Después de haber presentado los dos trabajos anteriores, se aproximaba el día de la madre, y como lindo detalle, los profesores nos dijeron que hagamos un regalo para nuestra mamá aplicando cuadriláteros.
Yo hice una caja que se abre y que lleva varias notas y frases lindas. Lo redacté en un PowerPoint, aquí lo adjunto:
8. • Decidí hacerle una caja sorpresa
para mi mamá. Lo malo es que no
pude poner fotos ya que no tenía
tinta en mi impresora, pero igual
quedó muy bonito:
• Los materiales que usé fueron
cartulinas de colores (negra,
blanca y roja) hojas de colores,
regla, lápiz, tijeras, silicona y un
poco de algodón para ponerlo
encima
9. Para la caja grande usé un cuadrado de 36x36 cm y lo
dividí en 9 cuadrados de 12x12cm. Luego corté una arista
de los cuadrados pequeños saltándome uno. Pegué un
cuadrado dentro del que estaba su costado y se formaba
así, una caja
Luego hice lo mismo, solo que esta vez el cuadrado era
de 33x33 cm y los dividí en 9 cuadrados de 11x11cm.
Luego, corté el cuadrado quedando de tal forma, una
cruz
10. Luego hice una caja pequeña con un cuadrado de
30x30, lo dividí en un cuadrado de 10x10 e hice lo
mismo que en la primera caja
Para hacer la tapa de la caja anterior, usé un
cuadrado de 16x16, y tracé líneas desde los
extremos 3 cm, esto para que alcance al
momento de ponerlo encima. De tal manera,
cerrará bien en la caja de arriba
11. Lo mismo hice con la tapa de la caja grande, pero
esta vez era un poco más grande, era un cuadrado
de 15x15. Realicé el mismo proceso anterior
La decoración ya queda para los gustos. Yo puse
en los cuadrados pequeños que formé, varias
notas y corazones, también frases y dedicatorias.
Dentro de la caja blanca puse una tira que al
abrir la tapa, se jala un mensaje con un “Feliz día
Mamá”
Al final, forre con cartulina roja con un grosor de
3 cm, todo el centro de los cuadros. Y es así como
me quedó
12. Sinceramente, me gustó mucho hacer el regalo, me tomó todo un sábado y tuve que desvelarme el
viernes haciendo varias tareas, pero ver la sonrisa que le saqué a mi mamá por el regalo, valió la
pena.
Los cuadriláteros se acoplaron muy bien a mi trabajo porque dependía de ellos, de medirlos
perfectamente, porque sino salía chueco y no quedaría bien.
Las clases de los profesores de Geometría fueron unos guías como para sentirme más cómodo al
momento de realizar el regalo.
En conclusión, una actividad muy bonita, entretenida y motivadora.