El documento describe tres posiciones que una persona puede adoptar frente a la fe cristiana. La Posición A involucra una fe "cosificada" donde lo sobrenatural es lo más importante y los seres humanos están sujetos a leyes divinas. La Posición B ve a las personas como individuos libres frente a Dios que buscan coherencia entre fe y vida. La Posición C involucra a personas comprometidas con construir un mundo mejor a través de la acción, en línea con el amor y justicia de Dios.