Agendadeportiva-Directv - 26 de abril al 3 de mayo.pdf
ÍNDICE DE MASA CORPORAL, PULSO Y FORMULA DE KARVONEN
1. Antonio José Abarca Solórzano 25.646.867
Semestre 1-Seccion 8-Relaciones Industriales
2.
3.
4. Cardiopatía
Hipertensión arterial
Apnea del sueño
Diabetes tipo 2
Venas varicosas
ÍNDICE DE MASA CORPORAL CATEGORÍA
Por debajo de 18.5 Por debajo del peso
18.5 a 24.9 Saludable
25.0 a 29.9 Con sobrepeso
30.0 a 39.9 Obeso
Más de 40 Obesidad extrema o de alto riesgo
5. Es un método fácil de utilizar, sólo necesitas saber cuánto pesas y cuánto mides.
Es muy utilizado en atención primaria de la salud.
Ayuda a realizar prevención de las complicaciones derivadas de la obesidad.
El IMC refleja las reservas corporales de energías.
Permite clasificar a los individuos según su estado nutricional, que va desde desnutrición
hasta obesidad.
El IMC se usa como una herramienta de detección para identificar posibles
problemas de salud de los adultos. Sin embargo, el IMC no es una herramienta de
diagnóstico. Por ejemplo, una persona puede tener un alto IMC, pero para determinar si el
exceso de peso es un riesgo para la salud, un proveedor de atención médica necesitará
realizar evaluaciones adicionales. Estas evaluaciones pueden incluir la medición del grosor
de los pliegues cutáneos, evaluaciones de la alimentación, la actividad física, los
antecedentes familiares y otras pruebas de salud que sean adecuadas.
6. El Índice de Masa Corporal es importante para saber si estás en un peso adecuado, que te
evitará ser más propenso a padecer enfermedades crónico degenerativas como la Diabetes, la presión
alta, la ateroesclerosis, riesgo de infartos o de embolias, etc.
El cociente entre el peso de una persona y su altura expresada en metros elevada al cuadrado
es la forma de calcular el IMC (Índice de Masa Corporal), un dato de gran importancia que permite
conocer el estado nutricional en un marco que establece como normal cuando la cifra resultante se
encuentra entre 19 y 24.9.
Tomando lo anteriormente mencionado, cuando la cifra resultante del cálculo es inferior
indica delgadez y si por el contrario es superior está marcando un determinado grado de obesidad.
Así, el IMC es un indicador sencillo de utilizar que permite hacer una evaluación sobre el
estado nutricional de una persona con solo conocer peso y altura, siendo en la actualidad una de las
formas más utilizadas para diagnosticar tanto bajo peso, como desnutrición y obesidad.
Sin embargo, este índice al basarse solo en el peso y la altura tiene la limitación de no
diferenciar entre masa muscular y grasa que se encuentran presentes en el organismo y por ello, no
debe ser utilizado en todos los casos, de forma aislada para hacer un diagnóstico, ya que una persona
como puede ser un deportista profesional no puede ser catalogado como obeso por tener un IMC
elevado, ya que en su caso no se trataría de grasa corporal sino de gran cantidad de músculo en la
composición de su cuerpo.
El índice de masa corporal es una herramienta sencilla de utilizar y útil a la hora de evaluar
los riesgos asociados a la salud tanto los relacionados con el sobrepeso y la obesidad como a la
delgadez extrema, siendo un estudio que ha permitido establecer umbrales efectivos para evaluar las
zonas de riesgo.
7.
8. Sabemos que el pulso es el elemento básico para conocer el grado de intensidad con que se está
realizando un esfuerzo físico y para verificar la aptitud física de una persona.
Además, tiene un gran valor, tanto para controlar el grado de exigencia de los ejercicios y
establecer la recuperación, como para regular la intensidad con que se desea ejercitar. El pulso se toma antes,
durante y después de un programa de entrenamiento.
Dicho de otro modo, es una onda que se origina en el corazón y se propaga a través de todas las
arterias en el cuerpo. Esto sucede cada vez que el corazón se contrae (o da un latido), y hace circular la sangre
por todo el organismo. La onda se percibe como un pulso y se puede palpar o tomar en diferentes partes del
cuerpo por donde pasan las diferentes arterias. Estos lugares pueden ser en el cuello donde se encuentra la
carótida y cerca de la muñeca en la radial. Para tomar el pulso usualmente se usan las yemas del dedo índice y
medio, presionando suavemente en el lugar indicado, allí se podrá sentir las palpitaciones del corazón.
Incluso, hay que aprender a controlar nuestras pulsaciones. Los sitios donde se puede tomar el
pulso son:
En la sien (temporal).
En el cuello (carotideo).
Parte interna del brazo (humeral).
En la muñeca (radial).
Parte interna del pliegue del codo (cubital)
En la ingle (femoral)
En el dorso del pie (pedio)
En la tetilla izquierda (apical)
9. La velocidad de la sangre se propaga de 8 a 10 m/s, de manera que la onda llegue a las arterias más
alejadas del corazón, antes de que haya terminado el período de evacuación ventricular.
La velocidad de la sangre está en correspondencia con la elasticidad de las arterias, por este motivo, hay
menos velocidad en las arterias de los jóvenes, pues ofrecen mayor resistencia, mientras que en los
ancianos la velocidad de la sangre aumenta al disminuir la elasticidad arterial.
Cuando se mide el pulso se observan las características siguientes: frecuencia, ritmo, tamaño (volumen) y
tensión (elasticidad).
Frecuencia. Es el número de latidos por minuto. Varia según la edad, el sexo, la talla, la actividad física o
emocional y en las enfermedades. Disminuye a medida que el niño crece y continúa reduciéndose hasta la
vejez extrema. El pulso suele ser más lento en los varones que en las hembras. En la mayoría de los adultos
el pulso suele considerarse normalmente de 60 a 80 latidos por minuto. Más de 100 se considera que es
acelerado, menos de 60 latidos se considera muy lento.
Ritmo. Se refiere al patrón de los latidos en personas sanas. Es regular cuando el tiempo que transcurre
entre cada latido es esencialmente igual. Cuando el intervalo entre cada latido es desigual, se dice que es
irregular.
Tamaño (volumen). El tamaño o amplitud de una onda de pulso refleja el volumen de sangre que se
impulsa contra la pared de una arteria durante la contracción ventricular.
Tensión (elasticidad). Es el grado de resistencia que ofrece la pared arterial al ser comprimida.
10. Palpa la arteria con tus dedos índice, medio y anular. No palpes con tu dedo pulgar, porque el
pulso de este dedo es más perceptible y se confunde con el tuyo.
No ejerzas presión excesiva, porque no se percibe adecuadamente
Controla el pulso en un minuto en un reloj de segundero
Anota las cifras para verificar los cambios.
Es importante tomar el pulso
cuando el cuerpo está en reposo, porque en
esta condición las pulsaciones y frecuencias
cardiacas se encuentran a un ritmo normal.
Cuando se está en reposo la frecuencia
cardiaca puede estar entre 60 y 80 p.p.m. Esta
frecuencia se obtiene inmediatamente después
de levantarse, antes de salir de la casa o hacer
cualquier actividad física en casa (como
limpiar los pisos), sentado en el salón de clase,
al terminar de comer (el almuerzo o la cena),
antes de acostarse o de cualquier actividad
deportiva.
Cerca de la muñeca se encuentra la arteria
radial conocida como canal radial.
Se utiliza para ello los dedos índice y medio
de la mano izquierda, colocando suavemente las
yemas sobre el canal radial y comprimiéndolo hasta
sentir ondas de pulso.
Se cuentan las pulsaciones durante unos 15
segundos, luego se multiplica esa cantidad por 4, de
esa manera se obtienen las p.p.m.
11. El pulso se toma después de una actividad física para chequear las
frecuencias cardiaca y respiratoria. Esto permite al atleta o entrenador saber si
el organismo tiene la capacidad para soportar el trabajo al cual está siendo
sometido. De esta manera se pueden evitar problemas cardiacos o colapsos por
abusar del cuerpo en los ejercicios para los cuales no está preparado.
Se toma en el cuello, por donde pasa la arteria carótida.
De igual modo que en la muñeca, se utilizan los dedos índice y medio
colocando presión con suavidad en el cuello, al lado de la tráquea.
Se utiliza toda la mano colocándola debajo de la región pectoral o
mamaria izquierda (en el pecho).
Se cuentan las pulsaciones durante un tiempo de 6 segundos, a
diferencia del pulso tomado en la muñeca y el cuello, luego se multiplica esa
cantidad por 10 de esta manera se obtienen p.p.m.
12. La medición del pulso puede proporcionar tanto la información acerca de la salud de una
persona, como también cualquier desviación de la frecuencia cardíaca normal puede ser indicio de una
condición médica.
Así mismo, el pulso rápido puede ser un signo de la presencia de una infección o
deshidratación. En situaciones de emergencia, la frecuencia del pulso puede ayudar a determinar si el
corazón del paciente está bombeando.
Es más, durante el ejercicio o inmediatamente después, la frecuencia del pulso puede
suministrar información sobre el estado atlético y de salud de la persona.
En otras palabras, el pulso, que generalmente se conoce como frecuencia cardíaca, es el
número de veces que late el corazón cada minuto.
13.
14. Es un test general muy utilizado a la hora de saber el nivel de entrenamiento para cada
persona es la fórmula o índice de Karvonen. Gracias a el, podemos saber cómo determinar la intensidad
del ejercicio para cada persona.
Así como, cada deportista es único, por lo que para conocer exactamente los diferentes
umbrales de trabajo es necesario realizar un test de esfuerzo. La fórmula de Karvonen es un método
para el cálculo de las pulsaciones a un porcentaje de carga de trabajo determinado. Este método no da
información sobre los umbrales. Únicamente calcula las pulsaciones de trabajo para una carga
determinada.
Para realizar el test, debemos saber unos conceptos básicos como:
Frecuencia cardiaca (FC): mide las veces que el corazón late por unidad de tiempo. Normalmente
se mide por segundos. Este valor nos indicará objetivamente las adaptaciones que el ejercicio nos
esta causando o provocando.
Frecuencia cardiaca útil (FcU): son los intervalos entre los que debemos establecer un
entrenamiento beneficioso para la salud. intensidades Entre el 60% y el 85%, aplicando la fórmula
de Karvonen.
FC Máxima (FCmáx.): frecuencia cardiaca máxima que es capaz de soportar una persona
haciendo una actividad deportiva. Hallaremos la frecuencia cardiaca máxima a través de la
siguiente fórmula:
15. Frecuencia cardíaca máxima (FCm): Se calcula restando nuestra edad a 220, es decir FCm = 220 –
edad.
Frecuencia cardíaca en reposo (FCr): Es la frecuencia cardíaca mínima a la que late nuestro corazón
en reposo. Aunque existen varias formas de calcularla, lo más cómodo es tomarse las pulsaciones a
los 5 minutos de despertarnos, acostados en la cama. Como las pulsaciones al despertarnos
dependen de varios factores (que hayamos descansado bien, que no nos despertemos sobresaltados,
que no estemos enfermos…) se recomienda tomar las pulsaciones durante varios días seguidos (4 o
5) y utilizar la mínima como FCr o, en su caso, una media.
La frecuencia cardíaca de reserva es la diferencia entre la frecuencia cardíaca máxima (FCm) y la
frecuencia cardíaca en reposo (FCr). De hecho, el porcentaje que se indica en los planes de
entrenamiento es el tanto por ciento que estamos utilizando de esta reserva. Por lo tanto, trabajar al
0% sería estar en reposo (¡no sería estar a 0 ppm, es decir muerto…!) y trabajar al 100% sería
trabajar en nuestras pulsaciones máximas.
La intensidad (I) a la que queremos trabajar, en tanto por ciento. Esto nos vendrá normalmente
detallado en el plan de trabajo.
16. La fórmula de Karvonen nos indica la importancia del cálculo de intensidad. Si se toma
como referencia a dos personas, una de ellas deportista de élite y la otra practicante, con la misma edad
(30 años) y con la misma Fc máxima, puede ocurrir que la Fc del deportista de élite en reposo sea
mayor que la de la persona practicante, por tanto las intensidades de esfuerzo serán diferentes. En el
caso del practicante, su Fc de reserva será mayor que la Fc del deportista de élite, por tanto el rango de
pulsaciones de trabajo es mayor y mientras que el primero necesitará menos pulsaciones por minutos,
el deportista de élite requerirá 150 ppm, de ahí la importancia de conocer la fórmula de Karvonen para
el cálculo de la intensidad.
17. A todo lo antes expuesto, se puede concluir que:
El pulso es la frecuencia a la que late el corazón, que generalmente se conoce
como frecuencia cardíaca, es el número de veces que late el corazón cada minuto. Mientras
el corazón bombea sangre a través de nuestro cuerpo, se pueden sentir pulsaciones en
algunos de los vasos sanguíneos cercanos a la superficie de la piel, como en la muñeca, el
cuello o la parte superior del brazo. Tomarse el pulso es una forma sencilla de saber qué tan
rápido está latiendo nuestro corazón.
Uno de los indicadores de más confianza de nuestro estado de forma son las
pulsaciones basales o las pulsaciones en reposo. Una persona preparada tiene menos
pulsaciones en reposo que otra que no lo está. El corazón, a medida que tu condición física es
mayor, necesita menos latidos para bombear la misma sangre ya que se hace más grande a
medida que tu estado de forma es mejor. En casos como estos es donde la fórmula de
Karvonen nos ayuda a encontrar nuestro pulso de entrenamiento con más exactitud al incluir
una nueva variable junto con la edad, el pulso base o pulso en reposo.