DISEÑO DE ESTRATEGIAS EN MOMENTOS DE INCERTIDUMBRE
Búsqueda del éxito profesional
1. LA BÚSQUEDA DEL ÉXITO PRPOFESIONAL
Por: Camilo Cruz. Taller del éxito
El aspecto profesional que se encuentra en nuestro subconsciente, en ocasiones parece dominar
la mayor parte de nuestra vida, haciéndonos ignorar otras áreas importantes de nuestro ser. Es
probable que todos los esfuerzos, ambiciones y actividades diarias se canalicen sólo hacia la
realización de aquellas acciones que nos conducen a alcanzar una profesión. Pero, una vez
superada esa meta, empezamos nuevamente el círculo para llenar más expectativas en ese
sentido y así podemos continuar indefinidamente, sin preocuparnos por otras áreas de nuestra vida
igualmente importantes, que queda relegadas a simples sueños y que se posponen con cualquier
disculpa.
Nos consolamos diciéndonos que avanzaremos cuando los requerimientos de la profesión se
calmen un poco, para retomar nuevamente otras metas y prioridades. No obstante, con el tiempo
nos damos cuenta que esos anhelos de adquirir más conocimientos nunca se calman; que en la
medida en que se logran materializar ciertas metas profesionales aparecen otras, y que la única
manera en que podemos trabajar en otras áreas de la vida que tenemos olvidadas, es tomando la
firme decisión de hacerlo y poner en marcha la decisión tomada.
Decidí que todos aquellos sueños que deseaba realizar, y que aquellas actividades que yo sabía
que traerían felicidad a mi vida, no podían ser pospuestas un día más. Decidí que el compartir con
mis seres queridos, conocer nuevos países y culturas, o escribir libros e impactar positivamente la
vida de otras personas, no seguiría siendo algo que sucedería en algún momento en el futuro, sino
que tenía que acontecer en el presente. Decidí que el logro de estas metas debía vivenciarlas
durante cada uno de los días de mi vida. Tome la decisión de asumir, desde ese preciso instante,
mi éxito familiar, intelectual, espiritual y personal sin ponerles unos puntos lejanos en la distancia
para convertirlos en el diario vivir.
Una vez tomada la decisión, comencé a trabajar en las otras facetas de mi vida: regresé al
gimnasio, comencé a escribir, decidí hacerle saber a mi esposa cuánto la amaba, no sólo con
palabras sino también con acciones y descubrí, para mi asombro, que era posible alcanzar mis
metas profesionales sin tener que sacrificar los demás aspectos de mi vida.
El crecimiento profesional es sólo uno de los aspectos de nuestra vida. Si bien es cierto que estas
2 últimas décadas estuvieron marcadas por una excesiva preocupación por las metas
profesionales, debido en parte a que los grandes avances tecnológicos y el incremento en la
competitividad empresarial a nivel mundial, llevaron a muchas empresas a reducir drásticamente
su personal, también es cierto que de las cenizas de este cambio global ha salido un profesional
muchas más consciente de sus demás papeles en el juego de la vida.
Nos queda hoy una lección importante: no permitamos que el plan personal de éxito que nos
hemos trazado, se sature con metas profesionales a costa de las demás facetas de nuestra
vida. El ser adulto implica: EQUILIBRIO.
Te recomiendo que:
• Establezcas metas para desarrollar tu propio programa de educación y actualización
profesional, de manera que puedas estar siempre a la vanguardia de tu profesión.
• Te mantengas bien informado si deseas a la competencia pues el poder está del lado de
quienes poseen el conocimiento y la información.
• Determines cuáles son las verdades razones por las que no has logrado escalar posiciones
en tu empresa y actúes para modificar la situación.
Recuerda que todos podemos cambiar nuestro campo de acción profesional en lugar de quejarnos
todos los días, camino al trabajo, de cuánto odiamos lo que hacemos.
2. ¿CÓMO CREAR UN PROGRAMA DE CRECIMIENTO Y DESARROLLO
PERSONAL?
A continuación encontrarás algunas sugerencias que te pueden ayudar:
Invierte en tu propio desarrollo personal
Invierte por lo menos un 3% de tus ingresos en buenos libros, revistas y seminarios. Quien no está
dispuesto a invertir en sí mismo, expone el precio de éxito. Recuerda que el precio del éxito no es
negociable. Invierte en tu capacitación y formación. Si bien es cierto que miles de personas han
logrado llegar a la cumbre y amansar grandes fortunas sin pasar por una educación formal,
también es cierto que lo lograron porque estaban altamente motivados y poseían una gran actitud,
que como vimos antes es un 85% del éxito.
Lee por lo menos 30 minutos diarios sobre las áreas de tu interés profesional
El leer una hora diaria, significa leer un libro entero en tres semanas. Un libro cada tres semanas
equivale a leer 15 libros al año. En un mundo donde el profesional promedio lee menos de un libro
al año, al tú leer 15 que te ayuden a profundizar en tu profesión, o a administrar mejor tu tiempo, no
sólo lograrás distanciarte de tus competidores, sino que tu situación financiera y tu productividad
personal se verán afectados positivamente. Recuerda que todo aquello que ha encontrado cabida
en tu mente es lo que ha moldeado la persona que eres hoy.
HÁBITOS PARA ALCANZAR LA EFECTIVIDAD
Lo mejor que podemos hacer cuando queremos iniciar procesos de renovación es invertir tiempo
para mejorarnos a nosotros mismos, como personas y como gerentes y este cambio personal se
logra cuando cambiamos nuestros hábitos.
Un hábito es la conjunción de 3 componentes, EL CONOCIMIENTO, LA HABILIDAD Y LA
ACTITUD. Para convertir un comportamiento en hábito es necesario que se unan los 3
componentes.
La efectividad en todas las áreas de la vida se alcanza cuando aplicamos en ellas el equilibrio
P/CP, el cual está conformado por Producción (P) y la Capacidad para Producir (CP). Este principio
se ilustra mejor con la fábula de “la gallina de los huevos de oro”, en la cual el granjero, en su afán
codicioso por hacerse más rico en el menor tiempo posible, decide matar a la gallina para tener
todos los huevos a la vez, sin esperar día a día que la gallina los ponga, pero cuando la abre se da
cuenta que no hay huevos, desaprovechando así la oportunidad de obtener el mayor beneficio.
La ley de la efectividad queda así ilustrada: para ser realmente se necesita de los huevos (P) y de
la gallina que los produce (CP).
Recuerde los 3 componentes del hábito:
Conocimiento: indica qué hacer y por qué.
Habilidad: enseña a hacer las cosas.
Actitud: es la motivación, las ganas de hacer las cosas.
Stephen R. Covey nos presenta en su libro “Los siete hábitos de la gente altamente efectiva” una
serie de consejos tendientes al mejoramiento personal con los cuales se alcanzará la alta
efectividad, a continuación los presento:
1. SER PROACTIVO. Una personas proactiva no culpa a los demás por lo que le está pasando, es
consciente de que fueron sus decisiones las que la llevaron donde está pero no se queda en el
3. simple reconocimiento de sus acciones, tiene el poder para decir “estoy aquí por las decisiones
que tomé, pero mañana quiero estar allá”. La proactividad se basa en guiarnos por nuestros
valores, en no entregar a otros el control sobre nuestras decisiones y en trabajar continuamente en
nuestro desarrollo buscando influenciar a quienes se encuentran en nuestro entorno cercano.
2. EMPEZAR CON EL FINAL EN MENTE. Si empezamos cada día de nuestras vidas sabiendo lo
que queremos hacer y dónde nos dirigimos, seguro que llegaremos al liderazgo personal. Para
desarrollar este hábito existe una herramienta fundamental LA MISIÓN PERSONAL, que es una
declaración basada en nuestros principios y valores, de manera que nos permita tomar decisiones
derivadas de ellos.
Antes de determinar nuestra MISIÓN GENERAL debemos encontrar nuestro centro, el cual está
dado por la forma en que miramos el mundo. Nuestro centro es nuestra fuente de mayor seguridad
y es una guía para nuestras decisiones. Para desarrollar el segundo hábito debemos encontrar el
centro más adecuado, aquel basado en principios que no cambian con el tiempo ni bajo otras
circunstancias.
Centros erróneos son por ejemplo, la familia, el dinero, las posesiones, el poder y el trabajo, ya que
pueden cambiar con el tiempo. Cuando uno se basa en principios analiza y sopesa todas las
posibilidades sin que los centros erróneos afecten sus decisiones.
3. PONER PRIMERO LO PRIMERO. Una vez que se han desarrollado los dos primero hábitos se
está en posición de implementar el tercero: priorizar.
Casi toda la gente está en la búsqueda de organizar el tiempo, pero casi nadie se preocupa por
organizar sus prioridades, lo cual resulta siempre más efectivo. La cuestión es que para ser
realmente efectivo, se debe poner lo verdaderamente importante por encima de lo urgente, ya que
lo urgente sólo es importante para otros. Logrando desarrollar este hábito se aplica el principio de
implementar nuestros planes de acción para lograr propósitos significativos.
4. PENSAR GANAR/GANAR. La cultura en la que vivimos está enmarcada en el concepto de yo
gano-tu pierdes. Desde pequeños lo vemos en la escuela, luego en la universidad, más adelante
en el trabajo, en la política y en los negocios. En la cabeza tenemos instalado el chip de la
competencia en lugar del chip de la colaboración.
Para ser realmente efectivos debemos pensar GANAR/GANAR en todas nuestras relaciones
interpersonales, “hay suficiente para todos”. La victoria de uno no siempre es la derrota del otro,
desarrollar el cuarto hábito quiere decir que ambas partes de cualquier acuerdo siempre saldrán
beneficiadas.
5. ANTES QUE BUSCAR SER COMPRENDIDO, COMPRENDER. Es difícil interactuar con otros,
dialogar o convivir sin tener problemas, si buscamos encontraremos que en la raíz de estos
problemas está la dificultad de comprendernos unos a otros. el quinto hábito consiste en aprender
a escuchar, en entender a los demás desde su propia perspectiva, si logramos desarrollar este
hábito podremos no sólo evitar problemas interpersonales, sino adelantar con más agilidad los
procesos con soluciones GANAR/GANAR.
6. SINERGIZAR. EL TODO ES MÁS QUE LA SUMA DE LAS PARTES, esto significa la sinergia.
La creación de este hábito requiere del trabajo en equipo, el cual, cuando se basa en la confianza y
en los principios, genera creatividad, innovación y efectividad.
7. AFILAR LA SIERRA. El desarrollo de este hábito se da cuando somos capaces de hacer
mantenimientos e innovaciones benéficas a los demás hábitos. Si recuerdas el principio del P/CP,
afilar la sierra significa que si nos dedicamos solamente a aserrar, sin mantener la sierra, sin
afilarla, seguramente llegará el momento en que ya no podamos aserrar más.
4. SIETE PRINCIPIOS
1. Toma de conciencia, visión personal y responsabilidad.
2. Liderazgo, Misión y Visión.
3. Administración del tiempo y Priorización.
4. Beneficio mutuo.
5. Comunicación efectiva.
6. Cooperación creativa.
7. Mejoramiento continuo.
Desarrollar estos hábitos requiere de inversión, de tiempo y de ganas, lo más posible es que nos
enfrentemos a nosotros mismos, pero comenzando por el principio, siendo proactivos, habremos
dado un primer gran paso para alcanzar la efectividad.
MANEJO DEL TIEMPO
• Planifica: elabora una lista escrita periódicamente de los objetivos que quieres alcanzar.
Esta lista debe contemplar cada nuevo proyecto en el que te involucres, así no solamente
ahorrarás tiempo sino que serás más productivo.
• Prioriza: generalmente consideramos que tenemos más cosas por hacer que las que
podemos cumplir, es importante identificar cuáles actividades nos conducirán a alcanzar
objetivos; priorizando podremos realizar las sustantivas primero y tendremos la capacidad
de dejar las menos importantes para realizarlas en segundo plano. Recuerda que lo
importante va antes que lo urgente.
• Fija plazos: determinar cuánto tiempo vas a necesitar para adelantar cada tarea, fija
límites posibles y trata de llevarlas a cabo dentro de ellos.
• Evalúa: regálate 15 minutos diarios para revisar cómo va tu plan, cuáles acciones has
adelantado, cuáles te faltan, cuáles te resultan difíciles de realizar en el tiempo que les
asignaste y a cuáles puedes recortarles un poco de tiempo, así podrás saber cómo va tu
plan y en cuáles actividades deber
PERFIL DEL PROFESIONAL ACTUAL
El resultado de una encuesta en el contexto del proyecto europeo sobre investigación que
indagaba sobre cuáles capacidades genéricas solicitan las empresas a los egresados
universitarios, determinó en orden de prioridad que se requieren las siguientes:
1. Capacidad de aprender.
2. Capacidad de aplicar los conocimientos en la práctica.
3. Capacidad de análisis y síntesis.
4. Capacidad para adaptarse a las nuevas situaciones.
5. Habilidades interpersonales.
6. Capacidad para generar nuevas ideas (creatividad).
7. Comunicación oral y escrita en la propia lengua.
8. Toma de decisiones.
9. Capacidad crítica y autocrítica.
10. Habilidades básicas de manejo de computadores.
11. Capacidad de trabajar en equipo interdisciplinario.
12. Conocimientos generales básicos sobre el área de estudio.
13. Compromiso ético (valores).
14. Conocimientos básicos de la profesión.
15. Conocimiento de una segunda lengua.
16. Apreciación de la diversidad y multiculturalidad.
17. Habilidad de investigación.