Este documento presenta un análisis de la estructura espacial y densidad industrial de España en 1975 a través de varias prácticas. Identifica cuatro áreas industriales principales: áreas desarrolladas alrededor de Madrid y Barcelona, ejes de expansión como el Ebro y Mediterráneo, áreas en declive como el País Vasco y Asturias, y focos dispersos creados por planes de desarrollo. Explica los contrastes entre el centro industrializado y la periferia agrícola, y cómo este modelo ha cambiado desde
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EJERCICIOS DE GEOGRAFÍA HUMANA (IV).
EL SECTOR INDUSTRIAL.
Práctica 1.
El mapa representa la estructura espacial y densidad industrial de España en 1975.
Analícelo y responda a las siguientes preguntas:
a) Diga el nombre de las Comunidades Autónomas que tienen más de 16
trabajadores/km2
.
b) Identifique y diga el nombre de las ciudades con más de 50.000 empleos
situadas en las Comunidades Autónomas de Galicia, Asturias, Aragón, Castilla y
León y Andalucía.
c) Explique los principales rasgos de la distribución espacial de la industria en
España.
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Soluciones:
a) Las comunidades autónomas con más de 16 trabajadores/km2
son la
Comunidad Valenciana, País Vasco, Cataluña y Madrid.
b) Las ciudades con más de 50.000 empleos industriales son: en Galicia: Vigo;
en Asturias: Oviedo-Gijón-Avilés; en Aragón: Zaragoza; en Castilla-León:
Valladolid y en Andalucía: Sevilla.
c) Podemos diferenciar en España, cuatro tipos básicos de áreas industriales:
las áreas desarrolladas, que se localizan en las áreas metropolitanas de
Madrid y Barcelona, beneficiándose de que son áreas muy pobladas, con
proximidad a la oferta de mano de obra y a la demanda de un mercado de
consumidores de alta renta, estas áreas se caracterizan por su variedad en
las industrias, un alto grado de terciarización industrial (empleos de cuello
blanco: diseñadores, administrativos, comerciales, ejecutivos, etc.) y de alta
innovación (alta concentración de proyectos de I+D+i). Conectando estas
áreas desarrolladas, se distinguen dos ejes de expansión que conectan a las
áreas desarrolladas con las áreas centrales de antigua industrialización
(País Vasco y Comunidad Valenciana). Entre estos ejes de expansión
destaca el corredor en “Y” del valle del Ebro, que conecta los focos más
importantes del país por modernas vías de comunicación, en concreto, el
foco vasco con el el eje mediterráneo, cuyo vértice central es Zaragoza que
concentra la mayor parte de la capacidad industrial de Aragón. El eje
mediterráneo va desde Cataluña a Murcia (Girona a Cartagena). Se
caracteriza por un desarrollo industrial endógeno (aprovecha las
capacidades y recursos del país), como el calzado, la madera y muebles,
cerámica, alimentación y juguetes en la Comunidad Valenciana, la
industria agroalimentaria en Murcia y la petroquímica en Cartagena. En
tercer lugar, están las áreas en declive industrial, que se han visto
duramente afectadas por la reconversión industrial por su alta
especialización en industrias tradicionales o maduras (siderurgia, astilleros
y minería). Solo en el País Vasco se ha experimentado una revitalización
industrial por su mayor tradición industrial, mayor diversificación e
inversión en I+D+i (cerca del 10% de su PIB, muy por encima de la media
nacional). Por último, los focos industriales dispersos, que fueron objeto en
los sesenta y setenta de los Planes de Desarrollo. Algunos han servido de
focos de descongestión industrial, como Toledo y Guadalajara respecto al
área metropolitana de Madrid, ejemplo de descentralización industrial en
la corona periurbana de Madrid, que se extiende hacia las provincias
limítrofes, al igual que el caso de Barcelona. Otros se constituyeron en Polos
de Desarrollo, como el polo químico de Huelva, Alcalá de Guadaira en
Sevilla, Albolote y Peligros en Granada, en los casos de Andalucía. Su
capacidad para desarrollar una economía de escala o sinergia ha sido muy
limitada y constituyen focos aislados que no han logrado difundir la
industria a una comunidad autónoma, la andaluza, caracterizada por su
débil tejido industrial.
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Práctica 2.
El mapa representa la estructura espacial y densidad industrial en 1975. Analícelo y
responda a las siguientes preguntas:
a) Diga el nombre de las Comunidades Autónomas que figuran en cada uno de los
intervalos de trabajadores/km2
.
b) Explique los contrastes industriales existentes entre el centro y la periferia
españoles.
c) ¿Ha cambiado sustancialmente esta situación a partir de 1975? Explíquelo.
Soluciones:
a) Más de 30 trabajadores: País Vasco, Comunidad de Madrid y Cataluña, el
triángulo de desarrollo español.
De 16 a 30 trabajadores: Comunidad Valenciana.
De 8 a 15 trabajadores: Asturias, Cantabria y Baleares.
De 4 a 7 trabajadores: Galicia, Navarra, la Rioja, Andalucía, Región de
Murcia y Canarias.
Menos de 4 trabajadores: Castilla-León, Castilla La Mancha, Extremadura
y Aragón.
b) Es un contraste muy acusado. El interior del país, Salvo madrid, Zaragoza
y Valladolid, presenta una escasa industrialización por razones diversas:
baja densidad de población, ausencia de tradición industrial y
especialización agraria. Por el contrario, en la periferia, regiones con mayor
tradición industrial son el País Vasco, la Cornisa Cantábrica, y el eje
mediterráneo: Cataluña, Comunidad Valenciana, que gozan de una
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economía diversificada, ya que no solo se desarrolla en ellos una potente
industria sino un sector terciario muy desarrollado, destacando el turismo.
c) Este modelo ha cambiado desde 1975. En 1975 asitimos a una crisis
industrial de las industrias maduras y, aquellas regiones especializadas en
ellas (siderurgia, naval, minería, textil), tuvieron que sufrir una dura
reconversión industrial a mediados de los ochenta. De esta forma, Galicia y
la cornisa cantábrica se convirtieron en regiones de declive industrial y
dejaron de ser focos de inmigración y de urbanización, para convertirse en
zonas de emigración. Por otra parte, a partir de 1975 asistimos al inicio de
la Tercera Revolución Industrial que produce la aparición de una nueva
industria ligada a las nuevas tecnologías, que permitió el desarrollo de las
tecnópolis o parques tecnológicos en las áreas periurbanas de las áreas
metropolitanas: nuevos espacios, de gran calidad ambiental, y de grandes
infraestructuras que se destacan como los nuevos espacios donde aparece la
nueva industria (telecomunicaciones, informática, electrónica, microelectró-
nica, robótica, etc.). Mientras, los centros urbanos han desmantelado su
tejido industrial, cuyas fábricas se han deslocalizado hacia la periferia,
donde el suelo es más abundante y barato o hacia países donde la mano de
obra es abundante y barata. En su lugar, los centros urbanos conocen la
terciarización de la industria (predominio de los empleos de cuello blanco
frente a los de cuello azul: obreros o trabajadores manuales).
Práctica 3.
En el mapa adjunto, están representadas las áreas industriales de España. Usando como
referencia dicho mapa, conteste a las preguntas siguientes:
a) Comente razonadamente la situación de los grandes polos industriales y su área
de influencia.
b) Describa los ejes de expansión industrial que pueda distinguir en el mapa y sus
condicionantes.
c) ¿A qué provincias afecta el área de declive industrial? ¿Cuáles son las causas
que han provocado ese declive?
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Soluciones:
a) Los grandes polos industriales están situados en las áreas metropolitanas de
las grandes ciudades españolas: Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia. Son
regiones de gran tradición industrial, que han difundido sus industrias por los
corredores que crean las vías de comunicación (autopistas) que difunden la
industria por su entorno metropolitano o área de influencia.
b) Los ejes de expansión que se pueden diferenciar son:
-El Eje del Mediterráneo: va desde Girona hasta Cartagena. Este eje presenta
un alto grado de urbanización, altas densidades demográficas, y una economía
muy diversificada: agricultura intensiva orientada a la exportación en Valencia
y Murcia, industria en Valencia, Barcelona, Murcia y Cartagena y un potente
sector terciario ligado a la importancia que alcanza el sector turístico.
-El Eje del Ebro o la “Y” del corredor del Ebro: une el País Vasco y Cataluña
y se vislumbra una incipiente conexión en Madrid. Tiene como principal foco
industrial a Zaragoza, que concentra la mayor parte de la industria de Aragón,
aunque también hay otros núcleos fabriles que se aprovechan de su
proximidad al polo industrial vasco, como Logroño y Pamplona, o al polo
catalán, como en Huesca.
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-El eje de Madrid: goza de la proximidad de los centros de toma de decisiones
y de la información (al ser la capital del Estado). En el eje de Madrid se insinúa
una difusión hacia su entorno o área de influencia metropolitano, alcanzandoa
provincias limítrofes como Guadalajara y Toledo y se insinúa una conexión
con el eje de la carretera de La Coruña hacia Valladolid, que está conectado
con el polo de Madrid, aunque es de bastante menor entidad que el polo
madrileño.
-El eje andaluz: se concentra principalmente en el triángulo de Huelva-Sevilla-
Bahía de Cádiz, donde se sitúan enclaves industriales aislados surgidos como
Polos de Desarrollo en los Planes de Desarrollo. Este eje del valle del
Guadalquivir coincide con un área altamente urbanizada, así como el de la
costa mediterránea andaluza que es prolongación del eje mediterráneo.
d) Las provincias afectadas por el declive industrial son: Asturias, Cantabria,
Guipúzcoa, Vizcaya y Álava. Pertenecen a la zona de declive industrial de la
cornisa cantábrica que tiene su prolongación en la costa gallega (A Coruña y
Pontevedra). Su declive es consecuencia de la crisis industrial que afectó desde
mediados de los setenta a los sectores tradicionales de la industria, como el
siderúrgico, el minero y el naval. La especialización en estas industrias, la
escasa diversificación en otras industrias, salvo el caso vasco (que ha logrado
una reindustrialización basándose en la diversificación y en la innovación); es
la causa de su declive industrial ya que estas industrias se han deslocalizado o
sufrido la competencia de países donde la mano de obra es abundante y barata,
lo que ha obligado a una dura reconversión industrial a mediados de los
ochenta, con cierre de las industrias menos rentables y despidos masivos de
trabajadores.