4. Espiritualidad y sexualidad
•Cuando separamos la sexualidad de nuestra espiritualidad, tornamos a la sexualidad en algo distorsionado.
•La espiritualidad enriquece nuestra sexualidad.
•Lo espiritual no es cuestión de cultos y liturgias.
5. Espiritualidad y sexualidad
•Lo espiritual se relaciona con todo lo que somos.
•No hay algo como lo material es malo y lo espiritual es bueno.
•Dios creó todo y dijo: “Dios miró todo lo que había hecho, y consideró que era muy bueno” (Génesis 1:31)
7. Comunión
•Muchos cristianos usan la expresión comunión sólo para referirla a Dios. Es un error.
•La Biblia habla de comunión con:
–Dios.
–Con los demás.
–Consigo mismo.
–Con la naturaleza.
8. Comunión
•La vida sexual se refiere a la comunión en esos cuatro aspectos.
•La sexualidad sana busca la comunión con el ser amado.
•No sólo la relación física. Eso es “orgasmo manía”.
10. El diseño de Dios
•Todo lo que existe funciona dentro de un esquema pre-diseñado.
•Es un error no analizar el diseño de Dios.
•Comprender la propia sexualidad dentro de lo que Dios ha diseñado previamente, con un propósito.
11. El diseño de Dios
•El entendimiento sexual no se puede realizar de manera plena antes del matrimonio por dos razones claves:
–Tiempo
–Seguridad emocional
12. El diseño de Dios: Tiempo
•Una pareja normal necesita tiempo para vivir una sexualidad sana y compatible.
•La sexualidad casual produce más frustración que alegría.
•El tiempo de comunión hace que la pareja alcance plenitud en todos los ámbitos, incluyendo el sexual.
13. El diseño de Dios: Seguridad
•La sexualidad sana no se trata de funcionamiento de órganos.
•Una sexualidad sana exige encuentro de personas.
•La vida emocional es clave para una sexualidad sana.
•Sin seguridad emocional se tiene sexo, pero no plenitud.
15. El amor verdadero
“Fuerte es el amor, como la muerte, y tenaz la pasión, como el sepulcro. Es el fuego ardiente del amor. Ni las muchas aguas pueden apagarlo, ni los ríos pueden extinguirlo. a cambio del amor, sólo conseguiría el desprecio” (Cantar de los Cantares 8:6-7).
16. El amor verdadero
•El amor verdadero transforma.
•El amor que procede de Dios es distinto a una mera pasión.
•El amor verdadero no tiene nada que ver con hacer lo malo.
•El amor verdadero busca no el placer sensual personal, sino vivir la voluntad de Dios.
17. El amor verdadero
El amor verdadero es: “paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. El amor no se deleita en la maldad sino que se regocija con la verdad. Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta” (1 Corintios 13:4-7).
19. La santidad de lo que Dios hace
•“Manténganse santos, porque yo soy santo” (Léviticos11:44)
•“Yo, el Señor su Dios, soy santo” (Léviticos19:2).
•El sexo no tiene sentido a menos que comprendamos que es santo.
•Todo lo que Dios hace es santo.
•Fuera del ámbito matrimonial pierde su santidad.
21. Imagen de Dios y sexualidad
•«Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó» (Génesis 1:26).
•Cuando varón y mujer se unen en matrimonio, santo, dirigido por Dios, llegan a representar plenamente la imagen de Dios.
•Sin Eva, Adán no era una representación plena de la imagen de Dios.
22. Imagen de Dios y sexualidad
•Por eso Pablo se refiere a esto como un “misterio” (Efesios 5:32). Representa la unión entre Cristo y su iglesia.
•Por esa razón Pablo es tan fuerte contra quienes caen en la fornicación o el adulterio (1 Corintios 6:16).
24. Cristo y la iglesia
•La unión entre un varón y una mujer es una representación de la unión de Cristo y la iglesia.
•No es algo para ser tomado a la ligera.
•¿Podrá una relación fornicaria (prematrimonial) representar esta unión?
•Una pareja que desobedece a Dios, podrá representar la imagen de Dios de manera adecuada.
26. Creer es actuar
•Ser cristiano no se trata de “hablar”, sino de actuar.
•La Biblia dice: “Por sus frutos los conoceréis” (Mateo 7:20).
•Los cristianos somos “cartas abiertas”, leídas por todos (2 Corintios 3:2).
•Lo que hacemos es una muestra de lo que somos.