La instalación de un turbo o supercargador es una forma efectiva de aumentar la potencia de un motor al sobrealimentarlo con más aire. Un supercargador usa la energía mecánica del motor para comprimir el aire, mientras que un turbocargador usa los gases de escape. Estos sistemas permiten compensar la disminución de potencia a grandes altitudes al crear presiones superiores a la atmosférica. Sin embargo, al someter al motor a mayor esfuerzo, también se deben modificar otros componentes como la transmisión, fren
1. Una de las maneras mas sencillas de obtener un considerable aumento de potencia es la instalación
de un turbo o un supercargador.
Un turbocargador y un supercargadores hacen lo mismo, la sobrealimentación, que es el termino
que describe la acción de introducir mas aire a un motor, lo que los diferencia es el método que usan
para lograr la sobrealimentación.
A grandes rasgos el supercargador aprovecha la energía mecánica del motor para absorber el aire y
el turbocargador hace girar una turbina gracias al flujo en el sistema de escape.
La potencia de un motor esta determinada por la máxima cantidad de mezcla (aire-combustible) que
puede admitir un cilindro, y mientras mas mezcla se puede meter mayor será la potencia.
En motores atmosféricos esta mezcla depende de la presión atmosférica, pues como los pistones en
fase de admisión trabajan como una bomba de aire, solo absorben una cierta cantidad de esta.
Desafortunadamente la presión atmosférica varia dependiendo de la altitud y temperatura ambiente.
Por esto en ciudades como México con 2200 metros sobre el nivel del mar la potencia se ve
disminuida, aproximadamente 22% (1% por cada 100 metros); aquí es donde entran los sistemas de
sobrealimentación porque compensan la escasez de aire a grandes alturas. De hecho los sistemas de
sobrealimentación trabajan a cierta presión que trabaja en conjunto con la atmosférica superando
muchas veces la existente al nivel del mar.
Los Supercargadores
Los supercargadores como había comentado aprovechan la energía mecánica del motor vía juego de
poleas para impulsar un compresor volumétrico. Puede quedar montado de los dos lados del motor
y alimenta el aire hacia el colector de admisión o bien están unidos directamente al motor, y quedan
integrados dentro del colector de admisión. Estos aditamentos tienen algunas ventajas importantes.
Su funcionamiento les permite generar la sobrepresión prácticamente al instante. Por otra parte no
calienta tanto el aire como el turbocargador, asi que su eficiencia no depende de la instalación de un
interenfriador. El supercargador absorbe aire a través de una boca –conectada al filtro de aire- y lo
comprime antes de entregarlo al múltiple de admisión. Como hay mayor aire, hay mayor mezcla y
como consecuencia mayor potencia.
Hay dos tipos de supercargadores. Los más viejos pero no menos eficaces son los llamados Roots.
Estos son sincronizados por un juego de engranes y normalmente van colocados arriba del motor.
Su mayor ventaja es que entregan aire a presión desde ralentí, lo que incrementa su ganancia de
potencia casi en todo el régimen de revoluciones. Su punto en contra es el gran tamaño del
compresor, por lo que son recomendados para motores V6 o V8, aunque también se puede usar en
motores de 4 cilindros.
Los supercargadores más recientes son los centrífugos. Es un compresor (parecido a la turbina) que
va unido a la polea, la cual es accionada por una banda al motor. Su ventaja es que ocupa menos
espacio que el Roots y que es menos complicada su instalación. Pero su desventaja es que presenta
una pequeña demora, y que su régimen óptimo de funcionamiento del compresor es a altas
revoluciones. Más o menos la velocidad de giro del rotor debe de ser entre 70, 000 a 100, 000 rpm.
A muchos autos se les puede adaptar un supercargador, como por ejemplo el paquete de Vortech
especial para el Honda Civic Sir que su precio ronda los $35 000 aproximadamente; otro ejemplo de
2. un auto supercargado pero de fábrica es el Mini Cooper S, el Pontiac Grand Prix o la Lobo Harley
Davidson que también es supercargada.
El aumento de potencia será aproximadamente de un 30 a un 50% dependiendo del supercargador y
del motor, que obviamente debe de estar antes en óptimas condiciones antes de intentar mejorar su
desempeño.
Si la transmisión es manual habrá que verificar que el embrague pueda resistir el aumento de
potencia.
Si a transmisión es automática posiblemente se tendrá que instalar un sistema de enfriamiento para
la transmisión.
Definitivamente habrá que optimizar el sistema de frenos, porque los frenos de serie del auto están
calculados para frenar el auto con cierta potencia en el motor.
Los sistemas a mejorar serían el de alimentación (mayor gasolina), el de admisión (mejor
respiración), distribución (adelantar el tiempo de avance), escape (para facilitar la entrada hay que
facilitar la salida), enfriamiento(mejor radiador y bomba de agua).
También dependiendo de la presión al que sea calibrado el supercargador posiblemente sea
necesario colocar pistones y anillo forjados.
Esta información es para saber que no es solo instalar el supercargador y listo, hay que modificar
ciertas partes partes del motor porque ese motor no fue concebido para el sobreesfuerzo al que es
sometido con un supercargador o un turbocargador.
Así que si lo que quieres es destacar en arrancones ¼ de milla o simplemente tener un auto muy
veloz puedes optar por un supercargador o un turbo, pero tienes que tomar en cuenta las
modificaciones necesarias y sobretodo que no es económico