 'no nIenos triste ynlelaJlcólieo .tiene: que '
sel.-fÜrzosaUl,ente el d e déseiüertadoro resucitador
si ~e quiere, de costünlbn~s , ll1uertasy cOlnp1etaniente
. r110nü:ficádas, qlle fueron y ya no son, que .existieron .
yya no existen, pOl;que., relegadas eonlpletanlente al
. olvido,se encuentran' clesgra~iadanlente sepultadas
en el panteón de la historia. . .
,Porqu~lal fin. de cuentas, éste y no otro es el
objeto de iodo novelista que se" propone resucitar
"gentes,coSl,UlnhFes, cosas y lugareg, tipos y paisajes
conlpletanllC)Ilte .desaparecidos, ' y recol1struir unpue-
hlo~ ga~vallizarle de nuevo, soplando COllloEzequiel
, sobi~e¡ sushüesos áridos,carcom5dosypulv.erízados
de la noche a la luañana, después de uha patriarcal
y centena-riaexistencia, ha~iéndole revivú una vida
nueva, salvándole 'de la balunlha de nuevas ideas, de
costumbres·ex6ticas y de orientaciones descarriadas,
arrancándole,en fin, del torrente devastador, de
eso que ha dado en'llalll1arse. civilizaci~n nueva, de la "
.qUe nohán podido librárse ni los pueblos .nlás pací-
.fieos, ni las ald,eas ll1ásescondidas eptre roeas y bre·
ñales.
, .'
':"; ':.-: :,,,•• .,,.;í" 1'''1
..~. ": . .
16 PBRO. DEl'vIETRIO HAI10S DIEZ
Lo que :ell autor aquí pretende y lo que busca
y lo que desea? es nada l1lenos que hacer revivir a
un pueblo patriarcal ya l1Ulerto? hac;er reapal'eceren
el escenario de la vida a una generación que ya pas6
a la histoxia,presentando a los ant~epasados de Hli
pueblo. ele yelilla de Guardo con los núsnlOS cue:r:pos
y ahnas que tuvieron? de tal ,l11aneql quc, los que me
leyeren con melancolía en el ahl1a5 · con dolor 'en el
corazón y con lágrimas en los ojos~ puedan exclalnar:
" T-' . ., 1 1 1 ~ ,l'.,sto que aquI eo o conozco yo persona luenLe' ,
porque desde ya puedo' afirmar que aún· existen
111uehos? pero nlHehos~ que personalmente conovieJ'on
las antiguas costum,bres de rnipuehlo, y fueron ac-
to.res de' ellas~ y ·las recuerdan con nostalgia, y se
entoéTuecen con sus remel11)branzas~ y lloran su pér-
dida y suspiran por su resurrección, y viven ,con ]él '
esperanza de verlas restauradas ,de nuevo,' aunque
peiáen· ya canas' y lte.s falten los dientes, y tengan
la piel' arrugada y apergan1inada. Y a esto vengo'l Y
para esto escribo el presente libro de "Costu111bre5
de nli pueblo"', para que cuantos aún viven de espe~
ranzas, puedan rem,ozarse un Po.co con los recuerdos,
pasados, y al 111enos derranletl1 IágrÍlnas sedantes al
ver desfilar, ante sus ojos tal vez apagados, cuadros
en los cuales ellos nliS1110S fueron actores~ 'y costurn-
h1'es ya desapal~e~cidas que· a ellos, les dieron calo,r
y vida, cantos que ellos entonaron con sus Inisn1HS
gargantas, danzas,· qiIe ellos 111)S11108 ejecutaron. al .
st1n del tamboril y' de la pandereta, y ejercieios fi-
,:'.":L
.. . . . ¡,iÍ
:,.. ;..' ....... : o"·,:·,· .. _... c..:.;.•• ~.....: . _•., ,..;.;;;:_:·,¡,,¡¡,,:::_;,~,~,.I.;
ji ,
! .
f
'.''"':,:
, BRISAS DE MIS MONTAÑAS -'LEONESAS 17
, ,
. l' "1 h" 1 "h 1 ", 1 "1 " 'SICOS que como e a uc e" o.s o os' y a )arra"
elcolocar "enraluadas" y "pinar mayos", dieron vigor
a sus cuerpos y santa' e~'pansión y alegría a sus
esníritus.
~ Pretel1do nada nlenos que resucitar costumbres
de luipueblo, no hacenlucho desaparecidas y des-
graeiadamen~e "asesinadas" a", rnano.s de aquellos
'lnisnl0sque taI1to gozaron"' con ellas, y' que, ahpra
-echan de menos, C01110 el joyero echa de menos las
perlas preciosas y el, oro. antiguo que antes enrique-,
cieron 'SllS anaqueles y vitrinas, y ahora no ve más
que chafalonías y falsedades 1110dernas colocadas en
esas misÍnas vitrinas y anaqueles.
.No es núiiltento, ni nIucho 111enos aspil'oá. la
conquista del aplauso, pero tampoco. terno ni TITe in~
,tünida el veredicto de Ta crítica ni ,las invectivas de
los ,Aristarcos que nunca han faltado ni faltaráp nunca.
Lo único que puedo decir desde ya a nlis lectores, es'
lo que dijo Pereda en una de sus fanlüsas novelas:
"Lo que aquí veis, no pertenece nlásque, a la cantera
d . 1 "e 11U 1uerto .
Quedanl0s, por 10 tanto, en que lo único tIue
lTIe interesa es tener 1'<1 satisfacción de hacer reír o
llorar con este libro a los viejos de luí tierra mOll-
Úlñ.esa al recordarles tiempos que se fueron; de hacer
~.
'pensar a 140s jóven'es y entretener a 'los niños,que no "'<';:i~~j':>..."
• . . ' . ' ,,:'. (.. '1,
tuvi'eron la dicha de presen~iar 'y masticar el ambien/~>'.,')Ji /~~2>
te; patrian} J de las costumbres de sus padres i~ ~~.=~:.~:'~.;'~~ '.'
abuelos. . ,,' >,~, ~::,,' :..'::~ ;Ú ~J
'f~/¡;'..:~: :-'~'~.., : 1'-~ .~  --:/ .
' '2.- ",,' l. _:.......
¡"Ú¡¿~~;;}~",;" ..... ,,'C; " .' ." '........ .
'. '.'" ,,'
•.. q
:~.,¿~
: "-':'
..' . ' .......
18 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
, Todo esto que aquí digo,. o que qlllsIe:ra dedr,
sucedía, no en·· tiempos de Maricastaña, sino hace
rnuy pocós años ennli pueblo. natal, Velilla de Guardo;
escondido entre las rtiontañas abruptas de. León, pro-
tegidopor los Picos de Europa y .peña Espiguete,
flanqueado por la Peña Mayor y Peña Labra, baña-.
do por el Río Carrión, famoso por sus truchas salmo.-
nadas y sus aguas frescas y cristalinas, cubierto por ...
susinm:aculadasnieves en invierno, conloaf~adoy ..
ennegrecido por el 'cisco de sus lninas de carbón en.
; . -, . . ': . ' . . .
.prImavera y verano, esas InInas y esas antracJtas
que m.ancharon el. ahua .de los habitantes de mi .
. puebl~ y de todos sus contornos, y el carbón, que
coml1nica fuego a las lnáquinas y a los hogares, apa-
'gó allnismo tiempo el fnegode los espíritus y puso
una capa de nieve sobre las'tradiciones patriarcales,
. que, han sido siempre el so.stéü de la vida espiritual
de los pueblos.
Al hablar' aquí de mi pueblo Velilla de .Guar-
~o, no me dirijo al VelIlla con galerías n1Íneras ni
demine¡"os. con caras ennegrecidas, con' carreteras
y puente nuevo, con camÍonetas y autolnóviles estre-
pito.sos y roncadores, con luz eléctrica y molinos él
. vapor; no quiero hablar del Velilla nlo.derno invadido
porB.ilbaínos y .Asturianos explotadores de sus ri-
quezas, y por ingenieros de botas altas y trajes a la
.~sa.De .este Velilla modernizado." no .quie1rosa-
ber nada,porque no es el· Velilla de lnis' padr,es ni
el .pueblo de mi niñez,en tanto. grado, .que ni· lnis
'1 .
'·1
"
J.:
;
>'!i
<, .' .'. "j~.,......
" -- .;,~,.':, '.' ",
'1 .
'·1
"
J.:
. e '. silQ.?L.t5
.....,..- .. LSJ.... !II. Xl., .. . -Sf,,/'ffl
. '., " ' . ' . . , ...: .: : :::~
7.
~.'" .
· BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 19
padres le reconocexÍan si salieran dell sepulcro, COIno
yo'no lo conocí cuando por últirp.ay-:ez 'le visité en ~1
., año 1934, y a quien con pena en el alma yeongoja
en el corazón tuve que aplicarle "aquellas. palahras
...del orador r0111ano: "VüieORolllam, sed mores ro. .
, ':JnY1;nornml!on video"; éste eSllli puehlo, pero no'
veo las, antigüas costumbres de mi pllehlo,o COlno
, nlclsvulgannente se, dice; ,,
Este no es mi pueblo, •'
que me le han "cambiao";
,mi pueblo era dichoso
, ,,, J"Y este esta... amoao.
Al intentar resucitar al antiguo pueblo de Ve-
lilla, quiero presentarle conlO era hace 30 .años con
sus costumhres típi&ts y tradicio~ales, ~caballerescas,
' nobles y sencillas, con' su legendario puente rOl11.ano
hoy dernuilbado, 'con sus "veladei'os" y candiles de
ace:i~e, con 'sus pantalones y escarpines de sayal, con
sús hOJ.11bres de capa con esclavina que les convertía ,
en seres casi cardenalicios y sus puras y modestas'
111ujeres tocadas con la lllantilla de bordes aterciope..
lados que .les daba el aire de abadesas~>.y basquiñas
adornadas con cintas de estjrilla que a sli~':¡ doncellas
convertían en damas de la Corte de, Luis XV. Quiero
resucitar al Velilla de ahnadrefias y zagones; de las
que no se_ desprendían sus honlbres y sus mozos, .
y sus niños, sino para vestirse el trajé dominguero
con "ciunisas nuevas y lim'pias,pero sin planchar, y
cuellos sin corba~ta, 'cubierto.scon aquellas· chaquetas
'.::: ,",
, '/' r;,
. I
[i¡,
','¡,'
f
I
f',¡'
i,"',(':'
'.: - ....
20 Pnrw. .'DEMÉTRIO . llAMQS DIEZ
y pantalones que olían a 111anzanas y camuesas y
membrillos, únicos olores que se desprendían de sus .
mozas garridas, .castas y sanas, y de SUS. i110Z0S ague-
..l'l'idos,. fue~tes; ·ágilesy rohustos' con1ojas .hayas'.de
sus hosques de Baldeaya y sus .. robles de la Mata
'. Iglesia.' ,
.' No quiero saher nada con elVeli11a que no 111C
fecuerdea ·láVirgell .de Areñós"Todeadade.prados
'. reverd.eantelsy de trigales encerados, visitada todos
. los d0111ingos por las rnadres y las doncellas rezando
el Rosario en el trayecto, y ante cuya inlagen vene-
randa exponíall Sl1E:· cuitas y pedían renledio para to- ·· .
das sus desgracias; de 111i Virgencita de A'reños, qUe
sirvió de fa1'.oannestros antepasados; y donde apren~
dünosdesde niños a rezar las p1'Ílneras plegarias y
entonar los prüneros cánticos; de la Virgende Areños
.<1 la que nrozos y 1n02as ibdn 'asaludal; y dar las
. ';'Alhriciaf:;" en el día de la aurora de Pascua de .H.e-
surrección, n1Íentras lascanlpana~ de la Parroquia
lanzaban alegres susbroncíneas voces despertando a
todo el 'pueblo para que: se dierann1utuan1ente las
"felices Pascuas".
Yo no quiero decir nádaúi saber nada del Velilla
modernizado, sino ·.dr,lviejo Velin~ yadesapar~cido,
porque el de ahora nOlne dice nada al aln1a~ áunque
lne .digLl nluchascosas a los sentido.s, pero tan desfi-
gurado y falsificado por veEtirse a la última n10da,
que ni él l1Ü~nl0 se: conoce ni yo mislnopnedo Cono-
. ......... cede; tan conv~rtido . en "hirria~quea los presen.fes. . . .
, "
" ,
" '
" .'..
22 PBRO. DEMETIUO RAMOS' DIEZ
hace reír, y a los viejos hace llorar, y lloran al ver
cambiadas sús costunibrf~, y desapareéidas para sieln-
pre áquellas fiestas que eran C9mo un -sedante en,
lnedio de sus trahajos can1pesinos; de aquellos bailes
d6.1ningueros r'epletos de alegría y satlirados de-feli~
'ciclad, que en una sola tarde derralnabanentre la
gente ",nlOZa alegría suficiente para toda la sen1ana.
lVre daré por contento, si conseguir plldieraelque
la presente generación de mis rno11tañas leonesas,se
'diera cuenta de la üunensa desgracia que süpone para"
.ellos la pérdida dé,. sus antiguas costunlhres,pérdida
tal vez irreparable, y el inlnenso tesoro que· ha QtS-
aparecido con el calnhio experünentado 1)01' eSe alu-
vión de 'costl1111bn=s "ciudadanas" exportadas a los
trallqtlilos valles ele mi tierra por los que en lnala
hora, llegai'on de las ciudades rrJercan~iles y agitadas,
cOn aires de corrupción y costlllnhresestragadas, 111a-'
tando a traición la inocencia y sencillez pueblerinas.
Quisiera gritar l11Uy alto, para qUe todos nlis
paisanos lne oyeran y seconvencie:r;an, de¡ que si quie-
ren participar núevamente de la felicidad y alegría
que ·nuestros padres y abuelos en tanta abundancia
poseyeran, es preciso que den marcha atrás,viraren
redondo~ volver a lo antiguo., adorar lo que quelnaron
y quem~t-"lo que están adorando, -atraídos por el es-
. pejisilIío de es?C{ue se ha dado en llamar modernism ) •
yciv:ilizaciÓri, -civilización y, nlodernismo que, engen- .
drado.res- de la desazón y de la .desconfianza, del en4
vénena-miento y del odio entre los antes sencillos y .•
. . -I(;~-. )" ,
.~ ,~-~ '- - -.'"-:..::.-----,.;-....'-...:~- I " ~
, l · ,,'
• l ' ~
-"'.;,.
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 23
nobles habitantes 'de lui tierra montañe:sa, aventáron
la paz y la tranquilidad.
Quiero hac~ir constar, y que constea. cuantos se
lam,entan de que ya no hay paz ni 'tran.quilidad, ni
amor 111utuo, ni confianza de unos con otros, ni justi-
da ni caridad, que todas estas virtudes no volverán
jalnás a ser patrinlonio de los habitantes de lni tierra
idolatrada, nlientrasno vuelvan a ca:mpeardenuevo
.las '. antiguas costunlbres p()pulares, que' eran justa.-
m.ente las quedaban alma y vida a los pueblos, y
aho.ra des,aparecida!, por negligencia y abandono de
las illislnas autoridades, y porque lanloderna juventud
conlenz~ a avergonzarse de aquella herencia que sus
antepasados les legarancOlno una herencia santa y sa-
grada. ·Por obra y gracia del' modernismo. que lo
'ahsol:he- todo" dichas costumbres fueron decayendo
poco él poco, hasta que desaparecieron totalm.ente;
nluriendo por anemia y por incolnprensión.,
y sin elruJargo, con aquellas costumbres tradi-
cionales que nues.tros padres 110S dejaran en heren-
cia... j era tan feliz el pueblo de Velilla L.. que es
ahora cuando se dan cuenta y cuando· ya tal vez no
, tenga relnedio.
¡Sí!,éranl0s felic~~~ cuando las campanas nos
anunciaban desde vfspera las grandes fiestas, y cuan-
do ,nos hacían descubrir. tres veces al día al toque
del "Ang~lus", y' nos hacían est~e:m'ecercon santo
es~renlecimiento al toque de "A,nimas", y nos des-
pertaban alborozadas con sus repiques del "Alba".
.' ' ..
ri~
¡";:~;¡G.t~~~0,~i:<~1~é'C:;':¿:'~;;< e,' .• ,:,,:. ..,.. .
.... ..,.::.'.
"
-,
"", :
. ' ,"
.,,", :'.
:¡
!: ..,
2-t PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
El eco de las canlpanas de nú pueblo, que nos sabían
a gloria y' él. 111úsiea divina, porque desde niños se
hahían grabado sus acordes en nuestros oídos, y que
defendía.n10S· corno se' defi~nde a una nladre, a pe~
dtada linlpia con los chicos de otros pueblos del,
.'. contorno, que pretendían sobreponer sus. canlpanas
.:.~.....,:':~a·las: de mi.-.pueblo, eleco.de esascanlpanas tenian
sienlpre un lenguaje al que acon1pañábanlos sie:rnpte.
con interés e intel'pretábanl'Üsünlledicüanlente loql1e
decirnos querían con sllsbadajos, y, aunque niúos,
".' sabía1110S 111uyhiell distinguir sus' diversos toques,
lo nlismo cuando. tocaban a gloria que cuando toca~
j- , " 1 "1'" d l' 1Jan a ll1uerto, ague )ra ,o 1111S111o que a "ar ·a ,
SerlOr''', a Concejo o a eehar"la hacienda" o a lanzar
"los jatos". Las canlpanas nos indicaban cuando ha-.
híaufl bautizo o" cüando se cel-ehraba una boda.
Dichosos tienlpos aCluellos en qu e las call1panas eran
.la voz deF pueblo y la consig11a 'paratodos sus aeon:'
tecÍlnientos.Esos tiel11'pos yapa~:arOl1, y con eHos
pasó tanlbiénde largo la felicidad del pueblo.
'Eralllos felices cuando los chicos, sien1pre re·
. voltosos, inquietos y traviesos, alborntaban el pueblo
'recorrÍendo sus' calles cantando Villancicos en Acl-
viento y Navidad, coplas, tristes en Cuaresnla, to-
,nadasen la trilla" y canciones populares al volver ..
de los rastrojos o de regar los prados; cuaüdoatro~ .
nábamos los' oídos con matracas y ca'rracas en Se~
l1'lana Santa, y arnlabamos la gorda en la "gerijuela~'"
para que todo elplleblo nos oyera, como todos tenían .
. , ..~
..... :';':', '.,
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS
Cine oírnos las esqi~ilas .. y los cencerros en las com-
d " "d d 1 o • •
parsas e· zamarrones 8:11 o sustos a .as VIeJas
y :repartiendo pel<?tazos a todo hicho viviente que se
pusiera a tiro.
Eranlo.s felices 10lnislno haciendo sudar tinta
[t Jos zanlarronesel día de "antruido" o ~1artes de
Carnaval, con'iendo para agarrarnos y hacernos pa-
g,ú :los cinco céntinlos de vino en la tabenla, que
.. cuando en pandillas salÍanl0s "a nidós" después del··
Rosario. de los don1Íngos; o íbanl0s· a Valdeaya a
descortezür acebos para hacer liga después de Hlas-
ticarla~ lavarla y desgranarla, con gran p~ligro de
G' . . ~, ." d· "". "" ".pImentoneros, ver _erones, pnn-pulCS y slete
colores" que inocentenlente ,venían a cael sohre lélf:
paja's bien enhebradas de nga, en lo que· éralTIOs.
111aestros, consul1laclbs, y000 iqué destrozos .110 hacÍanlOS '
de los pobres pajarillo.s en el "Cristo dé la Cinta",
en la Ermi.ta d~, San. JLar~ y hasta .en las puertas mis-
IDas de la Igles1a yde~scuela. '
. . Felices tiem,pos aquellos, en, que las ~11ayores
'travesuras nuestras eran apedrear los peruchos del
tío Beneite en la pontaneja, 111eternos por :huertos y
saltar vallados para atrapar nloras y ,endrino.s, esca-
lar árboles para coger un nido con huevos todavía
vacíos o con pájaros todavía en cañones, lanzar earw
pinchos a las lnozas en el baile, recibiendo 'en canlbio
algunos. pescozones, de los '1110Z0S, o lanzar balines
dé estopa con nuestros peloteros de saúco. ¿,Y qué
decir de nuestras correrías a los prados de. Honseca
.;..
..1" ,
I -:... '., ....:'-~
PmlO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
. . . : . .
para arrancar aberbejas y lechugas, aVillascusa para
llenar los bolsos de avellanas, a Villasquincepara
hartarnos de guindas agrias y de peruchos y lllanzanas
en agraz, al pinar por algayugas, al Cortijo en busca
de arráspanos, a Lastares para buscar setas, a la
Cueva para apedrear grajos" ~ los Palacios, para
arrancar estaLactitas y estalagmitas, a~mol'lte de los.·
Verdug9sparatraer incienso de enebros,desenterrar
nJantecones en Pereda o pescar peces en el Río Chico,
o. venir, bien cargados de algayugas y amostajas y
ayucos, de todos los lllontes y conado~ colindantes.
La juventud era también feliz y estaba siempre
contenta, ydelSpués del rudo trabajo de toda la se-
. nlana, esperaba con ansias incontenibles cIdonlingo, .
y' en la tarde del donlingo hacía. gala de su agilidad
bailando en· la-plaza el baile Hlontañés, al conlpás
de: las ·dulces cadencias de la gaita del tío Nicolás,
. de la pandereta nlagistr,alrrlente tocada por sus ,~ll~zas
acolTIpañadade inspIrados cantos, y robustecido por,
"la histórica Caja" o tanlbor, cuyos parch~s redoblabaü
bajo los palillos hábilmf·nte maneiados por el· tío
Marcos, el tío Martín o el tío Isidoro, los .mejores
redoblantes qUe entonces se conocían, todos ellos de
VeliLla.
. Esa felicidad desapareció, una vez que la pande-'
reta y 'el tanlbor y la gaita pastoril füeron reelnplaza.:
dos en mala hora por chillón acordeón, por la es-
tridente victrola o por la· cansadora··radio explotada·
póruntalPerroChico~Desapareció el baile: clásico .
. .:
. BRISAs DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 27
montañés, honesto, ágil y viril, para. dar paso al
"agarra~" con todas sus lanwntablesconsecuencias
para la juventud.
. y porque .deseo de nuevo .la felicidad de¡ mi
pueblo natal, es por lo que he escrito este libro, para .
que leyéndole' nlispaisanos, puedan darse cuenta.
de la felieidad perdida, pero que podríaadquírirse
de nuevo con un poco de unión y de ·buena voluntad
··pGl' parte de las Autoridades y .de la juventud.··
Eseribo el presente libro para que esa juventud
se eonvenza de una vez para' sienlpre, que es preciso
· desenterrar y hacer revivir las antiguas costluuhres .
hoy. desaparecidas, y que Velilla no .volverá a. resu-
citar, n1Íentras los· lUOZOS no tengan de nuevo su
ayuntamiento. propio con todas sus leyes reconoci-
das; ll1ientras no se oigan los redobles de "la Caja~'
llanlando a los mozos a Conc.ejo para deliberar con
· seriedad de. Cónsules romanos sobre los asuntos de
la. nlo.cedad, sobre sus rondas a las mozas, graves y .
bien reglaluentadas para que no haya ahusos lÜ inu-
cho luenos innl0ra1idades~ En aquellos Concejos en
los cuales se legislaba sobre la admi~ión de los nue-
. vos· "lnozos" a recibirse con ·las formalidades· de
q~ien entra en una Co.fradía, y sin cuyo reql1jsjto
· ningún mozalbete tenía derecho a rondar mozas, J11
.' .participar de derechos de inozo. .
En ellas se ventilaba la cuestión grave de "atra-
par" .al· mozo extraño de otros pueblos, que quisiera' .
visitár a una moza del pueblo con vistas al noviaz-
. -.:.
.'.. '
:~~'~.-..~ ~;~~?~~';;·;:i:·:~s~·~.2.·~~:·:~L~:~·~' :,- "-._-::,'::,'
23 PBRO. DEMETRIO .RAMOS, DIEZ
go, )r qu e no se le pennitía sin pa'gar el tributo eo·
rrespondiente de su cántaro de vino y algunas pesetas
si quería llevar'~e la novia. Y era ese Coueejo donde
se haclan los nOlTIbran1Íentos. de alcalde y regidor, de
juez y delnás autoridades que habían de tornar pose-
sión de sus cargos el día de los Santos Reyes,con
11 . 11"" "1 . ':,aque .as CerelTIOnlaS, aque as varas y ,astones
. floreados por las 1110za8, y que constituían -e0111o eJ
sÍnlholo .de .sus nuevas dignidades, que dllrarÍan to·
do el año. Allí se, ideaban los prograrnasde despe-
dida de los n'1oz05 que se iball o ton1aban estado,
siendo desnedidos con todo el cariño de una her-.l , .
rnandad, lo rnjS1110 cuando les tocaba ir a servir al
Rey. Allí, en fin, se informahaa todos el día de l1l1¿1.
boda o el día de un entierro, para qne todos se pre'·
pararan para la fiesta o para el duelo; 10 n11sn)O
qne se pasaban avisos, se irnponían rllultas o se ex-
pulsaba al que' con su conducta poco reco111e11dable
no lTlerecÍa ser 1110Z0 de Velilla.
¡Qué tienlpos aquellosL.. ¡Sí!, ¡qué tienlpos
aquellos, tan f e.lices· C0111Q tranquilos, cuando los
1l10ZOS no tenían111ás preocupaciones que ganar éL
los bolos a 1oscasados, o ganarse el aluche en el
Cristo de Guardo, o hacer luás, tiros a la barra que
los otros n10ZOS del contorno! Felices tienlpos aque-
Hos, cuando los mozos de V,elilla se lucían trayendo
el Mayo" pinándole a fuerza de puños y de 111aéstrÍa
ell111ediode la plaza, a la vista del Sr. Cura, de las
,Autoridades, del pueblo entero,} animados' por los,• • ~:-.,..;:.' '1 • - _
o,' .
" '
,',".:)
~.;.'·;.~i;~
$
• ~ - ' . ' J - ~ '< , _ ~. ~ .;~.~r
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 29
cán6c0s de la's ,mozas qUe habían hecho la bandera
y que les enardecían Con sus voces y consupresen-
, cia, hasta que el lnás majo, elnlás ágil y el lnás
,vapente subía por el lnayo hastala·copa para arran-
car de ella el prell.'io apetecido. ¡Sí!, lo repito, iqué
tie.mpos aqnellos q.e yo he presenciado con nlis.
propios ojos, que recuexdo con, nostalgia y que a
'.veces me hacen derranlar lágrinlaspensando en ellos!,
Pues' de todo esto y de algunas cosasn1ás,pien-
so hablar en este libro que tienes en tus nlanós, 'lector
querido, para, que' al menos' las generaciones' del
poi'venü' sep' II lo que fué en· tienlpos pasados lui
querido puelecÍtG, de Velilla de Guardo, que aunque
no figure en os 111apas, le tengo nluy adentro y en
lo nlás profundo de lnis entrañas~ y le recuerdo con
cariño desde estas apartadas regiones de A'nléricp"
de esta República Argentina en ,la que viven tantos
y tantos españoles 'y paisanos nl íos" que conlO ;ro
reclH~rdan con cariño a la tierruca~ ,
EL AUTOR
, /
t~'? '..:;.t~
.... "':..
.;~.~, ...", ....-'.
··Dl
t'
.~
, '¡
:..,',
.) ., < ,'•• ' ~:.:: l.'
.:....., .. ':- " "
,.,;
,"
CAPITULO PRIMERO
ESTE ES MI," PUEBLO
Si el le,ctor tonla en sus manos este libro con
fines cientÍficos y con ansias de exan~inarle con li '
,lupa de la crítica, puedo decirle con franqueza que
.'. no ,pierda el tienipo, que le cierre y que' no pase
adelante, sobre todo sino es de mi tierra.
, Para leer este libro, el lector debe despojarse
de su togi de juez, porque -para' comprenderle hay
que sentirle antes que juzgarle, y sólo sintiéndoJe
le comprenderá.,
, Por' eso estoy seguro que sólo Jl1e van a ,COln-
prender aquellos que, identificados con "su terruño",
encontrarán' miéles, en estas páginas saturadas de
aromas puehlereños,' que sólo aspirar saben los mon-"
tañeses, los acostumbrados a apacentar 'sus ojos desde
'niños <?on el espectáculo "de 'la' naturaleza bravía" de
nli tierra, dulc'emente melancólica, de sus 'montañas
escabrosas, deslis valles, encantadores,désus' ríos'
de linfa pura,"fresc'a y cristalina~por'que ellos;,'y tan
" .' -, ... .-
..,.: -
....-;.
".'~
. . , ".-~,'.'~
,
"
>!.¡ .
.J
.',
.~
:' .../';;.
.1 ':". ,':
32 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ·
sólo ellos han de saher descubriJ; sagazmente toda la
poesía de sus costumbres' rústicas, de esa poesía que
ofrece .mi pueblo, no ya con su aspecto exterior,sino -
con algo lnas profundo, más hondo, y más íntiíno, que
no se ve, pero que sin en1bargo penetra el alma y
produce ese encanto n1isterioso generador de' eso que
Pereda llamara "el sabor de la tierr'uca'?
Al escribir estas líneas, nibuseo gloria literaria
ni tampoco renoll1bre que l11e inn1ortalice, porque'ni
en sueños, ni'por las nlientes me ha pasado'nunca el
intentar imitar siquiera al autor de "Peñas Arriba"
y "Sotileza", ni a Trueha o Pardo Bazán, ni talnpoco
a Polo y Peirolón y Muñoz y Pavón. Ave de la 'zarza
escDndida entre 'los espinos del huerto, nunca pre-
teúdí rel11ontan11e, ni seguir a las águilas que se ele- '
van en círculos concéntricos sobre las altas cUl11bres
y escalan los picachos de los, Picos de Europa. Lo
único que busco, sin. tal. vez lograrconseguirló, es
.producir en los corazones montañeses de 111i tierra
ese cosquilleo inexplicable, que >at sentirse 111UY
, adentro, hum'edi,ece los ojos y hace estren'1ecer la
barbilla con la e.moción de recuerdos pasados.
;Quedan por lo tanto avisados todos los Zoi10s
y Aristarcos que pudieran talir.me. al camül<?, y no
quiero .cargar sobre mi conciencia la responsabilidad
de haberles hecho perder el tiempo, leyendo lo que
no les interesa, o lo que no son capaces de eompren-'
,der. Y dicho esto,. "vamos pa~lante"> '
. ..~.
.'. :>.
.1,
a
oe
o.
oe
y
oe
a
o.
L1
:0
el
s
o
s
a
y
a
s'o
J
1
BRISAS DE MIS MOÑTAÑAS LEONESAS 3B
Un poco dehisforiay algo de leyenda
~
Poco. o nada puedo decir a luis lectores sobre el
origen de mi pu~blo Velilla de Guardo, tan insignj-
Jicante, que todavía creo no haob~r encontrado escrito
su nonlbre en ningún m:apa, si no es en algúnmapa~, ..
l:noderno dedicado exclusivanlente. a Ja:PrOiVincláde,
León o dePal~neia; pero lo que sípuedcvdecir, es~
.que omi ptlt'ihlo. con sus doscientas o trescientas casas,
llHlchas de ellas casucas, es un pueblo -reabllente poé-
tico y hermoso, rodeado de huertos, bien regado, hien
cultivado. y bien oreado por arotnáticas y salubres ..
. auras cam.pestres, circundado de nlon:tañ.RS roqui-
zas de un lado, y de verdeantps praderas y urnbrosos
bosques por otro, con variedad de prados que le ciñeno
por unas partés perfun1ánd~le .con arom:as de hyno, y
por otras engalal~a(lo coi1 sus trigales de enceradas..
l1ueses.
Todos sus habitantes han sido sie:nlpre lahra-
dores de¡ oficiO? y todo.s,· por consiguiente, al menos
en nli tienlpo~cOJnían el pü.chero cotidiano, unos, y
.el ln~ndrugo otros, empapados en el ~udor de" un tra-
bajo campestre tan·· rudo como incesante y no nl.uy
productivo.
Fuera de algunas familias, que podían contar-
se ocon los dedos de una mano, todo.s sus vecinos
eran pobres, no tanto.conlO para morirse de hamM
breO, eso no, pue~to que el niás pobre~enía ·su sopa
con torrezno., sus cuatro patatas y su celemín de
3.-
. ' , " ,
", ,:.
. ~, .
.,
. -f;o)
... ~.
....-. __ ._.-
EIlPueblo de Velilla de Guardo a vista de pájaro.
tom~do por la parte Norte, desde la Peña .. Mayor
;;;
,...•.~.']}.. -
,,.';'.< ~:
·:·:"1'·;:
...../
.:j.
. ..-~ .....
..;!.,<_.!};~~~
~/~j
~'::- "",~':::'~'.~"~?'~;.::,<~:,;:.~::.:~;,,:~.~ :.'.'.'"c:
, t",:;, "
. j .... :. :, :..; ,.;", " p.':: ..;'
·1 "~:~~
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 35
alubias para alimentarse, pero sin lujos ni desper-
.d~cios, fuera de los días en, que ~erepicaba gordo,
o, se 'echaba ,la casa por lla ventana con motivo de -,
algún, acontecim'lento popular o doméstico. 'Eran
pobres, pero eran felices con su pobreza, porque
nunca ae~).stum,braron sus cuerpos a la molicie ni al
d~spilfarro. , ,
'Ensllscalles no había pérdida ningüna;' puesto
que no hahía n1ás que r~correr la calle Abajo; la
caUeArriba, el Tiruelo y, el ,Barrio del Río, paTa
aea.har de contar su topografía interna. Una plaza'
delante de la iglesia, s0111breada por dos o. tres noga"
les, una iglesia: antigua, ni grande ni artística,eon
su torre cuadrada llena. de gorriones y vencejos;
,un arroyo q'ue' cortaba la plaza: de arriba hasta
,abajo con aguas" puras qUe venían 'del. llamado
"brocal", 'en el que chapalateábamos los chiquillos
casi sien1pre descalzos y con las pantorrillas al aire;
'una tienda de quincalla en la plaza, perteneciente, a
la "Tía Blanquilla"; un rótulo que decía: "Estanco
y A.rrendataria de Tabacos", la CaSa Ayuntamiento
y la Casona d'el Tío JVlateo, y acabe" Vd.de contar,
de cuanto eontar~e pudiera de 1111 pueblo de Velilla
de Guardo..
~' .. ,..',,'~:-:-- ¿De sus oiígeúes hi'stÓ:ricos?:.~Niyo ,lo' sé, ni
creo .que ninguIlo de .mi' 'pueblo 10 sabe, y ningún '
l~istoriador se ha preocupado tampoco 'de ello. Lo
único que s'í' puedo asegurar,:es que' 'Su antiguo
.:nomhre fuéel de 'TILLA DE GUARDO, Y no el de
o'.::,
..~." .. ; .' ..... ". ." .;,
1........".,.,.".;'.. ,.,.".,.,..
...... : ..:", .
36 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
'VELILLA,hahiendo indicios ir no Docas prohabili-
.dades de que en tiempos relllotos Velilla estaha uni-
. da a'Guardo, oal lu:enos había un pueblo intermedio,
cercano· al Cristo. de' la Cinta, como se ha nodido, ' ' .1 ...
conlprobar por descuhri'mientos realizados, y hasta
,por losas sepulcrales sacadas de las entrañas de la
tt-erra 'con la esteva de los arados.
Tam:bién·'podenl0s desde ya afirnlal qUe .. el
.. pueblo de Velilla '{ué tdhutario'dé Garcilaso'de la
Vega, que percibía por privilegios reales hasta "tr'es-
mil maravedises" anuales' en concepto de vasallaje y
regalías concedidas por ],a Corona a dicho Garcilaso
de la '1ega~ Ilasta creo haber leido (fue el nombre
de ,Velilla es una corrupción de "Vega, lo. que no
sería inverosímil, dada la pleátesía que tenía que
rendü'por orden regia a dicho. Garcilaso- de la Vega,
sin que sepam!o~) el porqué ,üi bajo qué éoncepto se
le dabanE'lstos tributos. Es úna verdadera lástima
no tener lnás datos históricos.) y 111'ás lastünoso'toda-
vía, el 'que l1inguno del puehlo. 'se haya preocupado
de hacer investigaciones.
A esto podemos añadir que el puehlo es siil
duda antiquísimo, y que era el calnino forzado panl
los Peregrinos que' iban a cumplir sus votos· a· San;. ,
tiago de Com'po.stela, y en VeliUa existían varias
n
n
h
1'4
Sl
.
.. VI
n
q
P(
P
q
'G
b
Jlospederías para PeJ.nigrjnos. y; esto se 'co111Prüeha .
. p
por el númeroconsiderab~e de edjficÍos que osten-
. tan Escudos Heráldicos con la Cruz Santiaguista, y In
a
"que ,poco, a poco han' ido desapareciendo,
.: ~.
':.......
)
t
1
1
1
s'
)
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS
nosotros cuando niños heTIlOS visto, sin que entonces
. nos preocuparan ni poco ni In/ucho su significación
. histórica. "
Por o.tra parte" una y CIen veces hell1os' oído
relatar a l1Uelstros padres el paso de peregrinos con
sus bordones coronados por calabacines y sus escla-
,'. vinas ribeteadas de conchas, y yo nlÍsIno en nlÍ niñe,z
. recuerdo' haber visto a alguno,s de eistos pe:regrinds,
qüe a pie' y d~scalzos hacían su peregfinaciól1,bien
por devoción o' ya 'cunlplÍt~~ldo .lUla penitencia im~
puesta.
'Una cOlnprohación del nÚlnero de peregrinos
que deEfilaban por lni pUt::blo~ rÚl11ho a Santiago de
'Galicüi, es.el canto con que lo.s chiquillos anunciá-'
)
~ ..., balDOS po,r las calles la llegada de alguno, y que era
" así, porque aúri lo recuerdo:
)
:1
1
Y . 1 . "P 1 . "a Viene a e egnna
con su escla,;ina, .
su 'cartuchera?
j que es un prim.or!
Trae los zapatos hlancos,
medias de seda,
'sombrero fino
y un gran "bordón".
,Ni que decir tiene Cine la chiquillada rodeabas
1 a la "pelegrina" o ¡;"pelegrino",COlno decÍa~os allá"
.• ,para escuchar sus narraciones y peripecias,' más o
'lnenos verídicas,' que' o nos hacían reír ya. veces nos
hacían Ilotar, pero, SfeIllpre les tratábamos con n1U-
Rr~Y
h--l- -
;;
¡ "
';' .
":'1'·, .
..,
1" :'
, . '.
....". ~ . ,. .~
";':'r"
38 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
cho respeto y veneración. Más de un peregrino vi
_hospedado en nü propia casa con" su esclavina cua-
jada de conchas" su bordón y ,su calabaza:
Dafosgeográficos
-
En los 1ÍnlÍtes de la Pi'ovincia de. Palencia, y
a unas :veinte leguas de dicha Ciudad, diez leguas'
de Saldaña y siete de Cervera de Río Pisuerga, en
m:e~io de un valle poético se encuentra como enca-
jonado el pueblo de Velilla de Guardo,en una es'·-
;".}
.pecie de gigantesco anfiteatro fórnlado pUl' lllontañas "'-
_y eeñ,ido len' uno de sus eostadospor el río 1l,l1nado
Carrión.
Viniendo de Gual:do, el VIajerO se encuentra
sorprendido, desde el alto llalnado de La PalonH'rú,
con la vista del puehlo. que parece no tener- salida
por ninguna parte. Cierra sus horizontes por'el Nor-
te -la gigantesca peña Espiguete, "donde comienzan los
Picos de ,Europa, inlponente _masaroq'.uiza de tres
n1Íl nletros de alhua, en laque saltan manadas de
rebecos y vuelan en. círculos concéntricos las majes-
. tuosas águilas que avizoran eonstante;tllente a los cor~
.derillos triscado¡res y' a las nlerinasque ranlonean
por los puertos y las cañadas. '
,Al Este, se' enCllentra protegido. por la Peña
lVlayor,queí COn1o. un gigante par1ecequerer aplastar
. "al pueblo,· y. tan' próximo; que a las cuatro de. la
..... :- .., . . . . ".:.. :, ".-;;"..
-:"1
,'
,
,',"!
, ,-'" ' , " .".. '~." '
'í '.
/,
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS
tarde ya le s0111hrea y precIpIta en sus penlunhras.
Al Oeste, limitan sus: horizontes muy limitados el'
Monte de Peña Labra y el de los' Verdugos, moteados
'po,r sus enebros que brotan de la 'roca viva, y que .,
enlbalsalnan el am,biente con sus granos de inciensq. , '
Extendiendo la vista por EI1 bravío panoranla que
ofrece la naturaleza, los ojos se deleitan con el cuaM
, 'dto umbrío de los bosques de Valdeaya ylascolinas '
ondeantes de Pereda yVillasquince, guaridas de ]0: '
bos y jabalíes, rapOS06 y liebres y otra variedad de'
aninlales, hoy en -gran parte desaparecidos por el,
1110vimjento continuo de las l1lÍnas que! tienen sus
111ás apreciadas vetas e,l1 el sitio denOlninado 'La
Fiera.
Por el Sur, y en dirección a la Villa deGl~ardo,'
es por dondel se abre la brecha de este círculo de
lllontañas, 'que 'cual cinturón de piedra todea ,al
simpático pueblo1110ntañés. Es en Velilla donde ter-
111inan justanlente las nlontañas 'Cantábricas propia-
,mente dichas, ya qw~ desde Guardo comienzan los
Párarnos y las dilatadas estepas castellanas. Tan sólo
al Sud-Este continúan hasta Cervera las Cordilleras
del Brezo, '_completalnente calizas,áric¡las y blanque-
cinas, que escoÍlden entre sus riscas-f laderas diver-
sos pueblos y aldeas que se extienden por la regi6n,
de La Baldavia.
~1 viajero que por vez prinlera cae en V'elilla,
procedente del interior de Castilla, lo primero que
,se le ocurre preguntares: ,¿Y por dónde salgo ahora'(... '
. '. :~.' ....~."" , ,
', ..': .
'" " f
..-- ,.
.....'
", .,'
l""
': .
; -,
~.'"
"
4·0 PBRO. DEMETIUO RAMOS DIEZ
Porque sus ojos no encuentran reahnente salida en
, Inedio de aquel anfiteatro para él desconocido, y ,ni
soñar ha podido que entre aquellas lnontañas pu eda
haber una escapatoria, C01119_en realidad ,la hay~ y
por cierto biensorpr,endente, aunque por él nunca
imaginada. ' '1
. ' . ' 
, SalIendo -del pueblo de VelIlla l'lunho a Call1pO'~
"rredondo, y bordeando. la Peña Mayor, atraviesa las
fuentes del Calderón, y dejando asu dereehaEl'Pi·
nilr, se Inete de rond6n en una garganta éIueiInpone
respeto cuando no miedo, sin 111as lugar que el carni-
no aprisionado de Ulla parte por la montaña alÜsÍlna
y de ,ot1:a por el Río Can'ión, cuyas aguas van sal-
,tando las peñ~s y InUTlnurando Bstrepitosanlente, ca-
llándose tan sólo cuando sus aguas fonnan: renlansos
en aquellos pozos donde las truchas sahnonadás sal-
tan y se encuevan, hüyendo del peligro de lüs pes-
cadores que siernpre están en acecho. Siga el viajero
,', su ruta, y aunque un poco asusta~o al verse solo en
lugares que ni escogidos para dar un atraco, pronto
se eilcontrará con el puente ROlnano de Otero, que
al, pueblo de Otero conduce, y donde el can1Íno se
bifurca para proseguir 'si .quiere hácia Balcoher6 y
La Sierra, tirando a ll1a.no derecha. Puente ROlnan:J?
vel·dadera joya hislóTica, ahora. destruído por lU~3
hárbaros dinaimÍteros de las nlinas. durante la re-
vuelta asturiana deJ año 1934. '. . . ' .
Ya encontró la salida,el canlinante, y continuan··
do el carnino", siempre bordeando el río, llegará a
. '~'.
. ' .',:
. j " , •
, ~
, .
;:
,',-
o:: _:. '._._.' '.~ ?"':: -.- ~ .""-.
.' ~
BRISAS DE MIS MONTAÑA.S LEONESAS M
Call1porredondo, pueblo inmortalizado por el farlloso
Pantano del P,ríncipe de Asturias, una de las· glorias
11U1S preclaras· de la· ingeniería 1110derna, inaugurado
por el Rey· Alfonso XIII durante la gloriosa Dicta-
dura del inlTIortal Primo de Rivera, que con RUS
aguas .riega todas las llanuras Palentinas, si biell
en perjuicio de los pueblos colindantes al Pantano.
y ase 'encuentra·el turista en terrenócle Liéhana.,
.. ,puede .doT1nir en Potes, visitar el Sa~tuario deSant~
Tori1io, solazarse con aquellos cuadros de la natu-'
raleza de sus lTIontañas, seguir _por la I-Ier:mida y de-
.. tenerse a ton1ar las salutíferas aguas de este Balneario,
. y siguiendo., siguiendo por aquella, carretera abierta
a fuerza de barrenos, penetrar en los valles Cantá-
hricos hasta.nlojarsus pies e'n las costas Santanderinas.
¿Quiere el viajero turist~' ~'egresar a Velilla y
'experÍlnentar los encantos de otra de sus salidas casi
.. increíbles?
Para ello, no tiene 11lás q~le colocarse en la plaza
del pueblo, tirar por el Barrio Abajo, atravesar el,
puente; t0l11ar rumbo hacia la Er.mita de Areños,
ladearse hacia la izquietda antes de llegar ál puente
Besandino, atrave,sar la Vega del Pico de L.os Pa-
lacios, 'penetrar en Ül1seca, inclinarse ,hacia la jz-
quierda, y peñas arriba, pasando por las Cante!l'as·
de márnl01, contenlpla~ldo a su derecha el río Be,·
..'sandino, por cuyas linfas suben y saltan las truchas
l11ás finas que se~onocen, tan pobre de --agua, que
en verano no. hay necesidad, de descalzarse para
;:
,',.
,.-, ,
; :
,¡ 1:"
, , ~; .
:; ."
'1' .
1 •
,.., ,
~"..' .' , ,,'o ".. ' . ,
.' ........ '. " .. ": ..,
 O""
42 - PnllO. DElVIETRIO RAMOS DIEZ
trasponer SUS' orillas; fatigado y- súdoroso neg~lrá
hasta Las Portillas, que no son sino un tajo ál~iert.o
entre dos .niont'añas, tan. estrecho, que. fácihh~nte
pueden 'ponerse unas puerta's, y' quién sabe: si en
algún tienlpo las hubo. Desde este lugar, un nuevo
panoranla se abre a la contf1l11iplación del espec.tador.
Un paso adelante y se encuentra en la Provincia de
León, siendo Las Portillas el punto divisorio entre
Palencia y el nuevo Reino Leonés.
Aconsejanl0sal .viajante no se le ocurra hacer
. 'esa excursión en invierno,. si no quiere verse. sepnl-
tado por la nieve, o encararse así de sopetón con el oso.
El primer pueblo . que encontrará a su paso es
Besande, bien conocido por la leche sabrosa de sus
.' vacas y por la riquísim.a lnantecaelaboradapor sus
pobres IHibitantes. Pueblp en otros tielnpos s~ncqlo
y patriarcal, incoinunicado de la sociedad porJ~t::~I;e~
ve dural~t:e algunos ll1ese:s de invierno., y encüe~1.~do::.
sus moradores en la cuadra y en la cocina, lo mismo
que sus 'ganados, pero entretenidos Y 'hasta felices,
haciendo almadreña.s y tarugos, yugos y otrosape-l'os
de labranza, que después habrán de vender por unos
cuantos "Guartos", núentras que las viejashilall sus
ruec,as alrededor de la hornacha o encima de las "tré-
bedes", ,donde duermen los chicos .y talnbién los
grandes, a la' vez' que losmoz.o.s, con sus brazos ro·
bustos amaean los odres de donde, después de bien
batidos, extraen lanlanteca~. blanca como el aUlpó de
.. nieve-de sus montañas, refrescante .y pura conlO el
. .
..,;.' :"":.':':.::' .:í. :....': "".'
.. " .'.•...". ~ . .~. . ..' " . '.' .~
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 43
,manja:t; de los dioses, nutritiva y sana,' que hace a
sushábitantes fuertets y de raigalubre~ a pesar de
sJs>i~axas demacradas, pero' de fibras como cables
'de 'acero.
Continuando el calnino están los pueblos de'
Valverde, el de los famosos cazadores, y Siero, el de
, los arrieros, colocados en las faldas y estribaciones
.'..'-- , dé ,los Picos de Europa." Todos estos. pueblos han
. ,renacido "lilla y veinte veces 'de sus mismas' ceniza.s,
COIllO el Fenixde la fábula, ya que' repetidas vece-s
han sido pasto de las llall1as, sin perdonar más que
la iglesia y.Ia casa del Cura, por ser las únicas ·casa~
que tenían, en lnis tielnpos, los techos de teja, puesto
que las, demás le tenían de paja, semejanfesa los
portalillos de Belén. Esta era la causa de que, una
chispa cualquiera que 'se despreildiera de, lUla chi-
m.~l~,~a.? fuera suficiente para que ardiera todo el pue~
blo>~+3: no se repiten estos casos,p~n' tener bien te-
chados de teja los edificios, y ya no se contenlplan
aquellos cuadros tristísimos" que yo tantas vee.es en
nli niñez conteluplara, de ver a las muchedumbres
de estos pueblos con sus alforjas al hombro, pidien-
do de pue~·ta en puerta lin1;osna, se:n1illas, aperos de
labranza y delnás enseres domésticos 'para' comenzar,'
a vivir, puesto que el fuego había dCistruído conliJle~
tamente sus pobres llloradas con cuanto, contenían,
inch130 los luismos aninlales, que aveces perecían
e~tre las ll~unas, cuando no había tiempo para sol-
tarles de sus pesebreras.. El Gobierno, por su pa:rte, :
...' .....
.".'
f/I,
,:i
;',
; :'¡ .
44 PBRO. DEMETIUO RAMOS DIEZ
; ,','" ,':' :,ri~.t
: ;:)~
tenía que forn1ar un presupuesto. para aliviar a los
pueblos incendiados. Ni que decir tiene que 'la eSTí-
dad común ,de los pueblos vecinos se 111anifesta1x!
sienlpre vi~iblemente, con los afectados por la des-
gracia, porque entonces babía caridad entre unos y
otros.
Los cantos populares de' nü niñez sintetizaban
. la idiosincrasia 'parti~ldar de, dichos púeblecitoses~
:condidos enü:ebleñasy"peñascales. .
El que una v~z ha probado
leche de Desande
no beberá otra leche
aunque se la den dehalde.
Cazadores en Balver,de,
buenas truchas en Velilla,
buenos nabos en Besande,
buenas moras en J!fantinos
y caSI todo de balde ~
Pata ayucos; Baldeaya;
para arráspanos, Otero ;
para algayugas; el Brezo,
y para nlÍeles, tus labios,
cuando me estampan i1ll beso.
~
fauna y flora .. de mi pueblo
Donde los hOlnbres penetran~ las fiel'as huyen,
y esto es Jo qUeJha súcedido en lasill,ontañas de Ve-
.1illa, tan ricas ,en otros tiempos en la Fauna y en la
'·:.':.~'t, ..,
: ;>. ~;:
:~'.
" "'~."
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 4·5
,Flora. Los silbido.s de las locomotoras y los estampi-
dos de los harrenos y de la dinamita han ahuyentarlo
por completo a ,las fiera~ y alinlañas quepoblahall
abundantell1ente sus bosques y espeluncas.,
y cosa rara y para lnÍ siempre incolnprensible:
en los JTIontes de Velilla, en los qlle se' ,enco.ntraba
'caza rnayor, y meno-r,'"nunca''seveíaneazadoTE$''del'''
pueblo, y puedo asegurar ,que fuera de Juan eJ, ~
,,chero, que tenía ~lna carabina; el tío Marcos, que po-
,seÍauna escopeíta de cartucho, y el tíO Venancioel '
Bo.mhas, que era el herrero del pueblo y propietario
de una espingarda que se' cargaha por la boca y a
baquetazo limpio, de esas de pistón y con ceha, creo
.que Jlohahía ninguna otra ar111a de cazar en toda la
vecindad, fUEwa de la del Guardahosques. Y es que
para cazar hay que tener tiem'po, y los de mi pueblo
~staban s~empre nluy atareados con sus faenas cam,-
pestres para matar el tiempo cazando. Lo.s ,'únicos
día~, disponibles hubiieran sido los domángos y días'
festivos; ptTO am,én de que ningún v.ecinod'eVelilla
dejabaliél Misa ni el Rosario por nada de este mun-
do, esos días les dedicaban más y Jnejor a. jugar a
lo.sbo1os o a ,lánzar la harra.
Los 'únicos que se aprovechaban de la caza en
111i pueblo eran los Bilbaínos, q'ue e¡ntrahan ~omo Pe-
dro por su casa, no. dejando tranquilas a lasperdiees
de La Silva ni a los conejos de las Cortes, ni a las
liebres de Las' H.eh,reras- y Senaras. A, las ii1.ocenVes
codornices, lo misn1.O que a las quinzas ya los gayos
'.......
.. : ....;
'.'," ...
.:.¡
..
:.i:
.:~
"'¡.', ,",
. ....
46 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
del monte, a raposos y tasugo.s, se les perseguía con-
tinUalTIe'nte, sin que nadie les echara el alto a esos
Q,cazadores que invadían los trigales y los prados y. se
desahogaban' a-su gusto como si estuvieran en propie-'
qad suya. Los delll pueblo de Velilla se contentaban
y .daban por satisfephos contemplando los despojos
, de la cacería, sin que se les ..D..C.l.lrriera •protestar nllÜca
, contra los cazadores extraños. Así eral~ aquellas gen~
tes sencillas.
Loshosques y 'espesuras de mi pueblo estaban
poblados por cazanlayor, conlO jabaHelS, lobos, corzos
y galTIuzas, sinexcluü··al Tey de las selvas n10ntañesas,
el o.so, cuya caza interesante y peligrosa, tan vivainente '
fué descrita por Pereda en su novela de "Peñas Arri-
, ba". Desde ya podelTI9s asegurar, que tampoco falta-
ron en los plieblos de' Velala, Besande y Balverde,
ni Chiscos ni, Pitos Falces para encararse con' el oso,
y sin que se inmutaran ni les ten1blara el pulso, supie-
ran co.locar, consns escopetas 'anticuadas dos, onzas
de plomo en la fiera, una en el ojo y la, otra en el
. ,
corazon.
'No hablemos de la~ nw.nadas de lobos, que eran
la continua intranquilidad de los pastores y de los
rebaños, y que a pesar de 10.s ,perros con cal~rancas
al cUello y de,colmillos afilados, con los que sostenían
peleas, sangrientas, hacían no pocas veces estragos
"en alguna novilla desbandada o en las ovejas que se
d'esca'rriaban, siendo~ tannumerosa's las 'bandadas
:deestos lobos, que muchas veces había que darles,
. ,', ,',
... : ... ;....,' .. . '. .: ", ~..... . '. '.
BRISAS DE MIS MONTAi':IAS LEONESAS 47
una hatida en fornla y envenenarlos con estricnIna. I
Con no p'oca fr'ecuencia henlos presenciado cuando
ehicosa cazad01:el3 y pasto.res, que con: la piel y la
caheza de lo's lobos a cuestas, iban pidiendo de puer-
ta en puerta, huevos y longanizas conlO· prenlio por'
haber matado "al padre de las ovejas", que: era la fra-
"se gráfica .conque solicitahanJa pitanza. Aún quedan
Ósos y lobos en aquellas lTI.ontafias l~onesas, pero son
ya Taros los ejenlplares que sefdescubl'en., '.
Las flores caInpestres y de jardín abundahanen
la priI11,avel'a. Entre la$ flores silve/stres in~ls her.mo-
sas, reeuerdolas que llanlábanlos "lna111aperro.s", non1- _
hre que segurall1ellte no figura en la nénnell1clatul:a
botánica, pero en verdad' hennosas y de u'n color rojo
encendido. Las call1panillasdel Prado hesaIldino,
abundaban y eran preferidas en el 111 es de Mayo para
adornar el altar de la Virgen durante el 111es de "las
Flores. En los huertos sobresalían las Rosas de Ale-
jandría, .y otras rosas encarnadas sen~illas, al11én de
,las rosas' de cien hojas, vistosas y aro111áticas. Los
chicos guardába1110s las hojas para después de secarlas
e;nlplearlas conlO tabaco para fumar cigarrillos: a es-
condidas de' nuestras 111adres, que cuando nos sor-
ptendían nos aplicaban una buena azotaina de es-
carpinazos y soplal11ocos. .
Las fl~utas .de núestros huertos eran' todas' aro~
m,á~icas y sabrosísimas, COTI10 las ciruelas y las peras
de agua, las n1anzanas y los membrillos, que nun-
ca llegaban á 111aduraren el árbol, porque 110 lesdá-
;.;
.:: .~ ," .
...' '~. ': ,- "
' , " , '
48 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ,
haillos tielnpo para que lnaduraran, y con gran peli~
gro deblnsas y pantalones, hábilmente¡ subía1n10s
por los árboles o las derribábalno.s a pedradas, por-
que tenÍau10s' un pulso y unojó qne donde le ponía-
lnos, blanco seguro. ¡-Cuántas zurra.s maternas nos
eostaban nues"tras travesuras de ladronzuelos de la
fruta aj'ena,que,hoy~reeordamo8 con placer yco~l.la "
sonrisa. en los labios! ' " ,
Frutas silvestres, y algunas de pIlas sabrosÍsi"-
rnas, abundaban en los montes", valles y cañadas.
Los arráspanos, a cinco cént,imos el bote o la "jartaá"~
vendidos por las pobres m.uj eres de' Otero y Baleo-
bero; avellanas deVillascusa atrapadas por nosotros
'mismos sin miedo alguno, porque eran de.l "primi
capientis" ;'guindas ácidas' y m'oritaraces de Villas-
quince, peruchos de lahuertona, n10ras y a.ndrinas
de todos los bardales, algayugas del Pinar, 'amos-
tajas de ,Valde:aya, antimoras .de Pereda, hongos y',
setas de la Cruz dre¡ los Lontbanos y Lastares,Ulan-
zanasde todo elmonte,porqu.e en todo el niante las
había, y, que coIocábam;os entre paja para que: sepu-
. "'h" ' 1 'd ' 1 1Sleran poc as y' comer as ' espues en as, argas "
,veladas del, invierno' entre 10.s tizones y al a'nlor de
la lumbre. Otras las reservábamos para meterlas'~~n
l()s' baúlesy en' las c6m:od~s en la. ropa dominguera,
que se el1)papaba"~~d€rca~6m~' que desprenclían las, ca.;
,mu~sas y am'ostaja~, algo mas emhriágadoruue! las
_nlodernas esencias de tocador y menjunje!sdebotica. '
"y, nada ,digamos ,de las'" plantásy hierbas: ar'orrtáti-
~'<
. ~"':
::::...:';.
1
, ,j
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 49
. -
cas que tanto. abundan y que arrancábanl0s a "puñaos"
y~raÍaInos ahrazadas. Manzanilla pura, cuyas flo-
re.cÜas cubren nlaterialmente las colinas; apíos y
conlinos .que elnbahalnan' cuanto. tocan; sanguinaria,
tan apreciada en lnedÍcina, que brota entre la peña
viva y que se confunde con el blanquecino de las pie.-
drüs;henosque c0111piten con los de Pravia, hierha
~bu~f:{tte. brotaper todas partes, Hy- nlil yn1ÍI plan-
tas luedicinálesconociclas bien por los viejos y las
viejas clemi pueblo, y cm} las cuales hacían sus ca-o
3
.
1
3
s
s .
1
.,
s
l-
,,~, .
-:-: ."
'.. taplasnlas y ponían renleclio a todas las'enfermeda- .
de~ sin necesidad de acudir al nlédico, y siempre
con resultado positivo, porque así eran nuestras lna-.
dres:Anlas del Hogar y Doctoras para todas las'
enfernlcdades caseras.
Ellas conocían a las n1Íl maravillas la vh'tud
de todas las plantas y sabíah extraer de ellas todas
; las buenas cualidades que natura ha depositado en
ellas, y yo no sé eónl0 se las arreglaban, pero el.
caso es que-con sus eU1plastos y tisanas, con sus'
fricciones y sus aceites, co.n sus baños d~ pies y con
ceniza, con sus biznlas lnezclas de' hierbas, era"u el
". "cúralo todo", de talmailera, que tan sólo se llamaba
al . Doctor cuando se presentapa alguna enfe,rnle-
dad bi~n declarada y. que: pudiera te;ner conse~
cuenClas.
Otro tanto hacían nuestrosabuelo.s para curar
a los aninlales que fOrInaban su hacienda. Con- san-
guijuelas y sang,rías, con cocÍlnientos' de hierbas y
4.- ..
.. - : ..
'. '
.";.
: ,1
"
, ..'.~ ,. ',":-'--' :
.~... ',-::~ :"'..' ,. "
50 PBlw.DEMETRIO RAMOS DIEZ
con cuernos de' ciervo, ellos sajaban y pinchaban'que
eJra un prilnor, ylo 111ás curioso era, que los, ani'111a-
les se salvaban' sin necesidad de veterinarios ni eu"
randeros.
Pina casósde emergencia repentina allí estaha
'el tío Salazar que obraba milagros Gon su la~lceta,
como le,s .obraban en perniquebraduras y roturas de
huesos o dislo.cacioúes el tío Bernardo, o la tía Mag-
dalena.Upa bizlJ1ade¡--l:>.ez,.unas cuantas astil1as~ ün
vendaje y listo. el pollo.
Algo he divagado, pero no importa, porque el .
fin es dar a cada uno lo que, le pertenece, y las plan-
tas aromáticasrios han traído fin sentirlo a las habi-
lidades de quienes sabían aplicat sus' efectos cura~
tivos.
Iglesias,' ermitas y santuarios
Una iglesia ha)' en nlÍ pueblo, y con ella basta,
dedicada a Jesús Salvador con su bola en la lnano
y con1pletamente dorada, ante la cual nue:~tros abue-
los y' nuestras nladres han rezado sus plegarias y,
calmado slisdolores. El templo., de forma irregular,
, no tiene ll1érito artístico ninguno, eornono le t~e!nen
,ni sus altare,s ni sus Ílnágenes,.Todo en él es sencillo
, ypohre, como pobre y sellcilloera el pueblo anti-
gu~mente. ~illco alÚtres, dedicados, fuera del, MayoT,
al Santo Cristo 'de la Agonía, a la Virgen del Rosa-,
rio, ,al Niño Jesús Y,a San BIas. Dos' púlpito.sd~ hie-
j. ~'" ,
le
a-
u"
a,
le
m
el
11-
.1-
1~
1,
lO
V.1 .
r,
n
o
.1-
t',
t-
lo ~'oo ,
:':-00,:0" ,
BRISAS DE ,MIS' MONTAÑAS, LEONESAS 51
rro, un Coro y Pila Bautismal" y acabe Ud. de
contar (l)!
El piso, completanlente de madera, está todo
'nunlerado, porque .,era el cementerio donde yacen
'los restos de todos: nuestros antepasados, según,' la
costumbre antigua, y prohibida por nuestras leyes
modernas alegando razones de higiene, como prohi-
-(1) Hoy laigles/a 86 encnel/tra cOlllplelámente 'rcstanrcula, Mil,
1/.n Altal'Mayol' 1/uevo e imlÍgenes toda8 nucvas ymoclel'1lCts. El celoso
lJ dinámico Cura Fárroco actual, 81'. D. 1saac Ria110, fuéel inioiad01'
de esta.1'e8taura.ción por cierto muynecel3((.l'ia. y' conveniente. El
llamamiento qne 1108 hizo en unión de l{(·Comisión ele 8e1101"as de
FeUll.a, para S 1/. (J'G,{/CO' los ga8t08 cOIIsiclel'a.bles, (t Zos hZ/os de Velilla
'l'e8iel/'.1/.tescn Américct, así como a todos los Sacerdotes y Fm.¿zes de
Velilla, eneal/ira eco cn nnest1'os corazones. 1'o,po/' mi parte, y en
nombre de m~8 pa.cll'es !I he)'lna./tos, hicc elonaGÍóá (lel Altar i11a.yol',
cuyo impm'te fuérle ,5,000 peseta8, y afJrarlezoo, tctnto a la Comisión
de Señ01'Cl8 eomo al S·)', DI/m Pá·l'1'oco~ la gellWeza dc co'loc(/1' úlla
. lúpida cOllmem01'a.tiva aZ lado del Aliar, lJrtl'a pCl'petua menÚJ1'ia, y
parct que 108 '/ien'lderos eleven una oración púT el rloll(tnte. Nunca
en m.i 11ida he entregado mis 1/Ctbcre8 con más g/l.8toni sat'i8facción,
,l/hubiera sielou1w infjra,Ut1¡.(Z no COJTC8pOJ/c7cr a7 pedido de ?ni pueblo,
tratándose eleZ mnbelleci.m.iento de la 'iglerHa ele mi niñez, elohde
1'cc.ibí 7a. 'viela cspil'itllal,'we h·icieron. crisn(Ulo, 1'ecibí la P1'imera
COlli1tll'ión yc01l!oucé a balbucea')' las primeras orQciones y a 1JtO-
elnlar los primeros cánticos a la virgen, Era mi8antct mad1'e la que
?ne .llel;aba' en braz08 clIanclochiquitín, lJ el camino de la iglesia
fué el p1'imC1'O quc alJ1'cmlí ell mi llifíez. ¿Cómo no contribuir al
ac7OJ'no 11 embellécimioJ/to dc la ig7esia elc )iti ni'ñez?
Siento no tenel' .fotog'J'(~f'ía8 dc las nucvas refonna8, felizmente
Uevac].a8 a cabo con éxito, pam qnc ,fignraran en el p)'o,~eJ/te libro.'
M'i8 felicitaciones al Sr, O/tm. D. Isa.ac Riaño,(t la Comisión
de SeñOl'a8, y (t c/uinioshall contrUwído 'con 131113 i.tonaciones a las
1"l:fo1'1nns del Templo ele Vel'illa, que han sido toclos,tód08 los h~jos
del 1)ueb1o, '1/1/08 más, ot·)'os menos, pero todos con la moj01' 1lOl'nnütd.
Obrar de otl'a manel'a, 7mbicra sido una, ingl'atitncl imperelonable,
ya que los hijos de VeliUas'ie?npre han sielo, ge.ner080S y ag1'adecidos.
l,; .'
" '!'
.0,0
1:.
1;·1
,~ ' .
.;:" ;'.1
PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
bida quedó la "huesera" pegando a los muros, de
la igleúa, y cuyo lugar aún se conserva. 'Adosada
al telnplo está la tonre con su reloj y sus calnpanas,
de las que ya hahlarenl0s lnás adelante.
Al otro lado. del río se encuentra la Ermita', de
la venerada Virgen de Areños, que es la Virgen y
.Patrona ,del pueblo, d~ la que hareanos n1ención l1iás
,detenida' .en otro lugar. . ,
En el calnino que, c9nduce a Guardo exist::>, otra
Ennita conocida con el 110nl,bre de "Cristo de la
.Cinta", hoy casi destruída y c0l11pletalnent'e abandoM
nada, desde: que se 'eanlbió el cmnino que a ella
conducía por la nueva carretera. En tienlpos que
.ya pasaron para no volver 111ás, ningún canúnaiTte
cruzahapor delante del Crjsto de la, Cinta sin rez~r
el "Credo" o. un "Padre Nuestro", depositando sus
eincocénti'nl0s para el Cristo, que se arrojaban por
la ventaüilla ahierta 'en la nlism,a puerta, y sin que
n,adie se preocupara de que fueran robadas las li~'
mosnas allí -depositadas con amor y con fe. Ninguno~
por lnaloque fuera, se hubiera atrevido a robar ni
un "perro chico" de los que' cuhrían el paVi111ento
dé ··la ermita.¡ Felices tienlpos aquellos! Es 'triste
que nadie se haya prelocupado de indagar el origen
histórico de esa peqUeña enníta de nuestro Cristo"
. COlll0 ignoramos quién f~lé su fundador, ni ahora se~
ría fácil averiguado, puesto qUe ya nlurieron los que
podrían relatarnos su his'toria légendaria y ~ntiquf.
.~~l1ma.
i ~
,
i;,
·-:'
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 53
Los Santuarios lnás famosos en. los contornos.
deVeliUa y a cuyas festividades ,1 ronlerías nunca
faltaban nuestros antecesores, eran LA VIRGEN DEL
BREZO, escondido 'entre altís~nlas nl~ntañas, con su
IIo.spedería y su e¡xtensa huerta que en, un, tielnpo
fueron y pertenecieron ~ a, un Convento Benedictino,
servido hoy por el. Párroco de¡ Villafría, que es el
pueblo nlás Ílll11ediato.' La historia. de este Santüario
en otros tielnpos fanlosÍsÍlno, está' llena de' poesía,
,.C01110 poética y verídica fué la aparición de 'la Vir- ,
gen a unos pastorcitos 'entre 'unos brezales, de donde
tOlnó el nOJllhre de Virgen dd Brezo,. Su Santuari o'
esbelto y elegai1te, fué magníficanlente restaurado
por el Párroco de Villafría, D.Manue~ Die,z, tíocar-
nal del que esto e~~crihe, en el año de 1898.
'Para luí tie~e recuer.dos inolvidables dicho San--
tuario, porque en él apl:enclí .. a rezar n1Ís prlnleras
plegarias, y en él c0111encéa ayudar, a. lVIisa desde los
siete, años, cuando lni tío el Sr. Cura, nle [evaha en
las ancas de su caballo atravesando los tres kilónle-
trosque le separan de Vülafría, entre peñas Ílnpo-
nentes quelnetían nlieclo 'al luás valiente. '
En sus dos festividades anuales, el día de la
Virgen y el día de San Mateo, lniles y lniles ele
personas de todos lo,s pueblo~ colindantes venían en
ron1erías y procesiones para visitai' a la Virgen, de-
jándo.Ia en ofrenda vacas y ternero&, joyas, 111uletas
de enfermos, cabelleras y vestidos" piernas de, cera
:ij y CIrIOS enorm1es, exvotos y pronle~as y tributoS' de
f~
~: ~
id ..rl~¡
'11:~ .
i .,' ,"~~/1:i'~< :_.;,':.~~;.
.., '
.',; I
O", •
"
....
." /.,..;70'"1'."ti';";'''','·}''cip,J4;é'
J4
1
.;;.:!.
".¡
:.i
NUeSfraSeflora del Bcf'zO
',.
]
J
(
,,
]
(
. . .,,'~. - j.~. ~1 _ _ - • -_ • • ~ ••
BRISAS' DE MIS MONTÁÑAS LEONESAS 55
: gracias recibidas por intercesión de ]a Virgen del
: Brezo. Y había que ver a 111íles y lnil'es de peregrinos
, subie,ndo a pie descalzo para adorar la Cruz colocada
•• en la cÍlna de uná montaña a lllás de nlil y q'uinien-
" tos nletros, con un sendero de piedra viva y calcárea
,que dejaba los pies despeJ1ejados. ¡Oh, Fe de mis
, paisanosL..¿Cuándo volveremos a pres1enciar tales
", escenas? .. ,¡Creo qUe nunca! ¡Aque:los tiempos no
'volverán, desgraciadamente! '
Adenlás de, este Santuario e'stá el de la Virgen
del Carmen y el Santo Cristo de Guardo, que C01110
atalaya ser destacan en la cima de una de sus nl0n·
,tañas dontinando todo el panoralna; y era en aquella
"explanada exten5:a donde se celebraban .las mejores
, ferias y las lnás alborotadoras romerías, que ter!TIina':
ban todas con los honestos bailes 1110ntañeses' y ;:on
el clásico y ya desaparecido aluche lnontañés. Algo
diremos sobre esto lnás adelante.
Otro Santuario, auncjue ya rhás alejado, es el
de la Virgen de La Velilla, sitüado al otro lado de
"lasmontañas de Valderrueda, lnás allá de Morgobejo,
,'" ju.nto a Cü:tierna, y situado en eL alto de una collna"
,;' entre los pueblos de la Mata y d~l Otero. Su historia
; se renlonta hasta la Edad Media, llegando a ser uno
; de los más famosos Santuarios de la Provincia de
" León, al que acudían miÚaresdeperegrinos. Hoy se
',2 encuentra triste ycasl abandonado, por la pérdida
,<; de Fee incuria de los tiempos saturados de .materia-
, lismo. Si nuestros', antepasados, levantaran la cabeza,
. '.;' ~
'. : " .
"
"::
. : '
.~:-~':,: - '.~; '.~' .:' ; ..'::.
. ':'.
56 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
se 'avergonzarían del abandono de esos Santuarit~.'
yde la negligencia en visitar a nuestras' Vírgenes"
famosas, tanto en el orden religioso conlO en el orden'
histórico. ]1ás adelante,' trataremos este asunto de
los Santuaxios Leoneses.
" ,
Nunca m,e perdonarían nlis paisanos, si al ha-
blar de lós Santuarios de nli' tierra Palentino' - Leo-'
nesa, no hiciera nlención de nuestras Vírgenes. po- ' .
pulares y conocidas.. en toda" EspClña; eonlO fon la
Virgen del Valle de Saldaña y la Virgen del Camino
de León, ambas coronadas soh~nlnenlente por Decl'eto
Pontificio, dejando dichos acontecin1Íentosuna hue-
na imborrable cuanto ÍInperecedera, por los' cantor"
nossolenlnes que revistieron, siendo coronadas por
'man()s. "Reales, anlbas Inlágeners Milagrosas, siendo
·dichas fiestas cantadas por lo.s l1lejores Oradores de
España, con asistencia de toda ·la aristocracia espa~
ñola y de los Prelados de la~glesia.
La devoción Palentillo - Leonesa es tan' acen-
drada, que. difícilnlente se encontrará una fanlilia
quena tel1ga a su Virgen del Valle o del CalTI:ino,
como protectora d'e la fan1il~a. El grito espontáneo
de nuestras madres en el peligro, fuésiempre:" iAy,
Virgen qu:e.rida d:el Valle!¡Madre' idolatrada del .....
. Camino!'~ Ambos Santuarios están adornados v cm··· ". . . . ' al " <J
beHecidos como corresponde a su categoría,·y no r,e
-.':'.,
. .:' - '. ", . ~. . ..'."-:
~.~}; .
L>~ .
~g;1
I
¡~·;~l...:~r~.,.
".; ..:
~."..-,,:=,
n
e
O'';
BRISAS, DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 57
encontrará ni un palentino ni un leonés. que no haya'
contribuído cón su ofrenda para ,enriquecer el tesoro
de sus Vírgenes idola,tradas~ Sigalnos las huellas de
nuestros antepasados, y que ningún leonés nipalcn~
tino que' por caballeros se tengan, echen janlás en
olvido Santuarios tan faluosos y Vírgenes tan Mila-
grosas, que desde sus Canli:1rines vigilan y defienden
sus'respeetivasProvlncias, quedando constituidas, por
aclarnación popular y por de/recho de conquista, due-
"ñas' de todas las alnl¡as 'castellanas.
Riqueza agraria y ganadera
La única riqueza de los pueblos leoneses 'está
fonnada por sus calnpos ,de lnieses y por haciendas
ganaderas. La falnilia nlás pobre tiene su pareja de,
vaquillas y algunos "jatos", con SU eorrespondiente
lote· de ovejas y corderos, sin que falte el "gocho"
para la 11latanza, ni carne fresca para, e~ puche.ro:
Sus prados y sus trigales; los titos y los gar-
banzos con 'eJ canlpo de lentejas; la cehada y la ave-
na; la leña del ,monte yel he,no para el ganado, ,todo
ello es',lo, que constituye la riqueza de los hogares de
mi ,pue~lo y de todos los puehlos del contorno. Aña-
, diendo a. todo esto una cnbita de vino, traído de tierra
de Campos por los carrOlllatos del tío Pepito, hace
tielnpo "desaparecidos, ,bastahanpara hacer'f'elices,
en aquellos tielupos de égloga, a todos luís paisanos,
/ ~- .~ ::.):;:"
,.
, , '
'.,
.; .1';
;'·1 .
58 P.aRO. DEMETRIO. RAMOS DIEZ
ql~e no tEmían'·. nlás pretensiones que! trabajar hones-
tanle¡nte yCOfner para vivir, no vivir para com·er.
y por eso. nlÍslllo que no tenían pretensione.s,
lodos eran felices y vivían tranquilos con su "alua
niediócritas", corno dijo el poeta latino. Cuidando
sus vacas y terneros, regando sus prados y segando
sus trigales, acarreando a las e~-as 'el producto de
EUS trabajos por el Cielo bendecidos, no tenÍannues-
tros a'ntepasados ni intranquilidade,s que nlatan, ni
üel~viosidades que aniquilan. Es 'poi- eso que senlO-
rían de viejos y con la sonrisa en los labios, 'rodea-
dos de sus hijos y deslls nietos, a quienes bendecían
antes de 111.orir, con la gravedad de Patriarcas. Todo
.. esto tanlbién ha desaparecido, por culpa de advene-
dizos e indeseables.
·I.as galerías carboníferas
Ni más ni menos. La tr.anquilidad de nuestros
pueblos patriarca.les, huyó espantada por el silbido
de las locomotoras, por e.1'ruido de los nl0tores ypor
las vagonetas de carbón.
Yo conocÍ, cuando niño, esa tranquilidad y aque~ I .'.
lla felicidad, cua,nd0 ni en sueños se nos hubiera
ocurrido' que en ·las 'entraoos de nuestros montes y
bajo la capa verde de nuestros pI'ados, 'lat~a la civi-
lizaciónmoderna,· convertida en hullaqlleénnegrece
y máncha," no tan. sólq, )os cuerpos,- SIno talnbién las .
""",'1¡"'?''G''''T~G'"
,
:t
o
)
.
1
1
)
~'.
..(.
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 59
almas¡; C01110 nunca. nos hubiéramo's imaginado que
habí~ de llegar un día, en que la rauda locomotora
y las ~'balastreras", arrastran~o vagone:s, habían de
cruzar nuesti'os. valles y alborotar la tranquilidad de
nuestros pueblos. Todo ello sorprendió a los tranqui-
. los y pacíficos habitantes de los pueblos palentinos
y leoneses, y no poco les costó ei hacerse a ello. y
.• el habituarse al ruido demaquina:rias, 'a los silbidos
estridentes que p~olongaban su eco. por las hasta ell····
¡ tonces donnidas' nl0ntañas y tranquilos' valles, y' al
rechinar de las vagone~as cargadas de mineral; sa-
liendo .como topos defeentro de la tierra. Aún recal'-
dalnas la .llegada del prinler tren a Guard~, .el día
en que se inauguró la vía de la Robla, y las fiestas'
que se celebraron con esbe motivo..Los chicos, y .los .
.... viejos, que en su vida habían visto un tren, lniraLnn
estupefactos, como quien ve algo diabólico, y ni acer-
carse se'atrevían a la máquina, que les causaba niie-
do CQn el ruido de sus énlbÜilos, y les hacía correr con
los' resoplidos del vapor de sus válvulas, que intenéio-
nada11l,ente abrían lnaq'uinistas y fogoneros, para reÍr-
se de aquellas gentes sencillas, ~ que miraban al mo.ns-
trua de hierro como algo incomprensible para ellos.
I . Pero. no. fueron tan sólo los pel~juicios nlorales
quela nueva civilización había' de producir entre
aquellos pueblos tranquilos. Estos. perjuicios. fueron
: también luate:riales, yq, que el carhón y ·la dinan1ita
habían de dañar enormemente lo más rico, hermoso" y
,productivo que tenía luí pueblo de Velilla. Tales eran:
. .,
:..'.,' ; - .. '
.: ;',
'::" .
, ,.
" 60 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ
Sus aguas cristalinas y, sus truchas salmonadas 1
Entre las riquezas naturales con que la Provi-
dencia enriqueció al pueblo de Velilla y delnás pue-
blos de la comarca, tenemos· tiue dar la supreinacÍa
a sus purÍsinlas y cristalinas. 'aguas, tanto de sus ríos
, ,
Escena campesfre,enVeliHádeGua~d~,en lln(J. de las meriendós lípicl!s
y familiares, bajo la sombra" de árboles gigantescos
y sobr~ercés'pedde sus encanfadOl:aspraderas
como de sus fuentes. Aguas tan frescas y transparen-
tes,que se veían deslizarse 'las truchas por, entre la
, linfa saltarina y espuI~osa, batidacontinuanlente I)017
"el choque con'las piedras y peñascos que a' su paso
, el1contrahan~~'Esas,aguas puraSl y frescas de n1Í puehlo, '
. , "
:",
:
'!
,
..
':',
(
t
1
t
f
(
g
r
f
a
t<
e:
a
d
,', 13fR,~'7~-~~~t~~~~~0~m~~~~~~~~m~~~~~~~~.~~~~~~~~~~~~~~~R~~
"J"
. 1~: . "'. :.
1 . '.;~
[->
W •
"!
: "
"
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 61
han sido enormelnente dañadas en su pureza por los
nlineralesy" el carbón, y como consecuencia de· esto,
dañadas quedaron tamhién sus falnosas y.apetitosas
truchas salm:onadas, nlanjar de Reyes y regalo insu··
perable de 'n1adrileños y delnás gente aristocrática
española. .'
La pesca de la trucha constituia en 'Velilla· una
fnenteinagotable de riqueza, en tanto grado, que lnás'
de veinte vecil10s del púeblo no tenían otro oficio 'que
el de "pescadores", qlle con sus redes yysparaveles,
l11angas y. hutrones" cañas y. anzuelos, se ganaban tan
gnapanlente la vida, sosteniendo a. sus 'faúlilias, al
núsmo tienlpo que sostenían y conlpletúban el gusto
de los Sardanápalos en sus regios banquetes, sin 11lás
. "
peligro que mojarse continu~unente las pantorrillas,
agarrar algunos resfríos' y alguna q'ue otra pulmonía,
,,1 aunque rara' vez esto sucedía, puesto que, COlno Nep-
U· tuno, era para ellos su eleInentó propio el vivirEiem~
pre moj'ados y lnetidos en el agua.
Pero. vinieron las 111inas decarb,ón; llegaron los
Inineros con sus cartuchos de dinanlita; se terminó
la gigantesca obra hidráulica del Pantano de Cam-
•. : .porredondo,' y la trucha salnl0nada de nuestros ríos,: ;
:': ha quedado arruinada y deE>lnejorada por cOlnpleto.
,
, ;
1 . El perjuicio ll1'aterial causado al pueblo con es~
1¡ tos progresos modernos, es inconcebible. Todavía se
[:1 exporta la trucha de Velilla, . pero ya 110 es ni tan
k4 a~undante, ni tan sabrosa, ni tan apetecida. Hapel'~
t:¡ .'didóel .gusto, se 'ha' enflaq1uecido y se ha' estragado
ft;~:
:--:.,;
.", .~ ;
<1
. I
. 1
, I
, °0 '
" '
"': .
',. I
" : ' i
",.:': ;, ;"
'. ,f:
:,,; ': l '
:1 ':.
, '
.,', .
,-
·.•. '-.' ···",,,,,",,",;cf""·T~;7""; ••.... <, i~jl
62 PBno. DEMETRIO -RAMOS DIEZ
visibleluente. En una palabra, ha perdido todo., su sa-
bor refrescante y todo su gusto sabrosÍsinl0~ y hasta
ha perdido su fornla: eshelta y redondeada, su piel
" :finísinla~ salpicada de chispas de diamal1tes, 'por ,la
varieqad ~e tUS pintas que constituían un TIlosaico.
La explicación de esta lneÚtmorfo~is tiene sus causas.
, Es sabido que la trucha tiende s"i~mpre a subir
,,'tguas arriba"~ y ,cuanto lnenosag~lia~: inenos esfuer-
zo y trabajo tiene que hacer la trucha. Una vez' tel'-
núnado, el Pantano de Cam,porredondo., el río está
nivelado sienlpre por laE' conlpuertas; el caudal del
'agua es ahora doble 'qüeel que antes tenía el río,
'y la, trucha tiene que enllplear doble ¡esfuerzo para
romper la violencia de lacorfientada, consumiendo,
sus energías con gran perjuicio d'e su desarrollo nor-
InaI. Así se explica que ,la trucha de Camporredondo
se rechazó por "tuberculosa y anémica"~ porqueacu-
111ldándose a l11111aresen el remansO" de laSl aguas que
forman una especie 'de halsa, jimto al dique del lnÍs-
lYlO Pantano, ni pueden alünentarse ,lo suficiente, ni
encuentran oxígeno apropiado para EU desarrollo.
Aquí tienen mis lectores la explicación deldesnlejo-
, famiento de la trucha salnl0nada de; mi pueblo.
;.'?
~.'~
>,
Es por esta nliSlTIa razón, que ya no piledeul).o
(n~traerse, 'como antes nos distraíaUl0s, viendo desli~ ¡;
zarse, las truchas entre ,el agua" con rapidez. vertigi..
nosa, nicontenlpiarse pl:iede ahora el cuadroencan-' .,~
tador de "las truchas' abohadas~' y como dormidas ['¡,
dentro 'de su elemento, ni ll1ucho nlenos, se pue~e Ir
¡.~
"l,',)
¡~1
I. ".- .. 0·-" ':.:........ ,::. /- .
~••i;"'.f$lir::':,'.",,!•.,':>',1:,
~ ,:'+
;'"1 .::~~
~.'~ .
>,
.o.
',-:
a- "
ta
el
la
o.
~So
.Ir
ToÓ
.1'-
tá
el
o,
:a
lo
r-
lo
u-
le
s-
.11
o.
)-
:0
.'J- l '
,'
.
1"
BRISAS DE MIS lV10NTAÑAS LEONESAS
ahora "pBscar a lnano", que era para nosotros una
de las distraciones, nlás, emo<;ionantes en las tardes
de los domingo.s, a escondidas de los pescadores; que
nos proporcionaban no pocos sustos, COlTIO pescadores
clandestinos que eraInos. y ésta es también la razón
de que el pueblo de Velilla no. presencie el cuadro
típico de, :ver a los pescadores reunidos y en plena
batalla, para' envolver entre las' mallas de sus redes
a trl~chas gigantescas, de dooe y quince libras, cuadro
que yo tantas veces contenlplara eri lni niñez.
Todo esto ha desaparecido, conlO desapareció
tanlbién el tipo clásico de "los pescado.res", que, re-
n1a.ngados de pie y, pierna, regresaban de sus faenas
con la cesta en bandolera llena de truchas, la caña al
hori1bro, o cargados de vedes, llevando poi calzado.
unos cuantos trapos que les, preEervaban la planta
de los pies,' para no lastinlarlos en las piedras y gui-
jarros del río; fUlnando, sus pipas, alegres y' saúsfe-
chos,rum.bo a la caSa de Juan el truchero, donde~
después de vender' su Inercancía, entraban en la ta-
benia para tomar un cua.rtillo ,de vino y 1110jarse un
poquitq por dentro, ya que tanto se habían nlojado'
por fuera; y allí, alrededor del jarro y e11 amahle
compañetismo, se relataban InllÍuanl'Cnte las peripe-
cias de la pesca, o planeaban, COlno pudieran hacerlo
los je~es de un Estado Mayor en vísperas de tina
b~lÍalla, elmo.do y manera de "atrapar" alguna trucha
LS ¡.¡. gigantesca, vista por alguno de los pesca~ores en el po-
e ¡j, '.zo de San Tiurde, de la Cueva el Fraile o de La Olla.
~ ~
1- '"
,'" .
,]
I
"~
1
1
., .. :, .
' "
64 PBRO. DEMETRIO RAMOS. DIEZ
II01nhr'es felices aquellos pescadores, COTI10 lo
, eran los pescadores de Galilea, honest,os, generosos,
siempre ale?:resy cont~ntos, que vivían cOllliendo
~opas d~ papillos y pe,ces que no entraban' en peso,
y que al volver del río, en1papados en' agua, se ren-. . . . .
nían alrededor de' la hornacha, cenaban frugahlten-
te y se dormían conto niños, con la tranquilidad del
'que tiene sosegada la conciencia, para, levantarse dt~,
111añanita y regresar 'otra ,vez a horas. del alba, para
recorrer todo.', el tío en una ,extensión de dos y tres
leguas. l'Tada de extrañar era que les gustara a veces
"eIl1pinar un' poco el codo" en la taberna, cosa bien
dispensable en ellos. Cans~do~ de estar 111etidqs con"
tinuamiente en el agúa helada,¿qué extraño era que
les gustara el vino?."
Inolvidahles serán sien1pre' para los chiquillos
de acru~l tielllpo., los n0111hres de pescadores C01110, el
tío Tomasón, el tío Péltilla, el tío Salazar, el 'tÍo Cal'-
Iones y el tío Chuchurule, los pescadores n1ás fan10-
sos en, aquel entonces, y aql~ienes nosotros esperá-
halnos ansio.sos, ,al regreso de la pesca~ para gritarles
siml1pre con la frase proverhial: '''¡Tío T0111usónL..
¿Me da Ud. un pez?..." Y si le traía en la cesta~ rara
vez nos lo negaba, aunque a veces tan~hién nos res-
pondía: con sorna y con su pira entre lo.s labios: "El
que quiera peces, que se lnoje 'eL.. como. yo me le
n1ojo", y era entonces cuando nosotros le cantáhan10s.
con picardía infantil:
;,
i;1
, "
e
:e
1
. 1
]
y
a
,.;
el
f
q
1
¡@
:1
¡ t
l'
, ,
:,.,j
;1 (
r·:!
~.:t.
. i'
-:.:.... ,:
. ~ .
'. "'
....,;"..;.:::::." '.' :.,.,,;.
, '1(:.1
",:, <' ..:"
"/'0';. .•.-. :. ::'.:
o
o
),
1-
l-
J
;,
i;1
. "
·····'·:1·. "-;..'
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS
. Tío Tomasón,
Tío Tomasón,
que en vez de truchas,
ha pescado un "culebrón".
65
;.;
¡Tienlpos. felices aqnellos, que hoy recordamos
,con nostalgia en el alma y con tUl poco de tristeza, en
,el cótázón!'
a ',Riquezas de susnosqucs
s
Eran los bosques de lni pueblo espesos y um-
•bríos donde tenían sus guaridas los lobos y jabalíes,
y no sin pavor entrábamos por ello~ en busca le'
r ,,' acebos para saGar lig~, o en busca de guindas o ni-
s
(j
,dos, antünoras y nlantecones.
Pinos y acebos, hayag ,y robles, chopos y ene~
l ' hros, tejos y acebuches, cerezos, 111anZanos y perales,. ~
s
'pin05 y abedules, avellanos y salgueros, y otros más
que ahora no nle vienen a la memoria, constituyen
la riqueza forestal de mi pueblo.' '
También los hosqties, han sido víctinlasdel pro-
greso moderno y d'e la indlÍstria comercial. Aquellos
1 ,bosques, entonces .frondosos, y aquellos' árboles gi"
.; gantescos, han Ido desapareciendo poco a poco,' ta-
l :: lados sin conlpasión, para hacer traviesas o durmien-
[ tes para el' tren y vagonetas para trasladar el n1Íne-
, Tal, con gran perjuicio de 'los intereses deVelilla.
3
',; Ya no existe el negocio de los "hayucos", fruto
¡~ del haya" que es úna especie de bellota triangular~ de
~. - . ' '.;·1 . .
'l
fJ
~.:t. <
, ;;
¡ . ....
~. :".~;",.; . . ....
5.~
.,' ...' "
','
. ··1
:::1
j
. ,1
," .1
!
1,1
: t
:1
. ..;.
, : ' ~ ',' I
.." . ,
, ~.,.' ,-'
-:" ~";'-:-:~-'~'-=-:-::;.~~~,~~, 74
:. _.,
::-'" ,~ .
···········O"f" .
, }:4
¡1
66 PBRO. DEMETRIORAMOS DIEZ
fornla ovalada, y del. que se .extraía aceite, en abun- ,1
dancia, despuésl de elaborarlo en nl01inos propios. Ya
no van lo_s chicos en bandadas 'a descort~zaT los acebos, ,'"
para sacar liga, con que cazaban a los inocentes pa- .. '
jarillos, COl?- pajas bien enhebradas, en cuyo arte éra-
. 'mas verdaderos y consulllados nlaestros, puesto (iue
no carecía de luaestrÍa'(lnlodo de preparar la liga, ' ~
a la que había que: descortezar prilnero en' el árbol, ..
JuasVcardespués a déntellada viva,.~avarlacuida­
dosamente hasta desprenderla de sus partes granu-
l d ' . d . . "h l'" ,. l' fa as, termInan o por acer 19a, jy que 19a.,·
envasada con agua en cajitas 'de betún, y después
huscar pajas, enhebradas con habilidad, no tan féÍ.eil .
conlO se cree" saherlas colocar en las grietas y pare~
. des salitrosas donde venían a comer los páj.aros, es- 1
conderse y no rehullin:ü para no' espantarlos, y... (
¡zas!', ya se prendieron en la liga. Correr anhelantes (
p'ara atrapara las yíctinlas, y saber desprenderlas t
de la paja enligada sin estropear su plumaje. No :.
crean· que es tan fácil inflar 'un 'perro, como diría
Cervantes. Pues ese perro 'le inflábanl0s los chiqlli-
llosde mi ti~mpo, en un tr((8 por cu~tro, y estoy se-
guro qUe los chicos de 'ahora no saben hacerlo, como
no saben hacer muchas otras cosas 'que entonces nos
servían, de solaz y entretenim.iento, aunque a vece,s
rios costaban a:lgunas.,zurras y ~achetespor paJ.'te de
lasnuestra~ madres,' que conJ:azón ros ll,unahan .•
"endinos", ~~endiablaos" y "satanucos", y no sin ra- :~
.zón, porque después de nuestras excursiones ~al mon~ i:~, ~
cí
¡",¡
.¡
:¡
nI-
Ya
os,
)a-
ra-
BRISAS DE MIS MONTAÑAs LEONESAS' 67
.: te, ·el q'ue no. había perdido' la blusa, traía hecho
: jiroúes el pantalÓn, y .el que había' salvado. lagofra,
:; venía 'sin un zapato, cuando no venía sin los dos.
jAy que ver la gresca que .se armaba, y los gritos.de
las pobres madres al vernos rotos, con la caút llena
'liC de,á~.añazos, las lnanosdesolladas y los pies llenos
~a, .de espinas, los tirantes. sin botones y, a veces, los
01, .. pantalones sin tirantes, la camisa fuera .y con l~nhaln~ .
la- bre eaninapordeátro! En vista de nuestro aspecto
tU-
l.' ..,,
.es
:~il'
. zaparrandroso y de' nuestras fachas de verdaderos Ju-
das, InaS de una vez se cruzaban las mano.s, 8;sustadas,
y entre manotones exclamaban: "¡SeñorL...iSeñor!...
¿Por qué no vendni Herodes todos los años? ...
Estas' escenas se repetían un día sí, y otro taln-
~s- : hién, y siempre que había que ir '''a nidos" o a bus-
eal' "liga", cuando no. íbámps a meternos comogar-'
duñas, en las grutas y cuevas, silos y cavernas, que
as tanto abundan en lni pueblo, y en las que dejábamos,
~o :. a veces, nq. sólo pedazos' de pantalones, sino que
es
,
Ul
e.s
le
tan1bién hasta pedazos, de piel. .
Gradas y cavernas
Eh las lTIontañas cantábricas existen grutas ia-
11l0SaS e histórieas, y conocidas son la cueva de
Altan1ira, tan vi'sitad~ por los geólogos ansiosos de
III .deseubrin1ientos, y la gruta de Pando y cien fnaS, con
a- ;¡sus recuerdos prehistóricos y legendarios,' que en-'
n- i.' cierran en)sus entrañas petrificadas restos antedilu·~. ¡
cí
.1
" 'j
.' . ~ . < ..... .•. .;UiJf::·····.
. . ' 1
' h"
r·! .< ¡
68 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ ; ..
¡
, I
vianos y osalll:ent;ls de aniinales desaparecidos ya
de la Fauna lllundial.
Las grutas de Velilla de Guardo tienen'taTIlhiél1 su
.,poquito de_historia ySll nnlCho de' cosas ré,lras 'y .. .}
curiosas,q~Ie internlinable lne haría si a enluuerar- .1
.las fuera. .
Sus gigantescas ulontañasde pura piedra caliza,
de la {Iue antes se extraía cal en abundancia, después .,
de Eer quemada la ,piedra en los Caleros, y poreaya ......
razón se nos nanTa Ca.1i,ego~ a los habÍtantes de Velilla,
están llenas de cueva,s y grutas gigantescas, muchas de
ellas aún no exploradas por completo, ni recorridas en
toda su extensión, y en las, cuales tieilen que ence·,
rrarse no pocos nlÍsterios ocultos en sus tiniel:>las.
En Velilla están las cuevas de la "Gerijuela",
la del "Calderón", la "Cuev.a Grande de los Grajos",
la Cueva "El Fraile", la de ,"los Carlistas", el "Silo
,del tío Enleterio", la de la "Palomera" (hoy desapa-
recida), la de "Onseca", y otras muchas,pero entre
todas, la que tiene m,ás remelnbranzasy lnás popu-
laridad es la 11am,ada Cueva de los "Palacios".?
La de la Gerijuela, hoy inaccesible por el des'
moronanliento del estrecho sendero que a ella con-
ducía, no es otra cosa que un pedazo de túnel abierto
en la piedra viva; y que fué ni lnás ni nlenos que ,un
acueducto' Romano, por el que traían las aguas desde ¡,
el puente COlnpuerto de· Otero, hoydestruído. Para
nuestros padres'y abuelos, eráobra de ln0I:0S, ya que
todas "las ,obras cuyo origen "se desGonociera, era'
¡;• I
1"t~)
~:
.. : "
t
I
tl
-!,~:.>,:.,>,.:.,;..~;,:.;." ..':¡'
, I
BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 69
a
para ellbs "obra de 1110ros". Esta fué, sjelnpre la
u. ,'cueva preferida para los chicos, sobre todo. en Se~
'.
i.'
.J11ana' Santa~ y a ell?-suhíalllos con nuestras carracas
y rnatracasdando estrepitoEos conciertds que albo-
rol'aban a todo el pueblo q'uevenÍaa caer debajo .,~~
la cueva dicha. Ya pueden imaginarse los lectores el
ruido. que produc~rÍan treinta o cüarenta lTIuchach()s,
con otras tantas 111atracas y carracas, tQcadas y ha-
tidas a iabiar en aquel túnel de piedra de veinte me-'
tros de largo.. Justarpente íbam,os allí, por eso 111Ísmo,
porque ~x,maban más y lnejor nuestros instrumentos
y nuestros gi'Ítos, capaces de volver loco a cualqui~ra
que no Juera un chico de Velilla.
Comocúalquier otro que no fuera un chico de ·Ve-
hIla, hubiera' teriido nunCa el coraje de escalar aqueo
lla cueva colocada sobre unabismp de más de cuatro-
cientos ,111etros, y a la que' no había' más relnédio
que entrar por un sendero resbaladizo que no tendría
Jl1ás de un pie de anchura,' abajo €l abisnlo, y arriba
el peñasco en corte vertical. Aquello era para hacer
el acto de contrición o para hacer testam'ento, pero
ninguna' de eEas cosas nos preo.cupaban lo más mí~
nÍino a los chicos de Velilla, y que yo sepa, nunca
ocurrió ninguna desgracia;' conlprobátldose, una vez
lnás, de- que, los chiquillos tienen todo.s tres o cuatr,)
Angeles de 'la' Guarda, porque. de lo contrario no se
, explica que saliéranl0s convida de aquel 'peligro, 'al
que hoy il0 l11e expondría aunque 111e dieran todo
el 0.1'0 'del 111undo;
¡',
: , 1
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo
Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Poesia a mi colegio
Poesia a mi colegioPoesia a mi colegio
Poesia a mi colegiolis minaya
 
LA LECCIÓN DE LAS TRUCHAS
LA LECCIÓN DE LAS TRUCHASLA LECCIÓN DE LAS TRUCHAS
LA LECCIÓN DE LAS TRUCHASElsa Bayona
 
Dia de la primavera
Dia de la primaveraDia de la primavera
Dia de la primaveraADaly PHc
 
Jose Maria Arguedas - Warma Kuyay
Jose Maria Arguedas -  Warma KuyayJose Maria Arguedas -  Warma Kuyay
Jose Maria Arguedas - Warma Kuyayelde
 
Sesión de aprendizaje oracion compuesta
Sesión de aprendizaje oracion compuestaSesión de aprendizaje oracion compuesta
Sesión de aprendizaje oracion compuestaSarita Bravo
 
Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”
Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”
Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”JOSE RONALD CORREA LARREA
 
Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...
Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...
Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...Hugo Eduardo Palomino Esteban
 
Sesión de aprendizaje sumar y restar fracciones homogeneas
Sesión de aprendizaje  sumar y restar fracciones homogeneasSesión de aprendizaje  sumar y restar fracciones homogeneas
Sesión de aprendizaje sumar y restar fracciones homogeneaselena m
 
Chicharrón de pota triptico
Chicharrón de pota tripticoChicharrón de pota triptico
Chicharrón de pota tripticoJhoel Guerra
 
Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta
Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta
Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta patitavd
 
5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc
5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc
5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.docrosamariaaurismendoz
 
Plan lector el vuelo de los condores (interior)
Plan lector el vuelo de los condores (interior)Plan lector el vuelo de los condores (interior)
Plan lector el vuelo de los condores (interior)Williams Marin Chavez
 
Sueño de don jose de san martin
Sueño de don jose de san martinSueño de don jose de san martin
Sueño de don jose de san martinKaty_Montano
 
1° GRADO pupiletras-I.pdf
1° GRADO pupiletras-I.pdf1° GRADO pupiletras-I.pdf
1° GRADO pupiletras-I.pdfssuserb6cba7
 

La actualidad más candente (20)

Poesia a mi colegio
Poesia a mi colegioPoesia a mi colegio
Poesia a mi colegio
 
LA LECCIÓN DE LAS TRUCHAS
LA LECCIÓN DE LAS TRUCHASLA LECCIÓN DE LAS TRUCHAS
LA LECCIÓN DE LAS TRUCHAS
 
Dia de la primavera
Dia de la primaveraDia de la primavera
Dia de la primavera
 
Jose Maria Arguedas - Warma Kuyay
Jose Maria Arguedas -  Warma KuyayJose Maria Arguedas -  Warma Kuyay
Jose Maria Arguedas - Warma Kuyay
 
Sesión de aprendizaje oracion compuesta
Sesión de aprendizaje oracion compuestaSesión de aprendizaje oracion compuesta
Sesión de aprendizaje oracion compuesta
 
Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”
Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”
Sesión de aprendizaje xo“analizamos la lectura los sueños de un sapo”
 
Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...
Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...
Kit evaluacion-demostrando-aprendimos-4to-primaria-comunicacion-1trimestre-en...
 
Actividad 94 leemos un diptico
Actividad 94 leemos un dipticoActividad 94 leemos un diptico
Actividad 94 leemos un diptico
 
sesion-del-uso-de-la-B-y-V.docx
sesion-del-uso-de-la-B-y-V.docxsesion-del-uso-de-la-B-y-V.docx
sesion-del-uso-de-la-B-y-V.docx
 
Sesión de aprendizaje sumar y restar fracciones homogeneas
Sesión de aprendizaje  sumar y restar fracciones homogeneasSesión de aprendizaje  sumar y restar fracciones homogeneas
Sesión de aprendizaje sumar y restar fracciones homogeneas
 
Chicharrón de pota triptico
Chicharrón de pota tripticoChicharrón de pota triptico
Chicharrón de pota triptico
 
Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta
Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta
Sesion de aprendizaje Textos discontinuos: La historieta
 
Textos descriptivos
Textos descriptivosTextos descriptivos
Textos descriptivos
 
Sesion con weclass grupo 1
Sesion con weclass   grupo 1Sesion con weclass   grupo 1
Sesion con weclass grupo 1
 
5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc
5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc
5.- SESION ESCRIBIMOS UNA ANECDOTA.doc
 
SÍLABAS TÓNICAS Y ÁTONAS
SÍLABAS TÓNICAS Y ÁTONASSÍLABAS TÓNICAS Y ÁTONAS
SÍLABAS TÓNICAS Y ÁTONAS
 
Plan lector el vuelo de los condores (interior)
Plan lector el vuelo de los condores (interior)Plan lector el vuelo de los condores (interior)
Plan lector el vuelo de los condores (interior)
 
Sueño de don jose de san martin
Sueño de don jose de san martinSueño de don jose de san martin
Sueño de don jose de san martin
 
1° GRADO pupiletras-I.pdf
1° GRADO pupiletras-I.pdf1° GRADO pupiletras-I.pdf
1° GRADO pupiletras-I.pdf
 
Anecdotas
AnecdotasAnecdotas
Anecdotas
 

Destacado (9)

Primeras poesías
Primeras poesíasPrimeras poesías
Primeras poesías
 
Poesia 2013
Poesia 2013Poesia 2013
Poesia 2013
 
Viento Del Pueblo Con Poemas
Viento Del Pueblo Con PoemasViento Del Pueblo Con Poemas
Viento Del Pueblo Con Poemas
 
Poesía de protesta y revolucionaria
Poesía de protesta y revolucionariaPoesía de protesta y revolucionaria
Poesía de protesta y revolucionaria
 
Décimas del poeta saloero
Décimas del poeta saloeroDécimas del poeta saloero
Décimas del poeta saloero
 
Dimensiones culturales
Dimensiones culturalesDimensiones culturales
Dimensiones culturales
 
Dimensiones Culturales
Dimensiones CulturalesDimensiones Culturales
Dimensiones Culturales
 
Poesias dispersas
Poesias dispersasPoesias dispersas
Poesias dispersas
 
Poesía para Niños. Las Cigüeñas de mi Pueblo
Poesía para Niños. Las Cigüeñas de mi PuebloPoesía para Niños. Las Cigüeñas de mi Pueblo
Poesía para Niños. Las Cigüeñas de mi Pueblo
 

Similar a Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo

Ebook YO, BUENOS AIRES
Ebook YO, BUENOS AIRESEbook YO, BUENOS AIRES
Ebook YO, BUENOS AIRESSebastian Pain
 
REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.
REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.
REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.Juan Antonio López
 
Aventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdf
Aventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdfAventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdf
Aventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdfMARIBELANTONIETAHUAY
 
Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.
Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.
Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.Manu LF
 
Historia de Benjamin
Historia de Benjamin Historia de Benjamin
Historia de Benjamin MICHEL Arias
 
Miguel Hernández
Miguel HernándezMiguel Hernández
Miguel HernándezRafatalytal
 
Dichos,refranes,y mas
Dichos,refranes,y masDichos,refranes,y mas
Dichos,refranes,y masGabyMusic
 
Canciones populares de los primeros sesenta años del siglo XX
Canciones populares de los primeros sesenta años del siglo XXCanciones populares de los primeros sesenta años del siglo XX
Canciones populares de los primeros sesenta años del siglo XXGonzalo Rivas Flores
 
Cancionero popular-violeta-parra-2017
Cancionero popular-violeta-parra-2017Cancionero popular-violeta-parra-2017
Cancionero popular-violeta-parra-2017Alvaro Alvaro
 
El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)
El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)
El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)Claudio Osmán Soto Sepúlveda
 
Décimas lambayecanas de Carlos Távara
Décimas lambayecanas  de Carlos Távara Décimas lambayecanas  de Carlos Távara
Décimas lambayecanas de Carlos Távara Literatura y Tradición
 
Tradiciones de el salvador
Tradiciones de el salvadorTradiciones de el salvador
Tradiciones de el salvadorRicardoMauGoz
 
Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02
Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02
Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02rafaelsalguero
 
Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012
Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012
Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012elliodeabi
 
Programa Fiestas Briviesca 2012
Programa Fiestas Briviesca 2012Programa Fiestas Briviesca 2012
Programa Fiestas Briviesca 2012labureba
 

Similar a Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo (20)

261 arg mpc_tradicion
261 arg mpc_tradicion261 arg mpc_tradicion
261 arg mpc_tradicion
 
Ebook YO, BUENOS AIRES
Ebook YO, BUENOS AIRESEbook YO, BUENOS AIRES
Ebook YO, BUENOS AIRES
 
REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.
REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.
REVISTA Nº32 FERIA Y FIESTAS DE QUESADA, JAÉN.
 
Aventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdf
Aventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdfAventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdf
Aventuras de Juan Esparraguito o el niño casi legumbre.pdf
 
Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.
Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.
Aileen (Manu LF) LetrasQueSeMueven.
 
Historia de Benjamin
Historia de Benjamin Historia de Benjamin
Historia de Benjamin
 
Compendio UNIversos Siglo XX
Compendio UNIversos Siglo XXCompendio UNIversos Siglo XX
Compendio UNIversos Siglo XX
 
Miguel Hernández
Miguel HernándezMiguel Hernández
Miguel Hernández
 
Dichos,refranes,y mas
Dichos,refranes,y masDichos,refranes,y mas
Dichos,refranes,y mas
 
Canciones populares de los primeros sesenta años del siglo XX
Canciones populares de los primeros sesenta años del siglo XXCanciones populares de los primeros sesenta años del siglo XX
Canciones populares de los primeros sesenta años del siglo XX
 
Cancionero popular-violeta-parra-2017
Cancionero popular-violeta-parra-2017Cancionero popular-violeta-parra-2017
Cancionero popular-violeta-parra-2017
 
El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)
El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)
El cocinero universal arte de guisar al estilo moderno(1911)
 
Décimas lambayecanas de Carlos Távara
Décimas lambayecanas  de Carlos Távara Décimas lambayecanas  de Carlos Távara
Décimas lambayecanas de Carlos Távara
 
Canta palabras
Canta palabrasCanta palabras
Canta palabras
 
5 canta palabras
5 canta palabras5 canta palabras
5 canta palabras
 
Cantapalabras
CantapalabrasCantapalabras
Cantapalabras
 
Tradiciones de el salvador
Tradiciones de el salvadorTradiciones de el salvador
Tradiciones de el salvador
 
Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02
Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02
Tradicionesdeelsalvador 120626153911-phpapp02
 
Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012
Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012
Programa Oficial de Fiestas de Briviesca 2012
 
Programa Fiestas Briviesca 2012
Programa Fiestas Briviesca 2012Programa Fiestas Briviesca 2012
Programa Fiestas Briviesca 2012
 

Más de Historia de Cantabria

Liébana: condados, tenencias y señoríos
Liébana: condados, tenencias y señoríosLiébana: condados, tenencias y señoríos
Liébana: condados, tenencias y señoríosHistoria de Cantabria
 
Via romana de Herrera de Pisuerga a Retortillo
Via romana de Herrera de Pisuerga a RetortilloVia romana de Herrera de Pisuerga a Retortillo
Via romana de Herrera de Pisuerga a RetortilloHistoria de Cantabria
 
El oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria Histórica
El oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria HistóricaEl oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria Histórica
El oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria HistóricaHistoria de Cantabria
 
Ataque y destrucción del oppidum de Monte Bernorio
Ataque y destrucción del oppidum de Monte BernorioAtaque y destrucción del oppidum de Monte Bernorio
Ataque y destrucción del oppidum de Monte BernorioHistoria de Cantabria
 
Estructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte Cildá
Estructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte CildáEstructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte Cildá
Estructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte CildáHistoria de Cantabria
 
Asedio al castro de La Loma I Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma I Santibáñez de la PeñaAsedio al castro de La Loma I Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma I Santibáñez de la PeñaHistoria de Cantabria
 
Asedio al castro de La Loma II Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma II Santibáñez de la PeñaAsedio al castro de La Loma II Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma II Santibáñez de la PeñaHistoria de Cantabria
 
La provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzas
La provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzasLa provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzas
La provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzasHistoria de Cantabria
 

Más de Historia de Cantabria (20)

Los hórreos en Cantabria
Los hórreos en CantabriaLos hórreos en Cantabria
Los hórreos en Cantabria
 
Liébana: condados, tenencias y señoríos
Liébana: condados, tenencias y señoríosLiébana: condados, tenencias y señoríos
Liébana: condados, tenencias y señoríos
 
La merindad de Liébana y Pernía
La merindad de Liébana y PerníaLa merindad de Liébana y Pernía
La merindad de Liébana y Pernía
 
Las Anjanas de Valdáliga
Las Anjanas de ValdáligaLas Anjanas de Valdáliga
Las Anjanas de Valdáliga
 
El ferial de Maliaño
El ferial de MaliañoEl ferial de Maliaño
El ferial de Maliaño
 
Ferias de Cantabria
Ferias de CantabriaFerias de Cantabria
Ferias de Cantabria
 
El Chacoli Cántabro
El Chacoli CántabroEl Chacoli Cántabro
El Chacoli Cántabro
 
Santander Cantabria y el Nuevo Mundo
Santander Cantabria y el Nuevo MundoSantander Cantabria y el Nuevo Mundo
Santander Cantabria y el Nuevo Mundo
 
Via romana de Herrera de Pisuerga a Retortillo
Via romana de Herrera de Pisuerga a RetortilloVia romana de Herrera de Pisuerga a Retortillo
Via romana de Herrera de Pisuerga a Retortillo
 
De Vellica a Camarica
De Vellica a CamaricaDe Vellica a Camarica
De Vellica a Camarica
 
El castro de la Ulaña, Humada Burgos
El castro de la Ulaña, Humada BurgosEl castro de la Ulaña, Humada Burgos
El castro de la Ulaña, Humada Burgos
 
El oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria Histórica
El oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria HistóricaEl oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria Histórica
El oppidium de Monte Bernorio en la Cantabria Histórica
 
Ataque y destrucción del oppidum de Monte Bernorio
Ataque y destrucción del oppidum de Monte BernorioAtaque y destrucción del oppidum de Monte Bernorio
Ataque y destrucción del oppidum de Monte Bernorio
 
Estructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte Cildá
Estructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte CildáEstructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte Cildá
Estructura onomástica y estructura social de los indígenas de Monte Cildá
 
EpigrafÍa y muralla Monte Cildá
EpigrafÍa y muralla Monte CildáEpigrafÍa y muralla Monte Cildá
EpigrafÍa y muralla Monte Cildá
 
Asedio al castro de La Loma I Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma I Santibáñez de la PeñaAsedio al castro de La Loma I Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma I Santibáñez de la Peña
 
Asedio al castro de La Loma II Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma II Santibáñez de la PeñaAsedio al castro de La Loma II Santibáñez de la Peña
Asedio al castro de La Loma II Santibáñez de la Peña
 
La provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzas
La provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzasLa provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzas
La provincia de Cantabria Notas sobre su constitución y ordenanzas
 
Amós de Escalante Costas y Montañas
Amós de Escalante Costas y MontañasAmós de Escalante Costas y Montañas
Amós de Escalante Costas y Montañas
 
La crisis del s. XVI
La crisis del s. XVILa crisis del s. XVI
La crisis del s. XVI
 

Último

(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...
(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...
(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...patriciooviedo3
 
TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...
TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...
TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...univerzalworld
 
Mujeres que corren con los lobos en la noche.pdf
Mujeres que corren con los lobos en la noche.pdfMujeres que corren con los lobos en la noche.pdf
Mujeres que corren con los lobos en la noche.pdfKeilly Merlo
 
Matemática universitaria de AlgebraLineal.pdf
Matemática universitaria de AlgebraLineal.pdfMatemática universitaria de AlgebraLineal.pdf
Matemática universitaria de AlgebraLineal.pdfFAUSTODANILOCRUZCAST
 
Programación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdf
Programación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdfProgramación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdf
Programación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdf20minutos
 
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdfCode name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdfnaladosol
 
Code name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdf
Code name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdfCode name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdf
Code name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdfnaladosol
 
RESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJO
RESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJORESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJO
RESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJOLuisFigueroa230128
 
Code name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdf
Code name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdfCode name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdf
Code name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdfnaladosol
 
EL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicoss
EL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicossEL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicoss
EL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicossLucasJohnHuntingford
 
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdfCode name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdfnaladosol
 

Último (11)

(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...
(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...
(HOTD) Las Grandes Casas de Westeros y su estado previo a la Danza de los Dra...
 
TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...
TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...
TRIFOLIO DIA DE LA TIERRA.pdf Perdida libertad y educación social. • Pérdida ...
 
Mujeres que corren con los lobos en la noche.pdf
Mujeres que corren con los lobos en la noche.pdfMujeres que corren con los lobos en la noche.pdf
Mujeres que corren con los lobos en la noche.pdf
 
Matemática universitaria de AlgebraLineal.pdf
Matemática universitaria de AlgebraLineal.pdfMatemática universitaria de AlgebraLineal.pdf
Matemática universitaria de AlgebraLineal.pdf
 
Programación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdf
Programación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdfProgramación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdf
Programación de las Fiestas de San Isidro 2024.pdf
 
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdfCode name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-1.pdf
 
Code name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdf
Code name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdfCode name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdf
Code name Anastasia parte -1(1)-páginas-4.pdf
 
RESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJO
RESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJORESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJO
RESUMEN DE LA PELÍCULA DE CHERNOBYL ENFOCADO A MEDICINA DEL TRABAJO
 
Code name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdf
Code name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdfCode name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdf
Code name Anastasia parte 1 - capitulo - 2(1)-páginas-2.pdf
 
EL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicoss
EL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicossEL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicoss
EL QUIJOTE.pdf Libro adaptado de la edicion vicens vives de clasicos hispanicoss
 
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdfCode name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdf
Code name Anastasia parte - 1(1)-páginas-3.pdf
 

Tradiciones y costumbres de mi pueblo Velilla de Guardo

  • 1. ,', PBRO.DEMETlIO ,RAMOS, EHEZ BRI A DE MI M TAÑAS LEO E AS TRADICIONES, YC05TUMBRE.5 DE MI PUEBLO VELILLA DE GUARDO
  • 3. r.,':'1, ,.. - ' , 1 '.:" . :', ,~. . ~ PBRÓ. DEMETRIO RAMOS, DIEZ BRiSAS DE MIS a .1l1I Dr:11I JjJ a IIiI aa I Del. D' Da '11 lIIelS lIaa uIIID.a I D11 uoa UII ••• VII Da 1.llIlIal a 11 alal a 1111.1 •• MONTANAS· LEONESAS . TRADICIONES Y C·OS1Ulv1BRES DE MI PUEBLO VELILLA DE GUARDO . /'1 i~830~ ;2..91)D BUENOS AIRES'M REPUBLICA ARGENTINA M ANO 1940 ...~ .
  • 7. ,.'.'"." ...........-"':::";"'~(T:::~?~CT'~;'~,'''''''~r;~7'~'~~'7-~7;~:·~~~~..::r~·~;~??~ . ~~~--~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ ~ .. ¡o o AL MI QUERIDO PADRE D. MIGUEL RAMOS, '~'. . .' A LA' lvISEÑOR'A Y HEROICA MADRE J'~"" 'SEÑORA DOÑA AGUSTINA DIEZ DE RAlvOS & . . .: . ~ (QUE EN GLORIA ESTEN) & ,. I A LOS MIS HERMANOS CONSTI-NCIO, SlMON y ESTEBAN o l (CARMELITAS DESCALZOS), . : I :•& Je •.~ ~ 9 RUfO RlM05 üIEZ (lvJSIONERO DOMINICO EjJ CIiINA) . !$ ~ o Y MARCOS y fLORA RAMOS !~ :o ·9 e o A LOS MIS SOBRINOS Y SEÑORES TIOS . . y A TODOS LOS MIS PJRIENTES, AMIGOS, ----", J ..-$ o e G ~ o o . :o , o , COMPAÑEROS Y ceNDISCIPULOS DE ESCUE-I::A'.-~8-:- A TODOS LOS MONTAÑESES Y HABITANTES DE MI QUERIDO PUEBLO, VELILLA DE GUARDO' OfREZCO, DEDICO Y PRESENTO. ¡ ESTE MI l}BRO' DE : "TRADICIONES y COSTUMBRES DE NUESTROPU.EBLO" I '. . SATURADO DE AROMA . . DE NUESTRAS MONTAÑA5 LEONESAS' .. '.·c.·.· .::"~. <. :'; EL AUTOR o'. ' .- .., . ..:::. o,' '::' .. -
  • 9. ,',! /::i' >J.:,1 ;;1 ~. .~ ':é( ~'( CX::=~Ji . , Introducción A los, veinte años de ausencia de España, tengo. qhora m,ás pura y poética la visión de mi térruño, y esa visión es laque nLe lia intpulsado a escribir esto que a ."tierruca" sabe. . P " . "l l ·z· .. ero cosa ttzste, o que aa ganaG o mz sentz- n2iento de la patria chica, purificándose, lo ha perdido mi nle7noria en cuanto a detalles, palabras propias, . giros típicos y expresiones vivas. Ahora es cuando yo quisiera estar e7( mi pueblo y recoger,como un te.soro desperdigado, la palabra, la costlunbre y hasta la' indun2entaria, que se fueron para no volver nunca. Convencido de que no podré hacer cosa ntayor, me he propuesto sin embargo recoger "Brisas de mis montañas" para orear con ellas "Las. costumbres de . bl "mi plle o.' Siempre !té sentido entusiasmo por locaracte-'. rístico (costumbres,tradiciones, vestimentas, etc.) de cada país~ Me ha emocionado siem¡jre, todo lo qu.e tie'- ne "color local" a base de costnmbrismo, tanto de España como del mundo entero, y he sentido' siempre algo nizly hondo en presencia de las basquiñas y pa- ñoletas gallegas bailando una "muñeira"~ d(!¡ los Vas- ' cos con sus' "A urrescus", de los Catalanes" con sus .•Ii~¡;,~,~t,,~~(i;'~~:O.,'~'('.'~,~.:......, . ~" . ,.... ;" :"~, .'. ;, '1;;
  • 10. ,. . '. .'; ~ '.. . .: .:. , -. -' ,- :"-:-.-.".. , .:'.-. ;. ,·:,.,c..;-. ~. ".' . 8 "PBRO. DEMETRIO" RAIVIOS DIEZ ,"Sardanas", de los Asturianos con su "'Danza Prima" y de los Anda.luces con sus "Sevillanas", 'lo lnism.o que he experilnentado en~ociones ante U1L bretón o un holandés, U71 napolitano y un -escocés con sus enagüi-- Uas y perifollos. Aquí en América~ ninguna cosa rhe: entusiasma tanto COlno la presencia de un "gancho", con bom,bachas, chiripá, botas de potro, espuelas naza- renas, facón y cinto cuajado de plata~Esla tradic~ón" " y la tradlcióli infwye sobre mlíde una 7nanera irresis- tible. N o soy"criollo", alu~que entré criollos he p(Jsa- do los lnC.10res años de lnivida, pero siempre 7ne entusiasmó el payador de la pa7npa rasgueando en su . " 1 " " 'el lO ,,' - ,. l'guztarra c Lacareras y vz a, ztas , y para 7nz, ,e presenciar los bailes popuiares alnericanos ln:e ha servido de solaz y entretenilniento. Siempre he sentido , , ',. . lb' 'l l" .,." l ',,' "emOClon V'l'enc o az al' e perzcon o e:, gato" una "chacarera" o lULa "santiagueña", ung, "cueca chile- " " "f l . ,¡) na o un ,- an(j ango natzvo . Es por esto sin duda que nunca he encontrado en la. vida cosa más imbécil-que "la 7noda". Quita toda ,esperarz,za de. humana redención, y nos hace reír eso 'de que h~sta muchos honLbres de talento 1 verdadera· mente eminentes., sé preocupan de su bigote recorta.J.o a loCarlitos Chaplín... ' j Vamos, hombre!, Pues esta moda estúpida; con sus cam,bios, ri- dículos, ha' penetradq también en mi .tierra, como en otros paíSes de costumhres, tradiciones: y, vestimentas patriarcales, bo~ra.ndo lq típico tradicional, lo único ,genllinopor'castita procedencia de. raza pura y 'va'· .:~
  • 11. .:~ ......¡ BRISAS DE MIS lVIONTAÑAS,LEONESAS 9. roniZ. Lo repito: no, encuentro en el lluuulo nada más'ridículo ni nlás z,nbécil que "la m,oda". .Ella es la culpable de qlie se hayan icT;;- denú pueblo las capas de paño de loshom,bres y las man- .tillas severas y elegantes de, las 7nujeres; .l([, llloda ha hecho desapa,i-ecer las basquiñas, lnanteletas y pa- ñolones,' escarpines,' blusas y 'gorras, zaragüelles' y chalécos, bailes y juegos, costlunb,-es y bellezas. Cllalquier viejo de m,i pueblo podría e_xclalnar con el poeta: ¡Ay! Yana soy yo quien solía ni quien yo solía ser... porque hasta el recuerdo de lo qu·e fué nti' pueblo ha. desaparecido. Con esa ntelancolía propia del que se propone escribÍ7: un libro "regional" y ,.-eunir "notas de co- lar", m'e propongo yo resl¿citar los recuerdos de mi pzu¡1Jlo y de, mi tierra, cOlnopaís encantador por SlíS costuntbrestípicas (bailes, bodas, bautizos, entierros, tradiciones populares, navidades, carnestolendas, Se- ' . ~. )lllana IJanta, ,etc. .. Con todos estos elementos he procurado dar a ,este libro regional un ambi,ente que temo no lo én- contraría ya. en m,i tierra el curioso lector, si a ella fuese a buscarlo... Salpicado de: notitas salientes y pintorescas de costnn'tbres, creencias y leyendas, he procurado reco- ger algunas palabras' raras y típicas para dar el ., .:'. ,- >v ,." . ; ','
  • 12. JO PBRO. DEIVIETRIO RAMOS DIEZ alnbienlie y la visión de mL tLerra, e.vocando a veces, lnás" que recuerdos, la frase, la7nanera propia de decir del pueblo, para, ajustar a e.lla el tema de la composición. "Lo del vulgo está en el 'senti7~". Ha')" .·'vulgo" que sie7ú~' con finura y delicadeza, ,Y "gente. , fina" qlte no sabe lo que es sentir finamente. . Jyo he'· buscado e.stilo 'afiligranado ni léxico de- erudición, ni piruetas Y acrobacias de lenguaje. Pre- .fiero. lo vivo, lo qlle me llena de sentir y me mnociona ,y 7ne 'estrelnece, y escribir quiero lo ,que vi J' lo qne sentí y' lo que· gocé durante los años de mi n,iñez, y lo qzie ya, ni vivir ni .se.ntir pueden los'niños actnales de 7ni pueblo, porque... ¡pasó!... ' ¡pasó!... iY todó' pasó.tal vez par.a no volver ya lnás!... Y, justalnerLte 'pOrque todo eso. ya pasó, es por lague yo quiero re.cordarloaquí, para que al. n1enos sepa;¡nos que existió, y' para guardar esos fragmentos que ya pasaron; para eso son esas urnas sagradas qUe llam)u,mos bibliotecas, lnuseosy libros.' Para eso he escrito este libro, y no para otra cosa. ¿Que se fué lo típico? .. iEs cierto!, pero po~ :" rlelnos evo~arlo todavía, poden10s. hacerlo revivir, y al .! '. hacerlo así- hacemos historia, Y todo cuanto pienso decir de lni pueblo Y de.7nis montañas teone.,sas, no se~ , rá otra cosa que evocación, historia.: ¿Qué son los lnu- , s(?os, lalite.ratura clás.ica, antigua, arcaica? .. ¿Por qué desenterram,os hoy~scrupulosa Y escudriñadora,mente Zas tumbas de los' Faraones y de Tum-Tam-Ka7nón? .. Para evocarlas y haceiZas revivir, después de tantos """'"'.':.:¡-- " .... " .~' '" " .:. 1 ,. 1, " " .
  • 13. " . " " :.. , ,:,,1 .:·.,~·1 '."y , • • 0 , ' , ,,', - ': ",.~:':"''-"'~"'~'~'¡:<"C'>>i,<".;-;,",;':7.C;'?JjG'i'07.'C;?¡;:':;.~~:,~'!;;~o/'...:i::':;i;i.,./:;,:;X,>:¡;)<~¡))~'~):ir»;~~~j;~?:::·.;it.,.;':;f;~~ :.::/; BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 11' y ta.ntos siglos de haber desaparecido. La ciencia no hace. otra cosa que recoger lo que pasó. DefendanLos Y" cons'ervemos nosotros también, 'en lo' P?sible, '"la gracia rústica" de nuestra tierra, que' es "nuestra lnadre", la qne nos hace exclamar con el paeta: . Acuden a mi memo;'ia los recuerdos: mi infancia, mi Hwcedad, 7nis padres lnuertos. y es la tierruca "la tierna madre" a la que con cariiio recordamos desde lejos, y por ella sentimos 'la nostalgia que nos ha.ce senti., y llorar y apreciar en su, justo" valor lo mucho que' vale, obligándonos a exclanz,ar: " "1rse lejos para verte: para qnererte, dejarte; )' perderte, tierra mía, para sabe]' lo que vales". El poeta JlIluTciano tenía. corazón y tenía senti~ , rniento al 'escribir estos versossobre "la patria, chica":; y lo núslno que Vicente Medina, siento yo tristeza al cantarla, y siento lo mJsmo que él los ojos hume.~ (lecidos, las nz,ismas ansias y los mismos deseps: ./ "i1!T ··Z·11'1 e pongo tnste a cantarle y se llze mojan los ojos... Tierrecica, tierrecica... es que al cantarte te lloro. • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • l . • • • . • • • • :.' ....... l,,",0'[;/X" . . :..l .....,._~;:,'il
  • 14. , , .. • . ,o. .... ~. 12 PBRO. DEMETIUO RAMOS, DIEZ Que ·7Jwabrigue·· mJ cuerpo. mi tierra; lni .tierra del. alma..." .El qne no tenga el" corazón ninerto~ no podrá lnr:>nos de sentir un cosquilleo al encontra.rse con esto: . CWI.(zclo nrihorica li'LC' llegue . quiero m~orir7J1e en mi tierra, ... 'verla al cerrarse mis ojos y tener un hoyico en ella., AUá lejitos, Tlw/y lejos, en. un 'Vtllleéito ameno, están mi pueblo y mi casa... e,slán ]ni c:[(sa y mi pueblo..., i Quién Juera águila, )' volando. J l ,,' l' ,uera eJllos, muy· ,e]os.... j Allá donde está lni casa! j Allí donde está mi pueblo! Es 'Por eso tambiéh que me entra una pena lnuy grande al contemplar a mi púeblo sÍli süs antiguas costulnbres patriarcalf:!:s hoy desaparecidas, y' en este libro por lni recordt;tdas,y al recordarlas lanzo este quejido': . . Jl!lipro1.Jincia ]ne da 'pena, mi pueblo me da dolor: i Ay! j provincia de mi vida! ¡Pueblo de ¡ni cora~ólLL. y esa rn.i puebló;y a los seres queridos de mi pueblo a quie'nes dédicomilibrocon todas sus cosas -, . "':--. -'.' ....~ ."
  • 15. .• r~..r...:'"-~'~~";'.·f ~f,." ...... ~~:. r' ~y,,, ",;_~!~••• k!(IP~:, :.':;_"·.·I~:!'·Hu.~':;:."í.''!:,~,!:--'~I,,~~:,~···~~:~'!-::?-~1¡,:~f.:;'~':::;:-~'§'~~~~~{';.~~;:.+'I!f~::J~~ . o: .0 '" •• ; . .0 O ' . ¡. : ~~'.' o:.. , .: ; .' . ~.. O·' ; ... BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 13 regionales, .típicas, características, pintorescas y sen- cillas, con todo su colorido, ingenuidad, gracia' agres- te, viveza y frescura, y he querido defender y' conser- . '.:',. ... val· en lo posible esa "gnacia" rústica y pueblere~a de mi tierra. .~ . Al escribirle, no he pensado para nada en la. ciudad, porque a las ciudades. las repudio y no las acepto como representantr;s, genuinas .. del pueblo. El puéblo es, y' sera siempre, el campo, el río, la fuen/'c, la huerta, el prado, el valle, el bosque y la, cOlina; la tierra qUe da el pan, la nladre: tierra que lo da todo, ., todo: el pan, el fruto, la flor, la .lana, la. hierba )' el trigo, 'hasta las patatas y el repollo. Y la ciudad . .. ¿qué, da?... malicia, pillería, engaño... La 'ciudad contamina y borra lo genuino' de: la tierra. La ciudad no da, ¡quita! y ¡traga! La ciudad se ha traga.do a ¡ni pueblo y a' m,i tierra... i Por eso no la quiero! Quiero a mi tierra leonesa y a mi pueblo en'ce- rrado e.ntre m'ontañasleonesas, y en señal de que los quiero, a ellos les envío mli libro saturado de "Brisas {le mis n10ntañas". Se ~quivocademledio a medio el que creyere qZle al escribir lnilibronle han, en~pu­ ja.do, la gloria o el dinero... j El dinero!... EI editar hoy un· libro no da dinero, sino que cuesta dinero... ¡Si lo sabrem,os los' que tenp:nLos la chifladura de -b' Z'b ,escrl zr l ros.... Ei'L cuanto a la gloria... lo único que' confío es , que 'alguna vez jJlbede que enmíJiueblosp~ acuerden ., de. mí, y con esto ",:,e doy por satisfecho. '. ,', • • o • l. : . ."
  • 16. PB)W. DEMETRIO HAMOS DIEZ Quedamos, por lo tanto, en que'. este libro' es enviado y va dedicado a "mi tierrllca" y a mi pueblo: Tierra leonesa Por nú cantada, .Tan admirada, Tan suspirada, .Tan deseada... Est.a corona fe envío· .. En oro fino' labúl(la. , DElVIETRIO HAMOS DIEZ Bne'nos 4áes, ~J 940. .." ..
  • 17. " , . " , .~ . ) .:,::. .:~.~ -'," .-:' ..,.:c.,.,:,.,_...,.,,:.=:",.t~.~:;,: ',.:,: ;;~i:..'.::: ~'~";:>::'.'::"';'.",-/,__.<._.'.:::..:,::.~.>..:.)i.~';" ~:" .:";_';~>:;;;.c:<:r;;~,':!;:~:~:~;t," .', ' .Prólogo . . Si triste ha ~ido. · y será ·slenlpreel oficio de sepulturero, 'no nIenos triste ynlelaJlcólieo .tiene: que ' sel.-fÜrzosaUl,ente el d e déseiüertadoro resucitador si ~e quiere, de costünlbn~s , ll1uertasy cOlnp1etaniente . r110nü:ficádas, qlle fueron y ya no son, que .existieron . yya no existen, pOl;que., relegadas eonlpletanlente al . olvido,se encuentran' clesgra~iadanlente sepultadas en el panteón de la historia. . . ,Porqu~lal fin. de cuentas, éste y no otro es el objeto de iodo novelista que se" propone resucitar "gentes,coSl,UlnhFes, cosas y lugareg, tipos y paisajes conlpletanllC)Ilte .desaparecidos, ' y recol1struir unpue- hlo~ ga~vallizarle de nuevo, soplando COllloEzequiel , sobi~e¡ sushüesos áridos,carcom5dosypulv.erízados de la noche a la luañana, después de uha patriarcal y centena-riaexistencia, ha~iéndole revivú una vida nueva, salvándole 'de la balunlha de nuevas ideas, de costumbres·ex6ticas y de orientaciones descarriadas, arrancándole,en fin, del torrente devastador, de eso que ha dado en'llalll1arse. civilizaci~n nueva, de la " .qUe nohán podido librárse ni los pueblos .nlás pací- .fieos, ni las ald,eas ll1ásescondidas eptre roeas y bre· ñales. , .'
  • 18. ':"; ':.-: :,,,•• .,,.;í" 1'''1 ..~. ": . . 16 PBRO. DEl'vIETRIO HAI10S DIEZ Lo que :ell autor aquí pretende y lo que busca y lo que desea? es nada l1lenos que hacer revivir a un pueblo patriarcal ya l1Ulerto? hac;er reapal'eceren el escenario de la vida a una generación que ya pas6 a la histoxia,presentando a los ant~epasados de Hli pueblo. ele yelilla de Guardo con los núsnlOS cue:r:pos y ahnas que tuvieron? de tal ,l11aneql quc, los que me leyeren con melancolía en el ahl1a5 · con dolor 'en el corazón y con lágrimas en los ojos~ puedan exclalnar: " T-' . ., 1 1 1 ~ ,l'.,sto que aquI eo o conozco yo persona luenLe' , porque desde ya puedo' afirmar que aún· existen 111uehos? pero nlHehos~ que personalmente conovieJ'on las antiguas costum,bres de rnipuehlo, y fueron ac- to.res de' ellas~ y ·las recuerdan con nostalgia, y se entoéTuecen con sus remel11)branzas~ y lloran su pér- dida y suspiran por su resurrección, y viven ,con ]él ' esperanza de verlas restauradas ,de nuevo,' aunque peiáen· ya canas' y lte.s falten los dientes, y tengan la piel' arrugada y apergan1inada. Y a esto vengo'l Y para esto escribo el presente libro de "Costu111bre5 de nli pueblo"', para que cuantos aún viven de espe~ ranzas, puedan rem,ozarse un Po.co con los recuerdos, pasados, y al 111enos derranletl1 IágrÍlnas sedantes al ver desfilar, ante sus ojos tal vez apagados, cuadros en los cuales ellos nliS1110S fueron actores~ 'y costurn- h1'es ya desapal~e~cidas que· a ellos, les dieron calo,r y vida, cantos que ellos entonaron con sus Inisn1HS gargantas, danzas,· qiIe ellos 111)S11108 ejecutaron. al . st1n del tamboril y' de la pandereta, y ejercieios fi- ,:'.":L .. . . . ¡,iÍ :,.. ;..' ....... : o"·,:·,· .. _... c..:.;.•• ~.....: . _•., ,..;.;;;:_:·,¡,,¡¡,,:::_;,~,~,.I.; ji , ! . f
  • 19. '.''"':,: , BRISAS DE MIS MONTAÑAS -'LEONESAS 17 , , . l' "1 h" 1 "h 1 ", 1 "1 " 'SICOS que como e a uc e" o.s o os' y a )arra" elcolocar "enraluadas" y "pinar mayos", dieron vigor a sus cuerpos y santa' e~'pansión y alegría a sus esníritus. ~ Pretel1do nada nlenos que resucitar costumbres de luipueblo, no hacenlucho desaparecidas y des- graeiadamen~e "asesinadas" a", rnano.s de aquellos 'lnisnl0sque taI1to gozaron"' con ellas, y' que, ahpra -echan de menos, C01110 el joyero echa de menos las perlas preciosas y el, oro. antiguo que antes enrique-, cieron 'SllS anaqueles y vitrinas, y ahora no ve más que chafalonías y falsedades 1110dernas colocadas en esas misÍnas vitrinas y anaqueles. .No es núiiltento, ni nIucho 111enos aspil'oá. la conquista del aplauso, pero tampoco. terno ni TITe in~ ,tünida el veredicto de Ta crítica ni ,las invectivas de los ,Aristarcos que nunca han faltado ni faltaráp nunca. Lo único que puedo decir desde ya a nlis lectores, es' lo que dijo Pereda en una de sus fanlüsas novelas: "Lo que aquí veis, no pertenece nlásque, a la cantera d . 1 "e 11U 1uerto . Quedanl0s, por 10 tanto, en que lo único tIue lTIe interesa es tener 1'<1 satisfacción de hacer reír o llorar con este libro a los viejos de luí tierra mOll- Úlñ.esa al recordarles tiempos que se fueron; de hacer ~. 'pensar a 140s jóven'es y entretener a 'los niños,que no "'<';:i~~j':>..." • . . ' . ' ,,:'. (.. '1, tuvi'eron la dicha de presen~iar 'y masticar el ambien/~>'.,')Ji /~~2> te; patrian} J de las costumbres de sus padres i~ ~~.=~:.~:'~.;'~~ '.' abuelos. . ,,' >,~, ~::,,' :..'::~ ;Ú ~J 'f~/¡;'..:~: :-'~'~.., : 1'-~ .~ --:/ . ' '2.- ",,' l. _:....... ¡"Ú¡¿~~;;}~",;" ..... ,,'C; " .' ." '........ . '. '.'" ,,' •.. q :~.,¿~
  • 20. : "-':' ..' . ' ....... 18 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ , Todo esto que aquí digo,. o que qlllsIe:ra dedr, sucedía, no en·· tiempos de Maricastaña, sino hace rnuy pocós años ennli pueblo. natal, Velilla de Guardo; escondido entre las rtiontañas abruptas de. León, pro- tegidopor los Picos de Europa y .peña Espiguete, flanqueado por la Peña Mayor y Peña Labra, baña-. do por el Río Carrión, famoso por sus truchas salmo.- nadas y sus aguas frescas y cristalinas, cubierto por ... susinm:aculadasnieves en invierno, conloaf~adoy .. ennegrecido por el 'cisco de sus lninas de carbón en. ; . -, . . ': . ' . . . .prImavera y verano, esas InInas y esas antracJtas que m.ancharon el. ahua .de los habitantes de mi . . puebl~ y de todos sus contornos, y el carbón, que coml1nica fuego a las lnáquinas y a los hogares, apa- 'gó allnismo tiempo el fnegode los espíritus y puso una capa de nieve sobre las'tradiciones patriarcales, . que, han sido siempre el so.stéü de la vida espiritual de los pueblos. Al hablar' aquí de mi pueblo Velilla de .Guar- ~o, no me dirijo al VelIlla con galerías n1Íneras ni demine¡"os. con caras ennegrecidas, con' carreteras y puente nuevo, con camÍonetas y autolnóviles estre- pito.sos y roncadores, con luz eléctrica y molinos él . vapor; no quiero hablar del Velilla nlo.derno invadido porB.ilbaínos y .Asturianos explotadores de sus ri- quezas, y por ingenieros de botas altas y trajes a la .~sa.De .este Velilla modernizado." no .quie1rosa- ber nada,porque no es el· Velilla de lnis' padr,es ni el .pueblo de mi niñez,en tanto. grado, .que ni· lnis '1 . '·1 " J.: ; >'!i <, .' .'. "j~.,...... " -- .;,~,.':, '.' ",
  • 21. '1 . '·1 " J.: . e '. silQ.?L.t5 .....,..- .. LSJ.... !II. Xl., .. . -Sf,,/'ffl . '., " ' . ' . . , ...: .: : :::~ 7. ~.'" . · BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 19 padres le reconocexÍan si salieran dell sepulcro, COIno yo'no lo conocí cuando por últirp.ay-:ez 'le visité en ~1 ., año 1934, y a quien con pena en el alma yeongoja en el corazón tuve que aplicarle "aquellas. palahras ...del orador r0111ano: "VüieORolllam, sed mores ro. . , ':JnY1;nornml!on video"; éste eSllli puehlo, pero no' veo las, antigüas costumbres de mi pllehlo,o COlno , nlclsvulgannente se, dice; ,, Este no es mi pueblo, •' que me le han "cambiao"; ,mi pueblo era dichoso , ,,, J"Y este esta... amoao. Al intentar resucitar al antiguo pueblo de Ve- lilla, quiero presentarle conlO era hace 30 .años con sus costumhres típi&ts y tradicio~ales, ~caballerescas, ' nobles y sencillas, con' su legendario puente rOl11.ano hoy dernuilbado, 'con sus "veladei'os" y candiles de ace:i~e, con 'sus pantalones y escarpines de sayal, con sús hOJ.11bres de capa con esclavina que les convertía , en seres casi cardenalicios y sus puras y modestas' 111ujeres tocadas con la lllantilla de bordes aterciope.. lados que .les daba el aire de abadesas~>.y basquiñas adornadas con cintas de estjrilla que a sli~':¡ doncellas convertían en damas de la Corte de, Luis XV. Quiero resucitar al Velilla de ahnadrefias y zagones; de las que no se_ desprendían sus honlbres y sus mozos, . y sus niños, sino para vestirse el trajé dominguero con "ciunisas nuevas y lim'pias,pero sin planchar, y cuellos sin corba~ta, 'cubierto.scon aquellas· chaquetas '.::: ,", , '/' r;, . I
  • 22.
  • 24. '.: - .... 20 Pnrw. .'DEMÉTRIO . llAMQS DIEZ y pantalones que olían a 111anzanas y camuesas y membrillos, únicos olores que se desprendían de sus . mozas garridas, .castas y sanas, y de SUS. i110Z0S ague- ..l'l'idos,. fue~tes; ·ágilesy rohustos' con1ojas .hayas'.de sus hosques de Baldeaya y sus .. robles de la Mata '. Iglesia.' , .' No quiero saher nada con elVeli11a que no 111C fecuerdea ·láVirgell .de Areñós"Todeadade.prados '. reverd.eantelsy de trigales encerados, visitada todos . los d0111ingos por las rnadres y las doncellas rezando el Rosario en el trayecto, y ante cuya inlagen vene- randa exponíall Sl1E:· cuitas y pedían renledio para to- ·· . das sus desgracias; de 111i Virgencita de A'reños, qUe sirvió de fa1'.oannestros antepasados; y donde apren~ dünosdesde niños a rezar las p1'Ílneras plegarias y entonar los prüneros cánticos; de la Virgende Areños .<1 la que nrozos y 1n02as ibdn 'asaludal; y dar las . ';'Alhriciaf:;" en el día de la aurora de Pascua de .H.e- surrección, n1Íentras lascanlpana~ de la Parroquia lanzaban alegres susbroncíneas voces despertando a todo el 'pueblo para que: se dierann1utuan1ente las "felices Pascuas". Yo no quiero decir nádaúi saber nada del Velilla modernizado, sino ·.dr,lviejo Velin~ yadesapar~cido, porque el de ahora nOlne dice nada al aln1a~ áunque lne .digLl nluchascosas a los sentido.s, pero tan desfi- gurado y falsificado por veEtirse a la última n10da, que ni él l1Ü~nl0 se: conoce ni yo mislnopnedo Cono- . ......... cede; tan conv~rtido . en "hirria~quea los presen.fes. . . .
  • 25. , " " , " ' " .'.. 22 PBRO. DEMETIUO RAMOS' DIEZ hace reír, y a los viejos hace llorar, y lloran al ver cambiadas sús costunibrf~, y desapareéidas para sieln- pre áquellas fiestas que eran C9mo un -sedante en, lnedio de sus trahajos can1pesinos; de aquellos bailes d6.1ningueros r'epletos de alegría y satlirados de-feli~ 'ciclad, que en una sola tarde derralnabanentre la gente ",nlOZa alegría suficiente para toda la sen1ana. lVre daré por contento, si conseguir plldieraelque la presente generación de mis rno11tañas leonesas,se 'diera cuenta de la üunensa desgracia que süpone para" .ellos la pérdida dé,. sus antiguas costunlhres,pérdida tal vez irreparable, y el inlnenso tesoro que· ha QtS- aparecido con el calnhio experünentado 1)01' eSe alu- vión de 'costl1111bn=s "ciudadanas" exportadas a los trallqtlilos valles ele mi tierra por los que en lnala hora, llegai'on de las ciudades rrJercan~iles y agitadas, cOn aires de corrupción y costlllnhresestragadas, 111a-' tando a traición la inocencia y sencillez pueblerinas. Quisiera gritar l11Uy alto, para qUe todos nlis paisanos lne oyeran y seconvencie:r;an, de¡ que si quie- ren participar núevamente de la felicidad y alegría que ·nuestros padres y abuelos en tanta abundancia poseyeran, es preciso que den marcha atrás,viraren redondo~ volver a lo antiguo., adorar lo que quelnaron y quem~t-"lo que están adorando, -atraídos por el es- . pejisilIío de es?C{ue se ha dado en llamar modernism ) • yciv:ilizaciÓri, -civilización y, nlodernismo que, engen- . drado.res- de la desazón y de la .desconfianza, del en4 vénena-miento y del odio entre los antes sencillos y .• . . -I(;~-. )" , .~ ,~-~ '- - -.'"-:..::.-----,.;-....'-...:~- I " ~ , l · ,,' • l ' ~
  • 26. -"'.;,. BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 23 nobles habitantes 'de lui tierra montañe:sa, aventáron la paz y la tranquilidad. Quiero hac~ir constar, y que constea. cuantos se lam,entan de que ya no hay paz ni 'tran.quilidad, ni amor 111utuo, ni confianza de unos con otros, ni justi- da ni caridad, que todas estas virtudes no volverán jalnás a ser patrinlonio de los habitantes de lni tierra idolatrada, nlientrasno vuelvan a ca:mpeardenuevo .las '. antiguas costunlbres p()pulares, que' eran justa.- m.ente las quedaban alma y vida a los pueblos, y aho.ra des,aparecida!, por negligencia y abandono de las illislnas autoridades, y porque lanloderna juventud conlenz~ a avergonzarse de aquella herencia que sus antepasados les legarancOlno una herencia santa y sa- grada. ·Por obra y gracia del' modernismo. que lo 'ahsol:he- todo" dichas costumbres fueron decayendo poco él poco, hasta que desaparecieron totalm.ente; nluriendo por anemia y por incolnprensión., y sin elruJargo, con aquellas costumbres tradi- cionales que nues.tros padres 110S dejaran en heren- cia... j era tan feliz el pueblo de Velilla L.. que es ahora cuando se dan cuenta y cuando· ya tal vez no , tenga relnedio. ¡Sí!,éranl0s felic~~~ cuando las campanas nos anunciaban desde vfspera las grandes fiestas, y cuan- do ,nos hacían descubrir. tres veces al día al toque del "Ang~lus", y' nos hacían est~e:m'ecercon santo es~renlecimiento al toque de "A,nimas", y nos des- pertaban alborozadas con sus repiques del "Alba". .' ' .. ri~ ¡";:~;¡G.t~~~0,~i:<~1~é'C:;':¿:'~;;< e,' .• ,:,,:. ..,.. . .... ..,.::.'. " -, "", : . ' ," .,,", :'.
  • 27. :¡ !: .., 2-t PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ El eco de las canlpanas de nú pueblo, que nos sabían a gloria y' él. 111úsiea divina, porque desde niños se hahían grabado sus acordes en nuestros oídos, y que defendía.n10S· corno se' defi~nde a una nladre, a pe~ dtada linlpia con los chicos de otros pueblos del, .'. contorno, que pretendían sobreponer sus. canlpanas .:.~.....,:':~a·las: de mi.-.pueblo, eleco.de esascanlpanas tenian sienlpre un lenguaje al que acon1pañábanlos sie:rnpte. con interés e intel'pretábanl'Üsünlledicüanlente loql1e decirnos querían con sllsbadajos, y, aunque niúos, ".' sabía1110S 111uyhiell distinguir sus' diversos toques, lo nlismo cuando. tocaban a gloria que cuando toca~ j- , " 1 "1'" d l' 1Jan a ll1uerto, ague )ra ,o 1111S111o que a "ar ·a , SerlOr''', a Concejo o a eehar"la hacienda" o a lanzar "los jatos". Las canlpanas nos indicaban cuando ha-. híaufl bautizo o" cüando se cel-ehraba una boda. Dichosos tienlpos aCluellos en qu e las call1panas eran .la voz deF pueblo y la consig11a 'paratodos sus aeon:' tecÍlnientos.Esos tiel11'pos yapa~:arOl1, y con eHos pasó tanlbiénde largo la felicidad del pueblo. 'Eralllos felices cuando los chicos, sien1pre re· . voltosos, inquietos y traviesos, alborntaban el pueblo 'recorrÍendo sus' calles cantando Villancicos en Acl- viento y Navidad, coplas, tristes en Cuaresnla, to- ,nadasen la trilla" y canciones populares al volver .. de los rastrojos o de regar los prados; cuaüdoatro~ . nábamos los' oídos con matracas y ca'rracas en Se~ l1'lana Santa, y arnlabamos la gorda en la "gerijuela~'" para que todo elplleblo nos oyera, como todos tenían . . , ..~ ..... :';':', '.,
  • 28. BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS Cine oírnos las esqi~ilas .. y los cencerros en las com- d " "d d 1 o • • parsas e· zamarrones 8:11 o sustos a .as VIeJas y :repartiendo pel<?tazos a todo hicho viviente que se pusiera a tiro. Eranlo.s felices 10lnislno haciendo sudar tinta [t Jos zanlarronesel día de "antruido" o ~1artes de Carnaval, con'iendo para agarrarnos y hacernos pa- g,ú :los cinco céntinlos de vino en la tabenla, que .. cuando en pandillas salÍanl0s "a nidós" después del·· Rosario. de los don1Íngos; o íbanl0s· a Valdeaya a descortezür acebos para hacer liga después de Hlas- ticarla~ lavarla y desgranarla, con gran p~ligro de G' . . ~, ." d· "". "" ".pImentoneros, ver _erones, pnn-pulCS y slete colores" que inocentenlente ,venían a cael sohre lélf: paja's bien enhebradas de nga, en lo que· éralTIOs. 111aestros, consul1laclbs, y000 iqué destrozos .110 hacÍanlOS ' de los pobres pajarillo.s en el "Cristo dé la Cinta", en la Ermi.ta d~, San. JLar~ y hasta .en las puertas mis- IDas de la Igles1a yde~scuela. ' . . Felices tiem,pos aquellos, en, que las ~11ayores 'travesuras nuestras eran apedrear los peruchos del tío Beneite en la pontaneja, 111eternos por :huertos y saltar vallados para atrapar nloras y ,endrino.s, esca- lar árboles para coger un nido con huevos todavía vacíos o con pájaros todavía en cañones, lanzar earw pinchos a las lnozas en el baile, recibiendo 'en canlbio algunos. pescozones, de los '1110Z0S, o lanzar balines dé estopa con nuestros peloteros de saúco. ¿,Y qué decir de nuestras correrías a los prados de. Honseca .;.. ..1" ,
  • 29. I -:... '., ....:'-~ PmlO. DEMETRIO RAMOS DIEZ . . . : . . para arrancar aberbejas y lechugas, aVillascusa para llenar los bolsos de avellanas, a Villasquincepara hartarnos de guindas agrias y de peruchos y lllanzanas en agraz, al pinar por algayugas, al Cortijo en busca de arráspanos, a Lastares para buscar setas, a la Cueva para apedrear grajos" ~ los Palacios, para arrancar estaLactitas y estalagmitas, a~mol'lte de los.· Verdug9sparatraer incienso de enebros,desenterrar nJantecones en Pereda o pescar peces en el Río Chico, o. venir, bien cargados de algayugas y amostajas y ayucos, de todos los lllontes y conado~ colindantes. La juventud era también feliz y estaba siempre contenta, ydelSpués del rudo trabajo de toda la se- . nlana, esperaba con ansias incontenibles cIdonlingo, . y' en la tarde del donlingo hacía. gala de su agilidad bailando en· la-plaza el baile Hlontañés, al conlpás de: las ·dulces cadencias de la gaita del tío Nicolás, . de la pandereta nlagistr,alrrlente tocada por sus ,~ll~zas acolTIpañadade inspIrados cantos, y robustecido por, "la histórica Caja" o tanlbor, cuyos parch~s redoblabaü bajo los palillos hábilmf·nte maneiados por el· tío Marcos, el tío Martín o el tío Isidoro, los .mejores redoblantes qUe entonces se conocían, todos ellos de VeliLla. . Esa felicidad desapareció, una vez que la pande-' reta y 'el tanlbor y la gaita pastoril füeron reelnplaza.: dos en mala hora por chillón acordeón, por la es- tridente victrola o por la· cansadora··radio explotada· póruntalPerroChico~Desapareció el baile: clásico . . .:
  • 30. . BRISAs DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 27 montañés, honesto, ágil y viril, para. dar paso al "agarra~" con todas sus lanwntablesconsecuencias para la juventud. . y porque .deseo de nuevo .la felicidad de¡ mi pueblo natal, es por lo que he escrito este libro, para . que leyéndole' nlispaisanos, puedan darse cuenta. de la felieidad perdida, pero que podríaadquírirse de nuevo con un poco de unión y de ·buena voluntad ··pGl' parte de las Autoridades y .de la juventud.·· Eseribo el presente libro para que esa juventud se eonvenza de una vez para' sienlpre, que es preciso · desenterrar y hacer revivir las antiguas costluuhres . hoy. desaparecidas, y que Velilla no .volverá a. resu- citar, n1Íentras los· lUOZOS no tengan de nuevo su ayuntamiento. propio con todas sus leyes reconoci- das; ll1ientras no se oigan los redobles de "la Caja~' llanlando a los mozos a Conc.ejo para deliberar con · seriedad de. Cónsules romanos sobre los asuntos de la. nlo.cedad, sobre sus rondas a las mozas, graves y . bien reglaluentadas para que no haya ahusos lÜ inu- cho luenos innl0ra1idades~ En aquellos Concejos en los cuales se legislaba sobre la admi~ión de los nue- . vos· "lnozos" a recibirse con ·las formalidades· de q~ien entra en una Co.fradía, y sin cuyo reql1jsjto · ningún mozalbete tenía derecho a rondar mozas, J11 .' .participar de derechos de inozo. . En ellas se ventilaba la cuestión grave de "atra- par" .al· mozo extraño de otros pueblos, que quisiera' . visitár a una moza del pueblo con vistas al noviaz- . -.:. .'.. ' :~~'~.-..~ ~;~~?~~';;·;:i:·:~s~·~.2.·~~:·:~L~:~·~' :,- "-._-::,'::,'
  • 31. 23 PBRO. DEMETRIO .RAMOS, DIEZ go, )r qu e no se le pennitía sin pa'gar el tributo eo· rrespondiente de su cántaro de vino y algunas pesetas si quería llevar'~e la novia. Y era ese Coueejo donde se haclan los nOlTIbran1Íentos. de alcalde y regidor, de juez y delnás autoridades que habían de tornar pose- sión de sus cargos el día de los Santos Reyes,con 11 . 11"" "1 . ':,aque .as CerelTIOnlaS, aque as varas y ,astones . floreados por las 1110za8, y que constituían -e0111o eJ sÍnlholo .de .sus nuevas dignidades, que dllrarÍan to· do el año. Allí se, ideaban los prograrnasde despe- dida de los n'1oz05 que se iball o ton1aban estado, siendo desnedidos con todo el cariño de una her-.l , . rnandad, lo rnjS1110 cuando les tocaba ir a servir al Rey. Allí, en fin, se informahaa todos el día de l1l1¿1. boda o el día de un entierro, para qne todos se pre'· pararan para la fiesta o para el duelo; 10 n11sn)O qne se pasaban avisos, se irnponían rllultas o se ex- pulsaba al que' con su conducta poco reco111e11dable no lTlerecÍa ser 1110Z0 de Velilla. ¡Qué tienlpos aquellosL.. ¡Sí!, ¡qué tienlpos aquellos, tan f e.lices· C0111Q tranquilos, cuando los 1l10ZOS no tenían111ás preocupaciones que ganar éL los bolos a 1oscasados, o ganarse el aluche en el Cristo de Guardo, o hacer luás, tiros a la barra que los otros n10ZOS del contorno! Felices tienlpos aque- Hos, cuando los mozos de V,elilla se lucían trayendo el Mayo" pinándole a fuerza de puños y de 111aéstrÍa ell111ediode la plaza, a la vista del Sr. Cura, de las ,Autoridades, del pueblo entero,} animados' por los,• • ~:-.,..;:.' '1 • - _ o,' .
  • 32. " ' ,',".:) ~.;.'·;.~i;~ $ • ~ - ' . ' J - ~ '< , _ ~. ~ .;~.~r BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 29 cán6c0s de la's ,mozas qUe habían hecho la bandera y que les enardecían Con sus voces y consupresen- , cia, hasta que el lnás majo, elnlás ágil y el lnás ,vapente subía por el lnayo hastala·copa para arran- car de ella el prell.'io apetecido. ¡Sí!, lo repito, iqué tie.mpos aqnellos q.e yo he presenciado con nlis. propios ojos, que recuexdo con, nostalgia y que a '.veces me hacen derranlar lágrinlaspensando en ellos!, Pues' de todo esto y de algunas cosasn1ás,pien- so hablar en este libro que tienes en tus nlanós, 'lector querido, para, que' al menos' las generaciones' del poi'venü' sep' II lo que fué en· tienlpos pasados lui querido puelecÍtG, de Velilla de Guardo, que aunque no figure en os 111apas, le tengo nluy adentro y en lo nlás profundo de lnis entrañas~ y le recuerdo con cariño desde estas apartadas regiones de A'nléricp" de esta República Argentina en ,la que viven tantos y tantos españoles 'y paisanos nl íos" que conlO ;ro reclH~rdan con cariño a la tierruca~ , EL AUTOR , / t~'? '..:;.t~ .... "':.. .;~.~, ...", ....-'.
  • 34. , '¡ :..,', .) ., < ,'•• ' ~:.:: l.' .:....., .. ':- " " ,.,; ," CAPITULO PRIMERO ESTE ES MI," PUEBLO Si el le,ctor tonla en sus manos este libro con fines cientÍficos y con ansias de exan~inarle con li ' ,lupa de la crítica, puedo decirle con franqueza que .'. no ,pierda el tienipo, que le cierre y que' no pase adelante, sobre todo sino es de mi tierra. , Para leer este libro, el lector debe despojarse de su togi de juez, porque -para' comprenderle hay que sentirle antes que juzgarle, y sólo sintiéndoJe le comprenderá., , Por' eso estoy seguro que sólo Jl1e van a ,COln- prender aquellos que, identificados con "su terruño", encontrarán' miéles, en estas páginas saturadas de aromas puehlereños,' que sólo aspirar saben los mon-" tañeses, los acostumbrados a apacentar 'sus ojos desde 'niños <?on el espectáculo "de 'la' naturaleza bravía" de nli tierra, dulc'emente melancólica, de sus 'montañas escabrosas, deslis valles, encantadores,désus' ríos' de linfa pura,"fresc'a y cristalina~por'que ellos;,'y tan " .' -, ... .- ..,.: - ....-;. ".'~ . . , ".-~,'.'~
  • 35. , " >!.¡ . .J .', .~ :' .../';;. .1 ':". ,': 32 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ· sólo ellos han de saher descubriJ; sagazmente toda la poesía de sus costumbres' rústicas, de esa poesía que ofrece .mi pueblo, no ya con su aspecto exterior,sino - con algo lnas profundo, más hondo, y más íntiíno, que no se ve, pero que sin en1bargo penetra el alma y produce ese encanto n1isterioso generador de' eso que Pereda llamara "el sabor de la tierr'uca'? Al escribir estas líneas, nibuseo gloria literaria ni tampoco renoll1bre que l11e inn1ortalice, porque'ni en sueños, ni'por las nlientes me ha pasado'nunca el intentar imitar siquiera al autor de "Peñas Arriba" y "Sotileza", ni a Trueha o Pardo Bazán, ni talnpoco a Polo y Peirolón y Muñoz y Pavón. Ave de la 'zarza escDndida entre 'los espinos del huerto, nunca pre- teúdí rel11ontan11e, ni seguir a las águilas que se ele- ' van en círculos concéntricos sobre las altas cUl11bres y escalan los picachos de los, Picos de Europa. Lo único que busco, sin. tal. vez lograrconseguirló, es .producir en los corazones montañeses de 111i tierra ese cosquilleo inexplicable, que >at sentirse 111UY , adentro, hum'edi,ece los ojos y hace estren'1ecer la barbilla con la e.moción de recuerdos pasados. ;Quedan por lo tanto avisados todos los Zoi10s y Aristarcos que pudieran talir.me. al camül<?, y no quiero .cargar sobre mi conciencia la responsabilidad de haberles hecho perder el tiempo, leyendo lo que no les interesa, o lo que no son capaces de eompren-' ,der. Y dicho esto,. "vamos pa~lante"> ' . ..~. .'. :>. .1,
  • 36. a oe o. oe y oe a o. L1 :0 el s o s a y a s'o J 1 BRISAS DE MIS MOÑTAÑAS LEONESAS 3B Un poco dehisforiay algo de leyenda ~ Poco. o nada puedo decir a luis lectores sobre el origen de mi pu~blo Velilla de Guardo, tan insignj- Jicante, que todavía creo no haob~r encontrado escrito su nonlbre en ningún m:apa, si no es en algúnmapa~, .. l:noderno dedicado exclusivanlente. a Ja:PrOiVincláde, León o dePal~neia; pero lo que sípuedcvdecir, es~ .que omi ptlt'ihlo. con sus doscientas o trescientas casas, llHlchas de ellas casucas, es un pueblo -reabllente poé- tico y hermoso, rodeado de huertos, bien regado, hien cultivado. y bien oreado por arotnáticas y salubres .. . auras cam.pestres, circundado de nlon:tañ.RS roqui- zas de un lado, y de verdeantps praderas y urnbrosos bosques por otro, con variedad de prados que le ciñeno por unas partés perfun1ánd~le .con arom:as de hyno, y por otras engalal~a(lo coi1 sus trigales de enceradas.. l1ueses. Todos sus habitantes han sido sie:nlpre lahra- dores de¡ oficiO? y todo.s,· por consiguiente, al menos en nli tienlpo~cOJnían el pü.chero cotidiano, unos, y .el ln~ndrugo otros, empapados en el ~udor de" un tra- bajo campestre tan·· rudo como incesante y no nl.uy productivo. Fuera de algunas familias, que podían contar- se ocon los dedos de una mano, todo.s sus vecinos eran pobres, no tanto.conlO para morirse de hamM breO, eso no, pue~to que el niás pobre~enía ·su sopa con torrezno., sus cuatro patatas y su celemín de 3.- . ' , " , ", ,:. . ~, .
  • 37. ., . -f;o) ... ~. ....-. __ ._.- EIlPueblo de Velilla de Guardo a vista de pájaro. tom~do por la parte Norte, desde la Peña .. Mayor ;;; ,...•.~.']}.. - ,,.';'.< ~: ·:·:"1'·;: ...../ .:j. . ..-~ ..... ..;!.,<_.!};~~~ ~/~j
  • 38. ~'::- "",~':::'~'.~"~?'~;.::,<~:,;:.~::.:~;,,:~.~ :.'.'.'"c: , t",:;, " . j .... :. :, :..; ,.;", " p.':: ..;' ·1 "~:~~ BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 35 alubias para alimentarse, pero sin lujos ni desper- .d~cios, fuera de los días en, que ~erepicaba gordo, o, se 'echaba ,la casa por lla ventana con motivo de -, algún, acontecim'lento popular o doméstico. 'Eran pobres, pero eran felices con su pobreza, porque nunca ae~).stum,braron sus cuerpos a la molicie ni al d~spilfarro. , , 'Ensllscalles no había pérdida ningüna;' puesto que no hahía n1ás que r~correr la calle Abajo; la caUeArriba, el Tiruelo y, el ,Barrio del Río, paTa aea.har de contar su topografía interna. Una plaza' delante de la iglesia, s0111breada por dos o. tres noga" les, una iglesia: antigua, ni grande ni artística,eon su torre cuadrada llena. de gorriones y vencejos; ,un arroyo q'ue' cortaba la plaza: de arriba hasta ,abajo con aguas" puras qUe venían 'del. llamado "brocal", 'en el que chapalateábamos los chiquillos casi sien1pre descalzos y con las pantorrillas al aire; 'una tienda de quincalla en la plaza, perteneciente, a la "Tía Blanquilla"; un rótulo que decía: "Estanco y A.rrendataria de Tabacos", la CaSa Ayuntamiento y la Casona d'el Tío JVlateo, y acabe" Vd.de contar, de cuanto eontar~e pudiera de 1111 pueblo de Velilla de Guardo.. ~' .. ,..',,'~:-:-- ¿De sus oiígeúes hi'stÓ:ricos?:.~Niyo ,lo' sé, ni creo .que ninguIlo de .mi' 'pueblo 10 sabe, y ningún ' l~istoriador se ha preocupado tampoco 'de ello. Lo único que s'í' puedo asegurar,:es que' 'Su antiguo .:nomhre fuéel de 'TILLA DE GUARDO, Y no el de o'.::, ..~." .. ; .' ..... ". ." .;,
  • 39. 1........".,.,.".;'.. ,.,.".,.,.. ...... : ..:", . 36 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ 'VELILLA,hahiendo indicios ir no Docas prohabili- .dades de que en tiempos relllotos Velilla estaha uni- . da a'Guardo, oal lu:enos había un pueblo intermedio, cercano· al Cristo. de' la Cinta, como se ha nodido, ' ' .1 ... conlprobar por descuhri'mientos realizados, y hasta ,por losas sepulcrales sacadas de las entrañas de la tt-erra 'con la esteva de los arados. Tam:bién·'podenl0s desde ya afirnlal qUe .. el .. pueblo de Velilla '{ué tdhutario'dé Garcilaso'de la Vega, que percibía por privilegios reales hasta "tr'es- mil maravedises" anuales' en concepto de vasallaje y regalías concedidas por ],a Corona a dicho Garcilaso de la '1ega~ Ilasta creo haber leido (fue el nombre de ,Velilla es una corrupción de "Vega, lo. que no sería inverosímil, dada la pleátesía que tenía que rendü'por orden regia a dicho. Garcilaso- de la Vega, sin que sepam!o~) el porqué ,üi bajo qué éoncepto se le dabanE'lstos tributos. Es úna verdadera lástima no tener lnás datos históricos.) y 111'ás lastünoso'toda- vía, el 'que l1inguno del puehlo. 'se haya preocupado de hacer investigaciones. A esto podemos añadir que el puehlo es siil duda antiquísimo, y que era el calnino forzado panl los Peregrinos que' iban a cumplir sus votos· a· San;. , tiago de Com'po.stela, y en VeliUa existían varias n n h 1'4 Sl . .. VI n q P( P q 'G b Jlospederías para PeJ.nigrjnos. y; esto se 'co111Prüeha . . p por el númeroconsiderab~e de edjficÍos que osten- . tan Escudos Heráldicos con la Cruz Santiaguista, y In a "que ,poco, a poco han' ido desapareciendo, .: ~. ':.......
  • 40. ) t 1 1 1 s' ) BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS nosotros cuando niños heTIlOS visto, sin que entonces . nos preocuparan ni poco ni In/ucho su significación . histórica. " Por o.tra parte" una y CIen veces hell1os' oído relatar a l1Uelstros padres el paso de peregrinos con sus bordones coronados por calabacines y sus escla- ,'. vinas ribeteadas de conchas, y yo nlÍsIno en nlÍ niñe,z . recuerdo' haber visto a alguno,s de eistos pe:regrinds, qüe a pie' y d~scalzos hacían su peregfinaciól1,bien por devoción o' ya 'cunlplÍt~~ldo .lUla penitencia im~ puesta. 'Una cOlnprohación del nÚlnero de peregrinos que deEfilaban por lni pUt::blo~ rÚl11ho a Santiago de 'Galicüi, es.el canto con que lo.s chiquillos anunciá-' ) ~ ..., balDOS po,r las calles la llegada de alguno, y que era " así, porque aúri lo recuerdo: ) :1 1 Y . 1 . "P 1 . "a Viene a e egnna con su escla,;ina, . su 'cartuchera? j que es un prim.or! Trae los zapatos hlancos, medias de seda, 'sombrero fino y un gran "bordón". ,Ni que decir tiene Cine la chiquillada rodeabas 1 a la "pelegrina" o ¡;"pelegrino",COlno decÍa~os allá" .• ,para escuchar sus narraciones y peripecias,' más o 'lnenos verídicas,' que' o nos hacían reír ya. veces nos hacían Ilotar, pero, SfeIllpre les tratábamos con n1U-
  • 41. Rr~Y h--l- - ;; ¡ " ';' . ":'1'·, . .., 1" :' , . '. ....". ~ . ,. .~ ";':'r" 38 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ cho respeto y veneración. Más de un peregrino vi _hospedado en nü propia casa con" su esclavina cua- jada de conchas" su bordón y ,su calabaza: Dafosgeográficos - En los 1ÍnlÍtes de la Pi'ovincia de. Palencia, y a unas :veinte leguas de dicha Ciudad, diez leguas' de Saldaña y siete de Cervera de Río Pisuerga, en m:e~io de un valle poético se encuentra como enca- jonado el pueblo de Velilla de Guardo,en una es'·- ;".} .pecie de gigantesco anfiteatro fórnlado pUl' lllontañas "'- _y eeñ,ido len' uno de sus eostadospor el río 1l,l1nado Carrión. Viniendo de Gual:do, el VIajerO se encuentra sorprendido, desde el alto llalnado de La PalonH'rú, con la vista del puehlo. que parece no tener- salida por ninguna parte. Cierra sus horizontes por'el Nor- te -la gigantesca peña Espiguete, "donde comienzan los Picos de ,Europa, inlponente _masaroq'.uiza de tres n1Íl nletros de alhua, en laque saltan manadas de rebecos y vuelan en. círculos concéntricos las majes- . tuosas águilas que avizoran eonstante;tllente a los cor~ .derillos triscado¡res y' a las nlerinasque ranlonean por los puertos y las cañadas. ' ,Al Este, se' enCllentra protegido. por la Peña lVlayor,queí COn1o. un gigante par1ecequerer aplastar . "al pueblo,· y. tan' próximo; que a las cuatro de. la ..... :- .., . . . . ".:.. :, ".-;;".. -:"1
  • 42. ,' , ,',"! , ,-'" ' , " .".. '~." ' 'í '. /, BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS tarde ya le s0111hrea y precIpIta en sus penlunhras. Al Oeste, limitan sus: horizontes muy limitados el' Monte de Peña Labra y el de los' Verdugos, moteados 'po,r sus enebros que brotan de la 'roca viva, y que ., enlbalsalnan el am,biente con sus granos de inciensq. , ' Extendiendo la vista por EI1 bravío panoranla que ofrece la naturaleza, los ojos se deleitan con el cuaM , 'dto umbrío de los bosques de Valdeaya ylascolinas ' ondeantes de Pereda yVillasquince, guaridas de ]0: ' bos y jabalíes, rapOS06 y liebres y otra variedad de' aninlales, hoy en -gran parte desaparecidos por el, 1110vimjento continuo de las l1lÍnas que! tienen sus 111ás apreciadas vetas e,l1 el sitio denOlninado 'La Fiera. Por el Sur, y en dirección a la Villa deGl~ardo,' es por dondel se abre la brecha de este círculo de lllontañas, 'que 'cual cinturón de piedra todea ,al simpático pueblo1110ntañés. Es en Velilla donde ter- 111inan justanlente las nlontañas 'Cantábricas propia- ,mente dichas, ya qw~ desde Guardo comienzan los Párarnos y las dilatadas estepas castellanas. Tan sólo al Sud-Este continúan hasta Cervera las Cordilleras del Brezo, '_completalnente calizas,áric¡las y blanque- cinas, que escoÍlden entre sus riscas-f laderas diver- sos pueblos y aldeas que se extienden por la regi6n, de La Baldavia. ~1 viajero que por vez prinlera cae en V'elilla, procedente del interior de Castilla, lo primero que ,se le ocurre preguntares: ,¿Y por dónde salgo ahora'(... ' . '. :~.' ....~."" , , ', ..': . '" " f ..-- ,. .....' ", .,'
  • 43. l"" ': . ; -, ~.'" " 4·0 PBRO. DEMETIUO RAMOS DIEZ Porque sus ojos no encuentran reahnente salida en , Inedio de aquel anfiteatro para él desconocido, y ,ni soñar ha podido que entre aquellas lnontañas pu eda haber una escapatoria, C01119_en realidad ,la hay~ y por cierto biensorpr,endente, aunque por él nunca imaginada. ' '1 . ' . ' , SalIendo -del pueblo de VelIlla l'lunho a Call1pO'~ "rredondo, y bordeando. la Peña Mayor, atraviesa las fuentes del Calderón, y dejando asu dereehaEl'Pi· nilr, se Inete de rond6n en una garganta éIueiInpone respeto cuando no miedo, sin 111as lugar que el carni- no aprisionado de Ulla parte por la montaña alÜsÍlna y de ,ot1:a por el Río Can'ión, cuyas aguas van sal- ,tando las peñ~s y InUTlnurando Bstrepitosanlente, ca- llándose tan sólo cuando sus aguas fonnan: renlansos en aquellos pozos donde las truchas sahnonadás sal- tan y se encuevan, hüyendo del peligro de lüs pes- cadores que siernpre están en acecho. Siga el viajero ,', su ruta, y aunque un poco asusta~o al verse solo en lugares que ni escogidos para dar un atraco, pronto se eilcontrará con el puente ROlnano de Otero, que al, pueblo de Otero conduce, y donde el can1Íno se bifurca para proseguir 'si .quiere hácia Balcoher6 y La Sierra, tirando a ll1a.no derecha. Puente ROlnan:J? vel·dadera joya hislóTica, ahora. destruído por lU~3 hárbaros dinaimÍteros de las nlinas. durante la re- vuelta asturiana deJ año 1934. '. . . ' . Ya encontró la salida,el canlinante, y continuan·· do el carnino", siempre bordeando el río, llegará a . '~'. . ' .',: . j " , • , ~ , . ;: ,',-
  • 44. o:: _:. '._._.' '.~ ?"':: -.- ~ .""-. .' ~ BRISAS DE MIS MONTAÑA.S LEONESAS M Call1porredondo, pueblo inmortalizado por el farlloso Pantano del P,ríncipe de Asturias, una de las· glorias 11U1S preclaras· de la· ingeniería 1110derna, inaugurado por el Rey· Alfonso XIII durante la gloriosa Dicta- dura del inlTIortal Primo de Rivera, que con RUS aguas .riega todas las llanuras Palentinas, si biell en perjuicio de los pueblos colindantes al Pantano. y ase 'encuentra·el turista en terrenócle Liéhana., .. ,puede .doT1nir en Potes, visitar el Sa~tuario deSant~ Tori1io, solazarse con aquellos cuadros de la natu-' raleza de sus lTIontañas, seguir _por la I-Ier:mida y de- .. tenerse a ton1ar las salutíferas aguas de este Balneario, . y siguiendo., siguiendo por aquella, carretera abierta a fuerza de barrenos, penetrar en los valles Cantá- hricos hasta.nlojarsus pies e'n las costas Santanderinas. ¿Quiere el viajero turist~' ~'egresar a Velilla y 'experÍlnentar los encantos de otra de sus salidas casi .. increíbles? Para ello, no tiene 11lás q~le colocarse en la plaza del pueblo, tirar por el Barrio Abajo, atravesar el, puente; t0l11ar rumbo hacia la Er.mita de Areños, ladearse hacia la izquietda antes de llegar ál puente Besandino, atrave,sar la Vega del Pico de L.os Pa- lacios, 'penetrar en Ül1seca, inclinarse ,hacia la jz- quierda, y peñas arriba, pasando por las Cante!l'as· de márnl01, contenlpla~ldo a su derecha el río Be,· ..'sandino, por cuyas linfas suben y saltan las truchas l11ás finas que se~onocen, tan pobre de --agua, que en verano no. hay necesidad, de descalzarse para ;: ,',. ,.-, ,
  • 45. ; : ,¡ 1:" , , ~; . :; ." '1' . 1 • ,.., , ~"..' .' , ,,'o ".. ' . , .' ........ '. " .. ": .., O"" 42 - PnllO. DElVIETRIO RAMOS DIEZ trasponer SUS' orillas; fatigado y- súdoroso neg~lrá hasta Las Portillas, que no son sino un tajo ál~iert.o entre dos .niont'añas, tan. estrecho, que. fácihh~nte pueden 'ponerse unas puerta's, y' quién sabe: si en algún tienlpo las hubo. Desde este lugar, un nuevo panoranla se abre a la contf1l11iplación del espec.tador. Un paso adelante y se encuentra en la Provincia de León, siendo Las Portillas el punto divisorio entre Palencia y el nuevo Reino Leonés. Aconsejanl0sal .viajante no se le ocurra hacer . 'esa excursión en invierno,. si no quiere verse. sepnl- tado por la nieve, o encararse así de sopetón con el oso. El primer pueblo . que encontrará a su paso es Besande, bien conocido por la leche sabrosa de sus .' vacas y por la riquísim.a lnantecaelaboradapor sus pobres IHibitantes. Pueblp en otros tielnpos s~ncqlo y patriarcal, incoinunicado de la sociedad porJ~t::~I;e~ ve dural~t:e algunos ll1ese:s de invierno., y encüe~1.~do::. sus moradores en la cuadra y en la cocina, lo mismo que sus 'ganados, pero entretenidos Y 'hasta felices, haciendo almadreña.s y tarugos, yugos y otrosape-l'os de labranza, que después habrán de vender por unos cuantos "Guartos", núentras que las viejashilall sus ruec,as alrededor de la hornacha o encima de las "tré- bedes", ,donde duermen los chicos .y talnbién los grandes, a la' vez' que losmoz.o.s, con sus brazos ro· bustos amaean los odres de donde, después de bien batidos, extraen lanlanteca~. blanca como el aUlpó de .. nieve-de sus montañas, refrescante .y pura conlO el . . ..,;.' :"":.':':.::' .:í. :....': "".'
  • 46. .. " .'.•...". ~ . .~. . ..' " . '.' .~ BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 43 ,manja:t; de los dioses, nutritiva y sana,' que hace a sushábitantes fuertets y de raigalubre~ a pesar de sJs>i~axas demacradas, pero' de fibras como cables 'de 'acero. Continuando el calnino están los pueblos de' Valverde, el de los famosos cazadores, y Siero, el de , los arrieros, colocados en las faldas y estribaciones .'..'-- , dé ,los Picos de Europa." Todos estos. pueblos han . ,renacido "lilla y veinte veces 'de sus mismas' ceniza.s, COIllO el Fenixde la fábula, ya que' repetidas vece-s han sido pasto de las llall1as, sin perdonar más que la iglesia y.Ia casa del Cura, por ser las únicas ·casa~ que tenían, en lnis tielnpos, los techos de teja, puesto que las, demás le tenían de paja, semejanfesa los portalillos de Belén. Esta era la causa de que, una chispa cualquiera que 'se despreildiera de, lUla chi- m.~l~,~a.? fuera suficiente para que ardiera todo el pue~ blo>~+3: no se repiten estos casos,p~n' tener bien te- chados de teja los edificios, y ya no se contenlplan aquellos cuadros tristísimos" que yo tantas vee.es en nli niñez conteluplara, de ver a las muchedumbres de estos pueblos con sus alforjas al hombro, pidien- do de pue~·ta en puerta lin1;osna, se:n1illas, aperos de labranza y delnás enseres domésticos 'para' comenzar,' a vivir, puesto que el fuego había dCistruído conliJle~ tamente sus pobres llloradas con cuanto, contenían, inch130 los luismos aninlales, que aveces perecían e~tre las ll~unas, cuando no había tiempo para sol- tarles de sus pesebreras.. El Gobierno, por su pa:rte, : ...' ..... .".' f/I,
  • 47. ,:i ;', ; :'¡ . 44 PBRO. DEMETIUO RAMOS DIEZ ; ,','" ,':' :,ri~.t : ;:)~ tenía que forn1ar un presupuesto. para aliviar a los pueblos incendiados. Ni que decir tiene que 'la eSTí- dad común ,de los pueblos vecinos se 111anifesta1x! sienlpre vi~iblemente, con los afectados por la des- gracia, porque entonces babía caridad entre unos y otros. Los cantos populares de' nü niñez sintetizaban . la idiosincrasia 'parti~ldar de, dichos púeblecitoses~ :condidos enü:ebleñasy"peñascales. . El que una v~z ha probado leche de Desande no beberá otra leche aunque se la den dehalde. Cazadores en Balver,de, buenas truchas en Velilla, buenos nabos en Besande, buenas moras en J!fantinos y caSI todo de balde ~ Pata ayucos; Baldeaya; para arráspanos, Otero ; para algayugas; el Brezo, y para nlÍeles, tus labios, cuando me estampan i1ll beso. ~ fauna y flora .. de mi pueblo Donde los hOlnbres penetran~ las fiel'as huyen, y esto es Jo qUeJha súcedido en lasill,ontañas de Ve- .1illa, tan ricas ,en otros tiempos en la Fauna y en la
  • 48. '·:.':.~'t, .., : ;>. ~;: :~'. " "'~." BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 4·5 ,Flora. Los silbido.s de las locomotoras y los estampi- dos de los harrenos y de la dinamita han ahuyentarlo por completo a ,las fiera~ y alinlañas quepoblahall abundantell1ente sus bosques y espeluncas., y cosa rara y para lnÍ siempre incolnprensible: en los JTIontes de Velilla, en los qlle se' ,enco.ntraba 'caza rnayor, y meno-r,'"nunca''seveíaneazadoTE$''del''' pueblo, y puedo asegurar ,que fuera de Juan eJ, ~ ,,chero, que tenía ~lna carabina; el tío Marcos, que po- ,seÍauna escopeíta de cartucho, y el tíO Venancioel ' Bo.mhas, que era el herrero del pueblo y propietario de una espingarda que se' cargaha por la boca y a baquetazo limpio, de esas de pistón y con ceha, creo .que Jlohahía ninguna otra ar111a de cazar en toda la vecindad, fUEwa de la del Guardahosques. Y es que para cazar hay que tener tiem'po, y los de mi pueblo ~staban s~empre nluy atareados con sus faenas cam,- pestres para matar el tiempo cazando. Lo.s ,'únicos día~, disponibles hubiieran sido los domángos y días' festivos; ptTO am,én de que ningún v.ecinod'eVelilla dejabaliél Misa ni el Rosario por nada de este mun- do, esos días les dedicaban más y Jnejor a. jugar a lo.sbo1os o a ,lánzar la harra. Los 'únicos que se aprovechaban de la caza en 111i pueblo eran los Bilbaínos, q'ue e¡ntrahan ~omo Pe- dro por su casa, no. dejando tranquilas a lasperdiees de La Silva ni a los conejos de las Cortes, ni a las liebres de Las' H.eh,reras- y Senaras. A, las ii1.ocenVes codornices, lo misn1.O que a las quinzas ya los gayos '....... .. : ....;
  • 49. '.'," ... .:.¡ .. :.i: .:~ "'¡.', ,", . .... 46 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ del monte, a raposos y tasugo.s, se les perseguía con- tinUalTIe'nte, sin que nadie les echara el alto a esos Q,cazadores que invadían los trigales y los prados y. se desahogaban' a-su gusto como si estuvieran en propie-' qad suya. Los delll pueblo de Velilla se contentaban y .daban por satisfephos contemplando los despojos , de la cacería, sin que se les ..D..C.l.lrriera •protestar nllÜca , contra los cazadores extraños. Así eral~ aquellas gen~ tes sencillas. Loshosques y 'espesuras de mi pueblo estaban poblados por cazanlayor, conlO jabaHelS, lobos, corzos y galTIuzas, sinexcluü··al Tey de las selvas n10ntañesas, el o.so, cuya caza interesante y peligrosa, tan vivainente ' fué descrita por Pereda en su novela de "Peñas Arri- , ba". Desde ya podelTI9s asegurar, que tampoco falta- ron en los plieblos de' Velala, Besande y Balverde, ni Chiscos ni, Pitos Falces para encararse con' el oso, y sin que se inmutaran ni les ten1blara el pulso, supie- ran co.locar, consns escopetas 'anticuadas dos, onzas de plomo en la fiera, una en el ojo y la, otra en el . , corazon. 'No hablemos de la~ nw.nadas de lobos, que eran la continua intranquilidad de los pastores y de los rebaños, y que a pesar de 10.s ,perros con cal~rancas al cUello y de,colmillos afilados, con los que sostenían peleas, sangrientas, hacían no pocas veces estragos "en alguna novilla desbandada o en las ovejas que se d'esca'rriaban, siendo~ tannumerosa's las 'bandadas :deestos lobos, que muchas veces había que darles, . ,', ,', ... : ... ;....,' .. . '. .: ", ~..... . '. '.
  • 50. BRISAS DE MIS MONTAi':IAS LEONESAS 47 una hatida en fornla y envenenarlos con estricnIna. I Con no p'oca fr'ecuencia henlos presenciado cuando ehicosa cazad01:el3 y pasto.res, que con: la piel y la caheza de lo's lobos a cuestas, iban pidiendo de puer- ta en puerta, huevos y longanizas conlO· prenlio por' haber matado "al padre de las ovejas", que: era la fra- "se gráfica .conque solicitahanJa pitanza. Aún quedan Ósos y lobos en aquellas lTI.ontafias l~onesas, pero son ya Taros los ejenlplares que sefdescubl'en., '. Las flores caInpestres y de jardín abundahanen la priI11,avel'a. Entre la$ flores silve/stres in~ls her.mo- sas, reeuerdolas que llanlábanlos "lna111aperro.s", non1- _ hre que segurall1ellte no figura en la nénnell1clatul:a botánica, pero en verdad' hennosas y de u'n color rojo encendido. Las call1panillasdel Prado hesaIldino, abundaban y eran preferidas en el 111 es de Mayo para adornar el altar de la Virgen durante el 111es de "las Flores. En los huertos sobresalían las Rosas de Ale- jandría, .y otras rosas encarnadas sen~illas, al11én de ,las rosas' de cien hojas, vistosas y aro111áticas. Los chicos guardába1110s las hojas para después de secarlas e;nlplearlas conlO tabaco para fumar cigarrillos: a es- condidas de' nuestras 111adres, que cuando nos sor- ptendían nos aplicaban una buena azotaina de es- carpinazos y soplal11ocos. . Las fl~utas .de núestros huertos eran' todas' aro~ m,á~icas y sabrosísimas, COTI10 las ciruelas y las peras de agua, las n1anzanas y los membrillos, que nun- ca llegaban á 111aduraren el árbol, porque 110 lesdá-
  • 51. ;.; .:: .~ ," . ...' '~. ': ,- " ' , " , ' 48 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ, haillos tielnpo para que lnaduraran, y con gran peli~ gro deblnsas y pantalones, hábilmente¡ subía1n10s por los árboles o las derribábalno.s a pedradas, por- que tenÍau10s' un pulso y unojó qne donde le ponía- lnos, blanco seguro. ¡-Cuántas zurra.s maternas nos eostaban nues"tras travesuras de ladronzuelos de la fruta aj'ena,que,hoy~reeordamo8 con placer yco~l.la " sonrisa. en los labios! ' " , Frutas silvestres, y algunas de pIlas sabrosÍsi"- rnas, abundaban en los montes", valles y cañadas. Los arráspanos, a cinco cént,imos el bote o la "jartaá"~ vendidos por las pobres m.uj eres de' Otero y Baleo- bero; avellanas deVillascusa atrapadas por nosotros 'mismos sin miedo alguno, porque eran de.l "primi capientis" ;'guindas ácidas' y m'oritaraces de Villas- quince, peruchos de lahuertona, n10ras y a.ndrinas de todos los bardales, algayugas del Pinar, 'amos- tajas de ,Valde:aya, antimoras .de Pereda, hongos y', setas de la Cruz dre¡ los Lontbanos y Lastares,Ulan- zanasde todo elmonte,porqu.e en todo el niante las había, y, que coIocábam;os entre paja para que: sepu- . "'h" ' 1 'd ' 1 1Sleran poc as y' comer as ' espues en as, argas " ,veladas del, invierno' entre 10.s tizones y al a'nlor de la lumbre. Otras las reservábamos para meterlas'~~n l()s' baúlesy en' las c6m:od~s en la. ropa dominguera, que se el1)papaba"~~d€rca~6m~' que desprenclían las, ca.; ,mu~sas y am'ostaja~, algo mas emhriágadoruue! las _nlodernas esencias de tocador y menjunje!sdebotica. ' "y, nada ,digamos ,de las'" plantásy hierbas: ar'orrtáti- ~'< . ~"': ::::...:';. 1 , ,j
  • 52. BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 49 . - cas que tanto. abundan y que arrancábanl0s a "puñaos" y~raÍaInos ahrazadas. Manzanilla pura, cuyas flo- re.cÜas cubren nlaterialmente las colinas; apíos y conlinos .que elnbahalnan' cuanto. tocan; sanguinaria, tan apreciada en lnedÍcina, que brota entre la peña viva y que se confunde con el blanquecino de las pie.- drüs;henosque c0111piten con los de Pravia, hierha ~bu~f:{tte. brotaper todas partes, Hy- nlil yn1ÍI plan- tas luedicinálesconociclas bien por los viejos y las viejas clemi pueblo, y cm} las cuales hacían sus ca-o 3 . 1 3 s s . 1 ., s l- ,,~, . -:-: ." '.. taplasnlas y ponían renleclio a todas las'enfermeda- . de~ sin necesidad de acudir al nlédico, y siempre con resultado positivo, porque así eran nuestras lna-. dres:Anlas del Hogar y Doctoras para todas las' enfernlcdades caseras. Ellas conocían a las n1Íl maravillas la vh'tud de todas las plantas y sabíah extraer de ellas todas ; las buenas cualidades que natura ha depositado en ellas, y yo no sé eónl0 se las arreglaban, pero el. caso es que-con sus eU1plastos y tisanas, con sus' fricciones y sus aceites, co.n sus baños d~ pies y con ceniza, con sus biznlas lnezclas de' hierbas, era"u el ". "cúralo todo", de talmailera, que tan sólo se llamaba al . Doctor cuando se presentapa alguna enfe,rnle- dad bi~n declarada y. que: pudiera te;ner conse~ cuenClas. Otro tanto hacían nuestrosabuelo.s para curar a los aninlales que fOrInaban su hacienda. Con- san- guijuelas y sang,rías, con cocÍlnientos' de hierbas y 4.- .. .. - : ..
  • 53. '. ' .";. : ,1 " , ..'.~ ,. ',":-'--' : .~... ',-::~ :"'..' ,. " 50 PBlw.DEMETRIO RAMOS DIEZ con cuernos de' ciervo, ellos sajaban y pinchaban'que eJra un prilnor, ylo 111ás curioso era, que los, ani'111a- les se salvaban' sin necesidad de veterinarios ni eu" randeros. Pina casósde emergencia repentina allí estaha 'el tío Salazar que obraba milagros Gon su la~lceta, como le,s .obraban en perniquebraduras y roturas de huesos o dislo.cacioúes el tío Bernardo, o la tía Mag- dalena.Upa bizlJ1ade¡--l:>.ez,.unas cuantas astil1as~ ün vendaje y listo. el pollo. Algo he divagado, pero no importa, porque el . fin es dar a cada uno lo que, le pertenece, y las plan- tas aromáticasrios han traído fin sentirlo a las habi- lidades de quienes sabían aplicat sus' efectos cura~ tivos. Iglesias,' ermitas y santuarios Una iglesia ha)' en nlÍ pueblo, y con ella basta, dedicada a Jesús Salvador con su bola en la lnano y con1pletamente dorada, ante la cual nue:~tros abue- los y' nuestras nladres han rezado sus plegarias y, calmado slisdolores. El templo., de forma irregular, , no tiene ll1érito artístico ninguno, eornono le t~e!nen ,ni sus altare,s ni sus Ílnágenes,.Todo en él es sencillo , ypohre, como pobre y sellcilloera el pueblo anti- gu~mente. ~illco alÚtres, dedicados, fuera del, MayoT, al Santo Cristo 'de la Agonía, a la Virgen del Rosa-, rio, ,al Niño Jesús Y,a San BIas. Dos' púlpito.sd~ hie- j. ~'" ,
  • 54. le a- u" a, le m el 11- .1- 1~ 1, lO V.1 . r, n o .1- t', t- lo ~'oo , :':-00,:0" , BRISAS DE ,MIS' MONTAÑAS, LEONESAS 51 rro, un Coro y Pila Bautismal" y acabe Ud. de contar (l)! El piso, completanlente de madera, está todo 'nunlerado, porque .,era el cementerio donde yacen 'los restos de todos: nuestros antepasados, según,' la costumbre antigua, y prohibida por nuestras leyes modernas alegando razones de higiene, como prohi- -(1) Hoy laigles/a 86 encnel/tra cOlllplelámente 'rcstanrcula, Mil, 1/.n Altal'Mayol' 1/uevo e imlÍgenes toda8 nucvas ymoclel'1lCts. El celoso lJ dinámico Cura Fárroco actual, 81'. D. 1saac Ria110, fuéel inioiad01' de esta.1'e8taura.ción por cierto muynecel3((.l'ia. y' conveniente. El llamamiento qne 1108 hizo en unión de l{(·Comisión ele 8e1101"as de FeUll.a, para S 1/. (J'G,{/CO' los ga8t08 cOIIsiclel'a.bles, (t Zos hZ/os de Velilla 'l'e8iel/'.1/.tescn Américct, así como a todos los Sacerdotes y Fm.¿zes de Velilla, eneal/ira eco cn nnest1'os corazones. 1'o,po/' mi parte, y en nombre de m~8 pa.cll'es !I he)'lna./tos, hicc elonaGÍóá (lel Altar i11a.yol', cuyo impm'te fuérle ,5,000 peseta8, y afJrarlezoo, tctnto a la Comisión de Señ01'Cl8 eomo al S·)', DI/m Pá·l'1'oco~ la gellWeza dc co'loc(/1' úlla . lúpida cOllmem01'a.tiva aZ lado del Aliar, lJrtl'a pCl'petua menÚJ1'ia, y parct que 108 '/ien'lderos eleven una oración púT el rloll(tnte. Nunca en m.i 11ida he entregado mis 1/Ctbcre8 con más g/l.8toni sat'i8facción, ,l/hubiera sielou1w infjra,Ut1¡.(Z no COJTC8pOJ/c7cr a7 pedido de ?ni pueblo, tratándose eleZ mnbelleci.m.iento de la 'iglerHa ele mi niñez, elohde 1'cc.ibí 7a. 'viela cspil'itllal,'we h·icieron. crisn(Ulo, 1'ecibí la P1'imera COlli1tll'ión yc01l!oucé a balbucea')' las primeras orQciones y a 1JtO- elnlar los primeros cánticos a la virgen, Era mi8antct mad1'e la que ?ne .llel;aba' en braz08 clIanclochiquitín, lJ el camino de la iglesia fué el p1'imC1'O quc alJ1'cmlí ell mi llifíez. ¿Cómo no contribuir al ac7OJ'no 11 embellécimioJ/to dc la ig7esia elc )iti ni'ñez? Siento no tenel' .fotog'J'(~f'ía8 dc las nucvas refonna8, felizmente Uevac].a8 a cabo con éxito, pam qnc ,fignraran en el p)'o,~eJ/te libro.' M'i8 felicitaciones al Sr, O/tm. D. Isa.ac Riaño,(t la Comisión de SeñOl'a8, y (t c/uinioshall contrUwído 'con 131113 i.tonaciones a las 1"l:fo1'1nns del Templo ele Vel'illa, que han sido toclos,tód08 los h~jos del 1)ueb1o, '1/1/08 más, ot·)'os menos, pero todos con la moj01' 1lOl'nnütd. Obrar de otl'a manel'a, 7mbicra sido una, ingl'atitncl imperelonable, ya que los hijos de VeliUas'ie?npre han sielo, ge.ner080S y ag1'adecidos.
  • 55. l,; .' " '!' .0,0 1:. 1;·1 ,~ ' . .;:" ;'.1 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ bida quedó la "huesera" pegando a los muros, de la igleúa, y cuyo lugar aún se conserva. 'Adosada al telnplo está la tonre con su reloj y sus calnpanas, de las que ya hahlarenl0s lnás adelante. Al otro lado. del río se encuentra la Ermita', de la venerada Virgen de Areños, que es la Virgen y .Patrona ,del pueblo, d~ la que hareanos n1ención l1iás ,detenida' .en otro lugar. . , En el calnino que, c9nduce a Guardo exist::>, otra Ennita conocida con el 110nl,bre de "Cristo de la .Cinta", hoy casi destruída y c0l11pletalnent'e abandoM nada, desde: que se 'eanlbió el cmnino que a ella conducía por la nueva carretera. En tienlpos que .ya pasaron para no volver 111ás, ningún canúnaiTte cruzahapor delante del Crjsto de la, Cinta sin rez~r el "Credo" o. un "Padre Nuestro", depositando sus eincocénti'nl0s para el Cristo, que se arrojaban por la ventaüilla ahierta 'en la nlism,a puerta, y sin que n,adie se preocupara de que fueran robadas las li~' mosnas allí -depositadas con amor y con fe. Ninguno~ por lnaloque fuera, se hubiera atrevido a robar ni un "perro chico" de los que' cuhrían el paVi111ento dé ··la ermita.¡ Felices tienlpos aquellos! Es 'triste que nadie se haya prelocupado de indagar el origen histórico de esa peqUeña enníta de nuestro Cristo" . COlll0 ignoramos quién f~lé su fundador, ni ahora se~ ría fácil averiguado, puesto qUe ya nlurieron los que podrían relatarnos su his'toria légendaria y ~ntiquf. .~~l1ma. i ~ ,
  • 56. i;, ·-:' BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 53 Los Santuarios lnás famosos en. los contornos. deVeliUa y a cuyas festividades ,1 ronlerías nunca faltaban nuestros antecesores, eran LA VIRGEN DEL BREZO, escondido 'entre altís~nlas nl~ntañas, con su IIo.spedería y su e¡xtensa huerta que en, un, tielnpo fueron y pertenecieron ~ a, un Convento Benedictino, servido hoy por el. Párroco de¡ Villafría, que es el pueblo nlás Ílll11ediato.' La historia. de este Santüario en otros tielnpos fanlosÍsÍlno, está' llena de' poesía, ,.C01110 poética y verídica fué la aparición de 'la Vir- , gen a unos pastorcitos 'entre 'unos brezales, de donde tOlnó el nOJllhre de Virgen dd Brezo,. Su Santuari o' esbelto y elegai1te, fué magníficanlente restaurado por el Párroco de Villafría, D.Manue~ Die,z, tíocar- nal del que esto e~~crihe, en el año de 1898. 'Para luí tie~e recuer.dos inolvidables dicho San-- tuario, porque en él apl:enclí .. a rezar n1Ís prlnleras plegarias, y en él c0111encéa ayudar, a. lVIisa desde los siete, años, cuando lni tío el Sr. Cura, nle [evaha en las ancas de su caballo atravesando los tres kilónle- trosque le separan de Vülafría, entre peñas Ílnpo- nentes quelnetían nlieclo 'al luás valiente. ' En sus dos festividades anuales, el día de la Virgen y el día de San Mateo, lniles y lniles ele personas de todos lo,s pueblo~ colindantes venían en ron1erías y procesiones para visitai' a la Virgen, de- jándo.Ia en ofrenda vacas y ternero&, joyas, 111uletas de enfermos, cabelleras y vestidos" piernas de, cera :ij y CIrIOS enorm1es, exvotos y pronle~as y tributoS' de f~ ~: ~ id ..rl~¡ '11:~ . i .,' ,"~~/1:i'~< :_.;,':.~~;. .., ' .',; I
  • 58. . . .,,'~. - j.~. ~1 _ _ - • -_ • • ~ •• BRISAS' DE MIS MONTÁÑAS LEONESAS 55 : gracias recibidas por intercesión de ]a Virgen del : Brezo. Y había que ver a 111íles y lnil'es de peregrinos , subie,ndo a pie descalzo para adorar la Cruz colocada •• en la cÍlna de uná montaña a lllás de nlil y q'uinien- " tos nletros, con un sendero de piedra viva y calcárea ,que dejaba los pies despeJ1ejados. ¡Oh, Fe de mis , paisanosL..¿Cuándo volveremos a pres1enciar tales ", escenas? .. ,¡Creo qUe nunca! ¡Aque:los tiempos no 'volverán, desgraciadamente! ' Adenlás de, este Santuario e'stá el de la Virgen del Carmen y el Santo Cristo de Guardo, que C01110 atalaya ser destacan en la cima de una de sus nl0n· ,tañas dontinando todo el panoralna; y era en aquella "explanada exten5:a donde se celebraban .las mejores , ferias y las lnás alborotadoras romerías, que ter!TIina': ban todas con los honestos bailes 1110ntañeses' y ;:on el clásico y ya desaparecido aluche lnontañés. Algo diremos sobre esto lnás adelante. Otro Santuario, auncjue ya rhás alejado, es el de la Virgen de La Velilla, sitüado al otro lado de "lasmontañas de Valderrueda, lnás allá de Morgobejo, ,'" ju.nto a Cü:tierna, y situado en eL alto de una collna" ,;' entre los pueblos de la Mata y d~l Otero. Su historia ; se renlonta hasta la Edad Media, llegando a ser uno ; de los más famosos Santuarios de la Provincia de " León, al que acudían miÚaresdeperegrinos. Hoy se ',2 encuentra triste ycasl abandonado, por la pérdida ,<; de Fee incuria de los tiempos saturados de .materia- , lismo. Si nuestros', antepasados, levantaran la cabeza, . '.;' ~
  • 59. '. : " . " ":: . : ' .~:-~':,: - '.~; '.~' .:' ; ..'::. . ':'. 56 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ se 'avergonzarían del abandono de esos Santuarit~.' yde la negligencia en visitar a nuestras' Vírgenes" famosas, tanto en el orden religioso conlO en el orden' histórico. ]1ás adelante,' trataremos este asunto de los Santuaxios Leoneses. " , Nunca m,e perdonarían nlis paisanos, si al ha- blar de lós Santuarios de nli' tierra Palentino' - Leo-' nesa, no hiciera nlención de nuestras Vírgenes. po- ' . pulares y conocidas.. en toda" EspClña; eonlO fon la Virgen del Valle de Saldaña y la Virgen del Camino de León, ambas coronadas soh~nlnenlente por Decl'eto Pontificio, dejando dichos acontecin1Íentosuna hue- na imborrable cuanto ÍInperecedera, por los' cantor" nossolenlnes que revistieron, siendo coronadas por 'man()s. "Reales, anlbas Inlágeners Milagrosas, siendo ·dichas fiestas cantadas por lo.s l1lejores Oradores de España, con asistencia de toda ·la aristocracia espa~ ñola y de los Prelados de la~glesia. La devoción Palentillo - Leonesa es tan' acen- drada, que. difícilnlente se encontrará una fanlilia quena tel1ga a su Virgen del Valle o del CalTI:ino, como protectora d'e la fan1il~a. El grito espontáneo de nuestras madres en el peligro, fuésiempre:" iAy, Virgen qu:e.rida d:el Valle!¡Madre' idolatrada del ..... . Camino!'~ Ambos Santuarios están adornados v cm··· ". . . . ' al " <J beHecidos como corresponde a su categoría,·y no r,e -.':'., . .:' - '. ", . ~. . ..'."-: ~.~}; . L>~ . ~g;1 I ¡~·;~l...:~r~.,. ".; ..:
  • 60. ~."..-,,:=, n e O''; BRISAS, DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 57 encontrará ni un palentino ni un leonés. que no haya' contribuído cón su ofrenda para ,enriquecer el tesoro de sus Vírgenes idola,tradas~ Sigalnos las huellas de nuestros antepasados, y que ningún leonés nipalcn~ tino que' por caballeros se tengan, echen janlás en olvido Santuarios tan faluosos y Vírgenes tan Mila- grosas, que desde sus Canli:1rines vigilan y defienden sus'respeetivasProvlncias, quedando constituidas, por aclarnación popular y por de/recho de conquista, due- "ñas' de todas las alnl¡as 'castellanas. Riqueza agraria y ganadera La única riqueza de los pueblos leoneses 'está fonnada por sus calnpos ,de lnieses y por haciendas ganaderas. La falnilia nlás pobre tiene su pareja de, vaquillas y algunos "jatos", con SU eorrespondiente lote· de ovejas y corderos, sin que falte el "gocho" para la 11latanza, ni carne fresca para, e~ puche.ro: Sus prados y sus trigales; los titos y los gar- banzos con 'eJ canlpo de lentejas; la cehada y la ave- na; la leña del ,monte yel he,no para el ganado, ,todo ello es',lo, que constituye la riqueza de los hogares de mi ,pue~lo y de todos los puehlos del contorno. Aña- , diendo a. todo esto una cnbita de vino, traído de tierra de Campos por los carrOlllatos del tío Pepito, hace tielnpo "desaparecidos, ,bastahanpara hacer'f'elices, en aquellos tielupos de égloga, a todos luís paisanos, / ~- .~ ::.):;:" ,. , , '
  • 61. '., .; .1'; ;'·1 . 58 P.aRO. DEMETRIO. RAMOS DIEZ ql~e no tEmían'·. nlás pretensiones que! trabajar hones- tanle¡nte yCOfner para vivir, no vivir para com·er. y por eso. nlÍslllo que no tenían pretensione.s, lodos eran felices y vivían tranquilos con su "alua niediócritas", corno dijo el poeta latino. Cuidando sus vacas y terneros, regando sus prados y segando sus trigales, acarreando a las e~-as 'el producto de EUS trabajos por el Cielo bendecidos, no tenÍannues- tros a'ntepasados ni intranquilidade,s que nlatan, ni üel~viosidades que aniquilan. Es 'poi- eso que senlO- rían de viejos y con la sonrisa en los labios, 'rodea- dos de sus hijos y deslls nietos, a quienes bendecían antes de 111.orir, con la gravedad de Patriarcas. Todo .. esto tanlbién ha desaparecido, por culpa de advene- dizos e indeseables. ·I.as galerías carboníferas Ni más ni menos. La tr.anquilidad de nuestros pueblos patriarca.les, huyó espantada por el silbido de las locomotoras, por e.1'ruido de los nl0tores ypor las vagonetas de carbón. Yo conocÍ, cuando niño, esa tranquilidad y aque~ I .'. lla felicidad, cua,nd0 ni en sueños se nos hubiera ocurrido' que en ·las 'entraoos de nuestros montes y bajo la capa verde de nuestros pI'ados, 'lat~a la civi- lizaciónmoderna,· convertida en hullaqlleénnegrece y máncha," no tan. sólq, )os cuerpos,- SIno talnbién las .
  • 62. """,'1¡"'?''G''''T~G'" , :t o ) . 1 1 ) ~'. ..(. BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 59 almas¡; C01110 nunca. nos hubiéramo's imaginado que habí~ de llegar un día, en que la rauda locomotora y las ~'balastreras", arrastran~o vagone:s, habían de cruzar nuesti'os. valles y alborotar la tranquilidad de nuestros pueblos. Todo ello sorprendió a los tranqui- . los y pacíficos habitantes de los pueblos palentinos y leoneses, y no poco les costó ei hacerse a ello. y .• el habituarse al ruido demaquina:rias, 'a los silbidos estridentes que p~olongaban su eco. por las hasta ell···· ¡ tonces donnidas' nl0ntañas y tranquilos' valles, y' al rechinar de las vagone~as cargadas de mineral; sa- liendo .como topos defeentro de la tierra. Aún recal'- dalnas la .llegada del prinler tren a Guard~, .el día en que se inauguró la vía de la Robla, y las fiestas' que se celebraron con esbe motivo..Los chicos, y .los . .... viejos, que en su vida habían visto un tren, lniraLnn estupefactos, como quien ve algo diabólico, y ni acer- carse se'atrevían a la máquina, que les causaba niie- do CQn el ruido de sus énlbÜilos, y les hacía correr con los' resoplidos del vapor de sus válvulas, que intenéio- nada11l,ente abrían lnaq'uinistas y fogoneros, para reÍr- se de aquellas gentes sencillas, ~ que miraban al mo.ns- trua de hierro como algo incomprensible para ellos. I . Pero. no. fueron tan sólo los pel~juicios nlorales quela nueva civilización había' de producir entre aquellos pueblos tranquilos. Estos. perjuicios. fueron : también luate:riales, yq, que el carhón y ·la dinan1ita habían de dañar enormemente lo más rico, hermoso" y ,productivo que tenía luí pueblo de Velilla. Tales eran: . ., :..'.,' ; - .. ' .: ;', '::" .
  • 63. , ,. " 60 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ Sus aguas cristalinas y, sus truchas salmonadas 1 Entre las riquezas naturales con que la Provi- dencia enriqueció al pueblo de Velilla y delnás pue- blos de la comarca, tenemos· tiue dar la supreinacÍa a sus purÍsinlas y cristalinas. 'aguas, tanto de sus ríos , , Escena campesfre,enVeliHádeGua~d~,en lln(J. de las meriendós lípicl!s y familiares, bajo la sombra" de árboles gigantescos y sobr~ercés'pedde sus encanfadOl:aspraderas como de sus fuentes. Aguas tan frescas y transparen- tes,que se veían deslizarse 'las truchas por, entre la , linfa saltarina y espuI~osa, batidacontinuanlente I)017 "el choque con'las piedras y peñascos que a' su paso , el1contrahan~~'Esas,aguas puraSl y frescas de n1Í puehlo, ' . , " :", : '! , .. ':', ( t 1 t f ( g r f a t< e: a d
  • 64. ,', 13fR,~'7~-~~~t~~~~~0~m~~~~~~~~m~~~~~~~~.~~~~~~~~~~~~~~~R~~ "J" . 1~: . "'. :. 1 . '.;~ [-> W • "! : " " BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 61 han sido enormelnente dañadas en su pureza por los nlineralesy" el carbón, y como consecuencia de· esto, dañadas quedaron tamhién sus falnosas y.apetitosas truchas salm:onadas, nlanjar de Reyes y regalo insu·· perable de 'n1adrileños y delnás gente aristocrática española. .' La pesca de la trucha constituia en 'Velilla· una fnenteinagotable de riqueza, en tanto grado, que lnás' de veinte vecil10s del púeblo no tenían otro oficio 'que el de "pescadores", qlle con sus redes yysparaveles, l11angas y. hutrones" cañas y. anzuelos, se ganaban tan gnapanlente la vida, sosteniendo a. sus 'faúlilias, al núsmo tienlpo que sostenían y conlpletúban el gusto de los Sardanápalos en sus regios banquetes, sin 11lás . " peligro que mojarse continu~unente las pantorrillas, agarrar algunos resfríos' y alguna q'ue otra pulmonía, ,,1 aunque rara' vez esto sucedía, puesto que, COlno Nep- U· tuno, era para ellos su eleInentó propio el vivirEiem~ pre moj'ados y lnetidos en el agua. Pero. vinieron las 111inas decarb,ón; llegaron los Inineros con sus cartuchos de dinanlita; se terminó la gigantesca obra hidráulica del Pantano de Cam- •. : .porredondo,' y la trucha salnl0nada de nuestros ríos,: ; :': ha quedado arruinada y deE>lnejorada por cOlnpleto. , , ; 1 . El perjuicio ll1'aterial causado al pueblo con es~ 1¡ tos progresos modernos, es inconcebible. Todavía se [:1 exporta la trucha de Velilla, . pero ya 110 es ni tan k4 a~undante, ni tan sabrosa, ni tan apetecida. Hapel'~ t:¡ .'didóel .gusto, se 'ha' enflaq1uecido y se ha' estragado ft;~: :--:.,; .", .~ ; <1 . I . 1 , I , °0 '
  • 65. " ' "': . ',. I " : ' i ",.:': ;, ;" '. ,f: :,,; ': l ' :1 ':. , ' .,', . ,- ·.•. '-.' ···",,,,,",,",;cf""·T~;7""; ••.... <, i~jl 62 PBno. DEMETRIO -RAMOS DIEZ visibleluente. En una palabra, ha perdido todo., su sa- bor refrescante y todo su gusto sabrosÍsinl0~ y hasta ha perdido su fornla: eshelta y redondeada, su piel " :finísinla~ salpicada de chispas de diamal1tes, 'por ,la varieqad ~e tUS pintas que constituían un TIlosaico. La explicación de esta lneÚtmorfo~is tiene sus causas. , Es sabido que la trucha tiende s"i~mpre a subir ,,'tguas arriba"~ y ,cuanto lnenosag~lia~: inenos esfuer- zo y trabajo tiene que hacer la trucha. Una vez' tel'- núnado, el Pantano de Cam,porredondo., el río está nivelado sienlpre por laE' conlpuertas; el caudal del 'agua es ahora doble 'qüeel que antes tenía el río, 'y la, trucha tiene que enllplear doble ¡esfuerzo para romper la violencia de lacorfientada, consumiendo, sus energías con gran perjuicio d'e su desarrollo nor- InaI. Así se explica que ,la trucha de Camporredondo se rechazó por "tuberculosa y anémica"~ porqueacu- 111ldándose a l11111aresen el remansO" de laSl aguas que forman una especie 'de halsa, jimto al dique del lnÍs- lYlO Pantano, ni pueden alünentarse ,lo suficiente, ni encuentran oxígeno apropiado para EU desarrollo. Aquí tienen mis lectores la explicación deldesnlejo- , famiento de la trucha salnl0nada de; mi pueblo. ;.'? ~.'~ >, Es por esta nliSlTIa razón, que ya no piledeul).o (n~traerse, 'como antes nos distraíaUl0s, viendo desli~ ¡; zarse, las truchas entre ,el agua" con rapidez. vertigi.. nosa, nicontenlpiarse pl:iede ahora el cuadroencan-' .,~ tador de "las truchas' abohadas~' y como dormidas ['¡, dentro 'de su elemento, ni ll1ucho nlenos, se pue~e Ir ¡.~ "l,',) ¡~1 I. ".- .. 0·-" ':.:........ ,::. /- .
  • 66. ~••i;"'.f$lir::':,'.",,!•.,':>',1:, ~ ,:'+ ;'"1 .::~~ ~.'~ . >, .o. ',-: a- " ta el la o. ~So .Ir ToÓ .1'- tá el o, :a lo r- lo u- le s- .11 o. )- :0 .'J- l ' ,' . 1" BRISAS DE MIS lV10NTAÑAS LEONESAS ahora "pBscar a lnano", que era para nosotros una de las distraciones, nlás, emo<;ionantes en las tardes de los domingo.s, a escondidas de los pescadores; que nos proporcionaban no pocos sustos, COlTIO pescadores clandestinos que eraInos. y ésta es también la razón de que el pueblo de Velilla no. presencie el cuadro típico de, :ver a los pescadores reunidos y en plena batalla, para' envolver entre las' mallas de sus redes a trl~chas gigantescas, de dooe y quince libras, cuadro que yo tantas veces contenlplara eri lni niñez. Todo esto ha desaparecido, conlO desapareció tanlbién el tipo clásico de "los pescado.res", que, re- n1a.ngados de pie y, pierna, regresaban de sus faenas con la cesta en bandolera llena de truchas, la caña al hori1bro, o cargados de vedes, llevando poi calzado. unos cuantos trapos que les, preEervaban la planta de los pies,' para no lastinlarlos en las piedras y gui- jarros del río; fUlnando, sus pipas, alegres y' saúsfe- chos,rum.bo a la caSa de Juan el truchero, donde~ después de vender' su Inercancía, entraban en la ta- benia para tomar un cua.rtillo ,de vino y 1110jarse un poquitq por dentro, ya que tanto se habían nlojado' por fuera; y allí, alrededor del jarro y e11 amahle compañetismo, se relataban InllÍuanl'Cnte las peripe- cias de la pesca, o planeaban, COlno pudieran hacerlo los je~es de un Estado Mayor en vísperas de tina b~lÍalla, elmo.do y manera de "atrapar" alguna trucha LS ¡.¡. gigantesca, vista por alguno de los pesca~ores en el po- e ¡j, '.zo de San Tiurde, de la Cueva el Fraile o de La Olla. ~ ~ 1- '" ,'" . ,] I "~ 1 1
  • 67. ., .. :, . ' " 64 PBRO. DEMETRIO RAMOS. DIEZ II01nhr'es felices aquellos pescadores, COTI10 lo , eran los pescadores de Galilea, honest,os, generosos, siempre ale?:resy cont~ntos, que vivían cOllliendo ~opas d~ papillos y pe,ces que no entraban' en peso, y que al volver del río, en1papados en' agua, se ren-. . . . . nían alrededor de' la hornacha, cenaban frugahlten- te y se dormían conto niños, con la tranquilidad del 'que tiene sosegada la conciencia, para, levantarse dt~, 111añanita y regresar 'otra ,vez a horas. del alba, para recorrer todo.', el tío en una ,extensión de dos y tres leguas. l'Tada de extrañar era que les gustara a veces "eIl1pinar un' poco el codo" en la taberna, cosa bien dispensable en ellos. Cans~do~ de estar 111etidqs con" tinuamiente en el agúa helada,¿qué extraño era que les gustara el vino?." Inolvidahles serán sien1pre' para los chiquillos de acru~l tielllpo., los n0111hres de pescadores C01110, el tío Tomasón, el tío Péltilla, el tío Salazar, el 'tÍo Cal'- Iones y el tío Chuchurule, los pescadores n1ás fan10- sos en, aquel entonces, y aql~ienes nosotros esperá- halnos ansio.sos, ,al regreso de la pesca~ para gritarles siml1pre con la frase proverhial: '''¡Tío T0111usónL.. ¿Me da Ud. un pez?..." Y si le traía en la cesta~ rara vez nos lo negaba, aunque a veces tan~hién nos res- pondía: con sorna y con su pira entre lo.s labios: "El que quiera peces, que se lnoje 'eL.. como. yo me le n1ojo", y era entonces cuando nosotros le cantáhan10s. con picardía infantil: ;, i;1 , " e :e 1 . 1 ] y a ,.; el f q 1 ¡@ :1 ¡ t l' , , :,.,j ;1 ( r·:! ~.:t. . i' -:.:.... ,: . ~ . '. "' ....,;"..;.:::::." '.' :.,.,,;. , '1(:.1 ",:, <' ..:" "/'0';. .•.-. :. ::'.:
  • 68. o o ), 1- l- J ;, i;1 . " ·····'·:1·. "-;..' BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS . Tío Tomasón, Tío Tomasón, que en vez de truchas, ha pescado un "culebrón". 65 ;.; ¡Tienlpos. felices aqnellos, que hoy recordamos ,con nostalgia en el alma y con tUl poco de tristeza, en ,el cótázón!' a ',Riquezas de susnosqucs s Eran los bosques de lni pueblo espesos y um- •bríos donde tenían sus guaridas los lobos y jabalíes, y no sin pavor entrábamos por ello~ en busca le' r ,,' acebos para saGar lig~, o en busca de guindas o ni- s (j ,dos, antünoras y nlantecones. Pinos y acebos, hayag ,y robles, chopos y ene~ l ' hros, tejos y acebuches, cerezos, 111anZanos y perales,. ~ s 'pin05 y abedules, avellanos y salgueros, y otros más que ahora no nle vienen a la memoria, constituyen la riqueza forestal de mi pueblo.' ' También los hosqties, han sido víctinlasdel pro- greso moderno y d'e la indlÍstria comercial. Aquellos 1 ,bosques, entonces .frondosos, y aquellos' árboles gi" .; gantescos, han Ido desapareciendo poco a poco,' ta- l :: lados sin conlpasión, para hacer traviesas o durmien- [ tes para el' tren y vagonetas para trasladar el n1Íne- , Tal, con gran perjuicio de 'los intereses deVelilla. 3 ',; Ya no existe el negocio de los "hayucos", fruto ¡~ del haya" que es úna especie de bellota triangular~ de ~. - . ' '.;·1 . . 'l fJ ~.:t. < , ;; ¡ . .... ~. :".~;",.; . . .... 5.~ .,' ...' " ',' . ··1 :::1 j . ,1 ," .1 ! 1,1 : t :1 . ..;.
  • 69. , : ' ~ ',' I .." . , , ~.,.' ,-' -:" ~";'-:-:~-'~'-=-:-::;.~~~,~~, 74 :. _., ::-'" ,~ . ···········O"f" . , }:4 ¡1 66 PBRO. DEMETRIORAMOS DIEZ fornla ovalada, y del. que se .extraía aceite, en abun- ,1 dancia, despuésl de elaborarlo en nl01inos propios. Ya no van lo_s chicos en bandadas 'a descort~zaT los acebos, ,'" para sacar liga, con que cazaban a los inocentes pa- .. ' jarillos, COl?- pajas bien enhebradas, en cuyo arte éra- . 'mas verdaderos y consulllados nlaestros, puesto (iue no carecía de luaestrÍa'(lnlodo de preparar la liga, ' ~ a la que había que: descortezar prilnero en' el árbol, .. JuasVcardespués a déntellada viva,.~avarlacuida­ dosamente hasta desprenderla de sus partes granu- l d ' . d . . "h l'" ,. l' fa as, termInan o por acer 19a, jy que 19a.,· envasada con agua en cajitas 'de betún, y después huscar pajas, enhebradas con habilidad, no tan féÍ.eil . conlO se cree" saherlas colocar en las grietas y pare~ . des salitrosas donde venían a comer los páj.aros, es- 1 conderse y no rehullin:ü para no' espantarlos, y... ( ¡zas!', ya se prendieron en la liga. Correr anhelantes ( p'ara atrapara las yíctinlas, y saber desprenderlas t de la paja enligada sin estropear su plumaje. No :. crean· que es tan fácil inflar 'un 'perro, como diría Cervantes. Pues ese perro 'le inflábanl0s los chiqlli- llosde mi ti~mpo, en un tr((8 por cu~tro, y estoy se- guro qUe los chicos de 'ahora no saben hacerlo, como no saben hacer muchas otras cosas 'que entonces nos servían, de solaz y entretenim.iento, aunque a vece,s rios costaban a:lgunas.,zurras y ~achetespor paJ.'te de lasnuestra~ madres,' que conJ:azón ros ll,unahan .• "endinos", ~~endiablaos" y "satanucos", y no sin ra- :~ .zón, porque después de nuestras excursiones ~al mon~ i:~, ~ cí ¡",¡ .¡ :¡
  • 70. nI- Ya os, )a- ra- BRISAS DE MIS MONTAÑAs LEONESAS' 67 .: te, ·el q'ue no. había perdido' la blusa, traía hecho : jiroúes el pantalÓn, y .el que había' salvado. lagofra, :; venía 'sin un zapato, cuando no venía sin los dos. jAy que ver la gresca que .se armaba, y los gritos.de las pobres madres al vernos rotos, con la caút llena 'liC de,á~.añazos, las lnanosdesolladas y los pies llenos ~a, .de espinas, los tirantes. sin botones y, a veces, los 01, .. pantalones sin tirantes, la camisa fuera .y con l~nhaln~ . la- bre eaninapordeátro! En vista de nuestro aspecto tU- l.' ..,, .es :~il' . zaparrandroso y de' nuestras fachas de verdaderos Ju- das, InaS de una vez se cruzaban las mano.s, 8;sustadas, y entre manotones exclamaban: "¡SeñorL...iSeñor!... ¿Por qué no vendni Herodes todos los años? ... Estas' escenas se repetían un día sí, y otro taln- ~s- : hién, y siempre que había que ir '''a nidos" o a bus- eal' "liga", cuando no. íbámps a meternos comogar-' duñas, en las grutas y cuevas, silos y cavernas, que as tanto abundan en lni pueblo, y en las que dejábamos, ~o :. a veces, nq. sólo pedazos' de pantalones, sino que es , Ul e.s le tan1bién hasta pedazos, de piel. . Gradas y cavernas Eh las lTIontañas cantábricas existen grutas ia- 11l0SaS e histórieas, y conocidas son la cueva de Altan1ira, tan vi'sitad~ por los geólogos ansiosos de III .deseubrin1ientos, y la gruta de Pando y cien fnaS, con a- ;¡sus recuerdos prehistóricos y legendarios,' que en-' n- i.' cierran en)sus entrañas petrificadas restos antedilu·~. ¡ cí .1 " 'j
  • 71. .' . ~ . < ..... .•. .;UiJf::·····. . . ' 1 ' h" r·! .< ¡ 68 PBRO. DEMETRIO RAMOS DIEZ ; .. ¡ , I vianos y osalll:ent;ls de aniinales desaparecidos ya de la Fauna lllundial. Las grutas de Velilla de Guardo tienen'taTIlhiél1 su .,poquito de_historia ySll nnlCho de' cosas ré,lras 'y .. .} curiosas,q~Ie internlinable lne haría si a enluuerar- .1 .las fuera. . Sus gigantescas ulontañasde pura piedra caliza, de la {Iue antes se extraía cal en abundancia, después ., de Eer quemada la ,piedra en los Caleros, y poreaya ...... razón se nos nanTa Ca.1i,ego~ a los habÍtantes de Velilla, están llenas de cueva,s y grutas gigantescas, muchas de ellas aún no exploradas por completo, ni recorridas en toda su extensión, y en las, cuales tieilen que ence·, rrarse no pocos nlÍsterios ocultos en sus tiniel:>las. En Velilla están las cuevas de la "Gerijuela", la del "Calderón", la "Cuev.a Grande de los Grajos", la Cueva "El Fraile", la de ,"los Carlistas", el "Silo ,del tío Enleterio", la de la "Palomera" (hoy desapa- recida), la de "Onseca", y otras muchas,pero entre todas, la que tiene m,ás remelnbranzasy lnás popu- laridad es la 11am,ada Cueva de los "Palacios".? La de la Gerijuela, hoy inaccesible por el des' moronanliento del estrecho sendero que a ella con- ducía, no es otra cosa que un pedazo de túnel abierto en la piedra viva; y que fué ni lnás ni nlenos que ,un acueducto' Romano, por el que traían las aguas desde ¡, el puente COlnpuerto de· Otero, hoydestruído. Para nuestros padres'y abuelos, eráobra de ln0I:0S, ya que todas "las ,obras cuyo origen "se desGonociera, era' ¡;• I 1"t~) ~: .. : " t I tl -!,~:.>,:.,>,.:.,;..~;,:.;." ..':¡'
  • 72. , I BRISAS DE MIS MONTAÑAS LEONESAS 69 a para ellbs "obra de 1110ros". Esta fué, sjelnpre la u. ,'cueva preferida para los chicos, sobre todo. en Se~ '. i.' .J11ana' Santa~ y a ell?-suhíalllos con nuestras carracas y rnatracasdando estrepitoEos conciertds que albo- rol'aban a todo el pueblo q'uevenÍaa caer debajo .,~~ la cueva dicha. Ya pueden imaginarse los lectores el ruido. que produc~rÍan treinta o cüarenta lTIuchach()s, con otras tantas 111atracas y carracas, tQcadas y ha- tidas a iabiar en aquel túnel de piedra de veinte me-' tros de largo.. Justarpente íbam,os allí, por eso 111Ísmo, porque ~x,maban más y lnejor nuestros instrumentos y nuestros gi'Ítos, capaces de volver loco a cualqui~ra que no Juera un chico de Velilla. Comocúalquier otro que no fuera un chico de ·Ve- hIla, hubiera' teriido nunCa el coraje de escalar aqueo lla cueva colocada sobre unabismp de más de cuatro- cientos ,111etros, y a la que' no había' más relnédio que entrar por un sendero resbaladizo que no tendría Jl1ás de un pie de anchura,' abajo €l abisnlo, y arriba el peñasco en corte vertical. Aquello era para hacer el acto de contrición o para hacer testam'ento, pero ninguna' de eEas cosas nos preo.cupaban lo más mí~ nÍino a los chicos de Velilla, y que yo sepa, nunca ocurrió ninguna desgracia;' conlprobátldose, una vez lnás, de- que, los chiquillos tienen todo.s tres o cuatr,) Angeles de 'la' Guarda, porque. de lo contrario no se , explica que saliéranl0s convida de aquel 'peligro, 'al que hoy il0 l11e expondría aunque 111e dieran todo el 0.1'0 'del 111undo; ¡', : , 1