1. Concepto
Es una bajada del nivel de azúcar
en la sangre que se manifiesta con
síntomas como malestar general,
mareo, temblor, sudor frío, Puede
ocurrirle a cualquiera, pero es más
común en diabéticos.
2. Diagnostico
Se le realizará en primer lugar una valoración de azúcar en
sangre. Niveles por debajo de los 70mg/dl se considerarán
asociados a un estado hipoglucémico. Del mismo modo,
será útil preguntar al paciente acerca de sus hábitos
alimenticios, consumo de alcohol y estilo de vida en
general. A pesar de que el diagnóstico de esta patología es
relativamente sencillo, debido a la coincidencia de
muchos de sus síntomas con los de otros trastornos,
averiguar el origen de los mismos puede suponer un
verdadero rompecabezas. De ahí la importancia de
conocer los datos clínicos, antecedentes y estilo de vida
del paciente antes de comenzar con el estudio.
3. Tratamiento
El método más rápido para incrementar los niveles de
azúcar una vez se ha producido su bajada es consumir
algún alimento azucarado, a ser posible acompañado por
algún otro alimento con un cierto contenido graso y
proteico.
Otra posibilidad es disponer de tabletas de glucosa. Estas
pastillas se absorben a gran velocidad y suponen un
incremento del nivel de glucosa en sangre de 5mg/dl por
cada gramo ingerido.
En los casos más graves el tratamiento consistirá en la
aplicación de inyecciones de glucosa o glucagón
(hormona producida por el páncreas y cuya función es el
control de los niveles de glucemia).
4. Prevención
La mejor opción para las personas que tienden a sufrir bajadas
de azúcar es llevar un control estricto tanto de su alimentación
como de sus horarios. Normalmente se recomienda distribuir el
número de comidas diarias en cinco o seis (y no saltarse
ninguna), con el objetivo de repartir equilibradamente la
cantidad de glucosa ingerida a lo largo del día, y mantener así un
nivel regular en el organismo. En cuanto a la composición de los
alimentos, el consumo de carbohidratos complejos (que se
absorben lentamente y son empleados por el organismo de
manera más eficiente), fibra y grasa (a ser posible no abusar de
las grasas saturadas) favorece el equilibrio del metabolismo. Hay
que reducir el consumo de alcohol, y nunca beberlo en ayunas.
Los zumos de frutas y los azúcares simples (de rápida absorción),
por su parte, resultan de gran ayuda cuando se sienten los
primeros síntomas de una bajada de azúcar.
5. Síntomas
Los síntomas de un estado hipoglucémico varían de
unas personas a otras y, en función del nivel de
hipoglucemia del paciente, suelen comenzar cuando
los niveles en sangre se encuentran próximos a los
50mg/dl, aunque este valor es variable para cada
individuo.
Los efectos que sentirá un paciente que está
sufriendo una bajada de azúcar serán en la mayoría
de los casos: cansancio, malestar general,
adormecimiento y temblor. También es muy común la
presencia de sudores fríos, palpitaciones,
mareos, ansiedad, náuseas, vértigo, dolores
musculares y palidez.