El documento resume el capítulo 21 del Apocalipsis sobre el cielo y la tierra nuevos. Describe que no habrá más mar, tristeza, llanto o dolor, y que Dios enjugará todas las lágrimas. También resume parte del capítulo 22, indicando que no habrá más maldición, noche o muerte. Todo será renovado y purificado cuando Cristo establezca su reino.
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No mas apocalipsis
1. MIENTRAS PREDICAS: puedes ir orando ayúdame a llegarle a alguien GUÍAME.
TEMA: NO MÁS
TEXTO BÍBLICO:
Apocalipsis 21:1-4 (RVR1960) Cielo nuevo y tierra nueva
1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera
tierra pasaron, y el mar ya no existía más.
Después vi un cielo nuevo y una tierra nueva, pues ya el primer cielo y la
primera tierra habían dejado de existir, lo mismo que el mar.
2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de
Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.
2 Vi también que la ciudad santa, la nueva Jerusalén, bajaba del cielo,
donde vive Dios. La ciudad parecía una novia vestida para su boda, lista
para encontrarse con su novio.
3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con
los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo
estará con ellos como su Dios.
3 Y oí que del trono salía una fuerte voz que decía:«Aquí es donde Dios vive
con su pueblo. Dios vivirá con ellos, y ellos serán suyos para siempre. En
efecto, Dios mismo será su único Dios.
4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte,
ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas
pasaron.
4 Él secará sus lágrimas, y no morirán jamás. Tampoco volverán a
llorar, ni a lamentarse, ni sentirán ningún dolor, porque lo que antes
existía ha dejado de existir.»
Apocalipsis 22:3,5
3 Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en
ella, y sus siervos le servirán,
3 En la ciudad no habrá nada ni nadie que desagrade a Dios. Allí estará
el trono de Dios y del Cordero, y los servidores de Dios lo adorarán.
5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni
de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos
de los siglos.
5 Allí nunca será de noche, y nunca nadie necesitará la luz de una
lámpara ni la luz del sol, porque Dios el Señor será su luz, y ellos reinarán
para siempre.
2. GUÍANOS
INTRODUCCIÓN
• Dios declara que todo será renovado:
• He aquí que hago nuevas todas.las cosas.
• Abra grande restauración de todas las cosas en Cristo.
• La renovación será tal y tan definitiva, que hará olvidar todo lo pasado.
• Destruirá Dios todas las cosas viejas y hará todas nuevas.
DIRIGENOS
BOSQUEJO:
“NO MÁS” EN APOCALIPSIS
• No más mar Ap.21:1
a. El mar ha cobrado la vida de millones de personas en transcurso de la
historia.
b. El mar ya no existía más.
c. En el mundo nuevo que surgirá al final de los tiempos ya no existirá el
mar.
d. Vealo bien porque este mar que tu y yo vemos hoy no lo volveremos a
ver.
INSPIRANOS
• No más tristeza Ap. 21:4
A. Debido a su presencia no hay más tristeza.
B. La tristeza nos ha visitado a todos (muerte)
CONDÚCENOS
• No más llanto Ap. 21:4
No volverán a llorar.(Derramar lágrimas en señal de dolor)
USANOS
• No más dolor Ap. 21:4
A ya no sentirán ningún dolor
( cabeza, riñones, corazón)
GUÍAME
• No más maldición Ap.22:3
a. Por el pecado del hombre, la naturaleza fue sometida a la maldición.
b. La maldición de Dios de Génesis 3:17 será quitada para siempre.
c. El pecado no volverá a ser nombrado nunca más.
d. Porque no habrá nada ni nadie que desagrade a Dios.
AYÚDANOS
• No más Noche Ap. 22:5
A. Allí nunca será de noche
B. POR QUÉ? porque Dios el Señor será su luz AVIVANOS
• No más muerte Ap.21:4
A. "Y destruirá a la muerte para siempre,
B. No morirán jamás.
MINISTRANOS
3. gn.3:17 Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y
comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él;
maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella
todos los días de tu vida.
CONCLUSIÓN
Colosenses 3:2 (RVR1960)
2 Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Piensen en las cosas del cielo, donde Cristo gobierna a la derecha de
Dios. No piensen en las cosas de este mundo. BIB. LENG.ACT
REVELANOS
Cielo nuevo y tierra nueva
IDEAS QUE SURGEN DEL ENSAYO DEL SERMÓN REVELACIÓN
GES
Dios declara que todo será renovado: He aquí que hago nuevas todas.las
cosas. De este modo anuncia la grande restauración de todas las cosas en
Cristo 44
. La renovación será tal y tan definitiva, que hará olvidar todo lo pasado.
enjugara las lagrimas de sus ojos y la muerte no existirá más, ni habrá duelo, ni
gritos, ni trabajo, porque todo esto es ya pasado (v.4). Este texto se inspira en
el profeta Isaías, el cual dice: "Y destruirá a la muerte para siempre, y enjugará
el Señor las lágrimas de todos los rostros, y alejará el oprobio de su pueblo,
lejos de toda la tierra"42
.
4. San Juan ha hablado en el capítulo anterior del estanque de fuego
en donde serán atormentados eternamente los malos; pues bien,
ahora, por una especie de contraposición, comienza a hablar con
entusiasmo de la bienaventuranza de los elegidos en la creación
restaurada. Una vez ejecutado el juicio final, se abre una nueva vida
para los predestinados. Toda la naturaleza visible será renovada
y transformada. Del mismo modo que, por el pecado del
hombre, la naturaleza fue sometida a la maldición y a la
corrupción 5
, así también ahora, con la glorificación del hombre,
será librada de la corrupción y pasará a un estado mejor 6
.
El vidente de Patmos contempla un cielo nuevo y una tierra nueva
(v.1). Esta idea es un tema apocalíptico7
que tiene también grandes
resonancias en las esperanzas mesiánicas. El profeta Isaías
anuncia para los tiempos mesiánicos la creación de "cielos nuevos y
una tierra nueva"8
. Y los apócrifos judíos hablan también de la
aparición de un mundo nuevo que saldrá del caos del mundo
antiguo 9
. El Libro de Henocafirma claramente: "Y después de esto,
en la semana décima., tendrá lugar el gran juicio eterno. Y el primer
cielo desaparecerá y pasará, y un cielo nuevo aparecerá, y
todas las potestades del cielo brillarán eternamente siete veces
más. Y después de esto vendrán semanas numerosas, que
transcurrirán innumerables, eternas, en la bondad y en la justicia, y
desde entonces el pecado no volverá a ser nombrado nunca
más"10
. Esta misma concepción se encuentra en el Nuevo
Testamento. En este sentido nos dice la 2 Pe: "Nosotros
esperamos otros cielos nuevos y otra tierra nueva, en que tiene
su morada la justicia, según la promesa del Señor." 11
El
Apocalipsis, lo mismo que la 2 Pe 3:13, entienden esta
transformación de los últimos tiempos. Es algo parecido a la
palingenesia, o nuevo estado de cosas, esperado por la literatura
judía bajo el influjo de ciertos textos proféticos 12
. Sin embargo, el
Apocalipsis no enseña una destrucción o renovación real y material
del mundo físico, sino que permanece en el campo del simbolismo.
Lo que quiere decir San Juan es que, con el juicio divino —
purificador más poderoso que el mismo fuego —, los cielos y la
tierra quedarán tan puros que verdaderamente parecerán otros.
Quedarán totalmente libres de los impíos y de los malvados,
perseguidores de la Iglesia. Por consiguiente, los cielos y la tierra
serán nuevos, porque quedarán purificados.
El apóstol San Pedro, naciendo alusión a la historia del Génesis
1:9, dice que la tierra salió del agua, y luego con el agua del
diluvio fue purificada13
. Pero "los cielos y la tierra actuales están
reservados por la misma palabra para el fuego en el día del
juicio y de la perdición."14
El fuego es el elemento de mayor
energía purificadora, y, siendo tal la corrupción de los cielos,
mancillados con el culto idolátrico que les rinden los hombres, y de
la tierra, manchada con tantas iniquidades como en ella se
cometen, necesitan un elemento de una gran fuerza purificadora
para limpiarlos 15
.
5. San Pablo también espera una especie de nueva creación por la
cual suspiran las criaturas, sintiendo como dolores de parto
mientras llega la regeneración espiritual del hombre 16
.
El mar, a imitación de la tierra, desaparecerá del mundo nuevo que
surgirá después de la gran purificación del juicio final. La
desaparición del mar es también un rasgo apocalíptico que se
encuentra en la literatura judía. Los Oráculos sibilinos afirman: "Y
sucederá en el último período que el océano se secará."17
. El mar,
resto del caos primitivo acuático, Tehom-Tiamat18
, morada de los
monstruos marinos Tannim, Leviatan, Rahab y laSerpiente 19
, que
tan peligroso resultaba para los que tenían que atravesarlo, tenía
mala fama entre los antiguos. El Dragón del capítulo 12 se apostó
en la playa, junto al mar 20
; y la Bestia de siete cabezas y diez
cuernos salía del mar 21
. Moisés, a la salida de Egipto, secó el mar
Rojo para que pasase el pueblo de Israel. En el mundo nuevo que
surgirá al final de los tiempos ya no existirá el mar.
Esta completa renovación del mundo exige que la nueva capital, la
Jerusalén nueva, sea totalmente celeste. Por eso el autor sagrado
dice que vio la ciudad santa descender del cielo del lado de Dios
(v.2).
La presenta personificada bajo la figura de una novia ricamente
ataviada. Se le llama ciudad santa porque en ella surgía el templo
del único Dios verdadero. Y al mismo tiempo será nueva porque en
ella ya no habrá ninguna cosa impura o profana. Jerusalén era el
símbolo de la alianza de Dios con el pueblo escogido. La literatura
rabínica habla de la existencia de un modelo de la ciudad de
Jerusalén junto a Dios antes de que fuera fundada en la tierra 22
. San
Juan se sirve de esta creencia judía de una Jerusalén preexistente,
que se manifestaría en los tiempos escatológicos, para describirnos
una nueva Jerusalén totalmente espiritual, mansión de los elegidos.
Hacia esta ciudad futura, ideal, se dirigían las miradas y las
esperanzas, de los israelitas — lo mismo que en Ezequiel 40-48 —
especialmente después de la destrucción de Jerusalén en el año 70.
Jerusalén, en cuanto capital de la nación hebrea, viene a ser
frecuentemente como la expresión del mismo pueblo. Y como Israel
— según la concepción de los profetas — está íntimamente ligado
con Yahvé por un vínculo conyugal, por eso se le llama Esposa de
Yahvé 23
. Esto mismo explica que en nuestro pasaje se dé a
Jerusalén el nombre de esposa, en cuanto que representa al pueblo
de Dios. En esta concepción profética se funda San Pablo para
decir que Jerusalén es nuestra madre, porque representa al pueblo
de los hijos de Dios, de los que creyeron en Jesucristo y
aprendieron de El a llamar a Dios Padre. El mismo San Pablo
considera a la Iglesia como Esposa de Cristo 24
. Pues bien, San
Juan extiende a la Iglesia triunfante lo que San Pablo dice de la
Iglesia militante. Esta es la razón del lenguaje empleado en este
pasaje, donde el autor sagrado ve a la Jerusalén glorificada que
desciende del cielo ataviada como novia en el día de sus bodas.
Con esta imagen se quiere expresar la alianza íntima e indisoluble
del Cordero con su pueblo, con la Iglesia. Esta alianza íntima e
6. indisoluble de Cristo con su Iglesia ya ha sido representada en el
Apocalipsis bajo la imagen de unas bodas 25
, pues Jesucristo es
comparado en el Nuevo Testamento a un esposo 26
, y la Iglesia a
una esposa. 27
La esposa del Cordero que ve San Juan viene
ataviada con sus mejores galas de novia, es decir, con la gracia y
con las buenas acciones de los santos. Se dice, además, que la
nueva Jerusalén baja del cielo porque ha de ocupar el sitio de antes
en la nueva tierra una vez purificada de todas las impurezas que
antes la tenían manchada 28
.
Al mismo tiempo que ve esto San Juan, oye una voz fuerte que
salía del mismo trono de Dios, pronunciada probablemente por
algún querubín, que dice: He aquí el tabernáculo de Dios entre los
hombres. (ν.3). Es una alusiσn a la tienda o tabernáculo fabricado
por Moisés en el desierto, dentro del cual habitaba Dios 29
. La idea
cumbre de la religión mosaica era la presencia de Yahvé en medio
de su pueblo. Esta presencia de Dios se hace mucho más íntima en
el Nuevo Testamento por la gracia de Jesucristo y por los
sacramentos. El autor sagrado nos dice que Diosplantará su tienda
(σκηνώσει) entre ellos, haciendo un juego de palabras entre el
término griego skéné, tienda, y la palabra hebrea Sekinah 30
, que era
el símbolo de la presencia de Yahvé en medio de su pueblo 31
. La
presencia de Dios entre los hombres expresa la idea de morada y
de actividad que había comenzado a manifestarse por medio de la
alianza de Yahvé con Israel en el Sinaí 32
. La encarnación de Cristo
mostró de un modo más pleno esa presencia de Dios entre los
hombres y la espiritualizó 33
. Pero todavía será más perfecta,
definitiva y consumada al fin de los tiempos, cuando Dios habite y
reine en medio de los elegidos en el cielo. Entonces sí que se podrá
considerar a los bienaventurados como supueblo, y a Dios llamarlo
Dios con ellos, aludiendo a la profecía del Emmanuel, Dios con
nosotros 34
. Ezequiel también nos dice, hablando en nombre de
Yahvé: "Pondré en medio de ellos mi morada, y yo seré su Dios y
ellos serán mi pueblo" 35
. Y el mismo profeta, después de haber visto
cómo Dios abandonaba el templo profanado por los babilonios 36
y la
vuelta de Yahvé a su morada de Sión 37
, nos dice que el nombre de
la ciudad será Yahvé Sammak, Yahvé esta allí 38
.
En el Antiguo Testamento se repite con frecuencia que Yahvé será
el único Dios de Israel e Israel será el pueblo predilecto de Yahvé.
Si Israel cumple los preceptos del Señor, Yahvé le defenderá de los
enemigos y lo llenará de felicidades39
. Pero si el pueblo pecaba y se
apartaba de Yahvé, entonces Dios se retiraba de en medio de su
pueblo 40
. En la nueva Jerusalén, Dios habitará indefectiblemente en
medio de los elegidos, que no provendrán únicamente de Israel,
sino de todas las naciones de la tierra. En adelante ya no habrá
distinción entre judío y gentil, sino que todos podrán entrar a formar
parte del pueblo de Dios mediante la fe 41
. La presencia continua e
indefectible de Dios en medio de los elegidos traerá como
consecuencia la exclusión absoluta de toda suerte de penalidades.
Lo expresa el autor sagrado con expresiones muy gráficas:enjugara
las lagrimas de sus ojos y la muerte no existirá más, ni habrá duelo,
7. ni gritos, ni trabajo, porque todo esto es ya pasado (v.4). Este texto
se inspira en el profeta Isaías, el cual dice: "Y destruirá a la muerte
para siempre, y enjugará el Señor las lágrimas de todos los rostros,
y alejará el oprobio de su pueblo, lejos de toda la tierra"42
. Un nuevo
orden de cosas será inaugurado. En él cesará toda miseria, y los
elegidos serán colmados de felicidad en la nueva Jerusalén, porque
la primera condición de la bienaventuranza es la exclusión de todo
mal. Con esto comienza el reino de la alegría y de la felicidad. El
Libro de Henoc también nos describe la felicidad del reino
mesiánico en estos términos: "Y la tierra quedará limpia de toda
corrupción, de todo pecado, de todo castigo y de todo dolor, y no
enviaré más (estos azotes) sobre la tierra hasta las generaciones y
hasta la eternidad."43
Después el mismo Dios toma la palabra para dirigirse al vidente
(v.5). Es la primera vez que en el Apocalipsis se dice expresamente
que Dios toma la palabra. Esta intervención suprema de Dios se
explica bien si tenemos en cuenta la gravedad de las últimas
revelaciones con que termina el libro. Dios declara que todo será
renovado: He aquí que hago nuevas todas.las cosas. De este modo
anuncia la grande restauración de todas las cosas en Cristo 44
. La
renovación será tal y tan definitiva, que hará olvidar todo lo pasado.
Así se realizarán las antiguas promesas hechas al vidente de
Patmos en sus visiones pasadas 45
. Esta promesa de la renovación
total del orden humano y espiritual es ciertísima, pues así lo
asegura el mismo Dios, cuyas palabras son fieles y verdaderas ^6
. Y
aunque el hecho todavía no se ha realizado, es tan cierto que se
llevará a efecto, que ya se considera como realizado. Por eso, los
designios de Dios son presentados como ya cumplidos, pues el alfa
y la omega, el principio y el fin (v.6), ejecutará todo lo prometido
desde la primera letra hasta la última. Dios es el que dirige la
historia, y, por consiguiente, sabrá ordenar todas las cosas a
su fin primario, que es a su misma glorificación y a la
exaltación de su Iglesia. Todo comienza y termina en Dios, porque
El es el Creador de todos las cosas, y todos los seres convergen
ininterrumpidamente hacia El como a su centro y a su fin.
A los cristianos que se hayan mostrado valientes y hayan salido
vencedores en las luchas pasadas 47
, y a todo el que tenga sed, Dios
les concederá bondadosamente derecho a la inmortalidad
bienaventurada al lado de Jesucristo. Esto es lo que significa dar de
beber gratis de la fuente de agua de vida. El que tenga sed designa
a aquellos que sienten ansias de felicidad espiritual y cumplen los
requisitos establecidos por Cristo y la Iglesia para obtenerla. Dios
concede esa felicidad bienaventurada gratuitamente, en cuanto que
es un don gratuito de Dios, y porque se conseguirá sin fatiga y sin
sufrimientos en el cielo. Cristo apagará todos los deseos de los
elegidos, dándose El mismo a ellos como fuente de
bienaventuranza eterna. Esto se cumple ya en parte en este mundo
cuando los cristianos reciben la gracia y los sacramentos 48
; pero
Dios los saciará todavía mucho más perfectamente en el cielo. Aquí
alcanzará la promesa divina su más sublime realización cuando
8. Dios comunique a sus fieles la vida feliz de que El goza. Entonces
se realizará la perfecta adopción de los cristianos como hijos de
Dios (v.v) que Cristo nos comunica ya en este mundo49
. Porque en el
cielo es donde entramos en posesión de aquella divina herencia, la
cual sólo poseemos en esperanza en este mundo 50
. Pero
únicamente la obtendrán los vencedores en las persecuciones y en
las dificultades de la presente vida y aquellos que hayan renunciado
a todo lo de este mundo por amor de Cristo 51
. Éstos tales recibirán
una magnífica recompensa en el cielo, y Dios será todo para ellos y
ellos serán sus hijos 52
. Esta promesa tantas veces anunciada en la
Sagrada Escritura adquiere aquí su realización escatológica y
definitiva.
Esta es la suerte feliz que aguarda a los cristianos vencedores. En
cambio, los cristianos cobardes, que no se atrevieron a enfrentarse
con la persecución, los infieles, los idólatras y, en una palabra,
todos los malos serán terriblemente castigados (v.8). San Juan nos
da una lista de aquellos que, habiendo cometido acciones
abominables a los ojos de Dios, serán arrojados al estanque de
fuego. En primer lugar se refiere a los cristianos remisos y cobardes
que, al sobrevenir la persecución, no supieron luchar contra la
Bestia y renegaron de Cristo. Vienen a continuación los infieles que
han rehusado la fe, cerrando los ojos a la luz de la verdad y de la
revelación 53
. Muchos de éstos se han hecho abominables a los ojos
de Dios por haberse entregado a vicios execrables e impuros,
especialmente a los vicios contra la naturaleza 54
. La perversión
moral de estos viciosos viene a causar como mareo en aquellos que
perciben su intolerable hedor. También los homicidas o asesinos,
los fornicadores, loshechiceros que en sus artes mágicas se
sirvieron del engaño, los idólatras y todos los embusteros, es decir,
todos los mentirosos y falsos doctores que enseñaron doctrinas
erróneas 55
, serán castigados por Dios con la muerte eterna en el
estanque de fuego y azufre. Esta muerte eterna es llamada aquí la
segunda muerte por contraposición a la muerte primera o corporal,
que se da cuando el hombre sale de este mundo.
Este pasaje del Apocalipsis puede considerarse como el eco de
aquella afirmación de San Pablo en su 1 Cor: "¿No sabéis que los
injustos no poseerán el reino de Dios? No os engañéis: ni los
fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los
sodomitas, ni los ladrones, ni los avaros, ni los ebrios, ni los
maldicientes, ni los rapaces poseerán el reino de Dios." 56