San Pedro de Teberga, del prerrománico al románico

San Pedro de
Teberga

Del prerrománico al
románico

Higinio Rodríguez Lorenzo

San Pedro de Teberga

• El románico temprano en Asturias, como en
cualquier otro lugar de Europa, refleja la herencia
inmediata: aquí el prerrománico asturiano.
• Si en las iglesias rurales románicas que salpican las
aldeas asturianas el influjo del prerrománico de
Alfonso II es claro, en San Pedro de Teberga (y alguna
otra más, como la cercana Santa María de
Villanueva), los antecedentes son del estilo final, el
de Alfonso III y el modelo, San Salvador de Valdediós.


• Durante unos 150 años, desde la construcción de San
Salvador de Priesca y Santiago de Gobiendes, hasta
San Pedro de Teberga, no tenemos en Asturias
grandes construcciones.
• Es posible que la ausencia de obra notable se deba a
la falta de patrocinio real, más orientado al sur que
estaba siendo repoblado.
• Sólo el monacato, con apoyo de la alta nobleza,
parece que realizó alguna obra: San Salvador de
Cornellana (1024) o San Juan Bautista de Corias
(1044)… pero no llega nada a nosotros salvo el
documento que lo atestigua.


San Salvador de Priesca
(Planta según Manzanares)


Santiago de Gobiendes


• De ese prerrománico final tiene:
– La tribuna a los pies. Aunque alterada hoy, se identifica
fácilmente lo que fue la original. También la habitación alta
sobre la cabecera.
– La estructura en tres naves abovedadas: la relación ancho
y alto es idéntica a la de San Salvador de Valdediós.
– La cabecera plana al exterior y al interior. Aunque la actual
es del XVIII, sigue a la original sólo que aumentada en
planta y altura (más pequeña y baja la original).
– La disposición volumétrica de porche, naves y cabecera.
– La forma de los capiteles interiores (no la decoración, sino
la forma troncocónica invertida)


• Pero el románico es evidente en:
– Los muros: sillares bien escuadrados y la existencia de
contrafuertes con función sustentante clara.
– El uso de columnas. Son bajas y potentes.
– La decoración de los capiteles, en consonancia con
modelos del primer románico francés (normando,
concretamente) que llega a la península por el camino de
Santiago… y hasta el sur de Inglaterra, Durham.
– Las bóvedas de cañón, que no son de piedra volcánica.
– La decoración exterior: canecillos y metopas alternas.
– El tipo de ventanas.


• San Pedro de Teberga se
sitúa en el camino que
lleva al puerto de Ventana
-comunicación con la
meseta, con León- a
través de un ramal de lo
que fue el Camín real de
La Mesa.
• En las cercanías, Sto.
Adriano de Tuñón, del
891, obra de Alfonso III.


Santo Adriano de Tuñón


• El edificio actual es resultado de varias
intervenciones en el tiempo:
– Porche y cuerpo principal de la basílica: en el tercer cuarto
del siglo XI, si bien no se construyó toda ella de seguido.
Pasaron unos pocos años entre la construcción del primer
cuerpo, el porche, y las tres naves del cuerpo principal.
– La cabecera y la torre-campanario que borró la portada
oeste inicial, son del XVIII.
– Lo mismo podemos decir del claustro (en el lado norte) y,
desde luego, de la casa-rectoral que se sitúa en el lado
oeste.
– Tampoco es original la tribuna actual.


• Presenta una planta basilical de tres naves: 2,60 m la
central y 1,70 las laterales. Parecen muy estrechas en
relación con la altura: 9,30 m la central y 6 las
laterales.


• El porche tiene los muros ligeramente más estrechos.
Son tres naves separadas por dos columnas exentas y
cuatro adosadas al muro anterior y al posterior.
• El techo de la nave central es bajo porque soporta
una tribuna encima que, si bien no es la original, no
debió ser muy diferente pues aún quedan restos del
muro de la primitiva que era tan ancha como todo el
porche.
• Comunica sólo la nave central con la nave central de
la iglesia propiamente.


• La iglesia tiene tres cuerpos: dos separados por
columnas y con pilares adosados en la trasera y los
laterales; y el tercer cuerpo, hoy aumentado, es el
que corresponde a la cabecera.
• La cabecera es plana al exterior, si bien la primitiva,
siendo planta también, parece que sobresalía la nave
central ligeramente.
• El cuerpo principal de la iglesia y la cabecera están
separados por dos pilares cruciformes.


• El muro es de sillares de tamaño medio pero muy
bien escuadrados.
• Los elementos sustentantes en el interior son
columnas, exentas y adosadas al muro, en el porche.
En el cuerpo principal de la basílica hay dos columnas
y dos pilares que limitan con la cabecera. También
hay pilares adosados a los muros laterales. Sobre
ellos recaen los arcos fajones de las bóvedas.
• Las columnas son de porte bajo (unos 2,40 m) y
soportan capiteles decorados de forma muy plana.
• Y estos capiteles son el arranque de los arcos de
medio punto.


• Los capiteles del porche tienen representaciones
humanas, animales, vegetales y hasta temas
geométricos.
• La talla es bastante elemental, a bisel y de forma
muy simple y plana.
• Desde luego, parece una mano diferente de la que
labrará los capiteles de las columnas del interior de la
iglesia.


• Los capiteles del cuerpo principal de la iglesia tienen
un trabajo más depurado y una temática que enlaza
lo animal y lo humano en escenas:
– Hombres que luchan y animales que miran a los humanos.
• Además, el estilo de los capiteles parece enlazar con
otras obras que se están haciendo en Leyre
(Navarra), S. Pedro de Cardeña (Castilla) y San
Martín del Canigó (Cataluña)… aunque todavía hay
un aire a San Salvador de Valdediós en la disposición
del capitel en relación con el arranque del arco.


• Y singular es, también, la decoración exterior: los
canecillos y el ajedrezado de la cornisa. Ajedrezado
que también recorre en el interior el arranque de las
naves laterales del cuerpo principal de la iglesia.
• Los canecillos reproducen animales salvajes: jabalíes,
ciervos, cabras, osos… aunque también aparece la
cabeza de un guerrero en un canecillo en el lado sur
de la nave principal.


• Una iglesia cercana también, pero posterior aunque
debió intentar reproducir en parte a San Pedro de
Teberga es Santa María de Villanueva (unos cuatro
km distante).
• Tiene planta basilical de tres naves también, no tan
altas, pero ésta tiene un ábside semicircular al
exterior.


• Pero la relación más estrecha parece ser la que
guarda con la fundación real de San Isidoro de León.
Ésta es algo más antigua… lo que explicaría lo que
hay de románico “internacional” en San Pedro de
Teberga:
• Y esa relación bien pudo darse a través de una obra
“de enlace”: el pequeño claustro del Monasterio de
San Pelayo de Oviedo, de 1053 y levantado por
encargo del rey Fernando I y su esposa doña Sancha.
Los mismos que encargaron San Isidoro de León.

Fuentes y créditos
El texto es del autor. Las fotografías, salvo las plantas, son también
del autor, a excepción de los interiores de Gobiendes y Priesca,
tomadas de la Wikipedia (voz correspondiente).

Carlos Cid Priego. Arquitectura románica I. Editorial Prensa Asturiana. Oviedo 1996 (pg.
102-105)
Emilio Casares y María Cruz Morales. El románico en Asturias (centro y occidente). Ayalga
Ediciones. Gijón 1978.
María Soledad Álvarez. El románico en Asturias. Monumentos y caminos. Trea. Gijón 1997.

http://www.intermapa.es/mapas/clientes/caminreal/ (consultada el 2 de abril de 2010)
http://www.turismo-prerromanico.es/arterural/base/monumen.htm#astur (activa el 3 de
abril de 2010)

Higinio Rodríguez Lorenzo. 2010.
Esta presentación es de libre distribución y sólo reserva el derecho de cita del autor.

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