2. Competencia:
240201045 Orientar procesos formativos en
la metodología a distancia con base en los
planes de estudio.
Resultado de aprendizaje:
24020104501-2 Analizar la naturaleza y el
rol que cumplen maestro- estudiante como
actores principales de un proceso formativo
mediado por las tecnologías.
3. 1. Introducción.
2. El rol del profesor en la educación a
distancia.
3. Los docentes y la tecnología.
4. El estilo docente y el perfil del alumno
en la modalidad tutorial a distancia.
5. Características del estudiante virtual.
6. Conclusiones.
4. En esta comunicación se establecen las
nuevas características del rol docente, pues
como dice Bianco et al. (2002) “Por el lado
de la demanda, se destaca que ya ha
comenzado un importante cambio en los
patrones de consumo y en el empleo del
tiempo tanto laboral como de ocio. También
se registran nuevas formas de interacción. Las
TIC´s1 permiten comunicaciones masivas y
al mismo tiempo interactivas.”
5. Estos consumidores también plantean a las
instituciones educativas nuevos modelos de
vinculación pedagógica y organizacional; pero, la
agregación de nuevas tecnologías, requiere de
cambios organizacionales profundos. Por otra
parte, la creatividad y la pertinencia de los
rediseños de las estructuras organizativas
establecerán de alguna manera la capacidad de
las entidades para asimilar las Tics y traducir su
potencial en mejoras genuinas en el desempeño.
6. El docente, actor primordial en una
organización educativa, se transforma en
uno de los factores clave ya sea para el
cambio organizacional hacia modelos
pedagógicos sostenidos por Tics, o bien
para sostener con éxito estos modelos.
7. En general, la función básica del profesor
tutor en la modalidad virtual en los centros
de estudio consiste en servir de ayuda a los
alumnos para que asimilen los
conocimientos, que dominen los objetivos
de aprendizaje programados en los
materiales y para que, con base en las
orientaciones procedentes lleguen a
obtener la formación académica deseada.
8. El ejercicio del rol del tutor y su reflexión
sobre la enseñanza se centran en el
aprendizaje, por esto su figura a diferencia
de las propuestas presenciales, ya no es la
del experto transmisor de contenidos, sino
la de animador y vehiculizador del
aprendizaje autónomo que realizan los
alumnos.
9. Como animador y facilitador de los
aprendizajes es importante que el tutor
conozca y detecte las fuentes de obstáculos
en el aprendizaje, de manera que pueda
generar las estrategias pertinentes para
superarlos. También, debe poder guiar
adecuadamente las instancias de tutoría
grupal promoviendo el trabajo cooperativo
y la actitud solidaria, como las de carácter
individual favoreciendo la autonomía.
10. Es necesario resaltar la importancia de la
capacitación del docente para encarar las nuevas
formas de relación con los alumnos. Nunca como
ahora, se ha visto con claridad el significado de su
rol de tutor, guía y orientador; porque ya no es más
el transmisor único y privilegiado del saber. Cada
tecnología propone una modalidad de saber que
proviene de su propia estructura y construye
interlocutores con competencias específicas tales
como: saber ver, escuchar, leer, vincular. A partir de
la combinación de medios tecnológicos, surge
también un nuevo tipo de competencias cuyo
alcance no está todavía suficientemente explorado.
11. La labor del pedagogo es la de abrirse a las
tecnologías incorporando al diseño didáctico las
nuevas competencias que éstas generan.
También, en su que hacer debe tener presente la
importancia de su rol y el de la escuela como
agentes de socialización. Esto es especialmente
importante en este momento en que se observa
un fenómeno muy significativo: el hogar vuelve a
ser el núcleo de la educación formal partir de la
introducción de las redes virtuales (Bontá, 1998).
12. La actuación del docente se ha transformado a lo
largo del tiempo. Ha pasado de ser depositario único
y transmisor de los saberes a un “gerenciador de
información”. Estos cambios en sus funciones se
reflejaron también, en el cambio de metodologías de
enseñanza. Hoy no resulta suficiente que el profesor
únicamente esté informado, ésta no puede ser la
única procedencia del contenido, pues la cantidad
de información a manejar es mucho mayor. Por otra
parte, en estos tiempos, el docente tiene otras tareas,
tales como fomentar la convivencia, la participación,
la cooperación, la autonomía del alumno, la
autocrítica, la ética y la reflexión (de Pablo Pons,
2001).
13. Sumado a esto, el docente esta condicionado por las nuevas
características organizacionales y pedagógicas surgidas de
la implementación de tecnologías que modifican las
modalidades de la comunicación. Por ello, el estilo docente
debe producir un giro que, como establece Casas Armengol
(1998), tenga:
a) Un conocimiento profundo, actualizado y teórico-práctico
de su disciplina.
b) Dominio de las teorías y las metodologías de la
enseñanza y el aprendizaje, especialmente en educación no
presencial.
c) Manejo de las nuevas tecnologías informáticas y de
comunicación y de su utilización en el proceso de
aprendizaje y por último capacidad para formular
estrategias de capacitación originales y pertinentes.
14. El perfil docente que se describió es el
que están requiriendo las nuevas
modalidades de enseñanza y de
aprendizaje basadas en tecnologías
capaces de generar nuevos estilos de
comunicación.
15. Dentro de esta modalidad existen dos roles
diferentes, que implican funciones distintas y por
ende plantean características o estilos disímiles. Uno
de ellos es el contenidista, o experto en el área
que escribe y dispone los módulos sobre los
que el alumno trabajará.
La característica de este docente será tal que le
permita trasladar y adecuar el conocimiento
disciplinar de manera que sea asequible por el
alumno, pensando que éste deberá trabajar solo.
Por esta misma razón, el docente debe ser capaz
de anticiparse a las preguntas e inquietudes del
lector proveyendo suficiente material aclaratorio.
16. El otro rol docente es el de tutor; y su función es la de
acompañar al alumno en su aprendizaje. En este caso, la
característica primordial que se pone en juego es la
capacidad de establecer vínculos empáticos con otros.
Por otra parte, el tutor debe poder aceptar que la relación
con el alumno muchas veces se vaya transformando desde
lo formal hacia lo paternalista, lo cual puede redundar en un
beneficio para el aprendizaje y por otra parte esa
afectividad es la que se traslada a la institución produciendo
un sentido de pertenencia, tal como si su aprendizaje fuera
presencial.
17. Aquel que estudie bajo este sistema deberá
contar con una serie de requisitos y
habilidades para saber si su perfil es el apto
en este modelo educativo. Como
características podemos mencionar:
Es una persona auto-motivada.
Posee un espíritu independiente.
Adopta rápidamente las herramientas
tecnológicas necesarias para completar el
curso.
18. Sabe comunicarse mediante la escritura, que es el principal
medio de comunicación interactiva.
Se compromete a empeñar tiempo, ya que el trabajo puede
ser igual de pesado que asistir a la escuela presencial.
El éxito depende de su propio esfuerzo y dedicación, ya
que el proceso de aprendizaje se da fuera del aula.
Esta dispuesto a crear grupos de trabajo.
Asumen seriedad en los foros y realizan tareas.
Comunica necesidades y preocupaciones.
No debe ser egoísta, ya que tiene que compartir y aportar.
Interactúa no sólo con el tutor, incluso lo hace con los
compañeros.
Se adapta a nuevos estilos de aprendizaje.
19. Estas características marcan un enfoque del
desarrollo de las competencias del
individuo, Por lo tanto, estas ayudan al
individuo a formarse como una persona
libre y autónoma y un actor ético y
constructivo en la sociedad del
conocimiento, consciente de sus derechos y
obligaciones y capaz de asumir las
consecuencias de sus decisiones.
20. Nos encontramos, por tanto ante un cambio en los
procesos de aprendizaje que los más jóvenes viven
como parte de su formación inicial básica y los más
adultos viven, a menudo, como un problema
personal de adaptación a un mundo cambiante.
Para poder llevar a cabo este proyecto se necesita
de una tecnología lo suficientemente avanzada, es el
recurso capaz de cumplir con el manejo de este tipo
de información a altas velocidades. Las tecnologías
de la información y la comunicación, en general, son
necesarias porque son las herramientas de trabajo.
21. Nos queda por apuntar una última cuestión sobre la
enseñanza a distancia, las sociedades son cada vez
menos homogéneas. El multiculturalismo es un
enfoque central en la educación.
De la misma manera que saber es poder, también la
conciencia y la comprensión de lo diferente conduce a
aceptarlo y a que la sociedad sea cada vez más
igualitaria, donde los derechos de todos los
ciudadanos, al margen de su pertenencia racial o de
género, son igualmente aceptados.
22. La educación a distancia permite que estudiantes
que viven en un medio rural tengan el mismo nivel
que los que viven en zonas urbanas; permite que
estudiantes que viven en zonas prósperas de una
ciudad se relacionen con otros que tienen menos;
permite que alumnos racialmente diferentes
participen juntos en proyectos multiculturales, por
consiguiente la educación a distancia sí está
cambiando las cosas.
En la medida en que la tecnología por redes se está
consolidando, este tipo de interacciones se
convertirán en algo normal, en la regla y no la
excepción.
24. Expertos temáticos:
Camila Andrea López Orozco.
Luisa Fernanda Morales Herrera.
Asesor pedagógico:
Amanda Helena Peña Osorio.
Guionista:
Carlos Gabriel Gutiérrez Padilla.
Equipo de diseño:
Luis José Flórez Altamar.
Carolina María Márquez Rodríguez.
Programador:
Manuel Enrique Pérez Castro.
Líder del proyecto:
Carmen Patricia Mejía Sajona.