6. Enfermedad renal causada por
inflamación de las estructuras
internas del riñón (glomérulos) las
cuales ayudan a filtrar los
desechos y líquidos de la sangre.
7. Puede ser causada por problemas específicos con el
sistema inmunitario del cuerpo, pero se desconoce
la causa exacta de algunos casos. El daño a los
glomérulos provoca la pérdida de sangre y proteína
en la orina.
8. Sangre en la orina (orina oscura, de color rojizo o
café).
Orina espumosa.
Micción excesiva.
Sangrado nasal.
Hipertensión arterial.
Sangre en el vómito o en las heces.
9. Es un grupo de enfermedades que causan
inflamación de las estructuras internas del riñón
(específicamente, los glomérulos).
El síndrome nefrítico agudo puede estar asociado
con el desarrollo de hipertensión arterial,
inflamación de los espacios entre las células del
tejido renal e insuficiencia renal aguda.
10. • Sangre en la orina (orina de aspecto
oscuro, de color té o turbia).
• Visión borrosa.
• Disminución en el volumen
de orina (puede producirse poca
o ninguna orina).
• Dolores y achaques generalizados
(dolor articular, dolores musculares).
• Malestar general (indisposición).
• Dolor de cabeza.
• Movimiento lento, despacioso, letárgico.
• Hinchazón de cara, órbitas, brazos,
manos, pies, piernas, abdomen u otras áreas.
11. Es la etapa avanzada de un grupo de trastornos
renales, los cuales producen inflamación y
destrucción lentamente progresiva de las
estructuras internas del riñón, llamadas
glomérulos.
12. Esta afección causa hipertensión arterial e
insuficiencia renal crónica.
Los síntomas específicos abarcan:
Sangre en la orina (orina oscura, de color óxido o
marrón).
Orina espumosa.
13. Análisis de orina, con examen del
sedimento urinario.
Análisis de sangre.
Pruebas de funcionamiento renal.
Biopsia renal.
14. Antibióticos
Reposo en cama
Dieta puede incluir restricción de sal, líquidos y
potasio
Corticosteroides
Antiinflamatorios
Inmunodepresores
Realizar diálisis
15. • Debe de mantenerse a la persona en reposo durante toda
la fase aguda de la enfermedad.
• El control regular de la presión arterial proporciona un
buen índice de la evolución y pronóstico del trastorno.
• Debe medirse la cantidad de orina emitida cada día y pesar
a la persona cotidianamente. También debe procederse a
un estricto registro del balance de entradas y salidas de
líquidos.
• Manténgase una dieta hiposódica mientras persistan los
edemas y la hipertensión arterial.
• Suele indicarse restricción Hídrica, administrando a la
persona 500 ml de agua más que la cantidad de orina
emitida al día anterior.