La auditoría requiere que los auditores tengan una actitud positiva, estabilidad emocional y objetividad. Se realiza para detectar errores e informar sobre el examen crítico realizado con el fin de evitar malestares inesperados. La auditoría interna se lleva a cabo periódicamente en el lugar donde se encuentra la documentación para verificar que todo esté en orden. En conclusión, la auditoría es dinámica y debe realizarse formalmente en toda empresa independientemente de su tamaño u objetivos.