Este documento trata sobre tres trastornos alimentarios: la anorexia nerviosa, que implica una pérdida de peso provocada por el propio individuo que puede conducir a un estado de debilidad; la bulimia, que implica el consumo excesivo de comida seguido de vómitos o laxantes; y la dismorfia muscular o vigorexia, un trastorno caracterizado por una obsesión por el físico que puede ocasionar alteraciones metabólicas e incluso ser más mortal que la anorexia o la bulimia.