1. ALTERIDAD
Del latín alterĭtas, alteridad es la condición de ser otro.
El vocablo alter refiere al “otro” desde la perspectiva
del “yo”. El concepto de alteridad, por lo tanto, se
utiliza en sentido filosófico para nombrar al
descubrimiento de la concepción del mundo y de los
intereses de un “otro”.
2. I IDENTIDAD-ALTERIDAD
La alteridad hay que entenderla a partir de una división entre
un “yo” y un “otro”, o entre un “nosotros” y un “ellos”. El
“otro” tiene costumbres, tradiciones y representaciones
diferentes a las del “yo”: por eso forma parte de “ellos” y no
de “nosotros”. La alteridad implica ponerse en el lugar de ese
“otro”, alternando la perspectiva propia con la ajena.
3. IDENTIDAD- ALTERIDAD
Lo propio del ser humano es crecer y evolucionar pero
no se evoluciona por el mero hecho de existir: la tarea
más heroica de un ser humano es esencialmente
humanizarse.
4. IDENTIDAD- ALTERIDAD
El valor estructurarte de estos vínculos primarios en la
construcción de nuestra personalidad, pone en
evidencia que la vida es pura relación y que existimos
porque estamos relacionados.
Desde las primeras horas de vida, un bebé es un ser de
comunicación y de deseos, un ser que tiene necesidad
de seguridad, de amor, de alegría y de palabras tanto
como de cuidados físicos y materiales.
5. IDENTIDAD- ALTERIDAD
las dificultades psíquicas de los primeros años de vida,
en general, escapan a la conciencia de los adultos; una
sociedad que aún no comprende, no sabe o no quiere
ver cómo esas mismas dificultades son las que fabrican
un futuro psicosocial perturbado.
La educación marca profundamente a una persona y el
destino reservado a los niños depende de la actitud de
los adultos.
6. IDENTIDAD- ALTERIDAD
Crecer es desarrollar nuestra identidad, convertirnos en
verdaderos individuos. Pero no hay identidad si no hay
individuación.
Un ser puede echar raíces en su identidad porque hay
una individuación y luego una identidad simbólica de
esa individuación. Este es el camino del ser humano.