Este documento resume la vida y obra de la poeta española Gloria Fuertes. Discute cómo fue más tolerada su orientación lesbiana en la España franquista debido a estereotipos sobre las mujeres lesbianas. También analiza sus libros para niños Coletas y Pelines, este último una combinación de poesía y prosa sobre un niño huérfano. El documento concluye resaltando los valores humanos y cristianos en la obra de Fuertes.

3. INTROITO
En España siempre se ha sido mucho más tolerante con las lesbianas que con los
homosexuales, supongo que por dos motivos principales. Porque el macho ibérico en el
fondo, y en la superficie, nunca se ha creído que a las lesbianas no les gusten los hombres, y
porque uno de sus sueños húmedos es practicar un trío con dos mujeres, a ser posible
lesbianas, el summum del morbo, del supremacismo heterosexual. Gloria Fuertes era
lesbiana, reconocida, y a nadie le importaba una higa, con ese aspecto de camionera era algo
que todo el mundo daba por hecho, algo parecido pasa con Almudena Grandes, que por lo
visto es heterosexual. Para los niños de los 70-80 Gloria Fuertes, Gloria Fuerte para los
amigos, era esa señora fuerte, gorda, los niños éramos así de originales, a los gordos les
llamábamos gordos, que salía en todos los programas infantiles (“Un globo, dos globos, tres
globos”, “La cometa blanca”) soltando rimas con mucho desparpajo y gracejo. Esa faceta
pasada la infancia se hacía difícil de asimilar, muchas de esas rimas provocan sonrojo. Su
poesía para adultos no tanto, aunque solo en su faceta chulesca, egocéntrica, humorística, es
cuando brilla a gran altura. Desde luego como poeta es complicado situarla en un lugar
predominante de las letras españolas, tampoco sus glorierías son el colmo del ingenio. En
cambio su desconocida faceta como cuentista mágica es mucho más reivindicable, lo mismo
que esta intermedia, de novelista con niños, que no novelista para niños. Una faceta que
apenas explotó, un par de libros de Coleta, bastante insulsos, y este de Pelines, que combina
a la perfección poesía con prosa, inocencia, ternura, con mala leche. Pelines (López Viñeta)
desborda humanidad por todos sus poros, es tan campechano como la propia Gloria Fuertes.
Y también huérfano (Gloria solo de padre), un tema con el que estaba muy concienciada,
100 millones de su herencia fueron a parar a la “Ciudad de los Muchachos” del padre Jesús
Silva. En la España de Franco, y en la República, no era incompatible ser feminista,
progresista, pacifista, ecologista y cristiana, solo a partir de la Transición todo lo que oliera
a religión se demonizó por parte de la sectaria izquierda española.

4. Los valores de Gloria Fuertes son profundamente cristianos, humanos, y al que le
moleste eso pues que revise sus conceptos democráticos. Tanto Coletas como Pelines tienen
su origen en las colaboraciones de Gloria Fuertes en las revistas de tebeos del movimiento,
“Flechas y Pelayos” y “Maravillas” (1946-47), que ni eran simple adoctrinamiento, o no del
todo, ni tan retrógradas como tratan de simplificar los historiadores. De hecho las historias
en forma de tebeo de Pelines (nunca publicadas en forma de álbum, a pesar de que era el
personaje favorito de los niños), son más transgresoras, salvajes, que su posterior trasvase
en forma de libro, ya en plena democracia. Lo mismo se puede decir de las ilustraciones, las
coloristas, minimalistas, de Titos (realmente el creador del personaje, que antes de ser
Pelines se llamó Nicanorcito, aunque cuesta creer que no fuera Gloria Fuerte la guionista de
esa primera historia) le dan cien mil vueltas a las simplemente ilustrativas, realistas, de
Marta Balaguer. Esta edición casi completa recoge las dos versiones, que son
complementarias, fruto de un mismo impulso creativo.

111. APÉNDICE
PELINES
(1946-1947)
Texto: Gloria Fuertes
Dibujos: Titos
Edición:
Julio Tamayo
cinelacion@yahoo.es