Para que contraer matrimonio Civil si solo desgracias y problemas te va a causar, basta ver la realidad de nuestros Juzgados de los familiar, y la impotencia para resolver todo los problemas que acarrea la sociedad, guardemos para la historia el matrimonio civil y regresemos a la edad media donde se usaba la unión libre.
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La inutilidad del matrimonio civil por innecesario
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LA INUTILIDAD DEL MATRIMONIO CIVIL POR INNECESARIO
El matrimonio según la carta de Melchor Ocampo en la cual se sometía la mujer a
la esclavitud de su amado esposo, su crítica obligo a que dejara de leerse en la
celebración de los mismos.
Después vendría una revolución, para que los hombres que no quería ser hombres,
y para que las mujeres que no querían ser mujeres, llamados gays o lesbianas,
lucharan para que se les reconociera el Derecho de celebrar un contrato de
matrimonio, como si el mismo les viniera a resolver sus problemas, psicológicos,
sexuales, familiares y adoptar hijos sin poder tenerlos o bien de las ventas y alquiler
de vaginas de mujeres alquiladas, pero su reconocimiento no logro el objetivo
deseado, ya que un contrato publico llamado matrimonio no tiene la finalidad, ni el
ideal de lo que las partes anhelan, basta ver la estadística siguiente:
DIVORCIOS
Las estadísticas sobre nupcialidad aportan cifras sobre las separaciones legales,
estas indican que en 2019 el monto de divorcios es de 160 107. De estos, 338
representan separaciones legales de matrimonios del mismo sexo. Los divorcios
respecto a los matrimonios han aumentado de manera constante, entre los años
2000 a 2019 casi se quintuplicaron, al pasar de 7 a 32 divorcios por cada 100
matrimonios.
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MATRIMONIOS
Los registros administrativos en materia de nupcialidad indican que en 2019, en el
país, se realizaron 504 923 matrimonios legales, en 501 327 participan parejas de
distinto sexo (heterosexuales), en tanto que en 3 596 las parejas son del mismo
sexo. Aunque estos últimos representan el 1% del total de los matrimonios
celebrados en ese año, se observa un incremento notorio en su monto, en 2010 se
registraron 689 matrimonios, lo que significa que para el año 2019, su monto se
quintuplicó.
Según las estadísticas nos demuestran que un 32% de los matrimonios terminan en
divorcio, como abogado el día de ayer 18 de agosto del 2021 visite los Juzgados de
los Familiar, el edificio sede de Dichos Juzgados, y como siempre los archivos
saturados de expedientes de Juicios sucesorios inútiles y de Divorcios no se diga,
madres abandonadas, madres intentado divorciarse, buscando una pensión
alimenticia de un conyugue traidor a los ideales del matrimonio, jóvenes mujeres
litigando sus divorcios, llevando oficios para pensiones alimenticias, y exhortos para
emplazar a los irresponsables, que vergüenza ver a tantas madres, luchar por una
limosna alimentaria para sus hijos, y para ellas, vergüenza para el Tribunal Superior
de Justicia y para el Derecho de Familia a nivel Nacional.
Se me consulto un asunto de un divorcio en el año 2007, se tramito como voluntario
sin que se haya concluido, 10 años después la madre conyugue vuelve a intentar
un divorcio encausado que al carecer de recursos fue abandonado y hoy 2021
intento por tercer vez divorciarla, sin saber donde trabaja el desgraciado, sin saber
su domicilio exacto y tener que gastar en una investigación todo ellos nos lleva a las
siguientes conclusiones:
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CONCLUSIONES.
PRIMERO. El sagrado matrimonio para la Iglesia de Roma nos recuerda la frase
que se recibe en el acto diciendo: “lo que diosa unido que no solo separe el hombre”
pero viene el amante y destruye el principio enunciado.
SEGUNDO. El divorcio con causa que establecía más de quince causales que se
tenían que probar, demostrar en juicio, todas imposibles de acreditar y los jueces
declaraban improcedentes los divorcios por no demostrar las causales que se
invocaban.
Grandes negocios para los abogados litigantes, quienes cobraban sus honorarios y
si la divorciada era joven, bella y de buen cuerpo, pagaba parte de los honorarios
en especie, esas eran las maravillas del divorcio con causales. En un libro del
divorcio de mi autoria invocando la biblia el libro sagrado de Israel se establecía que
el hombre podía divorciarse de la mujer, simple y sencillamente, que era su deseo
repudiar a su esposa, aclarando que la palabra repudio no se consideraba ofensiva,
sino simplemente, una forma de manifestar que ya no se deseaba seguir unido en
matrimonio, dicho antecedente vendría siendo aplicable a la nueva reforma de
divorcio incausado, ni siquiera tiene una connotación jurídica ya que el nombre
correcto debería de ser divorcio sin causa, esta reforma resolvió el gran conflicto de
unión matrimonial, las estadísticas reportaban casos de hasta tres y cinco de
divorcio que todos resultaban improcedentes, si bien se adelantó ahora que los
conyugues queden divorciados en forma rápida y sencilla, pero unidos en una lucha
grotesca, ofensiva, y degradante para la pensión, alimenticia y para los bienes, un
tema sin resolver que al derecho de familia no le interesa su solución.
La situación actual del matrimonio sigue sino un gran negocio para los miles de
abogados que anuncian en sus despachos, en internet, en volantes, desde dos mil
pesos hasta como se deje el cliente por seguir un divorcio mal llamado incausado
debe de corregirse el termino por bien del derecho de familia y quedar solamente
como divorcio sin causa, que ni siquiera tendría porque titularse de esa forma, pues
al derogarse las causales se pide la acción de divorcio, simple y sencillamente.
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Lo más preocupante es de que el matrimonio sigue siendo un servicio que solo da
beneficio a los miles de abogados que ejercemos la profesión en perjuicio de la
mujer, de los hijos y de la sociedad, debe de establecerse un sistema más
inteligente, donde no se requiera abogado alguno, y sea le juez quien resuelva de
oficio la problemática de alimentos, custodia y bienes por bien del Derecho de
Familia, solo por citar un caso de actualidad, una mujer promueve divorcio
incausado, pagando seis mil u ocho mil pesos a su abogado sin razón o sentido
alguno, este dinero le pudo haber servido para ropa, alimentos, servicio médico de
sus trillizos y no para gastarlo en la mejor cantina con unas bellas pasantes de
litigante. Acabemos con la corrupción de un supuesto derecho de familia, de orden
público, de interés social, y todos esos conceptos inútiles, vacíos y perjudiciales,
que basta ver los rostros de las mujeres que camina por los pasillos de los Juzgados
de lo familiar.
No puedo dejar de comentar que se requiere derogar el matrimonio civil por
innecesario e inútil pues la unión libre sería mejor al supuesto contrato de
matrimonio civil y no quiero que se enojen con esta propuesta mis amigos Gay y
lesbianas ya que no necesitan de un contrato público llamado matrimonio, pero el
lector tendrá que evaluar mi propuesta.