Posturas de la moral y la ética de la masonería en el contexto de la pandemia
1. POSTURAS DE LA MORAL Y LA ETICA DE LA MASONERIA EN EL
CONTEXTO DE LA PANDEMIA
M:.R:.H:. Enrique Alva Anduaga
Gran Maestro de la Gran Logia Oriental del Perú
La masonería es la institución orgánica de la moralidad, sus principios son: La
moral universal y la ley natural dictada por la razón y definida por la ciencia.
Reconoce al ser Supremo; no admite más diferencias entre los hombres que
el mérito y el demerito, a nadie rechaza por sus creencias y opiniones y no da
cabida, en su seno, a los debates acerca de religión o política. Los masones
tienen el deber de conducirse moral y decorosamente, dentro y fuera de la
logia; los masones nos damos el título de hermanos; deben amarse,
protegerse y vivir en buena armonía.
La masonería tiene su Declaración de Principios, Código de Moral Masónico,
Decálogo de Moral Masónico, Reglas de Moral Masónica y las Máximas.
La masonería pregona la necesidad impostergable de dedicarnos al estudio
consiente, pues a través de el llegaremos a dominar nuestra naturaleza
inferior y nacerá en nosotros ese don divino, esa virtud extraña en este
mundo materialista en que vivimos “la humildad”. Debemos entender que
los fines de la masonería no pueden ser considerados a la ligera, ya que
entonces correríamos el riesgo de caer en conceptos vulgares, egoístas y
parciales, los cuales están reñidos totalmente con los principios éticos y
morales y universalistas que mantiene a nuestra augusta institución.
El masón debe abrirse a todo aquello que tienda a expandir su conciencia
hacia lo universal, hacia lo infinito y así, como consecuencia de una búsqueda
superior, e ira creciendo poco a poco la grandeza de su corazón y sus actos
serán cada vez más magnánimos y más sabios, lo cual a su vez le ira
aproximando con paso seguro hacia la dicha consiente y eterna.
2. Cuando el pensamiento del hombre se expande, se universalice, y sus actos
comiencen a ser cada vez menos egoístas; su meta dejara de ser el “YO”
entonces comenzara a a dedicarse a hacer el bien a su prójimo afligido,
llenándose su corazón de dicha al ver dichosos a los seres que lo rodean, al
poder llevar consuelo en un corazón afligido o al proporcionare el pan a una
boca hambrienta y desnutrida. Así es el masón verdadero, magnánimo, puro
sincero, humilde y amoroso con todos y con todo, pues su pensamiento
universal lo saca de la estreches en que vive el hombre cuando limita sus
actos y sus afectos al círculo cerrado de su familia, de su sociedad o de su
patria para extenderlas
Hoy más que nunca estas ideas se reafirman y tenemos que tener presente
que nuestra obligación frente a la pandemia y pos pandemia debe ser de
crear una nueva sociedad basada en la práctica de la tolerancia, de la libertad
de conciencia, de la fraternidad de la solidaridad y de la paz, impulsándolas
en nuestra patria, sin descuidar la oportunidad de que se nos puede
presentar para extenderla como ideario universal, más allá de nuestras
fronteras geopolíticas, porque no constituimos una isla en el continente
Americano ni en el mundo tenemos por delante una tarea formidable que
realizar.
Procuremos en conjunto establecer tareas parciales en favor de la niñez. De
la juventud, de la mujer, del trabajador; seamos los portavoces de la unidad
social en cada uno de nuestros países. Esta tarea que cada uno de los
masones tiene por delante. No es una tarea fácil ni se podrá alcanzar en
corto tiempo. Es posible que algunos las consideremos demasiados
ambiciosas o simplemente utópicas; pero la Orden ha sabido siempre
marchar con regularidad hacia la consecución de sus nobles propósitos
humanistas. Logro en el pasado asentar los conceptos de libertad política, de
igualdad social, de libertad de pensamiento y de creencias. En la actualidad a
defendido la libertad de expresión, la libertad de economía y la libertad de
educación, todos estos principios más los de fraternidad, de solidaridad, de
dignidad del trabajo, constituyen las bases de la cultura moderna y están
implícitos en leyes y constituciones. Es labor y obligación del masón que
3. estos principios no sea letra muerta ni sean tergiversados. Depende de
nosotros recuperar el sitial de preponderancia de la masonería en la sociedad
profana, siempre que nos compenetremos bien del objetivo central de la
Orden y de sus objetivos generales y particulares. Es preciso, además que
estemos dispuestos a proyectarnos en nuestras actividades individuales y
colectivas. Pueden ser distintas las maneras de cumplir con nuestros
propósitos masónicos, pero en la medida que seriamente realicemos esos
deberes, seremos la institución fuerte y segura que todos anhelamos.
En este tiempo en que la masonería , al igual que todas las escuelas
iniciáticas, han salido a la luz, es un imperativo cósmico que la luz, se haga
en esta era…… y decimos que la masonería ha salido a la luz , porque hoy se
ve lo que antes no se podía ver hace cincuenta años: libros que explican la
esencia de la Doctrina Masónica desde el primer grado hasta el grado treinta
y tres, al alcance de cualquier persona que busque en dos o tres librerías y
tenga algún dinero disponible, sin contar lo que encuentras en el internet. Ha
llegado la hora de que la masonería salga de las logias y sean del
conocimiento público los principios virtuosos que ella persigue. Quiera el
G:.A:.D:.U:. que la luz ,la paz y la armonía reine en el corazón de toda la
humanidad.
Debemos tener siempre en mente que para poder darnos a conocer, nuestra
divisa debe ser la paz y el amor, pero no la paz impuesta por la fuerza, sino
por la paz misma, así como el amor no puede ser impuesto por el odio sino
por el amor mismo.
Queridos Hermanos: Nuestro sentimiento de calor fraternal corresponde a
todas las fuerzas de mi espíritu y corazón con estas reflexiones, donde no se
trata de cuestiones académicas, sino simplemente de un intento de dar a
conocer como la masonería como una institución de ética y moral puede
contribuir a mejorar la humanidad. Recordemos siempre que los masones
somos de todas las naciones, de todos los idiomas, de todas las razas y su
único fin es siempre el beneficio de la humanidad como a sus hermanos y
dedicarse al estudio para intentar encontrarse así mismos.
4. Hare uso de las palabras del divino Maestro “Que la paz sea siempre con
vosotros”