1. BENEMÉRITAUNÍVERSIDAD AUTÓNOMA DE PUEBLA
Facultad de Administración
Licenciatura en Administración de Empresas
Desarrollo de Habilidades de Técnicas de Investigación y
Comunicación.
LEYENDAS MEXICANAS
Emmanuel Nieva Anaya Matrícula 201505020
Puebla, Pue Otoño 2015
2. ÍNDICE
RESUMEN 2
INTRODUCCIÓN 2
LEYENDAS PREHISPANICAS. 3
a) La creación del mundo (leyenda maya) 3
b) Popocatépetl e Iztaccíhuatl. 5
c) La llorona 6
LEYENDAS COLONIALES 7
a) El árbol del vampiro (Guadalajara) 7
b) El diablo en pañales. 8
c) El pirata barbillas (Campeche). 9
LEYENDAS MODERNAS 10
a) La aparecida en San Blas (Nayarit) 10
b) Carretera a la Rumorosa (Mexicali) 11
Conclusiones. 13
Bibliografía 14
3. 2
RESUMEN
El punto inicial de toda leyenda es un hecho social (histórico o de interés popular),
geográfico, biológico, etc. Que se considera digno de pasar a la posteridad; parte
de elementos reales a los que se les agregan elementos irreales y en muchas
ocasiones, misteriosos.
Durante siglos, los hombres y las mujeres que conocían las leyendas soló podían
transmitirlas de manera oral dado que aún no se inventaba la escritura. Estas
personas se convertían en custodios de las tradiciones de un pueblo, guardianes
de la historia de su comunidad
Las leyendas eran una radiografía que mostraba las ideas religiosas de un pueblo,
su cultura, sus formas de creación y de pensamiento.
A ciencia cierta no se sabe quién crea la leyenda, este carácter anónimo lo hace
admirable, pero si es posible conocer de qué pueblo viene.
INTRODUCCIÓN
En tiempos prehispánicos, los dibujos en varios códices resaltan la importancia
que la palabra hablada tenia entre los indígenas, por ejemplo, basta recordar la
figura de unos indios en cunclillas mientras se desprende de sus bocas una serie
de adornos en espiral o en caracoles, que representaban la palabra. Para este tipo
de cultura, igual que las antiguas culturas del orbe, la capacidad humana de
comunicarse oralmente era un acto mágico y gracias al cual se inventaron los
mitos y las leyendas. En ocasiones la línea entre leyenda y mito, en el mundo
prehispánico, es tan delgada que se entrelaza y genera leyendas mitológicas o
míticas.
4. 3
En todo el país, en cada estado, ciudad, pueblo o ranchería existen relatos que se
refieren a hechos históricos, de la naturaleza y que al ser transmitidos se
modifican con la imaginación del narrador: aparecidos, fantasmas, diablos,
milagros, santos, héroes, brujas o animales, desfilan en agiles y entretenidos
relatos que difieren por la zona o región donde fueron creados. Estas leyendas
mexicanas se clasificaron en 3 grandes clasificaciones; así tenemos las leyendas
prehispánicas (antes de la llegada de los españoles), coloniales (propiamente
cuando los peninsulares dominaban la nueva España) y contemporáneas o
modernas (situadas a partir del siglo XX; son las que ocurren en las ciudades, y a
veces son llamadas leyendas urbanas). A continuación se podrá leer unas
leyendas de cada una de estas clasificaciones.
LEYENDAS PREHISPANICAS.
a) La creación del mundo (leyenda maya)
En tiempos remotos la Tierra solo era una vasta extensión desolada sin límites,
cubierta únicamente por agua. En el mundo no había seres humanos, animales
arboles o piedras.
En algún espacio del infinito, entre el silencio y las tinieblas, Vivian los dioses
Huracán, Gucumats, y Tepeu quienes cansados de la pasividad que los
rodeaba, decidieron reunirse para cambiar esta situación Inesperadamente y
de la nada hicieron surgir la luz, que ilumino un cuerpo casi redondo al que
llamaron Tierra. Disminuyeron el niel de las aguas y dieron paso a grandes
porciones de tierra, donde se cultivarían semillas y surgiría la vegetación. Así
brotarían de su interior arboles, plantas y flores.
Los dioses se regocijaron ante su magnifica creación, sin embargo, se
enfrentaron ante su grave problema: ¿Quién cuidaría de los arboles y las
flores?
5. 4
-Los arboles no pueden quedar sin guardianes ni servidores –dijeron en
conjunto. Entonces hicieron aparecer sobre las ramas y junto a los troncos una
gran variedad de animales que permanecieron inmóviles, confundidos, hasta
que los dioses les ordenaron:
-Tú iras a beber en los ríos; tú dormirás en las grutas; tu marcharas en cuatro
patas y un día tu espalda servirá para llevar cargas; tu, especie con alas vivirás
en los árboles y volaras por los aires sin tener miedo de caer.
Una vez que terminaron de escuchar las instrucciones los animales hicieron lo
que se les ordeno. Los dioses pensaban que todos los seres vivientes debían
ser obedientes y sumisos con su entorno natural, pero no debían vivir en el
silencio; porque este es sinónimo de desolación y de muerte. Así que les
otorgaron a los animales el don de la voz. Pero ellos no supieron como sacar
provecho de este regalo, de tal manera que solo se dedicaron a gritar, sin
expresar ni una sola palabra inteligente.
Entristecidos, los dioses se reunieron, una vez más, para hablar de esta
situación. Pronto se dirigieron a informales a los animales sobre su nuevo
modo de vida: -Ustedes, animales, fueron privilegiados al tener el don de la
voz, pero no fueron capaces de emplearla correctamente. Creemos además
que han perdido o nunca han entendido quienes somos nosotros. Nosotros
somos los dioses. Estas razones son suficientes para condenarlos a vivir en el
peor de los temores: el miedo a los otros. Se devoraran unos a otros sin
ninguna repugnancia.
Al ver que no podían hacer nada contra los mensajes de sus dioses, se
resignaron y aceptaron la sentencia. Pronto serian persuidos y sacrificados,
sus carnes cocidas y devoradas por seres más inteligentes que pronto
nacerían: los seres humanos.
Así fue como en tiempos inmemorables a los animales se les retiro el derecho
a hablar y por ello, actualmente no son capaces de comunicarse unos con
otros.
6. 5
b) Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
Iztaccíhuatl era una hermosa joven, hija del emperador azteca, que se
enamoro rápidamente de un joven guerrero llamado Popocatépetl. Cuando el
padre de la doncella descubrió el romance, envió inmediatamente al joven
guerrero muy lejos, a combatir en una guerra Los jóvenes protestaron, sin
embargo, de la no pensaba que volviera. Los jóvenes enamorados protestaron,
sin embargo, el padre les prometió que si el regresaba con la cabeza del
enemigo, ese mismo día les permitiría casarse. Popocatépetl partió a la guerra,
pasaron años y años, en los que él combatía valerosamente sin doblegarse.
Iztaccíhuatl, por su parte cada día se encontraba más triste, porque no había
tenido noticias de si noble guerrero. El emperador se vio en la necesidad de
mentirle, debido a que él no aceptaba ese amor, le dijo que el valiente guerrero
había muerto en una batalla hacia ya mucho tiempo. La doncella no soporto el
dolor que la noticia le causo por lo que, murió unos días después.
El padre, arrepentido por sus acciones, preparo el ritual para despedirse de su
hija tendida sobre una manta fue colocada sobre una gran piedra e
inesperadamente, Popocatépetl apareció, regreso victorioso, traía consigo la
cabeza del enemigo. El suceso con el que se encontró fue terrible, ya que el
padre de la doncella preparaba la despedida de su hija. Con el dolor terrible
que un hombre pueda sentir, Popocatépetl tomó a la joven muerta en sus
brazos y huyo a las montañas.
Allí, la deposito tiernamente sobre la tierra y arrodillado a su lado dio rienda
suelta a su sufrimiento. Lloró y rugió de rabia, día y noche, durante mucho
tiempo. Los dioses se apiadaron de tanto dolor y en el preciso momento en el
que Popocatépetl cayó agotado por el cansancio y la pena, cubrieron a los
jóvenes con blanquísima manta de nieve y los convirtieron en dos hermosas
montañas. Nadie, nunca más, podría separarlos.
Iztaccíhuatl es conocida como la “Mujer dormida” porque en todo se asemeja
su silueta a una mujer echada sobre su costado. Popocatépetl, se llama ahora
7. 6
“Montaña Humeante” y sigue vivo. Cuando despierta, agobiado por el dolor de
ver a su amada muerta junto a él, lanza gritos de rabia que estremecen la tierra
y con sus ardientes lágrimas abrasa todo lo que toca.
c) La llorona
Existió una mujer Azteca que perdió su esposo muerto en una gran batalla. Al
quedar sola, la mujer perdió la cordura y ahogó a sus hijos en el lago. Aunque
su intención también era la de quitarse la vida, el pueblo la castigo, antes de
terminar con su objetivo suicida. Fue juzgada, torturada y sacrificada para
pagar por la muerte de sus hijos.
Los dioses condenaron a la mujer para que permaneciera atrapada entre la
vida y la muerte, siempre peleando y siempre lamentando el haber matado a
sus hijos. Ella apareció en el lago y se le conocía como la Cihuacoatl (mujer
serpiente). Aterrorizado a todos los pobladores de la ciudad; los hacía
naufragar y se los devoraba. Se dice que un sacerdote de nombre Acamapichtl
intentó realizar un ritual para atraparla y así acabar con sus amenazas pero fue
en vano la Cihuacoatl siguió asustando a los aztecas.
Ella salía cada noche con su conocido lamentó y se robaba a los niños para
llevárselos al lago. La única forma de complacerla era cuando los naturales
sacrificaban a sus propios hijos como una manera de retribuirle a la Cihuacoatl
por aquellos que había perdido. Entonces la Cihuacoatl regresaba aún habitual
resignación cargando una cuna vacía. Irónicamente las madres cuyos hijos
serán sacrificados para apaciguar a la Cihuacoatl, ve nada en todo el día por
las plazas y callejas, gritando: -¡Ay mis hijos! ¿Dónde están mis hijos?
Cuando Los Conquistadores españoles tomaron la ciudad, decidieron que el
lago era peligroso y comenzar a cortar los suministros de agua que venían del
mar. El sitio donde alguna vez estuvo el lago, poco a poco, se convirtió en un
valle. Con el nuevo rostro de la ciudad, reapareció la figura de la mujer
serpiente quien vestida de blanco, seguirá llorando eternamente los hijos que
ya nunca volverán.
8. 7
LEYENDAS COLONIALES
a) El árbol del vampiro (Guadalajara)
En época de la colonia, la Nueva España se convirtió en una región muy
atractiva para los Aventureros provenientes de Europa; el auge por conocer las
nuevas tierras duró muchos años. Se cuenta que entre tantos viajeros que
arribaron el nuevo mundo se encontraban personaje muy singular: un
caballero, probablemente de origen inglés, que siempre vestía de negro.
Luego de visitar varias ciudades, de hacer largos viajes decidió establecerse
en Guadalajara, en lo que hoy es el poblado de Belén. El caballero no
acostumbraba hablar con nadie, vivía solo, no contaba con sirvientes, a pesar
de darse a conocer como uno de los hombres más ricos de la región.
Semanas después de su llegada la vida de los habitantes comenzó a cambiar.
El primer día aparecieron varios animales muertos vacas perros borregos y
algunos gatos; los sueños de estos creyeron que los responsables de los
ataques era una jauría de lobos. El segundo día pasó lo mismo y el tercero
igual a pesar de que los hombres se turnaban para vigilar su número es no
lograban dar con el culpable. La situación empeoro, cuando días después, los
crueles ataques incluyeron niños: cinco infantes amanecieron muertos y sin
sangre; los ataques se repitieron en días posteriores. La gente sentía pánico,
los niños no querían salir a la calle y mucho menos a dormir; cuando
empezaba a caer la tarde, las mujeres iniciaban rezos, una y otra vez,
mantenían a sus hijos junto a ellas y esperaban, temerosas, la noche.
Un día los hombres del pueblo se armaron de valor y con machetes, palos y
antorchas decidieron ir en busca del asesino. En una casa a las orillas del
pueblo, la gente escucho unos gritos, rápidamente se dirigieron a ese lugar, al
abrir la puerta se encontraron al caballero, vestido de negro, mordiendo a uno
de los campesinos, quien ya había muerto. El miedo les duro poco, pues llenos
de valor rodearon al vampiro y uno de ellos le clavó una estaca en el pecho. Al
día siguiente fue sepultado, sobre su cuerpo se colocaron grandes lapidas de
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cemento, con la intención de que el hombre no volviese a atacar por las
noches.
Tiempo después las lapidas se rompieron y un árbol salió de la tumba, se cree
que nació de la estaca clavada en el pecho del vampiro. Cuenta la leyenda que
el árbol sangraba cada vez que alguien recortaba un trozo, se dice que era la
sangre de las víctimas asesinadas, las cuales pueden observarse en el tronco
del árbol, al anochecer. Finalmente se cree que este árbol debe mantenerse
con vida, ya que si es talado o sus raíces se secan, el vampiro regresará a
cobrar venganza.
b) El diablo en pañales.
Cierta vez, ya muy entrada la noche, circulaba en las callejuelas retorcidas y mal
formadas de la ciudad un hombre en evidente estado de ebriedad, las calles eran
alumbradas apenas con unos pequeños candiles que al reflejar las sombras
formaban tétricas figuras fantasmagóricas, a lo cual el borrachín no daba muestra
de sobresalto. Andando unos pasos más, escuchó levemente el llanto de un bebé,
era un llanto ahogado. Se detuvo tambaleante pero ya no escuchó nada más que
el aullar de los perros en la lejanía.
Andando unos metros más de nuevo escuchó ese llanto inconfundible, ahora si
era claro era el llanto de un bebé que se escuchaba más fuerte, el hombre buscó
en los rincones, y justo debajo del puente que cruzaba se hallaba la infortunada
criatura rosada y regordeta que solo estaba cubierta por una pequeña manta. El
hombre levantó al bebé sin antes maldecir a la desnaturalizada madre. Aun
tambaleándose el hombre siguió su camino aun murmurando pestes contra la
infame que dejó a su pequeño crío en semejante situación. No había llegado ni al
siguiente faro y empezó a tener la impresión de que el niño pesaba un poco más.
Avanzó 4 calles más y evidentemente se percató de que en chiquillo era más
grande y más pesado, ya no podía con él, parecía que en lugar de niño llevaba un
cerdito cargando, y se acercó a la luz del siguiente faro para ver bien al niño,
levantó la manta y cuál fue su sorpresa al comprobar que efectivamente era un
cerdo lo que llevaba cargando, el cual lo miró con los ojos encendidos, chasqueó
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los colmillos produciéndole el terror más profundo que se pueda sentir, lanzado al
animal por los aires y se fue corriendo del lugar, cuenta la leyenda que este bebe
se sigue apareciendo a los hombres que se embrutecen en el alcohol y se
olvidaban de sus obligaciones familiares
c) El pirata barbillas (Campeche).
Se había convertido en el siglo XVI el puerto más importante, hasta aquí llegaban
barcos de Europa, comestibles, telas, vinos esto acarreo muchos problemas pues
los piratas arribaban a la costa, secuestraban a personas y pedían rescate,
raptaban mujeres, asaltaban los negocios e incendiaban lo que les daba la gana.
Campeche fue víctima de estos criminales, el Pirata de Barbillas es el bandido que
más se le recuerda. Cuenta la leyenda, después de asaltar e incendiar la torrecilla
de Lerma, (era para alertar a las tropas de la presencia de estos bárbaros) el
mentecato llegó a la costa para cobrar un rescate.
Llegó a tierra y cambio su identidad, la gente pensó que era otro extranjero más,
que pondría un negocio, mientras caminaba por las calles vio a una mujer de
extraordinaria belleza era hija de un hombre rico.
El padre de la muchacha la cuidaba, era su única heredera así que no permitía
que cualquier pelado se acercara a ella. Para enamorarla era requisito venir de
buena familia y con magnifica posición económica, la hija acostumbrada al mayor
de los lujos. El padre quería que su hija no cambiase y exigía que el que se
comprometiera con ella tendría que cumplir todos sus caprichos.
El Pirata de Barbillas logró acercarse a la joven y ella aceptó sus galanteos, en
unos días le dijo cosas tan bonitas que la empezó a enamorar, llegó a los oídos
del celoso papá y ordenó investigar al atrevido caballero.
El Pirata de Barbillas había regado en todo su camino, que poseía una gran
riqueza y era hijo de un hacendado de Cuba. El padre prohibió a su hija que lo
viera, porque nadie sabía nada de él, la orden molestó a la chica y siguió viendo a
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escondidas al Pirata de Barbillas, una noche los vio abrazándose, en ese
momento el padre lo descubrió diciendo; eres el temible Pirata de Barbillas, -sí,
solo me divierto mientras estoy aquí en el puerto- contestó.
Ambos hombres protagonizaron una lucha y terminó en una sangrienta pelea, el
pirata dio muerte al padre la joven lloraba por el engaño y no podía creer ver a su
padre muerto. La leyenda cuenta que la mujer nunca se recuperó de la impresión,
de presenciar el asesinato de su padre y el dolor del engaño de aquel hombre que
ella se enamoró, se le recluyó en un convento y gritaba; ¡pirata, pirata! No pasó
mucho en que la joven murió, las personas allegadas a la familia aseguran que
hasta la fecha a veces oyen lamentos de la mujer y los gritos claros maldiciendo:
¡pirata, pirata!
LEYENDAS MODERNAS
a) La aparecida en San Blas (Nayarit)
Se cuenta que en el muelle de San Blas una anciana camina en la playa por las
noches con un vestido viejo de novia con los cabellos sueltos llorando sin parar.
La gente que la ha visto, se mira tan real que la quieren ayudar, y ella sigue
caminando sobre las aguas del mar y desaparece.
Se dice que una muchacha se enamoró de un hombre pobre, esa relación, las dos
familias lo llevaban a gusto, solo que el joven decidió irse de la ciudad, para ganar
un poco más de dinero para reunir para la boda.
Le hizo prometer a la novia que lo esperaría; él iba a viajar en barco, ella lo fue a
despedir y no se quitó de la playa hasta que desapareció en el horizonte el buque.
Ella sentía un mal presentimiento, sin faltar un solo día acudía al muelle para
esperar el regreso de su novio, ella se vestía igual como cuando lo fue a despedir,
para que el no fuera a confundirse y así sin perder el tiempo irían a casarse.
Cuando llegaba un barco miraba ansiosa a todos los que descendían sin ver a su
amado. Pasaron los años y ella seguía aferrada con el novio, un día pasó un
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amigo de su novio y le dijo que tan pronto que se fue a la otra ciudad se enamoró
y se casó con una joven y tuvo con ella hijos, pero por cuestiones de trabajo él se
embarcó y este se hundió en el mar, jamás apareció el cadáver, la joven en lugar
de entristecerle se molestó, le dijo -que era mentira-que ella lo esperaría.
Con los años los pobladores la consideraban una loca y siempre con el mismo
vestido no concebían como una mujer esperara por tanto tiempo a un hombre que
nunca regresaría. Muchas personas querían llevarla al manicomio, pero ella
lloraba y suplicaba que tenía que permanecer en el muelle, que su novio regresará
por ella, los habitantes la dejaban ahí en el muelle.
Cuando pasaban junto a ella, inspiraba temor porque había perdido la razón, la
vejez la alcanzó pasó 50 años pasó a cabellos grises, fiel a su sitio sonriendo
cuando veía un barco llegar. Un día una tempestad ella camino al mar las olas
crecieron llevándosela, el mar la regresó ya sin vida, los pobladores se encargaron
de su funeral.
Hasta la fecha se cuenta que aparece una anciana en el muelle que camina y
sigue caminando sobre las olas del mar, se escuchan sus lamentos.
b) Carretera a la Rumorosa (Mexicali)
Hace mucho tiempo, sobre la carretera de la Rumorosa, un trailero manejaba a
toda velocidad rumbo a Mexicali, pues su esposa estaba a punto de dar a luz y
quería llegar rápido a su casa, llevaba dinero para lo que se ofreciera, más cuando
iba a tomar una peligrosa curva perdió el control y se estrelló contra unas rocas.
El chofer se bajó del tráiler todo aturdido, se miró el cuerpo y se alegró al darse
cuenta que no le había pasado nada. Entonces esperó a que pasara alguien para
que le ayudara o lo llevara a la ciudad, pero durante mucho tiempo nadie cruzó
aquellos cerros. El hombre se quedó dormido y cuando despertó se sorprendió al
ver todo oscuro; no entendía qué pasaba así que decidió caminar, caminó y
caminó, avanzó una buena distancia, sabía que la salida de la rumorosa estaba
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cerca y sin embargo, cuando se dio cuenta se encontró en el mismo lugar del
accidente...
A los tres días hallaron el camión pero no al conductor; de él no se supo nada.
Hasta que en una ocasión, años más tarde, un muchacho que manejaba un tráiler
se detuvo porque un hombre le hizo señas.
—Amigo, me llamo Francisco Vázquez y necesito con urgencia que mi mujer
reciba un dinero porque va a tener un niño. Yo no puedo ir, mi tráiler se
descompuso y no lo puedo dejar aquí.
—sí, señor, con gusto se lo llevaré —contestó el muchacho— sólo dígame dónde
vive su mujer
El hombre le entregó un papel en el que anotó la dirección y el nombre de su
esposa. Al despedirse, el joven sintió que un escalofrío le recorría la espalda, pues
al darle la mano, el señor estaba tan frío como un muerto. El muchacho no le dio
importancia, subió a su tráiler y se encaminó a Mexicali.
Al día siguiente, fue a buscar a la señora pero no la encontró; alguien le dijo que
ya no vivía ahí, que hacía tiempo se había cambiado. Sin darse por vencido,
preguntó en varios lugares hasta que, por las señas del papel, una anciana le
indicó dónde vivía. Al llegar dio unos golpes en la puerta y esperó a que le
abrieran.
— ¿dígame joven? —le preguntó la señora.
—perdone, ¿aquí vive la esposa del señor francisco Vázquez?
—Soy yo —contestó ella— ¿qué se le ofrece?
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—Ayer en la carretera, su esposo me pidió que le trajera este dinero, porque se le
descompuso el tráiler...
— ¡no puede ser! —Lo interrumpió la señora tapándose la boca—. Mi marido
murió hace cinco años.
Al muchacho le temblaron las piernas, le dejó el dinero a la señora, que se puso a
llorar, y se fue para su casa todo asustado. Cuando llegó, apenas había cerrado la
puerta cuando descubrió frente a él al frailero de la carretera y brincó espantado;
sentía que una fuerza extraña lo invadía.
— ¡gracias, amigo! —le dijo el muerto con voz cavernosa, mientras desaparecía
El joven podía escuchar los latidos de su corazón y tardó un buen rato en
recuperarse de la impresión. Tiempo después, al platicar con unos amigos, se
enteró de que el frailero ya se les había aparecido a otros hombres, mismos que
no habían cumplido el encargo del muerto, por eso se les fue secando el cuerpo
hasta quedar como esqueletos.
Conclusiones.
Por lo ejemplos que se puede observar, tenemos relatos espectaculares que
cuentan cosas inexplicables. Así como estos, hay más en diferentes estados de
nuestro país, cada rincón, cada lugar, cada evento puede tener consigo una
leyenda oculta sin saberlo. México es rico en este tipo de relatos, podemos
aprender más de nuestra cultura y sentirnos orgullosos de tener tantas leyendas
que realmente son parte de nosotros los mexicanos.
15. 14
Bibliografía
Gonzales, M, & Círigo, A. (2011). leyendas mexicanas de todos los tiempos.
México, D.F: mexicanos unidos, s.a., pp. (13-15), pp. (34-36), pp. (59-61), pp.
(135-138), pp. (149-151), pp. (193-195), pp. (326-329) pp. (353-356).