(1) Aristóteles nació en 384 a.C. en Grecia y estudió en la Academia de Platón en Atenas por 20 años. Luego fundó su propia escuela, el Liceo, donde desarrolló sus propias teorías filosóficas.
(2) Aristóteles criticó la teoría de las Ideas de Platón y propuso que la esencia de un objeto está dada por su forma material unida a la materia.
(3) Escribió numerosas obras que abarcaron temas como la ló
2.
Aristóteles nació en 384 a. C. en la ciudad de Estagira (razón por la cual se lo apodó el
Estagirita),no lejos del actual Monte Ath..os, en la península Calcídica, entonces
perteneciente al Reino de Macedonia (actual Macedonia). Su padre, Nicómaco, fue
médico del rey Amintas III de Macedonia, hecho que explica su relación con la corte
real de Macedonia, que tendría una importante influencia en su vida.
En 367 a. C., cuando Aristóteles tenía 17 años, su padre murió y su tutor Proxeno de
Atarneo lo envió a Atenas, por entonces un importante centro intelectual del mundo
griego, para que estudiase en la Academia de Platón.[8] Allí permaneció por veinte
años.[8]
Tras la muerte de Platón en 347 a. C., Aristóteles dejó Atenas y viajó a Atarneo y a
Aso, en Asia Menor, donde vivió por aproximadamente tres años bajo la protección
de su amigo y antiguo compañero de la Academia, Hermias, quien era gobernador
de la ciudad.
Cuando Hermias fue asesinado, Aristóteles viajó a la ciudad de Mitilene, en la isla de
Lesbos, donde permaneció por dos años.[7] [8] Allí continuó con sus investigaciones
junto a Teofrasto, nativo de Lesbos, enfocándose en zoología y biología marina.[7]
Además se casó con Pythias, la sobrina de Hermias, con quien tuvo una hija del
mismo nombre.
Biografía
3.
En 343 a. C., el rey Filipo II de Macedonia convocó a Aristóteles para que fuera
tutor de su hijo de 13 años, que más tarde sería conocido como Alejandro
Magno.[7] [8] Aristóteles viajó entonces a Pella, por entonces la capital del imperio
macedonio, y enseñó a Alejandro durante, al menos, dos años, hasta que inició su
carrera militar.[8]
En 335 a. C., Aristóteles regresó a Atenas y fundó su propia escuela, el Liceo
(llamado así por estar situado dentro de un recinto dedicado al dios Apolo
Licio).[8] A diferencia de la Academia, el Liceo no era una escuela privada y
muchas de las clases eran públicas y gratuitas.[7] A lo largo de su vida Aristóteles
reunió una vasta biblioteca y una cantidad de seguidores e investigadores,
conocidos como los peripatéticos (de, 'itinerantes', llamados así por la costumbre
que tenían de discutir caminando).[7] La mayoría de los trabajos de Aristóteles que
se conservan son de este período.[7]
Cuando Alejandro murió en 323 a. C., es probable que Atenas se volviera un lugar
incómodo para los macedonios, especialmente para quienes tenían las conexiones
de Aristóteles.[7] [8] Tras declarar (según se cuenta) que no veía razón para dejar
que Atenas pecara dos veces contra la filosofía (en referencia a la condena de
Sócrates), Aristóteles dejó la ciudad y viajó a Calcis, en la isla de Eubea, donde
murió al año siguiente, en 322 a. C., por causas naturales.
4.
Metafísica:
Críticas a la teoría de las Ideas de Platón
Platón y Aristóteles, por Raffaello Sanzio (detalle de La escuela de
Atenas, 1509).
En su juventud, Aristóteles fue discípulo de Platón en la Academia de
Atenas. Aristóteles construyó un sistema filosófico propio.
Previo a ello, sometió a crítica la teoría de las Ideas de su maestro. Para
intentar solventar las diferencias entre Heráclito y Parménides, Platón
había propuesto la existencia de dos dimensiones en la realidad: el
Mundo sensible y el Mundo inteligible. Para Aristóteles, el mundo no
tiene compartimentos.
Si bien Aristóteles admite, al igual que Sócrates y Platón, que la esencia
es lo que define al ser, concibe (a diferencia de sus antecesores) la
esencia como la forma (μορφή) que está unida inseparablemente a la
materia, constituyendo juntas el ser, que es la sustancia. La afirmación
de la importancia del conocimiento sensible, y del conocimiento de lo
singular para llegar a lo universal, abrió posibilidades a la
investigación científica.
Pensamiento
6.
Aristóteles rechazó fuertemente la teoría de Platón según la cual las ideas eran
la auténtica realidad (por ser subsistentes y autofundadas) y que el mundo
sensible, captado por nuestros sentidos, no era más que una copia de aquellas.
Aristóteles, al contrario de Platón -que concebía la «existencia» de dos mundos
posibles o reales (algunos eruditos creen que la teoría platónica es en realidad
un realismo de las Ideas)-, poseía una teoría que discurría entre el mundo de las
nociones y el mundo sensible, si bien estaba abierto a admitir la existencia de
sustancias separadas e inmóviles (como se muestra en la Física y en la
Metafísica).
Aristóteles hace cuatro críticas fundamentales a la teoría de las ideas de Platón:
Critica a los dos mundos: para Aristóteles es uno solo; admitir dos mundos
complica la explicación innecesariamente, reduplicando las realidades.
Platón no ofrece una explicación racional al hablar de los dos mundos. Se limita
a utilizar mitos y metáforas, en vez de aclarar conceptualmente sus propuestas.
No hay una relación clara de causalidad del mundo ideal respecto del mundo
sensible. No explica cómo las ideas son causa de las cosas sensibles y mutables.
No infiere que de una idea se derive un objeto.
Argumento del tercer hombre: según Platón, la semejanza entre dos cosas se
explica porque ambas participan de la misma idea. Según Aristóteles, se precisa
un tercero para explicar la semejanza entre dos cosas, y un cuarto para explicar
las tres, y así sucesivamente. Es una regresión al infinito, por lo tanto no se
explica nada. Tal argumento ya había sido recogido por el mismo Platón en el
diálogo titulado Parménides.
7.
El problema del cambio
Aristóteles fue un pensador con espíritu empirista, es decir que buscó fundamentar el
conocimiento humano en la experiencia. Una de las primeras preocupaciones fue
encontrar una explicación racional para el mundo que lo rodeaba.
Los presocráticos se percataron de que lo que nos rodea es una realidad diversa que
se halla en continua y perpetua transformación.
Heráclito de Éfeso considera que todo se halla en perpetuo cambio y transformación;
el movimiento es la ley del universo.
Parménides, al contrario, opina que el movimiento es imposible, pues el cambio es el
paso del ser al no ser o la inversa, del no ser al ser. Esto es inaceptable, ya que el no
ser no existe y nada puede surgir de él.
Platón, supone una especie de síntesis, es decir, una unión o una suma de estas dos
concepciones opuestas: la de Heráclito y Parménides. Por un lado tenemos el mundo
sensible, caracterizado por un proceso constante de transformación y, por el otro,
tenemos el mundo abstracto y perfecto de las Ideas, caracterizado por la eternidad y la
incorruptibilidad.
Aristóteles entiende el cambio y el movimiento como «el paso de lo que está en
potencia a estar en acto», por la acción de las causas. Hay cuatro causas: formal que
constituye la esencia como forma de la sustancia; material como soporte de la forma
y al no tener forma es pura potencia de ser (propiamente, al no tener ninguna
determinación, no es nada); eficiente, que produce el movimiento; final que dirige el
movimiento hacia un fin, la perfección de la forma. Por ello la Naturaleza se explica
según una teleología de la forma que tiende a la perfección de su contenido.
8.
Las obras de Aristóteles que nos han llegado y que forman lo
que se conoció como el Corpus aristotelicum se editan según la
edición prusiana de Immanuel Bekker de 1831-1836, indicando
la página, la columna (a ó b) y eventualmente la línea del texto
en esa edición. Tras el trabajo de Bekker se han encontrado sólo
unas pocas obras más. Los títulos en latín todavía son utilizados
por los estudiosos.
Los trabajos cuya legitimidad está en disputa se marcan con , y
los trabajos que generalmente se consideran espurios se marcan
con .
Obras
10.
(1a) Categorías
(16a) De la interpretación
Primeros analíticos
Segundos analíticos
Tópicos (Topica)
(164a) Refutaciones sofísticas
Física (el estudio de la naturaleza)
(184a) Física
Tratado del cielo (De caelo)
(314a) De la generación y la corrupción
Meteorología
Del universo
Del alma
Pequeños tratados sobre la naturaleza
a) De los sentidos y de lo sentido
b) De la memoria y la reminiscencia
Del sueño y la vigilia
Del ensueño
De la adivinación por el sueño
De la longitud y la brevedad de la vida
De la juventud y la vejez, De la vida y la muerte, y De la respiración.
11.
1: Al igual que ocurría con Platón tampoco en Aristóteles encontramos una teoría del
conocimiento elaborada, aunque sí numerosos pasajes en varias de sus obras
(Metafísica, Ética a Nicómaco, Tópicos, por ejemplo) que se refieren explícitamente al
conocimiento analizándolo bajo distintos aspectos. El estudio de la demostración, el
análisis de las características de la ciencia y sus divisiones, la determinación de las
virtudes diagnósticas, etc., son algunas de las ocasiones en las que Aristóteles nos
habla de una manera más específica del conocimiento y de sus características. De
todo ello podemos deducir algunas de las características básicas del conocimiento tal
como parece haberlo concebido Aristóteles.
2: Aristóteles distingue varios niveles o grados de conocimiento. El conocimiento
sensible deriva directamente de la sensación y es un tipo de conocimiento inmediato
y fugaz, desapareciendo con la sensación que lo ha generado. El conocimiento
sensible es propio de los animales inferiores. En los animales superiores, sin
embargo, al mezclarse con la memoria sensitiva y con la imaginación puede dar
La Teoría del conocimiento
aristotélica
12.
lugar a un tipo de conocimiento más persistente. Ese proceso tiene lugar en el
hombre, generando la experiencia como resultado de la actividad de la memoria, una
forma de conocimiento que, sin que le permita a los hombres conocer el porqué y la
causa de los objetos conocidos, les permite, sin embargo, saber que existen, es decir,
la experiencia consiste en el conocimiento de las cosas particulares:
"... ninguna de las acciones sensibles constituye a nuestros ojos el verdadero saber,
bien que sean el fundamento del conocimiento de las cosas particulares; pero no nos
dicen el porqué de nada; por ejemplo, nos hacen ver que el fuego es caliente, pero
sólo que es caliente." ("Metafísica", libro 1,1).
3: El nivel más elevado de conocimiento vendría representado por la actividad del
entendimiento, que nos permitiría conocer el porqué y la causa de los objetos; este
saber ha de surgir necesariamente de la experiencia, pero en la medida en que es
capaz de explicar la causa de lo que existe se constituye en el verdadero
conocimiento:
""Por consiguiente, como acabamos de decir, el hombre de experiencia parece ser más
sabio que el que sólo tiene conocimientos sensibles, cualesquiera que ellos sean: el
hombre de arte lo es más que el hombre de experiencia; el operario es sobrepujado
por el director del trabajo, y la especulación es superior a la práctica."("Metafísica",
libro 1,1)
13.
4: El conocimiento sensible es, pues, el punto de partida de todo conocimiento,
que culmina en el saber. Y Aristóteles distingue en la Metafísica tres tipos de
saber: el saber productivo, el saber práctico y el saber contemplativo o teórico.
En la Ética a Nicómaco volverá presentarnos esta división del saber, en relación
con el análisis de las virtudes dianoéticas, las virtudes propias del pensamiento
discursivo (diánoia). El saber productivo (episteme poietiké) que es el que tiene
por objeto la producción o fabricación, el saber técnico. El saber práctico
(episteme praktiké) remite a la capacidad de ordenar racionalmente la
conducta, tanto pública como privada. El saber contemplativo (episteme
theoretiké) no responde a ningún tipo de interés, ni productivo ni práctico, y
representa la forma de conocimiento más elevado, que conduce a la sabiduría.
5: El punto de partida del conocimiento lo constituyen, pues, la sensación y la
experiencia, que nos pone en contacto con la realidad de las sustancias
concretas. Pero el verdadero conocimiento es obra del entendimiento y consiste
en el conocimiento de las sustancias por sus causas y principios, entre las que se
encuentra la causa formal, la esencia. Al igual que para Platón, para Aristóteles
conocer, propiamente hablando, supone estar en condiciones de dar cuenta de
la esencia del objeto conocido. De ahí que el conocimiento lo sea propiamente
de lo universal, de la forma (o de la Idea). Pero para Aristóteles la forma se
encuentra en la sustancia, no es una entidad subsistente, por lo que es
absolutamente necesario, para poder captar la forma, haber captado
previamente, a través de la sensibilidad, la sustancia.
14.
6: El entendimiento no puede entrar en contacto directamente con la forma;
cuando el hombre nace no dispone de ningún contenido mental, por lo que
entendimiento no tiene nada hacia lo que dirigirse: es a través de la experiencia
como se va nutriendo el entendimiento de sus objetos de conocimiento, a través
de un proceso en el que intervienen la sensibilidad, la memoria y la
imaginación. Mediante la acción de los sentidos, en efecto, captamos la realidad
de una sustancia, de la que, mediante la imaginación, elaboramos una imagen
sensible, es decir, una imagen que contiene los elementos materiales y sensibles
de la sustancia, pero también los formales. Es sobre esta imagen sobre la que
actúa el entendimiento, separando en ella lo que hay de material de lo formal.
Aristóteles distingue dos tipos de entendimiento, el agente y el paciente; el
entendimiento recibe, entra en contacto con, la imagen sensible; el
entendimiento agente realiza propiamente la separación de la forma y la
materia, quedándose con el elemento formal que expresa a través de un
concepto en el que se manifiestan, por lo tanto, las características esenciales del
objeto.
7: Las diferencias son, pues, considerables con Platón, tanto respecto al valor
atribuido al conocimiento sensible, como respecto a la actividad misma del
entendimiento que ha de ser necesariamente discursivo, siendo imposible llegar
a conocer los universales a no ser mediante la inducción; además, Aristóteles
rechaza explícitamente el innatismo del conocimiento, y nos lo presenta como el
resultado del aprendizaje, es decir, por la coordinación racional de los
elementos procedentes de la sensación, a través de la experiencia. Coinciden,
sin embargo, en la consideración de que el verdadero conocimiento ha de serlo
de lo universal, y no de los objetos singulares.
16. Ellos creían que la tierra era el centro del universo así, que el sol y los otros
planetas giraban alrededor nuestro, que en la tierra estaba constituida por 4
elementos, la tierra y el agua que son elementos que tienden a quedarse hacia el
piso por ser pesados y por estar en el centro del cosmos, y el aire y el fuego que
son tan elevados que tienden irse hacia arriba, como se observaba cuando se
prende fuego este va hacia arriba o el aire que anda en el ambientes, también
había un quinto elemento que era el compuesto fundamental de los cuerpos
celestiales es decir el mundo supra lunar el sitio de las cosas perfectas y donde
las cosas se mueven de manera perfectamente circular.
Aristóteles creía que los elementos tenían vida y podían decidir donde estar tal
cual lo hace un ser vivo, dándole animismo a todo lo que estaba en la tierra, es
decir característica de alma, para explicar el movimiento rectilíneo que hacían
los elementos para bajar o subir según su naturaleza.
TESIS CENTRALES DE LA CIENCIA
ARISTOTELICA
17.
Cuáles fueron los acontecimientos puntuales que permitieron cuestionarlas
Muchas de la tesis de Aristóteles fueron rechazadas y desaprobadas en el siglo
XVI tras hechos como la reforma , que dieron inicio a una época de luz en la
historia llamada “el renacimiento”, donde una serie de personajes como
científicos, filósofos, matemáticos gente de ciencia y de fe, realizaron
importantes descubrimientos que permitieron dar claridad a muchas ideas y
tesis que habían perdurado por más de 1800 años en la historia, también es
importante que una serie de elementos importantes para la observación como lo
fue el telescopio que usado por Galileo Galilei y Nicolás Copérnico dieron luz a
la teoría heliocentrista dejando sin argumentos a la tesis de Aristóteles.
Uno de los más importantes críticos de Aristóteles fue el filosofo ingles Thomas
Hobbes quien lo refuta diciendo que su teorías eran antropomórficas cegando la
realidad de la naturaleza.
18.
Estaba persuadido de que estas naturalezas tenían que dejarse descubrir; pero
para ello era necesario emplear un método apropiado. Y es entonces, a
propósito de esté método, cuando se manifiestan reales debilidades y
deficiencias. Se puede decir qué Aristóteles confiaba en procedimientos de
hallazgos poco maduros, a la vez que despreció otros procedimientos, como el
empleo de las matemáticas. Además siendo biólogo, cayó en la tentación de
pensar su método general desde una perspectivadictada por el estudio de los
seres vivos. Se mostró entonces el carácter hibrido de esté método, cuyo
principal resultado fue haber olvidado la parte del hombre que seintroducía en
él, espontáneamente proyectada en la parte del objeto que había qué estudiar;
tocada de antropomorfismo, corría el riesgo de procurar una satisfacción
ilusoria y desembocar con frecuencia a explicaciones verbales.
El Método de Aristóteles
19.
2.- El punto de partida: observación y experiencia.
Aristóteles precisa esta exigencia de la observación sensible en su teoría de La
experiencia, concebida no en el sentido actual de una experimentación, sino como un
empirismo reflejo, fruto de una familiaridad con los hechos. No hay duda de que
Aristóteles no ignoraba los posibles errores de los sentidos y las precauciones que
hay que adoptar, pero ha
identificado excesivamente el hecho de la sensación ( lo sensible) con el dato objetivo
( lo físico ).
El ser físico se ofrece al conocimiento sensible por sus accidentes situados al mismo
nivel que él; lo importante es descubrirlos y situarlos en sus relaciones mutuas y en
su dependencia de la substancia.
3.- La actividad intelectual en esta investigación:
En un proceso ascendente, después de la primera etapa de la experiencia, del
contacto directo con la realidad sensible, tiene que venir la del
hallazgo de lo universal inteligible
presente en el seno mismo de esta realidad. Respecto a esto conviene disipar
una imagen muy extendida, la de la importancia casi absoluta y exclusiva, que
el estagirita habría dado al silogismo. Es innegable, ciertamente, que lo
convirtió en el gran medio de conocimiento filosófico; pero hay que reconocer
que, en el ámbito cosmológico, en el estudio de los seres de la naturaleza, es la
inducción ( el paso de los hechos particulares a lo universal), la quecha retenido
toda su atención para descubrir las propiedades que se traducen por procesos
fijos.