El documento compara la Web 1.0 y la Web 2.0, señalando que mientras la Web 1.0 tenía contenido creado principalmente por pocos productores para que los usuarios solo lo observaran de forma pasiva, la Web 2.0 permite a los usuarios interactuar y colaborar como creadores de contenido generado por los propios usuarios. La Web 2.0 facilita el compartir información y la colaboración a través de aplicaciones como blogs, wikis, redes sociales y aulas virtuales.