El documento habla sobre la necesidad de un modelo energético más sostenible que se centre en la eficiencia energética, la gestión de la demanda de energía y un enfoque integral de sostenibilidad económica, social y ambiental. También menciona la importancia de fomentar una nueva cultura energética basada en la eficiencia, el acceso universal a la energía y la sostenibilidad a través de la investigación, el desarrollo y la comunicación.