Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
UNAD_Colaborativo Introducción a la Filosofía
1. Trabajo colaborativo presentado por los
estudiantes:
Juan Carlos Gutiérrez - Cód.: 88031856.
Wilson Gerardo Herrera - Cód.: 19496304
Juan Gabriel Peñaranda - Cód.: 15172084
Mónica P. Preciado - Cód.: 1087125578.
2. – FASE 3 –ALTERNATIVAS DE SOLUCIÓN Y
RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS
3. PROBLEMA FILOSÓFICO-PEDAGÓGICO
• La concepción del hombre que
subyace en la cultura como
sustrato de alienación, en
América Latina colonizada.
• Procesos liberadores de
autonomía desde lo
pedagógico-filosófico
4. “Un padre que no interactúa
con su hijo, que no le ayuda a
superar sus falencias o
debilidades y comportamientos
hereditarios, lo expone a un
pobre desarrollo físico,
emocional e intelectual. Y tiene
un impacto en la sociedad.
5.
6. Casos así, ponen en evidencia los
requeridos aportes de la filosofía en sus
múltiples objetos de reflexión como la
política, la antropología filosófica, la ética,
en enfoque liberador, emancipador de las
esclavitudes “legales” que alejan a los
padres de sus hijos para vender su fuerza
laboral.
7. ¿Cómo actuaba con sus hijos?
Cuando le explicaba las tareas en
casa les gritaba, les pegaba, los
maltrataba. Normalmente tenía cara
de malgeniado, las personas le tenían
temor, sus hijos también de hablarle e
incluso los hijos no traían personas a
su casa porque les daba miedo que
su papá les avergonzara.
8. La Filosofía de la Liberación ha intuido
desde la Caverna de Platón, la existencia
de modos éticos de vida humana. Filosofar
es urgente para dignificar al hombre. Una
Filosofía como Pedagogía del Oprimido,
urge.
13. ¿Qué es el hombre? ¿Acaso sólo su
fuerza de trabajo mal-bien pagada
es su esencia? ¿Por qué otros se
arrogan el poder de plagiarlo, de
decidir por él sobre sus capacidades
y orientación para hacerlo entrar en
el sistema educativo cual salchicha
o hacerlo como un ladrillo más a la
pared?
14. ahondar en las preguntas
para obtener, de la filosofía,
la fuerza emancipadora, el
pensamiento crítico, las
opciones para intervenir en la
historia, la sociedad, la
política y la misma
educación.
15.
16. Someter a la dialéctica histórica, a
la hermenéutica de las ciencias, a
la antropología filosófica, el
pensamiento que impulse
indignados, alienados y sociedad
educativa en general a romper con
la praxis en todos los campos, de
tal igualamiento por lo bajo del
pensamiento débil.
17.
18. Un saber que enseñe la condición humana
(cósmica, terrestre, física, la humana
condición, sapiens, demens, complexus);
enseñar a enfrentar las incertidumbres, la
identidad terrenal, la comprensión, la ética del
género humano; esto lo ilumina la educación
filosófica y quizá sea la única oportunidad que
tengamos...
19.
20. Sí, urge comenzar por enseñar
la condición humana y obligar
la entronización de la Justicia
Social fundada en la dignidad
de la persona, la inclusión, la
participación; es cómo una
filosofía emancipadora, de la
calle...
21. Ejercicio dialógico
Tres grandes puntos de encuentro
o de articulación, a saber: la praxis
de liberación, el posicionamiento
desde América Latina y las
alteridades oprimidas, y la
descolonización epistemológica.
22.
23. Procesos de diálogo y encuentro
entre la filosofía y la pedagogía en
general, y particularmente entre la
Filosofía de la Liberación dusseliana
y las Pedagogías Críticas
Latinoamericanas.
25. Praxis liberadora, no contemplativa, sino
crítico-práctica. La Filosofía de la Liberación
como filosofía latinoamericana nos invita
recurrentemente a analizar sus postulados
considerando las condiciones en que fueron
producidos, sus determinaciones
geopolíticas y las condiciones económicas,
culturales e ideológicas a las que se
encuentra supeditada.
26. La teología de la liberación otorgó
reflexiones fundamentales en torno a la
incorporación de la utopía dentro del
proceso histórico transformador, a la
relevancia de la praxis transformadora
comprometida con la humanización del
mundo y al desarrollo de la noción de
liberación.
28. A América Latina le urge
pensarse desde otros
lenguajes, desde otros
contextos, rebelarse ante los
paradigmas de la dominación,
la reproducción y el control, de
lo dado por las estructuras
conceptuales que formalizan
contenidos homogéneos.
29. Hay que pensarla como
continente que puede tener
contenidos significantes
abiertos a la multiplicidad,
como horizonte posible para
un nuevo movimiento
gnoseológico, que reflexione
en sí mismo, en un pensar
no para- métrico.
30. ¿Qué significa entonces el ser y
estar de nuestra América? ¿Cómo
descentrar los discursos para dar
cuenta de la matriz cultural e
histórica que subyace en cada
espacio territorial? ¿Cómo
desentrañar su subjetividad más
profunda, aquella silenciada por la
dominación, aquella que es
potencia y posibilidad, aventura y
apertura? (Pinto, 2007, p. 188).
