2. HISTORIA
• La DIABLADA PILAREÑA derivada de la ORUREÑA
(Bolivia) se celebra desde el 1 al 6 de enero. En la
diablada de Píllaro, como se conoce
tradicionalmente a esta celebración participan los
habitantes disfrazados con vestidos rojos, látigos
y caretas multicolores que son elaboradas por sus
propios dueños. Para estas incluso se utilizan
cuernos de animales de diversos tamaños o
huesos de pescado.
3. • Acompañados al son de la banda de pueblo,
los diablos llegan al centro de la ciudad
bailando desde las comunidades y barrios del
cantón.
4. • Según el historiador tungurahuense, Pedro
Reino, las diabladas en sus orígenes no
tuvieron el afán de ser un espectáculo o rendir
algún culto demoniaco. Fueron rituales que
oscilaban entre lo lúdico y un sentimiento
que, según dice, ya han perdido las
generaciones contemporáneas: la esperanza
de libertad
5. • Esta diablada conformada por unas 150
personas llegó el jueves pasado al centro de la
ciudad, luego de bailar durante una hora en el
recorrido que hicieron desde su comunidad
hasta el parque central.
