SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 21
Descargar para leer sin conexión
DE ESPARTA A ESPARTACO 
ALEMANIA 1918-1919, de la “puñalada por la espalda” a la 
revolución comunista 
Francisco José Fernández-Cruz Sequera. 
Agosto 2014. 
Publicado en: http://lagranpartida.blogspot.com.es 
Miembros de los Freikorps en Berlín durante el golpe de Kapp 
1 
Elegía 
“Porque es hermoso que un valiente muera, 
caído en las primeras filas, luchando por su Patria. 
Es, en cambio, la cosa más dolorosa de todas 
vivir como un mendigo, abandonando la Patria y sus fértiles campos, 
errante con la madre querida y el padre anciano 
y los hijos aún niños y la esposa legítima. 
Éste será objeto de odio para aquéllos a cuyo país llegue 
cediendo a la necesidad y a la horrible pobreza; 
deshonra su linaje, desmiente su noble rostro 
y toda infamia y toda vileza va con él. 
Por lo tanto, si no hay para un vagabundo ninguna ayuda 
ni tampoco respeto, consideración ni compasión, 
luchemos valientemente por nuestra tierra 
y muramos por nuestros hijos sin ahorrar nuestras vidas. 
Así pues, oh jóvenes, luchad unidos 
y no déis la señal de la huida vergonzosa ni del miedo; 
haced grande y fuerte en el pecho vuestro corazón 
y no tengáis amor por vuestras vidas cuando lucháis con el enemigo;
ni huyáis abandonando caídos a los de más edad, 
cuyas rodillas ya no son ágiles, a los viejos; 
pues es vergonzoso que, caído en las primeras filas, 
yazca en el suelo delante de los jóvenes un hombre de más edad, 
de cabeza ya blanca y barba cana, exhalando en el polvo su alma valerosa, 
con las ensangrentadas vergüenzas cogidas en las manos 
-visión abominable, cosa impía de ver- y desnudo; 
en un joven, en cambio, todo es decoroso 
mientras posee la brillante flor de la amable juventud: 
su vista produce admiración a los hombres y amor a las mujeres; 
caído en las primeras filas, es un héroe. 
Ea pues, que cada uno de vosotros permanezca en su puesto 
con las piernas bien abiertas, firmemente apoyado en el suelo con los dos pies, 
mordiendo el labio con los dientes.” 
2 
TIRTEO de Esparta, (siglo VII a.C.) 
El estallido de la guerra en 1914 dividió radicalmente a los 
europeos en muchos más sentidos de los que a primera vista nos 
pudiera parecer, mucho más allá de la aparición de dos alianzas de 
naciones enfrentadas entre sí. La guerra destruyó imperios, derribó 
tronos, alzó al ateísmo frente a la religiosidad europea y arrasó su 
cultura y su alma. La guerra dividió a los europeos no sólo en 
bandos combatientes, sino en dos conceptos de la existencia 
irreconciliables: por un lado, los herederos espirituales de la 
antigua civilización y cultura europeas; por el otro, los nuevos 
adalides de las fuerzas extraeuropeas y antieuropeas. Una división 
que cruzó cada nación no reconociendo más fronteras que las del 
alma, pues la guerra, al quebrar la unidad espiritual de Occidente 
rompió también la unidad de cada pueblo, que durante los últimos 
dos mil años había servido como base para rechazar los asaltos de 
los extraños a Europa. Sólo así fue posible que por primera vez 
hoyaran suelo europeo las fuerzas militares de los EE.UU., y que se 
alzara de su tumba el espectro del comunismo, ese fantasma que 
recorría Europa desde 1848 según decían Marx y Engels, que 
terminó por torcer los pasos vacilantes del socialismo ético. La 
Gran Guerra, terminó enfrentando el espíritu de la noble y temible 
Esparta, al del vengativo tiranicida de Espartaco. 
Y cuando este conflicto espiritual se tornó militar, y al choque 
de espíritus le sucedió el choque de material y ejércitos, se 
pusieron de manifiesto las diferencias dentro del movimiento 
socialista, que finalmente concluyeron con la división y 
enfrentamiento entre las distintas tendencias del socialismo 
agrupado en la II Internacional. Cuando llegó el final de los 
combates, la facción revolucionaria del movimiento socialista se 
encontró ante lo que creía que era el momento idóneo para llevar a 
cabo su revolución, siguiendo el ejemplo de la Rusia soviética. De 
esta manera, Hungría, Baviera, Alemania o Italia, entre otros,
experimentaron sendos asaltos revolucionarios que finalmente 
fracasarían. Finalmente, el socialismo terminó dividido en tres 
tendencias, que dieron lugar cada una de ellas a la fundación de los 
partidos socialistas o socialdemócratas burgueses, de los 
comunistas colectivistas e internacionalistas y de los socialistas 
identitarios comunitaristas o fascistas. 
En el caso de Alemania, el final de la guerra y la proclamación 
de la república, vino marcado por dos elementos relacionados entre 
sí que entrecruzan su origen y su accionar: por un lado, los 
movimientos revolucionarios comunistas; por el otro, la evidente 
participación de numerosos judíos en estos acontecimientos. 
1. La división de la II Internacional en los años 
anteriores a la guerra mundial. 
3 
En 1889, trece años 
después de la liquidación 
de la Primera 
Internacional (1876), los 
socialistas de la época 
habían creado una 
segunda organización 
internacional, denominada 
Internacional obrera 
Socialista, que era 
presidida por Emile 
Vandervelde, líder del 
Partido Obrero belga, el 
partido socialista de la 
época, siendo su 
secretario Camille 
Huysmans, otro conocido 
socialista belga. Durante 
los veinte años anteriores 
al comienzo de la Gran 
Guerra, tras la expulsión 
de los anarquistas en 
1893, tuvo lugar dentro 
de la II Internacional, un 
encarnizado debate entre 
los partidarios de la 
revolución y los reformistas. Los reformistas eran partidarios de 
llegar a un entendimiento con el poder e integrarse en los 
regímenes liberales, realizando una labor progresiva de corrección 
del capitalismo, que los aproximara a un sistema socialista. 
Mantenían una posición de principios izquierdistas, pero llegaban a
decisiones prácticas negociadas con las fuerzas liberales. En el 
congreso de la Internacional celebrado en París en el año 1900, el 
voto de la mayoría se inclinó por rechazar la participación en el 
gobierno; pero, en la resolución final, se dejaba abierta la 
posibilidad de la participación en el gobierno en circunstancias 
extremas. Parecía así dejarse resuelta la cuestión más fundamental 
para el movimiento socialista: integrarse o no en el sistema 
capitalista. Debemos señalar, que en este momento aún no eran 
mayoría los seguidores del socialismo marxista en el seno de la 
Internacional. Pero los socialistas estaban divididos respecto de la 
participación de los socialistas en el gobierno y la alianza con los 
grupos burgueses. 
En la conferencia de la Internacional celebrada en Ámsterdam 
en 1904, esta situación dio lugar a un debate entre el francés 
Jaures y el alemán Bebel, que tuvo un gran impacto entre los 
asistentes, al reflejar dos posiciones opuestas, la pactista del 
francés y la revolucionaria del alemán. Sin embargo, en la práctica 
política diaria, el parlamentarismo había ganado terreno. Ya entre 
1909 y 1910, el asunto fue discutido por los socialistas belgas, que 
estaban dispuestos a formar gobierno junto con los liberales, lo que 
finalmente no ocurrió a la vista de los resultados electorales. En 
todo caso, permanecía la división de los socialistas en torno a la 
posibilidad de pactar con los gobiernos parlamentarios liberales. 
Conferencia de La II Internacional en 1913 
4
También estaban divididos, por la cuestión de la conveniencia 
y necesidad de utilizar como arma la huelga general política. Era 
opinión de muchos radicales, que la mayoría absoluta en el 
parlamento no sería suficiente para forzar un cambio de sistema 
político, por lo que entendían que era necesario recurrir a la acción 
violenta extraparlamentaria de la clase obrera, en forma de huelga 
general. En Alemania, el congreso del partido en 1906 desestimó 
esta posibilidad, a su empleo se opuso vehementemente Karl 
Legien, secretario general del sindicato. 
Willi Sitte, Homenaje a Lenin, 1969 
5 
Otra cuestión que 
abundaba en la falta de 
unidad de los socialistas, 
era la cuestión colonial. La 
Internacional se asentaba 
en los principios 
fundamentales de igualdad 
de derechos de todos los 
pueblos y razas, su igual 
derecho a la dignidad, la 
justicia, la libertad y a la 
independencia Nacional, así 
como en el principio de 
solidaridad entre los 
oprimidos de todas las 
naciones y razas. En el 
Congreso de Londres de 
1896, la Internacional 
había formulado el principio 
de "plena 
autodeterminación para 
todas las naciones", 
considerando al 
colonialismo como una 
"manifestación del 
capitalismo". Pero cuando 
esta cuestión se enfocaba desde la perspectiva nacional e cada 
partido, el enfoque cambiaba. Los socialistas británicos defendían 
la colonización con el argumento de que ningún pueblo podía 
mantener la exclusiva en la explotación de los recursos a expensas 
de otros pueblos; la tierra, como bien común de toda la humanidad 
obliga a todas las naciones a compartir sus recursos naturales, 
prevaleciendo este derecho sobre los intereses de la población 
local. En Alemania, los socialistas reformistas abundaban en la 
misma dirección y apoyaban las pretensiones alemanas de 
proceder a un nuevo reparto colonial.
En el Congreso de París de 1900, ya se apuntaba a la 
redistribución de las colonias y de los recursos como causa de una 
futura guerra imperialista. Pero la conferencia más importante fue 
la celebrada en Stuttgart en 1907, los franceses propusieron la 
huelga de masas e incluso la insurrección en caso de guerra; pero 
para los alemanes esto era inaceptable, dado que ello les 
conduciría directamente a la ilegalización. Presentaron en su lugar 
un nuevo texto que nada concretaba. Lenin1, a través de su 
1 Lenin es el seudónimo de Vladímir Ilich Uliánov (Simbirsk, Rusia, 22 de 
abril de 1870 - Gorki, 21 de enero de 1924), dictador de origen judío y 
líder bolchevique. Fue el primer presidente del Gobierno soviético (el 
Consejo de Comisarios del Pueblo) de la Unión Soviética, elegido en el II 
Congreso de los Soviets de diputados obreros y soldados de toda Rusia el 
25 de octubre de 1905. Los documentos procedentes del archivo del KGB 
que confirman que confirman el origen judío de Lenin, fueron expuestos 
en el Museo de Historia Estatal de Rusia. Entre los nuevos documentos 
publicados y puestos en exhibición está una carta escrita por la hermana 
de Lenin, Anna Ulyanova, que dice que su abuelo materno era un judío 
de Ucrania que se convirtió al cristianismo para escapar de la persecución 
en la Zona de Residencia y tener acceso a una mejor educación. “Vino de 
una familia judía pobre y fue, según su certificado de bautismo, el hijo de 
Moses Blank, un nativo de Zhitomir” (una ciudad occidental de Ucrania), 
escribió Ulyanova en 1932. Anna Oulianova hace hincapié en que su 
hermano “siempre tuvo una alta opinión de los judíos”. Fue admitido en 
la Universidad de San Petersburgo y terminó sus estudios de derecho en 
1891. En 1895 participó en la fundación de la Unión para la Lucha por la 
Emancipación de la Clase Obrera de San Petersburgo. Pasó deportado a 
Siberia hasta 1900. Después de este primer destierro allí, huyó a Suiza, 
donde fundó el periódico Iskra (La chispa) en colaboración con Georgui 
Plejánov, L. Martov y otros marxistas. Lenin pasó en Europa la mayor 
parte del periodo anterior a 1917. Regresó a Rusia tras la Revolución de 
1905, pero se vio obligado a abandonar nuevamente el país en 1907 ante 
la falta de apoyo que acabó con la insurrección. El estallido de la Primera 
Guerra Mundial (1914-18) le dio la oportunidad de poner en práctica sus 
ideas: definió la contienda como fruto de las contradicciones del 
capitalismo y del imperialismo (El imperialismo, fase superior del 
capitalismo, 1916) y, en nombre del internacionalismo proletario, llamó 
sin éxito al movimiento socialista mundial a transformar la contienda en 
una guerra civil generalizada; más tarde, el deterioro del régimen zarista 
por efecto de la guerra le permitió pensar en lanzar la revolución 
socialista en su país como primer paso para una era de revolución 
mundial. A pesar de las "críticas" al sistema capitalista, los bolcheviques 
fueron financiados por los banqueros judíos de Wall Street: los 
Rothschild, los Warburg, Kuhn, Loeb, Olef Aschberg, Schiff, Lazare, 
Hirsch, Gunzbourg, Speyer, Wallenberg, Guggenheim, Breitung, etc., 
todos promovieron revoluciones socialistas-marxistas y anarquistas. La 
Revolución Rusa de octubre de 1917 que derrocó al régimen zarista fue 
un acontecimiento que Lenin no había previsto ni tuvo nada que ver con 
él, pero regresó apresuradamente a Rusia con la ayuda del ejército 
alemán. Los bolcheviques de Petrogrado, entre los que se encontraba 
6
emisaria la judía Rosa Luxemburgo2, proponía utilizar la crisis 
económica y política provocada por la guerra para “acelerar la 
Stalin, estaban de acuerdo en que los representantes del ejército y de los 
soviets de trabajadores respetaran al Gobierno Provisional de Kerenski 
que se había establecido, pero Lenin rechazó esta línea de actuación. 
Después de un fallido levantamiento de los trabajadores en julio de 1917, 
Lenin escapó a Finlandia ocultándose del Gobierno Provisional. Tras la 
agitación bolchevique y la consecutiva caída del Gobierno Provisional, y 
como creían tener controlado el II Congreso de los Soviets, los 
bolcheviques de Lenin no tienen inconveniente en que se celebren las 
elecciones democráticas a la Asamblea Constituyente. Sólo consiguieron 
el 23% de los votos. Tras este revés, dieron un golpe de estado conocido 
como la Revolución de octubre, gracias a la estrategia bolchevique de 
exigir la rendición de Rusia a las potencias centrales, apartando al país de 
la guerra en 1918 por la Paz de Brest-Litowsk. Disolvió la Asamblea 
constituyente (1918), proscribió a la oposición y creó una policía política 
para perseguir a los disidentes incluyendo a los demás socialistas, 
siguiendo literalmente las tesis de Marx de acabar con los socialistas no 
marxistas; a escala mundial, exigió a los demás partidos socialistas 
fidelidad absoluta a sus directrices, , provocando la escisión del 
movimiento obrero con la aparición en todos los países de partidos 
comunistas sometidos al control de una Tercera Internacional comunista 
(Komintern) con sede en Moscú (1919). Delegó en Trotsky la 
organización del Ejército Rojo, con el que consiguió arrasar al ejército 
blanco tras una dura Guerra Civil (1918-20). Una vez recuperado el 
control del antiguo imperio de los zares, articuló el territorio creando la 
Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (1922), a la que dotó de 
organización formal por la Constitución de 1923. Tras caer enfermo y 
morir, la mujer de Lenin, también judía, conocida como Krupskaya, pero 
cuyo verdadero nombre era Nadiezda Konstantinovna, acentuó su lucha 
mediante el adoctrinamiento de las mujeres, continuando con el 
pensamiento de Lenin. En su Outchit Gazeta escribió (10/Oct./1929): 
"Aunque la socialización de las mujeres no está formalmente ratificada en 
la lucha soviética, debe convertirse en una realidad y penetrar en la 
conciencia de las masas. Consecuentemente, cualquiera que intente 
defender a una mujer que es (indecentemente) asaltada, muestra una 
naturaleza burguesa y se declara a sí mismo a favor de la propiedad 
privada. El oponerse a la violación es resistirse a la revolución comunista 
de octubre."Fuentes: http://www.enlacejudio.com/2011/06/10/los-rusos-descubren- 
incredulos-los-origenes-judios-de-lenin/; 
http://www.anajnu.cl/raicesjudiaslenin.htm; 
http://es.metapedia.org/wiki/Vladimir_Lenin 
2 Rosa Luxemburgo nació en Zamosc, cerca de Lublin, en la Polonia 
entonces controlada por Rusia, en el seno de una familia de origen judío. 
Aparece ya como miembro del partido polaco marxista "Proletariat" en 
1886. En 1887 Luxemburgo terminó la educación secundaria, pero tuvo 
que huir a Suiza en 1889 para evitar su detención. Allí asistió a la 
Universidad de Zurich junto a otras figuras comunistas, como Anatoli 
Lunacharsky y Leo Jogiches. En 1898, Rosa Luxemburgo obtuvo la 
ciudadanía alemana al casarse con Gustav Lübeck, y se mudó a Berlín. 
7
Allí participó activamente con el ala más izquierdista del Partido 
Socialdemócrata Alemán (SPD), definiendo claramente la frontera entre 
su fracción y la teoría revisionista del líder moderado el judío Eduard 
Bernstein, atacándole en 1899 en un folleto titulado "¿Reforma Social o 
Revolución?". Entre 1904 y 1906 su trabajo se vio interrumpido a causa 
de tres encarcelamientos por motivos políticos. Sin embargo, Rosa 
Luxemburgo mantuvo su actividad política; en 1907 tomó parte en el V 
Congreso del Partido Obrero Socialdemócrata Ruso en Londres, donde se 
entrevistó con Lenin. Por esos años, Rosa comenzó a enseñar marxismo 
y economía en el centro de formación del SPD en Berlín. Uno de sus 
alumnos fue el que más tarde se convertiría en líder del SPD y primer 
presidente de la República de Weimar, Friedrich Ebert. El comienzo de la 
Gran Guerra fue una catástrofe personal que incluso la llevó a considerar 
la posibilidad del suicidio. Junto con los dirigentes de origen judío Karl 
Liebknecht, Clara Zetkin y el de origen alemán Franz Mehring, creó el 
grupo Internacional el 5 de agosto de 1914, el cual se convertiría 
posteriormente el 1 de enero de 1916 en la Liga Espartaquista intentando 
provocar una huelga general. Como consecuencia de ello, el 28 de junio 
de 1916 Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht fueron sentenciados a dos 
años y medio de prisión. En 1917, cuando los EEUU intervinieron en el 
conflicto, la Liga Espartaquista se afilió al Partido Socialdemócrata 
Independiente de Alemania (USPD), compuesto también por antiguos 
miembros del SPD opuestos a la guerra, fundado por el también judío 
Karl Kautsky. Tras la abdicación del kaiser Guillermo II y tras el 
levantamiento conocido como la Revolución de Noviembre alemana, la 
cual comenzó en Kiel el 4 de noviembre de 1918, cuando 40.000 
marineros e infantes de marina tomaron el control del puerto en protesta 
por los planes del Alto Mando Naval Alemán de un último enfrentamiento 
con la Real Marina Británica. El 8 de noviembre, los comités de 
trabajadores y soldados controlaban la mayor parte del oeste de 
Alemania, dando lugar a la formación de la República de Consejos 
(Räterepublik), basados en el sistema de sóviets ruso desarrollado en la 
revolución rusa de 1905 y 1917. Rosa Luxemburgo salió de la cárcel de 
Wroclaw el 8 de noviembre; Karl Liebknecht lo había hecho poco antes y 
había ya comenzado la reorganización de la Liga Espartaquista. Juntos 
crearon el periódico "La Bandera Roja". Sin embargo, el frente unido se 
desintegró a finales de diciembre de 1918 cuando el USPD abandonó la 
coalición. El 1 de enero de 1919 la Liga Espartaquista junto a otros 
grupos socialistas y comunistas (incluyendo la Internacional Comunista 
Alemana, IKD) crearon el Partido Comunista de Alemania (KPD), gracias 
a la iniciativa de Karl Liebknecht y Rosa Luxemburgo. Esta última apoyó 
que el KPD se involucrara en la asamblea constitucional nacional -la que 
finalmente acabaría fundando la República de Weimar- pero su propuesta 
no tuvo éxito. En enero una segunda ola revolucionaria sacudió Alemania. 
En respuesta al levantamiento, la milicia nacionalista Freikorps sofocó el 
levantamiento comunista. Tanto Rosa Luxemburgo como Liebknecht 
fueron capturados en Berlín el 15 de enero de 1919 y ajusticiados ese 
mismo día. Fuentes: http://wikiroja.wikispaces.com/Rosa+Luxemburgo; 
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/luxemburg.htm; 
http://es.metapedia.org/wiki/Rosa_Luxemburgo. 
8
caída de la hegemonía capitalista”, haciendo depender cada 
actuación concreta de la situación política de cada país. 
En 1910, el Congreso de Copenhague, decidió que los 
parlamentarios socialistas votarían en contra de todos los créditos 
de guerra, y en el congreso extraordinario celebrado en Basilea en 
1913, se adoptó una resolución por unanimidad contra la amenaza 
de una guerra. El 29 de julio 1914 se celebró en Bruselas la última 
sesión del secretariado de la Internacional. Austria ya había 
declarado la guerra y en París y Berlín, se habían organizado 
manifestaciones a favor de la guerra. Los delegados rusos y 
británicos dijeron que iban a resistir y propusieron una huelga 
general, pero no había nadie a favor. Los alemanes dijeron que 
iban a cumplir con su deber. Los franceses aseguraron la voluntad 
de paz del gobierno francés. La última conferencia de la 
Internacional antes de la guerra, se celebró en Basilea el 24 y 25 
de noviembre de 1912, y nuevamente se realizaron declaraciones 
descalificando la posibilidad de una guerra, sin que se acordara una 
línea de actuación conjunta. 
Rosa Luxemburgo en un mitin antes de la Gran Guerra 
El 1º de agosto, Alemania y Francia se movilizaron. Para los 
socialistas alemanes, la acción revolucionaria contra el gobierno del 
Káiser ni se consideró, y el 4 de agosto votaron los presupuestos 
de guerra. Los socialistas franceses invocaron las decisiones de los 
socialistas alemanes para colocarse a su vez junto al gobierno. Sólo 
los bolcheviques rusos, los socialdemócratas húngaros, búlgaros e 
italianos y el Partido Socialista de los Estados Unidos, se aferraron 
9
a las resoluciones contra la guerra dictadas por la Internacional, 
convocando una conferencia por separado en la ciudad suiza de 
Zimmerwald sin valor político alguno. La Internacional había 
muerto a manos de la Nación. 
2. El origen del enemigo interior: el “derrotismo 
revolucionario”. La creación de la III Internacional. 
Lenin condenó severamente el colapso ideológico de la 
socialdemocracia alemana e internacional: 
"La actitud de los dirigentes del Partido Socialdemócrata 
alemán -el partido más fuerte y más influyente de la segunda 
Internacional (1889-1914)- que votaron el presupuesto de guerra y 
que recogen la fraseología chovinista y burguesa de los Junkers 
prusianos y la burguesía, es una traición pura y simple al 
socialismo. Esta actitud no se puede justificar de ninguna manera, 
aun suponiendo que el Partido Socialdemócrata alemán sea 
extremadamente débil y esté forzado temporalmente a plegarse a 
la voluntad de la mayoría burguesa de la nación. De hecho, en la 
situación actual, el partido se ha involucrado en una política 
nacional-liberal. 
La actitud de los líderes de los partidos socialdemócratas 
belgas y franceses que han traicionado al socialismo al entrar los 
gobiernos burgueses, merece ser condenado de la misma manera. 
La traición al socialismo por la mayoría de los líderes de la 2º 
Internacional (1889-1914) significa la bancarrota ideológica y 
política de esta última."3 
Tras concluir que resultaba imposible reconstruir la 
Internacional tal y como la habían conocido, predica que: 
“La transformación de la actual guerra imperialista en guerra 
civil es la única consigna proletaria justa, indicada por la 
experiencia de la Comuna, señalada por la resolución de Basilea 
(1912) y derivada de todas las condiciones de la guerra 
imperialista entre los países burgueses altamente desarrollados. 
Por muy grandes que parezcan las dificultades de semejante 
transformación en uno u otro momento los socialistas jamás 
renunciarán a efectuar un trabajo preparatorio sistemático, 
perseverante y continuo en esta dirección, ya que la guerra es un 
hecho.” 4. 
3 V.I. Lenin, Obras 21, p. 8, Las tareas de la socialdemocracia 
revolucionaria en la guerra europea. 
4 V. I. Lenin, Sobre el Internacionalismo Proletario, Editorial Progreso, 
Moscú. 1975, páginas 86-94. 
10
Con este fin, Lenin continuó diciendo en su carta a Chliapnikov 
Karl Liebknecht 
11 
que: 
"No un sabotaje a la guerra, no a intervenciones aisladas 
individuales en este espíritu, sino una propaganda de masas (y no 
sólo entre los "civiles"), que conduzca a la transformación de la 
guerra en una guerra civil"5; “[...] Sería un error motivar actos 
individuales: disparar a los funcionarios, etc., así como admitir 
argumentos del tipo: no queremos ayudar al Káiser. La primera es 
una desviación hacia el anarquismo; la segunda hacia el 
oportunismo. En cuanto a nosotros, tenemos que prepararnos para 
la acción de masas (o al menos colectiva) en el ejército, no sólo de 
una nación, y llevar a cabo todo el trabajo de propaganda y 
agitación en esta dirección. Orientar el trabajo (obstinada y 
sistemáticamente, durante un largo periodo tal vez) en el sentido 
de una transformación de la guerra entre naciones en guerra civil, 
esa es la clave. En cuanto a cuándo se producirá este cambio, es 
otra cuestión, imprecisa por ahora. Tenemos que dejar que madure 
ese tiempo y ‘obligarlo a madurar’ sistemáticamente"6 
5 Lenin, carta del 17 octubre 1914 a A. G. Chliapnikov, Obras completas, 
tomo 35, p. 158. 
6 Ibid.
Este planteamiento coincidía con el de Karl Liebknecht7, que 
pretendía la transformación de la guerra internacional en guerra 
civil: “¡El enemigo principal está en el mismo país!". Por esta 
razón, la derrota nacional se aparecía a los revolucionarios como 
una sugerente posibilidad de llevar a cabo el asalto al poder, lo que 
llevó a Lenin a forjar la tesis del “derrotismo revolucionario”, que 
expresaba diciendo: “cuando dos ladrones se pelean, que mueran 
los dos”8. Así nació una política inicialmente circunscrita a Rusia, 
pero que más tarde generalizaría para todos los países 
contendientes en su artículo “Del derrotismo en la guerra 
7 Karl Liebknecht era hijo de Wilhelm Liebknecht, un revolucionario 
socialista amigo de Marx, que había implantado en Alemania la primera 
Internacional y había fundado con Bebel el periódico Vorwärts y el Partido 
Obrero Socialdemócrata de Alemania, que en 1875 se unificó con el 
grupo de Lasalle para crear en 1890 el moderno Partido Socialdemócrata 
Alemán (SPD). No recibió formación académica. Fue el partido el que 
pagó sus estudios universitarios de Derecho y Economía. Liebknecht 
participó en el movimiento socialista desde su juventud. Tras realizar el 
servicio militar, comenzó su carrera de abogado en Westfalia. Defendió a 
un grupo de campesinos que habían sido acusados de intentar implantar 
el comunismo en tierras alemanas. Miembro activo del SPD, en 1907 
funda en Stuttgart la Unión Internacional de Organizaciones Juveniles 
Socialistas. En ese mismo año, tras escribir el libro "Militarismo y anti-militarismo" 
en contra del militarismo alemán, fue encarcelado. En 1908, 
durante su estancia en prisión, consigue un escaño en la Cámara de 
Diputados de Prusia. En 1912 fue elegido miembro del Reichstag. 
Conoció a la judía marxista Rosa Luxemburgo y a Clara Zetkin, con las 
que fundó una facción radical del SPD, los espartaquistas. Después de 
enfrentarse al líder de su partido al recriminarle sus ideas patrióticas, fue 
expulsado del SPD el 1 de enero de 1916. Durante una manifestación en 
1916, fue detenido junto a Rosa Luxemburgo. Se le declaró culpable de 
alta traición y fue encarcelado. Fue condenado a dos años de trabajos 
forzados y desposeído de sus derechos civiles. En el otoño de 1918 
estalló en Kiel (Alemania) la Revolución de Noviembre. Rápidamente 
Liebknecht fue puesto en libertad para intentar aplacar a los 
revolucionarios. Pero su grupo era minoritario, y la mayoría de sus 
dirigentes revolucionarios eran fieles al SPD. En ese momento fundó el 
Partido Comunista alemán (KPD), junto con Rosa Luxemburgo y otros 
radicales. Al proclamarse la República de Weimar, el socialdemócrata 
Friedrich Ebert formó un gobierno provisional en noviembre de 1918. 
Liebknecht se opuso a dicho gabinete y lideró una insurrección 
espartaquista en enero de 1919 como miembro del autodenominado 
Comité Militar Revolucionario, inspirado por el modelo revolucionario 
desarrollado por Lenin en Rusia. La represión del movimiento corrió a 
cargo del ejército alemán, reforzado con excombatientes y otros 
voluntarios. Durante un enfrentamiento entre la policía y miembros de la 
liga, fueron detenidos Liebknecht y Rosa Luxemburgo y ajusticiados 
durante el traslado a la cárcel. 
8 V. I. Lenin, Obras 21, p. 12, Las tareas de la socialdemocracia 
revolucionaria en la guerra europea. 
12
imperialista”, al afirmar que: “en todos los países imperialistas, el 
proletariado debe desear la derrota de su propio gobierno y 
contribuir a ello”. De esta manera, puede considerarse que la 
totalidad de los socialistas revolucionarios, se convirtieron en 
agentes de la traición a sus respectivas naciones, en cada uno de 
los países contendientes, sin distinción de ningún tipo salvo las 
circunstanciales de lugar, posibilidad u otras. 
A partir de este planteamiento de transformación de la guerra 
entre naciones en guerra civil, Lenin participó en los años 
posteriores en la formación de un movimiento socialista 
revolucionario e internacionalista, más tarde llamado comunista, 
tanto en su propio país como a nivel internacional. Durante la 
guerra se celebraron dos nuevas conferencias con los restos de la 
dividida Internacional. La primera tuvo lugar en septiembre de 
1915 en la ciudad de Zimmerwald en Suiza. Representando a 
Rusia estaban las dos tendencias del Partido Social Demócrata: la 
de los bolcheviques revolucionarios de Lenin y Zinoviev; y la de los 
mencheviques, Mártov y Axelrod. En esta conferencia, Lenin se 
confirmó como portavoz y líder de la izquierda revolucionaria en 
Europa. Pero esto no evitó que sus propuestas no obtuvieran el 
respaldo de la conferencia y sí lo encontrara el llamado "Manifiesto 
de Zimmerwald”, escrito por Trotsky, que no incluía la necesidad 
de transformar la guerra imperialista en guerra civil, ni el "trabajo 
por derrotar a su propio gobierno" y la ruptura total con los 
dirigentes socialdemócratas que cooperaron en la guerra. Sin 
embargo, los bolcheviques firmaron el manifiesto. La conferencia 
acordó la creación de una Comisión Internacional Socialista, con 
sede en Berna con un secretariado liderado por Lenin. La segunda, 
llamada Conferencia de Paz, tuvo lugar en Kienthal, también Suiza, 
en abril de 1916, y en las votaciones clave, casi la mitad votó a 
favor de las posiciones de la izquierda revolucionaria. En ambas 
conferencias se colocaron las primeras piedras de la futura III 
Internacional. De este fermento nacerían acontecimientos como la 
revolución comunista de octubre en Rusia, la Revolución de 1918- 
19 y la fundación del KPD Partei Deutschlands Kommunistische 
Partido Comunista en Alemania, la insurrección comunista del 
dirigente judío Béla Kun9 en Hungría o la formación de la 
Internacional Comunista. 
9 Béla Kun, nacido Cohn Béla, (Szilágycseh, Transilvania, Austria- 
Hungría, 20 de febrero de 1886- prisión de Butyrka, URSS, 30 de 
noviembre de 1939), destacado político comunista húngaro que gobernó 
Hungría en 1919. Nació en una familia judía de clase media en 1886, era 
abogado de profesión. Se afilió al Partido Socialdemócrata Húngaro en 
1902, para el que trabajó antes de la guerra mundial, y al Partido 
Bolchevique en 1916, durante su periodo como prisionero de guerra en 
Rusia. En 1918 fundó el Partido Comunista Húngaro, que presidió. En 
13
3. Los socialistas alemanes ante la guerra. 
El 4 de Agosto de 1914, el partido socialdemócrata alemán votó de 
forma unánime en el Reichstag en favor de los créditos militares, 
inaugurando así la política que la mayoría de los dirigentes 
socialdemócratas mantendrían hasta el final de la guerra. La 
consigna consensuada antes de 1914 de: “Ni un céntimo, ni un 
hombre para el estado burgués y sus guerras”, había desaparecido, 
dando lugar a la conocida como “Unión Sagrada”. Esta expresión 
hacía referencia a la política de apoyo unánime a la guerra por 
parte de todas las fuerzas políticas y sociales, en aras a lograr la 
victoria en la lucha contra los países enemigos de Alemania. 
Multitud de hombres aguardan para alistarse en Gran Bretaña 
En el seno del partido, sin embargo, la facción radical se 
oponía a votar en favor de tales créditos, porque entendía que un 
voto favorable implicaba aceptar al régimen y aprobar la guerra. 
Aun así, la minoría aceptó la posición de la mayoría, en parte 
porque el partido basaba su fuerza en su cohesión y disciplina 
noviembre volvió a Hungría y en marzo de 1919 pasó a dirigir la breve 
República Soviética Húngara durante ciento treinta y tres días. Más tarde 
combatió en Ucrania en 1920, durante la Guerra Civil Rusa. Fue miembro 
de la presidencia colegiada de la Comintern, para la que trabajó el resto 
de su vida. Su oposición a los “frentes populares” y su gestión del partido 
comunista húngaro llevaron a su caída en desgracia. Detenido en junio 
de 1937, se le torturó infructuosamente para que confesase, antes ser 
asesinado en noviembre de 1939 en la prisión soviética de Butyrka. 
14
internas. Rosa Luxemburgo diría más adelante que: "El 4 de agosto 
la dirección socialdemócrata traicionó todos los principios, negó la 
lucha de clases y además prolongó la guerra". 
La socialdemocracia alemana fue la primera que rompió con 
las declaraciones de la Internacional contra la guerra. Con 
anterioridad, el SPD había sufrido una profunda transformación, 
por lo que su apoyo a los créditos de guerra no fue una sorpresa, 
aunque durante los primeros meses de 1914 el partido realizó 
protestas contra la guerra. El SPD no tuvo la determinación de usar 
la guerra para movilizar a los trabajadores en un sentido de 
solidaridad internacional de clase, para provocar el derrocamiento 
del sistema capitalista. Por el contrario, lo que movilizó finalmente 
al partido fue la solidaridad nacional, sabiendo que lo contrario le 
haría perder el apoyo de los trabajadores alemanes. La dirección 
del SPD y de la Federación General de Sindicatos Alemanes 
(ADGB), ocupadas por el ala socialdemócrata y no revolucionaria 
de los socialistas durante los diez años anteriores, justificaron el 
apoyo al Káiser alegando la necesidad de "adaptarse a la realidad" 
y de "tratar de evitar que esto empeore", ya que “al fin y al cabo 
no podemos cambiar nada"10. Desaparecía así el enemigo de clase 
y surgís una nueva imagen de enemigo: el enemigo nacional: 
"Para nuestra nación y un futuro de libertad, una victoria 
sobre el despotismo ruso, manchado con la sangre de su propio 
pueblo, significará muchas cosas, significará todo. Debemos 
asegurarnos que este peligro se evita, que protegemos la cultura y 
la independencia de nuestro país. A la hora del peligro, no vamos a 
permitir que nuestro país se retire. [...] Guiados por estos 
principios, estamos de acuerdo con los presupuestos de guerra 
necesarios."11 
En resumen, los dirigentes del SPD justificaron su apoyo a la 
15 
guerra en diversas razones: 
1ª Se trataba de una guerra defensiva, dado que en el Este 
Rusia había sido la primera en movilizar sus ejércitos 
amenazando la región de Prusia oriental, y en el Oeste 
Francia estaba dispuesta a invadir territorio alemán; 
10 “Handbuch zur Geschichte der deutschen Arbeiterbewegung”, Band 2. 
Berlín/DDR 1987, p.782. 
11 “Erklärung der Sozialdemokratischen Partei zum Kriegsausbruch 
abgegeben vom Fraktionsvorsitzenden Haase im Reichstag (4 Augustus 
1914)”, Verhandlungen des Reichstags, XIII. LP., II. Sess., 1914, Bd. 
306, pp. 8 y siguientes. Citado en Ernst Rudolf Huber, “Dokumente zur 
deutschen Verfassungsgeschichte”. 2
2ª El odio al zarismo y su deseo de derrocarlo, contribuyeron al 
nuevo posicionamiento del SPD, que entendía que cualquier 
victoria alemana contra la Rusia reaccionaria, contribuiría a 
salvaguardar los intereses del socialismo internacional, lo 
que coincidía con los intereses internacionales del 
socialismo. 
Según lo visto, para el SPD no sólo no había contradicción 
entre los intereses nacionales y los del partido, sino que los 
mismos se complementaban. 
Hasta qué punto la decisión de apoyar la guerra fue 
sorprendente para el ala revolucionaria del socialismo alemán, se 
desprende de un discurso de Karl Liebknecht, de mediados de 
16 
febrero de 1915, en el que 
explica la razón de haber 
votado los presupuestos 
diciendo que: 
"No me parecía 
indicado, en aquel 
momento, aislarme por 
completo de mis mejores 
amigos en el campo radical. 
Nadie podía prever la 
traición del partido. El 3 y 4 
de agosto, todo cambió al 
revés. Tuvimos sólo unas 
pocas horas, minutos, y 
nosotros estábamos, a 
nuestro gran pesar, frente a 
un colapso total del ala 
radical. Haase, miembro de 
la minoría en el partido, 
¡fue persuadido para 
presentar la declaración de 
la mayoría! Y con el crujir 
de mis dientes me 
Hugo Haase en 1905 
conformé con la mayoría. Me arrepentí de inmediato y con 
amargura, en razón de esta actitud, estoy dispuesto a asumir las 
críticas."12 
12 K. Liebknecht: “Brief an einen Unbekannten. 18 februari 
1915“, Gesammelte Reden und Schriften, Bd. VIII, pág. 195 y siguientes.
En Noviembre de 1914, Liebknecht, Luxemburgo, Franz 
Mehring y Clara Zetkin publicaron en un diario suizo un manifiesto 
en contra de la guerra y del posicionamiento de la dirección del 
partido socialdemócrata alemán. Separado de la dirección del 
Liebknecht votó en contra de las propuestas del gobierno en la 
siguiente votación del 2 de diciembre de 1914, y en una tercera el 
20 de Marzo de 1915. A lo largo de la guerra, el ala moderada del 
SPD mantuvo con el régimen monárquico alemán un Burgfrieden, 
una paz social o paz ciudadana. Hasta julio de 1917, su grupo 
parlamentario en el Reichstag, aprobó todas las leyes propuestas 
por el gobierno imperial a favor de los presupuestos de guerra. 
Esta política del SPD, convirtió a los socialistas en una parte 
integral del Estado alemán. Antes de la guerra, las autoridades se 
negaban a nombrar como cargos de los consejos de gobierno 
municipales, entidades organizadoras de las escuelas y otras 
actividades de los servicios municipales a miembros del SPD. Pero 
desde que se votaron los presupuestos de guerra, en más de 100 
ciudades y pueblos, se confirmaron oficialmente en sus funciones a 
los socialdemócratas. 
Por su parte, los revolucionarios no cejaron en su empeño de 
utilizar la guerra, para provocar un conflicto civil que se convirtiera 
en la llave de la revolución. 
4. La participación de los judíos alemanes en la Gran 
17 
Guerra. 
En agosto de 1914, el comienzo de las hostilidades 
desencadenó en los países beligerantes una ola de patriotismo 
entre las masas populares. Nadie dudaba de la victoria de su 
nación, que llegaría sin lugar a dudas tras una guerra breve y fácil, 
de ahí que los alistamientos de voluntarios en los primeros días, 
fueran masivos en todas las naciones. 
Dentro del Imperio Alemán, la minoría de origen judío se 
dividía en tres grupos claramente diferenciados: los sionistas, que 
no se sentían implicados en forma alguna por las guerras de las 
naciones europeas; los revolucionarios, que participaban 
plenamente en los movimientos anarquistas y socialistas13; y un 
tercer grupo de opinión, que veían en la guerra la posibilidad de 
13 La mayoría de los jefes del socialismo alemán, tanto en su vertiente 
moderada como en la revolucionaria eran judíos. Desde Lassalle a Singer, 
pasando por Berstein, Kohn Nordhausen, Davidson, Frank, Herzfeld, 
Simon, Stadhagen. Las revoluciones de posguerra fueron dirigidas por 
judíos Kurt Eisner con Lewien, Toller, Landauer y otros correligionarios, 
dirigió la revolución bolchevique de Baviera, Hirsch la dirigió en Prusia, 
Gradnauer en Sajonia o Fulda en Hesse.
ganarse el respeto de los ciudadanos alemanes demostrando su 
lealtad hacia la nación de la que eran huéspedes, mediante el 
enrolamiento de soldados judíos para luchar, por lo cual hubo 
desde los primeros días voluntarios judíos en el Reichsheer. Este 
espíritu patriótico y el entusiasmo bélico, contribuyeron a que las 
autoridades políticas y militares alemanas permitieran a los judíos 
ocupar empleos a los que con anterioridad habían tenido vedado el 
acceso. Así, se permitió a los médicos judíos ocupar destinos como 
oficiales al Reichsheer, y luego se permitió a todos los soldados 
judíos ascender a grados de oficial sin restricción alguna. 
Cuando llegó el invierno de 1915 y con él la guerra de 
trincheras, se perdió el entusiasmo inicial y la creencia en un 
triunfo rápido de Alemania. Tras la batalla de Verdún, se acordó 
realizar nuevas levas para cubrir las elevadas bajas que los 
combates producían. Los continuos reclutamientos y movilizaciones 
de hombres aptos para la guerra, alcanzaban de modo desigual a 
la población alemana y a la judía, que amparándose en su posición 
social, o de modo fraudulento, eludían el servicio militar activo, y 
en caso de ser finalmente movilizados, acaparaban casi todas las 
funciones militares de retaguardia. Panfletos y folletos acusaban 
también a los judíos de enriquecerse a costa del erario público, 
monopolizando la dirección de las empresas de armamento y de 
importación y exportación de alimentos, aprovechando así las 
penurias de las grandes masas alemanas para lucrarse "desde los 
despachos de los grandes comercios". 
Al malestar provocado por las numerosas bajas, se sumaban 
las privaciones derivadas del bloqueo marítimo impuesto por Gran 
Bretaña a las Potencias Centrales, que causó que el comercio 
internacional de Alemania se viera muy mermado, al reducirse 
apenas a Suiza, Holanda y las naciones neutrales de Escandinavia, 
sin opción para que la flota mercante alemana pudiera recorrer sus 
antiguas rutas comerciales. La casi total paralización del comercio, 
forzó al gobierno alemán a imponer el racionamiento de alimentos 
y productos industriales, dificultades que se veían agravadas por 
un mercado negro en el que muchos judíos encontraron un medio 
de enriquecimiento. Además, el principal funcionario 
gubernamental a cargo de la economía doméstica era el eminente 
economista y presidente de AEG Walther Rathenau14, judío, y el 
14 Nació en Berlín, hijo del empresario Emil Rathenau y de una hija de 
Benjamín Liebermann. Estudió física, química y filosofía en su ciudad 
natal y en Estrasburgo. De origen judío, su padre, Emil Rathenau era 
presidente y fundador de la Sociedad General de Electricidad (AEG), 
presidencia que heredó a la muerte de éste en 1915. Durante la 1ª 
Guerra Mundial fue el director de la oficina para la distribución de 
materias primas. Rathenau y otros hombres de negocios como Albert 
18
principal asesor para cuestiones de comercio restringido era el 
armador Albert Ballin, también judío, que fueron blancos del odio 
popular pese a su patriotismo. 
A inicios de 1916 las noticias sobre la presunta evasión de 
obligaciones por parte de los soldados judíos se habían hecho 
alarmantes, y la Reichshammerbund ("Federación del martillo del 
Reich") envía el 16 de marzo una petición al Káiser Guillermo II, a 
los ministros y a los miembros del Reichstag denunciando a los 
judíos por "enriquecerse lejos de la línea del frente" y de someter a 
Alemania "al sistema creado por Rathenau y Ballin". En Stettin la 
guarnición local denunció a los judíos el 16 de julio por "evadir con 
mil pretextos el servicio activo" y pedir "en forma desmedida 
empleos militares en retaguardia". Cuando el 29 de agosto 
siguiente se constituyó una nueva jefatura militar formada por Paul 
von Hindenburg y Erich Ludendorff, la cuestión relativa al intento 
de los judíos alistados de eludir el servicio en primera línea, llegó a 
la alta jefatura del Reichsheer, que se vio obligado a emitir el 16 de 
octubre de 1916, una orden para que todas las unidades militares 
del Reichsheer, en los frentes de lucha o en la retaguardia, 
censaran a todos sus integrantes judíos, de cualquier grado o 
especialidad, expresando cuántos de ellos realizaban funciones 
administrativas, cuantos combatían en el frente, y cuántos 
permisos o licencias se habían concedido a los soldados judíos. A 
Ballin (también judío), ofrecen desde agosto de 1914 sus servicios al 
gobierno alemán para organizar lo que considera la clave de esta nueva 
guerra industrial: el aprovisionamiento de materias primas. Para este fin, 
se reunió con el ministro de guerra Falkenhayn y le propuso organizar 
toda la economía nacional para ponerla al servicio de la guerra. Fue 
fundador y líder del Partido Democrático, representante de la gran 
burguesía industrial y liberal. Se oponía al socialismo, aunque apoyaba 
ciertas ideas de tintes socialistas, como la de que los obreros participaran 
en mayor medida en la dirección de las empresas. Establecida la 
República de Weimar, fue ministro de reconstrucción en 1921 y, al año 
siguiente, de Asuntos Exteriores, ministerio al cargo del cual asistió a las 
conferencias sobre reparaciones de guerra de Génova y Cannes, donde 
consiguió reducir dichos pagos. Opinaba que Alemania debería pagar lo 
estipulado en el Tratado de Versalles. Rathenau denigraba a los judíos 
que no quieren integrarse en la sociedad, refiriéndose a ellos como: "una 
banda de extranjeros vestidos de manera demasiado extravagante, que 
hacen banda aparte". El 24 de junio de 1922, dos meses después de 
firmar el Tratado de Rapallo, Rathenau fue asesinado en una conspiración 
orquestada por dos oficiales ultranacionalistas, Erwin Kern y Hermann 
Fischer, en el que también se vieron envueltos Ernst Verner Techow, 
Hans G Techow y Wille Guenther (ayudados e instigados por otros siete, 
algunos de ellos estudiantes) vinculados a la Organización Cónsul. Uno de 
los asesinos era el futuro escritor Ernest von Salomon, que había 
proporcionado el coche pero no había participó en el tiroteo 
19
este propósito, el Ministerio de Guerra diseñó unos cuestionarios 
que debían ser llenados por los comandantes de las unidades. El 
decreto de ejecución para proceder a recopilar la información 
solicitada, salió de la Jefatura del Reichsheer el 11 de noviembre de 
1916, remitiendo a las diferentes unidades los cuestionarios, con la 
orden de devolverlos antes del 1 de diciembre. La motivación 
escrita del decreto señalaba el pensamiento de las autoridades: 
"Han llegado quejas permanentes al Ministerio de Guerra, 
según las cuales, un número desproporcionado de conscriptos de 
religión israelita está exento de servicio militar o se esfuerza en 
lograrlo bajo toda clase de pretextos. Según las informaciones, se 
debe entender que un gran número de judíos en servicio militar 
logran hallar un refugio lejos de la línea del frente..." 
"12,000 soldados judíos murieron en batalla por el honor de la 
patria." Hoja difundida en 1920 por los veteranos judíos alemanes 
en réplica a las acusaciones de falta de patriotismo. 
Finalmente, las dificultades para redactar el Judenzählung15 y 
los obstáculos de todo tipo que se encontró para su confección, 
hizo que no se respetara la fecha límite para devolución de 
cuestionarios, y el plazo concedido se prolongó hasta febrero de 
1917. Pero llegado este mes, se detuvo el censo sin explicaciones 
oficiales de ningún tipo. Lo cierto es que la realización del censo 
era imposible, dado que no había autoridad militar alguna que 
20 
15 Censo de judíos.
vigilase su confección asegurando la fiabilidad de sus cifras, al 
punto que cualquier jefe de batallón podía manipular las cifras 
finales. Además, la dispersión geográfica de las tropas del 
Reichsheer por Francia, Bélgica, Rusia, Polonia, y los Balcanes, 
además de las guarniciones locales alemanas, hacía que el censo 
abarcase un territorio muy extenso. 
Los resultados del censo nunca fueron publicados, pero las 
investigaciones realizadas después de la Primera Guerra Mundial, y 
en los últimos años del siglo XX concluyen que en verdad, de un 
total de 550,000 judíos residentes en Alemania en 1914, 100,000 
prestaron servicio en el Reichsheer, siendo la décima parte de ellos 
voluntarios, cayendo en combate un total de 12,000 soldados 
judíos, un 12% del total, porcentaje muy inferior a los caídos en 
combate del resto del Reichsheer, del que de un total de 
11.000.000 millones de soldados movilizados, causaron baja como 
muertos, heridos o desaparecidos 7.142.558 soldados. Un 64,9% 
de los soldados16. Cinco veces más. 
Las consecuencias de la falta de implicación judía en la guerra, 
se proyectaron en dos planos diferentes: en el interior de la 
comunidad judía, a muchos de los excombatientes judíos el 
rechazo que provocó en la sociedad alemana su escasa 
participación en los sufrimientos de la guerra, les llevó a abrazar la 
ideología del sionismo como una forma de responder al rechazo de 
los alemanes; en el exterior de la comunidad judía, a la población 
alemana, los judíos, que habían dirigido el esfuerzo económico 
bélico y los movimientos subversivos contrarios al esfuerzo de 
guerra durante el conflcito, y que además se habían enriquecido 
con los suministros industriales al Reichsheer, quedaron señalados 
como traidores y causantes de la derrota. 
En el resto de la sociedad alemana, en tanto jamás fueron 
publicadas cifras oficiales del Judenzählung, la falta de resultados 
ayudó a cimentar la creencia popular de la puñalada por la espalda 
cometida por los judíos, como una efectiva traición a Alemania. 
Una creencia que, pese a que desde 1918 abundaron los relatos y 
crónicas de los veteranos combatientes judíos, se extendió 
masivamente alcanzando incluso a las asociaciones de veteranos 
excombatientes, que empezaron a rechazar las solicitudes de 
inscripción de veteranos judíos en sus filas. 
16 Simkin, John. First World War Encyclopedia. Kindle Edition. 
21

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial
4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial
4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra MundialGeohistoria23
 
Hace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscura
Hace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscuraHace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscura
Hace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscuraprofe pucillo
 
Totalitarismos: característicos de los fascismos
Totalitarismos: característicos de los fascismosTotalitarismos: característicos de los fascismos
Totalitarismos: característicos de los fascismosEmilydavison
 
Segunda Guerra Mundial
Segunda Guerra MundialSegunda Guerra Mundial
Segunda Guerra MundialAndres Mendoza
 
Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929
Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929
Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929victorhistoriarios
 
Comunismo, no lo silencies
Comunismo, no lo silenciesComunismo, no lo silencies
Comunismo, no lo silenciessuarse
 
Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013
Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013
Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013Jose Avendaño
 
Foro contemporanea mod 4
Foro contemporanea mod 4Foro contemporanea mod 4
Foro contemporanea mod 4AgustnDaz12
 
El día que cayó el duce el país
El día que cayó el duce     el paísEl día que cayó el duce     el país
El día que cayó el duce el paísprofe pucillo
 
Un camino entre dos guerras
Un camino entre dos guerrasUn camino entre dos guerras
Un camino entre dos guerrasJuan Fernández
 
Historia Siglo XX 1918 a 1991
Historia Siglo XX 1918 a 1991Historia Siglo XX 1918 a 1991
Historia Siglo XX 1918 a 1991gsanfer
 

La actualidad más candente (17)

Degrelle, leon hacia el poder
Degrelle, leon   hacia el poderDegrelle, leon   hacia el poder
Degrelle, leon hacia el poder
 
4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial
4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial
4ºESO Guía de estudio tema 6 Entreguerras y Segunda Guerra Mundial
 
Segunda Guerra Mundial
Segunda Guerra MundialSegunda Guerra Mundial
Segunda Guerra Mundial
 
Comentario de textos
Comentario de textosComentario de textos
Comentario de textos
 
El fascismo
El fascismoEl fascismo
El fascismo
 
Hace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscura
Hace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscuraHace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscura
Hace 80 años, franco llevaba a españa a su noche más oscura
 
Totalitarismos: característicos de los fascismos
Totalitarismos: característicos de los fascismosTotalitarismos: característicos de los fascismos
Totalitarismos: característicos de los fascismos
 
Segunda Guerra Mundial
Segunda Guerra MundialSegunda Guerra Mundial
Segunda Guerra Mundial
 
Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929
Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929
Europa en Crisis: La Gran Guerra y la Crisis Econímoca de 1929
 
Comunismo, no lo silencies
Comunismo, no lo silenciesComunismo, no lo silencies
Comunismo, no lo silencies
 
Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013
Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013
Guía de totalitarismos 1º medio historia 2013
 
Fascismo italiano
Fascismo italianoFascismo italiano
Fascismo italiano
 
Foro contemporanea mod 4
Foro contemporanea mod 4Foro contemporanea mod 4
Foro contemporanea mod 4
 
Segunda guerra mundial
Segunda guerra mundialSegunda guerra mundial
Segunda guerra mundial
 
El día que cayó el duce el país
El día que cayó el duce     el paísEl día que cayó el duce     el país
El día que cayó el duce el país
 
Un camino entre dos guerras
Un camino entre dos guerrasUn camino entre dos guerras
Un camino entre dos guerras
 
Historia Siglo XX 1918 a 1991
Historia Siglo XX 1918 a 1991Historia Siglo XX 1918 a 1991
Historia Siglo XX 1918 a 1991
 

Similar a De esparta a espartaco I

Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01
Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01
Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01AndreaGlvez9
 
La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1--- ---
 
La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1--- ---
 
Ensayo de la primera y segunda guerra mundial
Ensayo de la primera y segunda guerra mundialEnsayo de la primera y segunda guerra mundial
Ensayo de la primera y segunda guerra mundialjose luis hilario castro
 
principales acontecimiento siglo XIX
principales acontecimiento siglo XIXprincipales acontecimiento siglo XIX
principales acontecimiento siglo XIXDiana Gtq
 
Los Judíos y La Guerra Civil EspañOla
Los Judíos y La Guerra Civil EspañOlaLos Judíos y La Guerra Civil EspañOla
Los Judíos y La Guerra Civil EspañOlaGZ-Israel
 
UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)
UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)
UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)LaPotenciadeAmerica
 
Apuntes segunda guerra
Apuntes segunda guerraApuntes segunda guerra
Apuntes segunda guerraJose Avendaño
 
Guía 4to parcial historia
Guía 4to parcial historiaGuía 4to parcial historia
Guía 4to parcial historiamariapaulamc
 
Conflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusa
Conflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusaConflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusa
Conflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusaHidalgo Loreto
 
RDA: Compendio Histórico (1980)
RDA: Compendio Histórico (1980)RDA: Compendio Histórico (1980)
RDA: Compendio Histórico (1980)edwinlemmon
 
Primera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fría
Primera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fríaPrimera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fría
Primera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fríaCarlos Guillermo Ramirez
 
El despertar conflictivo del siglo XX
El despertar conflictivo del siglo XXEl despertar conflictivo del siglo XX
El despertar conflictivo del siglo XXCarlos Cogollo H
 
Primera Guerra Mundial
Primera Guerra MundialPrimera Guerra Mundial
Primera Guerra Mundialframoslyl
 
El autoritarismo en europa
El autoritarismo en europaEl autoritarismo en europa
El autoritarismo en europasonytel
 

Similar a De esparta a espartaco I (20)

Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01
Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01
Conflictosbelicos 120416205600-phpapp01
 
La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1
 
La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1La primera guerra mundial causas. pd 1
La primera guerra mundial causas. pd 1
 
Ensayo de la primera y segunda guerra mundial
Ensayo de la primera y segunda guerra mundialEnsayo de la primera y segunda guerra mundial
Ensayo de la primera y segunda guerra mundial
 
Segunda guerra mundial
Segunda guerra mundialSegunda guerra mundial
Segunda guerra mundial
 
principales acontecimiento siglo XIX
principales acontecimiento siglo XIXprincipales acontecimiento siglo XIX
principales acontecimiento siglo XIX
 
Los Judíos y La Guerra Civil EspañOla
Los Judíos y La Guerra Civil EspañOlaLos Judíos y La Guerra Civil EspañOla
Los Judíos y La Guerra Civil EspañOla
 
UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)
UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)
UNIDAD 6 Periodo entre guerras (1919 1939)
 
Apuntes segunda guerra
Apuntes segunda guerraApuntes segunda guerra
Apuntes segunda guerra
 
Historia Universal
Historia UniversalHistoria Universal
Historia Universal
 
Guía 4to parcial historia
Guía 4to parcial historiaGuía 4to parcial historia
Guía 4to parcial historia
 
Conflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusa
Conflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusaConflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusa
Conflictos belicos primera guerra mundial revolucion rusa
 
RDA: Compendio Histórico (1980)
RDA: Compendio Histórico (1980)RDA: Compendio Histórico (1980)
RDA: Compendio Histórico (1980)
 
Primera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fría
Primera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fríaPrimera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fría
Primera y Segunda Guerra mundiales. Guerra fría
 
El despertar conflictivo del siglo XX
El despertar conflictivo del siglo XXEl despertar conflictivo del siglo XX
El despertar conflictivo del siglo XX
 
Unidad 6
Unidad 6Unidad 6
Unidad 6
 
Siglo XX
Siglo XXSiglo XX
Siglo XX
 
Primera Guerra Mundial
Primera Guerra MundialPrimera Guerra Mundial
Primera Guerra Mundial
 
El autoritarismo en europa
El autoritarismo en europaEl autoritarismo en europa
El autoritarismo en europa
 
Segunda guerra mundial
Segunda guerra mundialSegunda guerra mundial
Segunda guerra mundial
 

Más de Lagranpartida

Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)
Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)
Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)Lagranpartida
 
La crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberal
La crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberalLa crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberal
La crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberalLagranpartida
 
Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)
Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)
Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)Lagranpartida
 
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...Lagranpartida
 
De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...
De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...
De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...Lagranpartida
 
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1Lagranpartida
 
1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)
1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)
1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)Lagranpartida
 
1929 - 2008. Dos crisis paralelas II
1929 - 2008. Dos crisis paralelas II1929 - 2008. Dos crisis paralelas II
1929 - 2008. Dos crisis paralelas IILagranpartida
 
1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)
1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)
1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)Lagranpartida
 
1914, los últimos catilinarios
1914, los últimos catilinarios1914, los últimos catilinarios
1914, los últimos catilinariosLagranpartida
 
LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)
LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)
LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)Lagranpartida
 
Los clavos del ataud de España (II)
Los clavos del ataud de España (II)Los clavos del ataud de España (II)
Los clavos del ataud de España (II)Lagranpartida
 
Los clavos del ataud de España (I)
Los clavos del ataud de España (I)Los clavos del ataud de España (I)
Los clavos del ataud de España (I)Lagranpartida
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)Lagranpartida
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...Lagranpartida
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...Lagranpartida
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador II
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador IILa mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador II
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador IILagranpartida
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)Lagranpartida
 

Más de Lagranpartida (20)

No es una crisis
No es una crisisNo es una crisis
No es una crisis
 
Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)
Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)
Piketty y el capital en el siglo xxi. ¿el marx de los nuevos tiempos (iv de iv)
 
La crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberal
La crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberalLa crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberal
La crisis y la quiebra de la hegemonía neoliberal
 
Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)
Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)
Piketty y el Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos (III de IV)
 
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El Marx de los nuevos tiempos? (II de ...
 
De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...
De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...
De Esparta a Espartaco. Alemania 1918-1919, de la puñalada por la espalda a l...
 
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1
Piketty y El Capital en el Siglo XXI. ¿El marx de los nuevos tiempos? 1
 
¡Oh mi patria!
¡Oh mi patria!¡Oh mi patria!
¡Oh mi patria!
 
1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)
1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)
1929-2008 DOS CRISIS PARALELAS (III)
 
1929 - 2008. Dos crisis paralelas II
1929 - 2008. Dos crisis paralelas II1929 - 2008. Dos crisis paralelas II
1929 - 2008. Dos crisis paralelas II
 
1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)
1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)
1929 - 2008. Dos crisis paralelas (I)
 
1914, los últimos catilinarios
1914, los últimos catilinarios1914, los últimos catilinarios
1914, los últimos catilinarios
 
LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)
LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)
LOS CLAVOS DEL ATAUD DE ESPAÑA (IV)
 
Los clavos del ataud de España (II)
Los clavos del ataud de España (II)Los clavos del ataud de España (II)
Los clavos del ataud de España (II)
 
Los clavos del ataud de España (I)
Los clavos del ataud de España (I)Los clavos del ataud de España (I)
Los clavos del ataud de España (I)
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (V)
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador ...
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador II
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador IILa mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador II
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador II
 
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)
La mano diestra del capitalismo, de Leo Strauss al movimiento neoconservador (I)
 

Último

Ente de Coordinación Operativa de Servicios en la Capital
Ente de Coordinación Operativa de Servicios en la CapitalEnte de Coordinación Operativa de Servicios en la Capital
Ente de Coordinación Operativa de Servicios en la CapitalEduardo Nelson German
 
Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348
Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348
Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348Erbol Digital
 
La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...
La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...
La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...Eduardo Nelson German
 
El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...
El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...
El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...20minutos
 
Comoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdf
Comoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdfComoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdf
Comoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdfLorenzo Lemes
 
La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"
La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"
La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"Ilfattoquotidianoit
 
Ampliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La Rioja
Ampliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La RiojaAmpliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La Rioja
Ampliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La RiojaEduardo Nelson German
 
Dictaduras de Bolivia a lo largo de su historia
Dictaduras de Bolivia a lo largo de su historiaDictaduras de Bolivia a lo largo de su historia
Dictaduras de Bolivia a lo largo de su historiaLauraCardenas882684
 
Aviso de pago de Títulos Públicos de La Rioja
Aviso de pago de Títulos Públicos de La RiojaAviso de pago de Títulos Públicos de La Rioja
Aviso de pago de Títulos Públicos de La RiojaEduardo Nelson German
 
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdf
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdfEstudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdf
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdfmerca6
 
APOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticos
APOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticosAPOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticos
APOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticosEduardo Nelson German
 
Boletin semanal informativo 16 Abril 2024
Boletin semanal informativo 16 Abril 2024Boletin semanal informativo 16 Abril 2024
Boletin semanal informativo 16 Abril 2024Nueva Canarias-BC
 
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La Rioja
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La RiojaDenuncia en la Justicia Federal por la salud en La Rioja
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La RiojaEduardo Nelson German
 
Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...
Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...
Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...Eduardo Nelson German
 
PRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdf
PRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdfPRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdf
PRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdfredaccionxalapa
 
maraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdf
maraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdfmaraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdf
maraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdfredaccionxalapa
 
COMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdf
COMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdfCOMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdf
COMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdfAndySalgado7
 

Último (18)

LA CRÓNICA COMARCA DE ANTEQUERA _ Nº 1078
LA CRÓNICA COMARCA DE ANTEQUERA _ Nº 1078LA CRÓNICA COMARCA DE ANTEQUERA _ Nº 1078
LA CRÓNICA COMARCA DE ANTEQUERA _ Nº 1078
 
Ente de Coordinación Operativa de Servicios en la Capital
Ente de Coordinación Operativa de Servicios en la CapitalEnte de Coordinación Operativa de Servicios en la Capital
Ente de Coordinación Operativa de Servicios en la Capital
 
Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348
Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348
Pronunciamiento de Mujeres en defensa de la Ley 348
 
La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...
La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...
La Justicia Federal no le hizo lugar a medida del Intendente de La Rioja cont...
 
El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...
El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...
El abogado de los Arrieta se queja ante la embajada de España por la presenci...
 
Comoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdf
Comoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdfComoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdf
Comoeuropasubdesarrolloaafricawakter.es.pdf
 
La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"
La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"
La lettera di pedro Sanchez che annuncia una "pausa"
 
Ampliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La Rioja
Ampliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La RiojaAmpliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La Rioja
Ampliación de denuncia del Fiscal Federal por medicamentos en La Rioja
 
Dictaduras de Bolivia a lo largo de su historia
Dictaduras de Bolivia a lo largo de su historiaDictaduras de Bolivia a lo largo de su historia
Dictaduras de Bolivia a lo largo de su historia
 
Aviso de pago de Títulos Públicos de La Rioja
Aviso de pago de Títulos Públicos de La RiojaAviso de pago de Títulos Públicos de La Rioja
Aviso de pago de Títulos Públicos de La Rioja
 
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdf
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdfEstudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdf
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdf
 
APOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticos
APOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticosAPOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticos
APOS - Global Médica SA: Contrato de prestación de servicios farmacéuticos
 
Boletin semanal informativo 16 Abril 2024
Boletin semanal informativo 16 Abril 2024Boletin semanal informativo 16 Abril 2024
Boletin semanal informativo 16 Abril 2024
 
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La Rioja
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La RiojaDenuncia en la Justicia Federal por la salud en La Rioja
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La Rioja
 
Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...
Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...
Investigaciones en curso por maniobras con recetas falsas de insulina y tiras...
 
PRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdf
PRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdfPRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdf
PRECIOS_M_XIMOS_VIGENTES_DEL_28_DE_ABRIL_AL_4_DE_MAYO_DE_2024.pdf
 
maraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdf
maraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdfmaraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdf
maraton atenas veracruzana 2024 calles rutas.pdf
 
COMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdf
COMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdfCOMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdf
COMUNICADO CNE-CAMPAÑA Y PROPAGANDA ELECTORAL 20240423.pdf
 

De esparta a espartaco I

  • 1. DE ESPARTA A ESPARTACO ALEMANIA 1918-1919, de la “puñalada por la espalda” a la revolución comunista Francisco José Fernández-Cruz Sequera. Agosto 2014. Publicado en: http://lagranpartida.blogspot.com.es Miembros de los Freikorps en Berlín durante el golpe de Kapp 1 Elegía “Porque es hermoso que un valiente muera, caído en las primeras filas, luchando por su Patria. Es, en cambio, la cosa más dolorosa de todas vivir como un mendigo, abandonando la Patria y sus fértiles campos, errante con la madre querida y el padre anciano y los hijos aún niños y la esposa legítima. Éste será objeto de odio para aquéllos a cuyo país llegue cediendo a la necesidad y a la horrible pobreza; deshonra su linaje, desmiente su noble rostro y toda infamia y toda vileza va con él. Por lo tanto, si no hay para un vagabundo ninguna ayuda ni tampoco respeto, consideración ni compasión, luchemos valientemente por nuestra tierra y muramos por nuestros hijos sin ahorrar nuestras vidas. Así pues, oh jóvenes, luchad unidos y no déis la señal de la huida vergonzosa ni del miedo; haced grande y fuerte en el pecho vuestro corazón y no tengáis amor por vuestras vidas cuando lucháis con el enemigo;
  • 2. ni huyáis abandonando caídos a los de más edad, cuyas rodillas ya no son ágiles, a los viejos; pues es vergonzoso que, caído en las primeras filas, yazca en el suelo delante de los jóvenes un hombre de más edad, de cabeza ya blanca y barba cana, exhalando en el polvo su alma valerosa, con las ensangrentadas vergüenzas cogidas en las manos -visión abominable, cosa impía de ver- y desnudo; en un joven, en cambio, todo es decoroso mientras posee la brillante flor de la amable juventud: su vista produce admiración a los hombres y amor a las mujeres; caído en las primeras filas, es un héroe. Ea pues, que cada uno de vosotros permanezca en su puesto con las piernas bien abiertas, firmemente apoyado en el suelo con los dos pies, mordiendo el labio con los dientes.” 2 TIRTEO de Esparta, (siglo VII a.C.) El estallido de la guerra en 1914 dividió radicalmente a los europeos en muchos más sentidos de los que a primera vista nos pudiera parecer, mucho más allá de la aparición de dos alianzas de naciones enfrentadas entre sí. La guerra destruyó imperios, derribó tronos, alzó al ateísmo frente a la religiosidad europea y arrasó su cultura y su alma. La guerra dividió a los europeos no sólo en bandos combatientes, sino en dos conceptos de la existencia irreconciliables: por un lado, los herederos espirituales de la antigua civilización y cultura europeas; por el otro, los nuevos adalides de las fuerzas extraeuropeas y antieuropeas. Una división que cruzó cada nación no reconociendo más fronteras que las del alma, pues la guerra, al quebrar la unidad espiritual de Occidente rompió también la unidad de cada pueblo, que durante los últimos dos mil años había servido como base para rechazar los asaltos de los extraños a Europa. Sólo así fue posible que por primera vez hoyaran suelo europeo las fuerzas militares de los EE.UU., y que se alzara de su tumba el espectro del comunismo, ese fantasma que recorría Europa desde 1848 según decían Marx y Engels, que terminó por torcer los pasos vacilantes del socialismo ético. La Gran Guerra, terminó enfrentando el espíritu de la noble y temible Esparta, al del vengativo tiranicida de Espartaco. Y cuando este conflicto espiritual se tornó militar, y al choque de espíritus le sucedió el choque de material y ejércitos, se pusieron de manifiesto las diferencias dentro del movimiento socialista, que finalmente concluyeron con la división y enfrentamiento entre las distintas tendencias del socialismo agrupado en la II Internacional. Cuando llegó el final de los combates, la facción revolucionaria del movimiento socialista se encontró ante lo que creía que era el momento idóneo para llevar a cabo su revolución, siguiendo el ejemplo de la Rusia soviética. De esta manera, Hungría, Baviera, Alemania o Italia, entre otros,
  • 3. experimentaron sendos asaltos revolucionarios que finalmente fracasarían. Finalmente, el socialismo terminó dividido en tres tendencias, que dieron lugar cada una de ellas a la fundación de los partidos socialistas o socialdemócratas burgueses, de los comunistas colectivistas e internacionalistas y de los socialistas identitarios comunitaristas o fascistas. En el caso de Alemania, el final de la guerra y la proclamación de la república, vino marcado por dos elementos relacionados entre sí que entrecruzan su origen y su accionar: por un lado, los movimientos revolucionarios comunistas; por el otro, la evidente participación de numerosos judíos en estos acontecimientos. 1. La división de la II Internacional en los años anteriores a la guerra mundial. 3 En 1889, trece años después de la liquidación de la Primera Internacional (1876), los socialistas de la época habían creado una segunda organización internacional, denominada Internacional obrera Socialista, que era presidida por Emile Vandervelde, líder del Partido Obrero belga, el partido socialista de la época, siendo su secretario Camille Huysmans, otro conocido socialista belga. Durante los veinte años anteriores al comienzo de la Gran Guerra, tras la expulsión de los anarquistas en 1893, tuvo lugar dentro de la II Internacional, un encarnizado debate entre los partidarios de la revolución y los reformistas. Los reformistas eran partidarios de llegar a un entendimiento con el poder e integrarse en los regímenes liberales, realizando una labor progresiva de corrección del capitalismo, que los aproximara a un sistema socialista. Mantenían una posición de principios izquierdistas, pero llegaban a
  • 4. decisiones prácticas negociadas con las fuerzas liberales. En el congreso de la Internacional celebrado en París en el año 1900, el voto de la mayoría se inclinó por rechazar la participación en el gobierno; pero, en la resolución final, se dejaba abierta la posibilidad de la participación en el gobierno en circunstancias extremas. Parecía así dejarse resuelta la cuestión más fundamental para el movimiento socialista: integrarse o no en el sistema capitalista. Debemos señalar, que en este momento aún no eran mayoría los seguidores del socialismo marxista en el seno de la Internacional. Pero los socialistas estaban divididos respecto de la participación de los socialistas en el gobierno y la alianza con los grupos burgueses. En la conferencia de la Internacional celebrada en Ámsterdam en 1904, esta situación dio lugar a un debate entre el francés Jaures y el alemán Bebel, que tuvo un gran impacto entre los asistentes, al reflejar dos posiciones opuestas, la pactista del francés y la revolucionaria del alemán. Sin embargo, en la práctica política diaria, el parlamentarismo había ganado terreno. Ya entre 1909 y 1910, el asunto fue discutido por los socialistas belgas, que estaban dispuestos a formar gobierno junto con los liberales, lo que finalmente no ocurrió a la vista de los resultados electorales. En todo caso, permanecía la división de los socialistas en torno a la posibilidad de pactar con los gobiernos parlamentarios liberales. Conferencia de La II Internacional en 1913 4
  • 5. También estaban divididos, por la cuestión de la conveniencia y necesidad de utilizar como arma la huelga general política. Era opinión de muchos radicales, que la mayoría absoluta en el parlamento no sería suficiente para forzar un cambio de sistema político, por lo que entendían que era necesario recurrir a la acción violenta extraparlamentaria de la clase obrera, en forma de huelga general. En Alemania, el congreso del partido en 1906 desestimó esta posibilidad, a su empleo se opuso vehementemente Karl Legien, secretario general del sindicato. Willi Sitte, Homenaje a Lenin, 1969 5 Otra cuestión que abundaba en la falta de unidad de los socialistas, era la cuestión colonial. La Internacional se asentaba en los principios fundamentales de igualdad de derechos de todos los pueblos y razas, su igual derecho a la dignidad, la justicia, la libertad y a la independencia Nacional, así como en el principio de solidaridad entre los oprimidos de todas las naciones y razas. En el Congreso de Londres de 1896, la Internacional había formulado el principio de "plena autodeterminación para todas las naciones", considerando al colonialismo como una "manifestación del capitalismo". Pero cuando esta cuestión se enfocaba desde la perspectiva nacional e cada partido, el enfoque cambiaba. Los socialistas británicos defendían la colonización con el argumento de que ningún pueblo podía mantener la exclusiva en la explotación de los recursos a expensas de otros pueblos; la tierra, como bien común de toda la humanidad obliga a todas las naciones a compartir sus recursos naturales, prevaleciendo este derecho sobre los intereses de la población local. En Alemania, los socialistas reformistas abundaban en la misma dirección y apoyaban las pretensiones alemanas de proceder a un nuevo reparto colonial.
  • 6. En el Congreso de París de 1900, ya se apuntaba a la redistribución de las colonias y de los recursos como causa de una futura guerra imperialista. Pero la conferencia más importante fue la celebrada en Stuttgart en 1907, los franceses propusieron la huelga de masas e incluso la insurrección en caso de guerra; pero para los alemanes esto era inaceptable, dado que ello les conduciría directamente a la ilegalización. Presentaron en su lugar un nuevo texto que nada concretaba. Lenin1, a través de su 1 Lenin es el seudónimo de Vladímir Ilich Uliánov (Simbirsk, Rusia, 22 de abril de 1870 - Gorki, 21 de enero de 1924), dictador de origen judío y líder bolchevique. Fue el primer presidente del Gobierno soviético (el Consejo de Comisarios del Pueblo) de la Unión Soviética, elegido en el II Congreso de los Soviets de diputados obreros y soldados de toda Rusia el 25 de octubre de 1905. Los documentos procedentes del archivo del KGB que confirman que confirman el origen judío de Lenin, fueron expuestos en el Museo de Historia Estatal de Rusia. Entre los nuevos documentos publicados y puestos en exhibición está una carta escrita por la hermana de Lenin, Anna Ulyanova, que dice que su abuelo materno era un judío de Ucrania que se convirtió al cristianismo para escapar de la persecución en la Zona de Residencia y tener acceso a una mejor educación. “Vino de una familia judía pobre y fue, según su certificado de bautismo, el hijo de Moses Blank, un nativo de Zhitomir” (una ciudad occidental de Ucrania), escribió Ulyanova en 1932. Anna Oulianova hace hincapié en que su hermano “siempre tuvo una alta opinión de los judíos”. Fue admitido en la Universidad de San Petersburgo y terminó sus estudios de derecho en 1891. En 1895 participó en la fundación de la Unión para la Lucha por la Emancipación de la Clase Obrera de San Petersburgo. Pasó deportado a Siberia hasta 1900. Después de este primer destierro allí, huyó a Suiza, donde fundó el periódico Iskra (La chispa) en colaboración con Georgui Plejánov, L. Martov y otros marxistas. Lenin pasó en Europa la mayor parte del periodo anterior a 1917. Regresó a Rusia tras la Revolución de 1905, pero se vio obligado a abandonar nuevamente el país en 1907 ante la falta de apoyo que acabó con la insurrección. El estallido de la Primera Guerra Mundial (1914-18) le dio la oportunidad de poner en práctica sus ideas: definió la contienda como fruto de las contradicciones del capitalismo y del imperialismo (El imperialismo, fase superior del capitalismo, 1916) y, en nombre del internacionalismo proletario, llamó sin éxito al movimiento socialista mundial a transformar la contienda en una guerra civil generalizada; más tarde, el deterioro del régimen zarista por efecto de la guerra le permitió pensar en lanzar la revolución socialista en su país como primer paso para una era de revolución mundial. A pesar de las "críticas" al sistema capitalista, los bolcheviques fueron financiados por los banqueros judíos de Wall Street: los Rothschild, los Warburg, Kuhn, Loeb, Olef Aschberg, Schiff, Lazare, Hirsch, Gunzbourg, Speyer, Wallenberg, Guggenheim, Breitung, etc., todos promovieron revoluciones socialistas-marxistas y anarquistas. La Revolución Rusa de octubre de 1917 que derrocó al régimen zarista fue un acontecimiento que Lenin no había previsto ni tuvo nada que ver con él, pero regresó apresuradamente a Rusia con la ayuda del ejército alemán. Los bolcheviques de Petrogrado, entre los que se encontraba 6
  • 7. emisaria la judía Rosa Luxemburgo2, proponía utilizar la crisis económica y política provocada por la guerra para “acelerar la Stalin, estaban de acuerdo en que los representantes del ejército y de los soviets de trabajadores respetaran al Gobierno Provisional de Kerenski que se había establecido, pero Lenin rechazó esta línea de actuación. Después de un fallido levantamiento de los trabajadores en julio de 1917, Lenin escapó a Finlandia ocultándose del Gobierno Provisional. Tras la agitación bolchevique y la consecutiva caída del Gobierno Provisional, y como creían tener controlado el II Congreso de los Soviets, los bolcheviques de Lenin no tienen inconveniente en que se celebren las elecciones democráticas a la Asamblea Constituyente. Sólo consiguieron el 23% de los votos. Tras este revés, dieron un golpe de estado conocido como la Revolución de octubre, gracias a la estrategia bolchevique de exigir la rendición de Rusia a las potencias centrales, apartando al país de la guerra en 1918 por la Paz de Brest-Litowsk. Disolvió la Asamblea constituyente (1918), proscribió a la oposición y creó una policía política para perseguir a los disidentes incluyendo a los demás socialistas, siguiendo literalmente las tesis de Marx de acabar con los socialistas no marxistas; a escala mundial, exigió a los demás partidos socialistas fidelidad absoluta a sus directrices, , provocando la escisión del movimiento obrero con la aparición en todos los países de partidos comunistas sometidos al control de una Tercera Internacional comunista (Komintern) con sede en Moscú (1919). Delegó en Trotsky la organización del Ejército Rojo, con el que consiguió arrasar al ejército blanco tras una dura Guerra Civil (1918-20). Una vez recuperado el control del antiguo imperio de los zares, articuló el territorio creando la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (1922), a la que dotó de organización formal por la Constitución de 1923. Tras caer enfermo y morir, la mujer de Lenin, también judía, conocida como Krupskaya, pero cuyo verdadero nombre era Nadiezda Konstantinovna, acentuó su lucha mediante el adoctrinamiento de las mujeres, continuando con el pensamiento de Lenin. En su Outchit Gazeta escribió (10/Oct./1929): "Aunque la socialización de las mujeres no está formalmente ratificada en la lucha soviética, debe convertirse en una realidad y penetrar en la conciencia de las masas. Consecuentemente, cualquiera que intente defender a una mujer que es (indecentemente) asaltada, muestra una naturaleza burguesa y se declara a sí mismo a favor de la propiedad privada. El oponerse a la violación es resistirse a la revolución comunista de octubre."Fuentes: http://www.enlacejudio.com/2011/06/10/los-rusos-descubren- incredulos-los-origenes-judios-de-lenin/; http://www.anajnu.cl/raicesjudiaslenin.htm; http://es.metapedia.org/wiki/Vladimir_Lenin 2 Rosa Luxemburgo nació en Zamosc, cerca de Lublin, en la Polonia entonces controlada por Rusia, en el seno de una familia de origen judío. Aparece ya como miembro del partido polaco marxista "Proletariat" en 1886. En 1887 Luxemburgo terminó la educación secundaria, pero tuvo que huir a Suiza en 1889 para evitar su detención. Allí asistió a la Universidad de Zurich junto a otras figuras comunistas, como Anatoli Lunacharsky y Leo Jogiches. En 1898, Rosa Luxemburgo obtuvo la ciudadanía alemana al casarse con Gustav Lübeck, y se mudó a Berlín. 7
  • 8. Allí participó activamente con el ala más izquierdista del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), definiendo claramente la frontera entre su fracción y la teoría revisionista del líder moderado el judío Eduard Bernstein, atacándole en 1899 en un folleto titulado "¿Reforma Social o Revolución?". Entre 1904 y 1906 su trabajo se vio interrumpido a causa de tres encarcelamientos por motivos políticos. Sin embargo, Rosa Luxemburgo mantuvo su actividad política; en 1907 tomó parte en el V Congreso del Partido Obrero Socialdemócrata Ruso en Londres, donde se entrevistó con Lenin. Por esos años, Rosa comenzó a enseñar marxismo y economía en el centro de formación del SPD en Berlín. Uno de sus alumnos fue el que más tarde se convertiría en líder del SPD y primer presidente de la República de Weimar, Friedrich Ebert. El comienzo de la Gran Guerra fue una catástrofe personal que incluso la llevó a considerar la posibilidad del suicidio. Junto con los dirigentes de origen judío Karl Liebknecht, Clara Zetkin y el de origen alemán Franz Mehring, creó el grupo Internacional el 5 de agosto de 1914, el cual se convertiría posteriormente el 1 de enero de 1916 en la Liga Espartaquista intentando provocar una huelga general. Como consecuencia de ello, el 28 de junio de 1916 Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht fueron sentenciados a dos años y medio de prisión. En 1917, cuando los EEUU intervinieron en el conflicto, la Liga Espartaquista se afilió al Partido Socialdemócrata Independiente de Alemania (USPD), compuesto también por antiguos miembros del SPD opuestos a la guerra, fundado por el también judío Karl Kautsky. Tras la abdicación del kaiser Guillermo II y tras el levantamiento conocido como la Revolución de Noviembre alemana, la cual comenzó en Kiel el 4 de noviembre de 1918, cuando 40.000 marineros e infantes de marina tomaron el control del puerto en protesta por los planes del Alto Mando Naval Alemán de un último enfrentamiento con la Real Marina Británica. El 8 de noviembre, los comités de trabajadores y soldados controlaban la mayor parte del oeste de Alemania, dando lugar a la formación de la República de Consejos (Räterepublik), basados en el sistema de sóviets ruso desarrollado en la revolución rusa de 1905 y 1917. Rosa Luxemburgo salió de la cárcel de Wroclaw el 8 de noviembre; Karl Liebknecht lo había hecho poco antes y había ya comenzado la reorganización de la Liga Espartaquista. Juntos crearon el periódico "La Bandera Roja". Sin embargo, el frente unido se desintegró a finales de diciembre de 1918 cuando el USPD abandonó la coalición. El 1 de enero de 1919 la Liga Espartaquista junto a otros grupos socialistas y comunistas (incluyendo la Internacional Comunista Alemana, IKD) crearon el Partido Comunista de Alemania (KPD), gracias a la iniciativa de Karl Liebknecht y Rosa Luxemburgo. Esta última apoyó que el KPD se involucrara en la asamblea constitucional nacional -la que finalmente acabaría fundando la República de Weimar- pero su propuesta no tuvo éxito. En enero una segunda ola revolucionaria sacudió Alemania. En respuesta al levantamiento, la milicia nacionalista Freikorps sofocó el levantamiento comunista. Tanto Rosa Luxemburgo como Liebknecht fueron capturados en Berlín el 15 de enero de 1919 y ajusticiados ese mismo día. Fuentes: http://wikiroja.wikispaces.com/Rosa+Luxemburgo; http://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/luxemburg.htm; http://es.metapedia.org/wiki/Rosa_Luxemburgo. 8
  • 9. caída de la hegemonía capitalista”, haciendo depender cada actuación concreta de la situación política de cada país. En 1910, el Congreso de Copenhague, decidió que los parlamentarios socialistas votarían en contra de todos los créditos de guerra, y en el congreso extraordinario celebrado en Basilea en 1913, se adoptó una resolución por unanimidad contra la amenaza de una guerra. El 29 de julio 1914 se celebró en Bruselas la última sesión del secretariado de la Internacional. Austria ya había declarado la guerra y en París y Berlín, se habían organizado manifestaciones a favor de la guerra. Los delegados rusos y británicos dijeron que iban a resistir y propusieron una huelga general, pero no había nadie a favor. Los alemanes dijeron que iban a cumplir con su deber. Los franceses aseguraron la voluntad de paz del gobierno francés. La última conferencia de la Internacional antes de la guerra, se celebró en Basilea el 24 y 25 de noviembre de 1912, y nuevamente se realizaron declaraciones descalificando la posibilidad de una guerra, sin que se acordara una línea de actuación conjunta. Rosa Luxemburgo en un mitin antes de la Gran Guerra El 1º de agosto, Alemania y Francia se movilizaron. Para los socialistas alemanes, la acción revolucionaria contra el gobierno del Káiser ni se consideró, y el 4 de agosto votaron los presupuestos de guerra. Los socialistas franceses invocaron las decisiones de los socialistas alemanes para colocarse a su vez junto al gobierno. Sólo los bolcheviques rusos, los socialdemócratas húngaros, búlgaros e italianos y el Partido Socialista de los Estados Unidos, se aferraron 9
  • 10. a las resoluciones contra la guerra dictadas por la Internacional, convocando una conferencia por separado en la ciudad suiza de Zimmerwald sin valor político alguno. La Internacional había muerto a manos de la Nación. 2. El origen del enemigo interior: el “derrotismo revolucionario”. La creación de la III Internacional. Lenin condenó severamente el colapso ideológico de la socialdemocracia alemana e internacional: "La actitud de los dirigentes del Partido Socialdemócrata alemán -el partido más fuerte y más influyente de la segunda Internacional (1889-1914)- que votaron el presupuesto de guerra y que recogen la fraseología chovinista y burguesa de los Junkers prusianos y la burguesía, es una traición pura y simple al socialismo. Esta actitud no se puede justificar de ninguna manera, aun suponiendo que el Partido Socialdemócrata alemán sea extremadamente débil y esté forzado temporalmente a plegarse a la voluntad de la mayoría burguesa de la nación. De hecho, en la situación actual, el partido se ha involucrado en una política nacional-liberal. La actitud de los líderes de los partidos socialdemócratas belgas y franceses que han traicionado al socialismo al entrar los gobiernos burgueses, merece ser condenado de la misma manera. La traición al socialismo por la mayoría de los líderes de la 2º Internacional (1889-1914) significa la bancarrota ideológica y política de esta última."3 Tras concluir que resultaba imposible reconstruir la Internacional tal y como la habían conocido, predica que: “La transformación de la actual guerra imperialista en guerra civil es la única consigna proletaria justa, indicada por la experiencia de la Comuna, señalada por la resolución de Basilea (1912) y derivada de todas las condiciones de la guerra imperialista entre los países burgueses altamente desarrollados. Por muy grandes que parezcan las dificultades de semejante transformación en uno u otro momento los socialistas jamás renunciarán a efectuar un trabajo preparatorio sistemático, perseverante y continuo en esta dirección, ya que la guerra es un hecho.” 4. 3 V.I. Lenin, Obras 21, p. 8, Las tareas de la socialdemocracia revolucionaria en la guerra europea. 4 V. I. Lenin, Sobre el Internacionalismo Proletario, Editorial Progreso, Moscú. 1975, páginas 86-94. 10
  • 11. Con este fin, Lenin continuó diciendo en su carta a Chliapnikov Karl Liebknecht 11 que: "No un sabotaje a la guerra, no a intervenciones aisladas individuales en este espíritu, sino una propaganda de masas (y no sólo entre los "civiles"), que conduzca a la transformación de la guerra en una guerra civil"5; “[...] Sería un error motivar actos individuales: disparar a los funcionarios, etc., así como admitir argumentos del tipo: no queremos ayudar al Káiser. La primera es una desviación hacia el anarquismo; la segunda hacia el oportunismo. En cuanto a nosotros, tenemos que prepararnos para la acción de masas (o al menos colectiva) en el ejército, no sólo de una nación, y llevar a cabo todo el trabajo de propaganda y agitación en esta dirección. Orientar el trabajo (obstinada y sistemáticamente, durante un largo periodo tal vez) en el sentido de una transformación de la guerra entre naciones en guerra civil, esa es la clave. En cuanto a cuándo se producirá este cambio, es otra cuestión, imprecisa por ahora. Tenemos que dejar que madure ese tiempo y ‘obligarlo a madurar’ sistemáticamente"6 5 Lenin, carta del 17 octubre 1914 a A. G. Chliapnikov, Obras completas, tomo 35, p. 158. 6 Ibid.
  • 12. Este planteamiento coincidía con el de Karl Liebknecht7, que pretendía la transformación de la guerra internacional en guerra civil: “¡El enemigo principal está en el mismo país!". Por esta razón, la derrota nacional se aparecía a los revolucionarios como una sugerente posibilidad de llevar a cabo el asalto al poder, lo que llevó a Lenin a forjar la tesis del “derrotismo revolucionario”, que expresaba diciendo: “cuando dos ladrones se pelean, que mueran los dos”8. Así nació una política inicialmente circunscrita a Rusia, pero que más tarde generalizaría para todos los países contendientes en su artículo “Del derrotismo en la guerra 7 Karl Liebknecht era hijo de Wilhelm Liebknecht, un revolucionario socialista amigo de Marx, que había implantado en Alemania la primera Internacional y había fundado con Bebel el periódico Vorwärts y el Partido Obrero Socialdemócrata de Alemania, que en 1875 se unificó con el grupo de Lasalle para crear en 1890 el moderno Partido Socialdemócrata Alemán (SPD). No recibió formación académica. Fue el partido el que pagó sus estudios universitarios de Derecho y Economía. Liebknecht participó en el movimiento socialista desde su juventud. Tras realizar el servicio militar, comenzó su carrera de abogado en Westfalia. Defendió a un grupo de campesinos que habían sido acusados de intentar implantar el comunismo en tierras alemanas. Miembro activo del SPD, en 1907 funda en Stuttgart la Unión Internacional de Organizaciones Juveniles Socialistas. En ese mismo año, tras escribir el libro "Militarismo y anti-militarismo" en contra del militarismo alemán, fue encarcelado. En 1908, durante su estancia en prisión, consigue un escaño en la Cámara de Diputados de Prusia. En 1912 fue elegido miembro del Reichstag. Conoció a la judía marxista Rosa Luxemburgo y a Clara Zetkin, con las que fundó una facción radical del SPD, los espartaquistas. Después de enfrentarse al líder de su partido al recriminarle sus ideas patrióticas, fue expulsado del SPD el 1 de enero de 1916. Durante una manifestación en 1916, fue detenido junto a Rosa Luxemburgo. Se le declaró culpable de alta traición y fue encarcelado. Fue condenado a dos años de trabajos forzados y desposeído de sus derechos civiles. En el otoño de 1918 estalló en Kiel (Alemania) la Revolución de Noviembre. Rápidamente Liebknecht fue puesto en libertad para intentar aplacar a los revolucionarios. Pero su grupo era minoritario, y la mayoría de sus dirigentes revolucionarios eran fieles al SPD. En ese momento fundó el Partido Comunista alemán (KPD), junto con Rosa Luxemburgo y otros radicales. Al proclamarse la República de Weimar, el socialdemócrata Friedrich Ebert formó un gobierno provisional en noviembre de 1918. Liebknecht se opuso a dicho gabinete y lideró una insurrección espartaquista en enero de 1919 como miembro del autodenominado Comité Militar Revolucionario, inspirado por el modelo revolucionario desarrollado por Lenin en Rusia. La represión del movimiento corrió a cargo del ejército alemán, reforzado con excombatientes y otros voluntarios. Durante un enfrentamiento entre la policía y miembros de la liga, fueron detenidos Liebknecht y Rosa Luxemburgo y ajusticiados durante el traslado a la cárcel. 8 V. I. Lenin, Obras 21, p. 12, Las tareas de la socialdemocracia revolucionaria en la guerra europea. 12
  • 13. imperialista”, al afirmar que: “en todos los países imperialistas, el proletariado debe desear la derrota de su propio gobierno y contribuir a ello”. De esta manera, puede considerarse que la totalidad de los socialistas revolucionarios, se convirtieron en agentes de la traición a sus respectivas naciones, en cada uno de los países contendientes, sin distinción de ningún tipo salvo las circunstanciales de lugar, posibilidad u otras. A partir de este planteamiento de transformación de la guerra entre naciones en guerra civil, Lenin participó en los años posteriores en la formación de un movimiento socialista revolucionario e internacionalista, más tarde llamado comunista, tanto en su propio país como a nivel internacional. Durante la guerra se celebraron dos nuevas conferencias con los restos de la dividida Internacional. La primera tuvo lugar en septiembre de 1915 en la ciudad de Zimmerwald en Suiza. Representando a Rusia estaban las dos tendencias del Partido Social Demócrata: la de los bolcheviques revolucionarios de Lenin y Zinoviev; y la de los mencheviques, Mártov y Axelrod. En esta conferencia, Lenin se confirmó como portavoz y líder de la izquierda revolucionaria en Europa. Pero esto no evitó que sus propuestas no obtuvieran el respaldo de la conferencia y sí lo encontrara el llamado "Manifiesto de Zimmerwald”, escrito por Trotsky, que no incluía la necesidad de transformar la guerra imperialista en guerra civil, ni el "trabajo por derrotar a su propio gobierno" y la ruptura total con los dirigentes socialdemócratas que cooperaron en la guerra. Sin embargo, los bolcheviques firmaron el manifiesto. La conferencia acordó la creación de una Comisión Internacional Socialista, con sede en Berna con un secretariado liderado por Lenin. La segunda, llamada Conferencia de Paz, tuvo lugar en Kienthal, también Suiza, en abril de 1916, y en las votaciones clave, casi la mitad votó a favor de las posiciones de la izquierda revolucionaria. En ambas conferencias se colocaron las primeras piedras de la futura III Internacional. De este fermento nacerían acontecimientos como la revolución comunista de octubre en Rusia, la Revolución de 1918- 19 y la fundación del KPD Partei Deutschlands Kommunistische Partido Comunista en Alemania, la insurrección comunista del dirigente judío Béla Kun9 en Hungría o la formación de la Internacional Comunista. 9 Béla Kun, nacido Cohn Béla, (Szilágycseh, Transilvania, Austria- Hungría, 20 de febrero de 1886- prisión de Butyrka, URSS, 30 de noviembre de 1939), destacado político comunista húngaro que gobernó Hungría en 1919. Nació en una familia judía de clase media en 1886, era abogado de profesión. Se afilió al Partido Socialdemócrata Húngaro en 1902, para el que trabajó antes de la guerra mundial, y al Partido Bolchevique en 1916, durante su periodo como prisionero de guerra en Rusia. En 1918 fundó el Partido Comunista Húngaro, que presidió. En 13
  • 14. 3. Los socialistas alemanes ante la guerra. El 4 de Agosto de 1914, el partido socialdemócrata alemán votó de forma unánime en el Reichstag en favor de los créditos militares, inaugurando así la política que la mayoría de los dirigentes socialdemócratas mantendrían hasta el final de la guerra. La consigna consensuada antes de 1914 de: “Ni un céntimo, ni un hombre para el estado burgués y sus guerras”, había desaparecido, dando lugar a la conocida como “Unión Sagrada”. Esta expresión hacía referencia a la política de apoyo unánime a la guerra por parte de todas las fuerzas políticas y sociales, en aras a lograr la victoria en la lucha contra los países enemigos de Alemania. Multitud de hombres aguardan para alistarse en Gran Bretaña En el seno del partido, sin embargo, la facción radical se oponía a votar en favor de tales créditos, porque entendía que un voto favorable implicaba aceptar al régimen y aprobar la guerra. Aun así, la minoría aceptó la posición de la mayoría, en parte porque el partido basaba su fuerza en su cohesión y disciplina noviembre volvió a Hungría y en marzo de 1919 pasó a dirigir la breve República Soviética Húngara durante ciento treinta y tres días. Más tarde combatió en Ucrania en 1920, durante la Guerra Civil Rusa. Fue miembro de la presidencia colegiada de la Comintern, para la que trabajó el resto de su vida. Su oposición a los “frentes populares” y su gestión del partido comunista húngaro llevaron a su caída en desgracia. Detenido en junio de 1937, se le torturó infructuosamente para que confesase, antes ser asesinado en noviembre de 1939 en la prisión soviética de Butyrka. 14
  • 15. internas. Rosa Luxemburgo diría más adelante que: "El 4 de agosto la dirección socialdemócrata traicionó todos los principios, negó la lucha de clases y además prolongó la guerra". La socialdemocracia alemana fue la primera que rompió con las declaraciones de la Internacional contra la guerra. Con anterioridad, el SPD había sufrido una profunda transformación, por lo que su apoyo a los créditos de guerra no fue una sorpresa, aunque durante los primeros meses de 1914 el partido realizó protestas contra la guerra. El SPD no tuvo la determinación de usar la guerra para movilizar a los trabajadores en un sentido de solidaridad internacional de clase, para provocar el derrocamiento del sistema capitalista. Por el contrario, lo que movilizó finalmente al partido fue la solidaridad nacional, sabiendo que lo contrario le haría perder el apoyo de los trabajadores alemanes. La dirección del SPD y de la Federación General de Sindicatos Alemanes (ADGB), ocupadas por el ala socialdemócrata y no revolucionaria de los socialistas durante los diez años anteriores, justificaron el apoyo al Káiser alegando la necesidad de "adaptarse a la realidad" y de "tratar de evitar que esto empeore", ya que “al fin y al cabo no podemos cambiar nada"10. Desaparecía así el enemigo de clase y surgís una nueva imagen de enemigo: el enemigo nacional: "Para nuestra nación y un futuro de libertad, una victoria sobre el despotismo ruso, manchado con la sangre de su propio pueblo, significará muchas cosas, significará todo. Debemos asegurarnos que este peligro se evita, que protegemos la cultura y la independencia de nuestro país. A la hora del peligro, no vamos a permitir que nuestro país se retire. [...] Guiados por estos principios, estamos de acuerdo con los presupuestos de guerra necesarios."11 En resumen, los dirigentes del SPD justificaron su apoyo a la 15 guerra en diversas razones: 1ª Se trataba de una guerra defensiva, dado que en el Este Rusia había sido la primera en movilizar sus ejércitos amenazando la región de Prusia oriental, y en el Oeste Francia estaba dispuesta a invadir territorio alemán; 10 “Handbuch zur Geschichte der deutschen Arbeiterbewegung”, Band 2. Berlín/DDR 1987, p.782. 11 “Erklärung der Sozialdemokratischen Partei zum Kriegsausbruch abgegeben vom Fraktionsvorsitzenden Haase im Reichstag (4 Augustus 1914)”, Verhandlungen des Reichstags, XIII. LP., II. Sess., 1914, Bd. 306, pp. 8 y siguientes. Citado en Ernst Rudolf Huber, “Dokumente zur deutschen Verfassungsgeschichte”. 2
  • 16. 2ª El odio al zarismo y su deseo de derrocarlo, contribuyeron al nuevo posicionamiento del SPD, que entendía que cualquier victoria alemana contra la Rusia reaccionaria, contribuiría a salvaguardar los intereses del socialismo internacional, lo que coincidía con los intereses internacionales del socialismo. Según lo visto, para el SPD no sólo no había contradicción entre los intereses nacionales y los del partido, sino que los mismos se complementaban. Hasta qué punto la decisión de apoyar la guerra fue sorprendente para el ala revolucionaria del socialismo alemán, se desprende de un discurso de Karl Liebknecht, de mediados de 16 febrero de 1915, en el que explica la razón de haber votado los presupuestos diciendo que: "No me parecía indicado, en aquel momento, aislarme por completo de mis mejores amigos en el campo radical. Nadie podía prever la traición del partido. El 3 y 4 de agosto, todo cambió al revés. Tuvimos sólo unas pocas horas, minutos, y nosotros estábamos, a nuestro gran pesar, frente a un colapso total del ala radical. Haase, miembro de la minoría en el partido, ¡fue persuadido para presentar la declaración de la mayoría! Y con el crujir de mis dientes me Hugo Haase en 1905 conformé con la mayoría. Me arrepentí de inmediato y con amargura, en razón de esta actitud, estoy dispuesto a asumir las críticas."12 12 K. Liebknecht: “Brief an einen Unbekannten. 18 februari 1915“, Gesammelte Reden und Schriften, Bd. VIII, pág. 195 y siguientes.
  • 17. En Noviembre de 1914, Liebknecht, Luxemburgo, Franz Mehring y Clara Zetkin publicaron en un diario suizo un manifiesto en contra de la guerra y del posicionamiento de la dirección del partido socialdemócrata alemán. Separado de la dirección del Liebknecht votó en contra de las propuestas del gobierno en la siguiente votación del 2 de diciembre de 1914, y en una tercera el 20 de Marzo de 1915. A lo largo de la guerra, el ala moderada del SPD mantuvo con el régimen monárquico alemán un Burgfrieden, una paz social o paz ciudadana. Hasta julio de 1917, su grupo parlamentario en el Reichstag, aprobó todas las leyes propuestas por el gobierno imperial a favor de los presupuestos de guerra. Esta política del SPD, convirtió a los socialistas en una parte integral del Estado alemán. Antes de la guerra, las autoridades se negaban a nombrar como cargos de los consejos de gobierno municipales, entidades organizadoras de las escuelas y otras actividades de los servicios municipales a miembros del SPD. Pero desde que se votaron los presupuestos de guerra, en más de 100 ciudades y pueblos, se confirmaron oficialmente en sus funciones a los socialdemócratas. Por su parte, los revolucionarios no cejaron en su empeño de utilizar la guerra, para provocar un conflicto civil que se convirtiera en la llave de la revolución. 4. La participación de los judíos alemanes en la Gran 17 Guerra. En agosto de 1914, el comienzo de las hostilidades desencadenó en los países beligerantes una ola de patriotismo entre las masas populares. Nadie dudaba de la victoria de su nación, que llegaría sin lugar a dudas tras una guerra breve y fácil, de ahí que los alistamientos de voluntarios en los primeros días, fueran masivos en todas las naciones. Dentro del Imperio Alemán, la minoría de origen judío se dividía en tres grupos claramente diferenciados: los sionistas, que no se sentían implicados en forma alguna por las guerras de las naciones europeas; los revolucionarios, que participaban plenamente en los movimientos anarquistas y socialistas13; y un tercer grupo de opinión, que veían en la guerra la posibilidad de 13 La mayoría de los jefes del socialismo alemán, tanto en su vertiente moderada como en la revolucionaria eran judíos. Desde Lassalle a Singer, pasando por Berstein, Kohn Nordhausen, Davidson, Frank, Herzfeld, Simon, Stadhagen. Las revoluciones de posguerra fueron dirigidas por judíos Kurt Eisner con Lewien, Toller, Landauer y otros correligionarios, dirigió la revolución bolchevique de Baviera, Hirsch la dirigió en Prusia, Gradnauer en Sajonia o Fulda en Hesse.
  • 18. ganarse el respeto de los ciudadanos alemanes demostrando su lealtad hacia la nación de la que eran huéspedes, mediante el enrolamiento de soldados judíos para luchar, por lo cual hubo desde los primeros días voluntarios judíos en el Reichsheer. Este espíritu patriótico y el entusiasmo bélico, contribuyeron a que las autoridades políticas y militares alemanas permitieran a los judíos ocupar empleos a los que con anterioridad habían tenido vedado el acceso. Así, se permitió a los médicos judíos ocupar destinos como oficiales al Reichsheer, y luego se permitió a todos los soldados judíos ascender a grados de oficial sin restricción alguna. Cuando llegó el invierno de 1915 y con él la guerra de trincheras, se perdió el entusiasmo inicial y la creencia en un triunfo rápido de Alemania. Tras la batalla de Verdún, se acordó realizar nuevas levas para cubrir las elevadas bajas que los combates producían. Los continuos reclutamientos y movilizaciones de hombres aptos para la guerra, alcanzaban de modo desigual a la población alemana y a la judía, que amparándose en su posición social, o de modo fraudulento, eludían el servicio militar activo, y en caso de ser finalmente movilizados, acaparaban casi todas las funciones militares de retaguardia. Panfletos y folletos acusaban también a los judíos de enriquecerse a costa del erario público, monopolizando la dirección de las empresas de armamento y de importación y exportación de alimentos, aprovechando así las penurias de las grandes masas alemanas para lucrarse "desde los despachos de los grandes comercios". Al malestar provocado por las numerosas bajas, se sumaban las privaciones derivadas del bloqueo marítimo impuesto por Gran Bretaña a las Potencias Centrales, que causó que el comercio internacional de Alemania se viera muy mermado, al reducirse apenas a Suiza, Holanda y las naciones neutrales de Escandinavia, sin opción para que la flota mercante alemana pudiera recorrer sus antiguas rutas comerciales. La casi total paralización del comercio, forzó al gobierno alemán a imponer el racionamiento de alimentos y productos industriales, dificultades que se veían agravadas por un mercado negro en el que muchos judíos encontraron un medio de enriquecimiento. Además, el principal funcionario gubernamental a cargo de la economía doméstica era el eminente economista y presidente de AEG Walther Rathenau14, judío, y el 14 Nació en Berlín, hijo del empresario Emil Rathenau y de una hija de Benjamín Liebermann. Estudió física, química y filosofía en su ciudad natal y en Estrasburgo. De origen judío, su padre, Emil Rathenau era presidente y fundador de la Sociedad General de Electricidad (AEG), presidencia que heredó a la muerte de éste en 1915. Durante la 1ª Guerra Mundial fue el director de la oficina para la distribución de materias primas. Rathenau y otros hombres de negocios como Albert 18
  • 19. principal asesor para cuestiones de comercio restringido era el armador Albert Ballin, también judío, que fueron blancos del odio popular pese a su patriotismo. A inicios de 1916 las noticias sobre la presunta evasión de obligaciones por parte de los soldados judíos se habían hecho alarmantes, y la Reichshammerbund ("Federación del martillo del Reich") envía el 16 de marzo una petición al Káiser Guillermo II, a los ministros y a los miembros del Reichstag denunciando a los judíos por "enriquecerse lejos de la línea del frente" y de someter a Alemania "al sistema creado por Rathenau y Ballin". En Stettin la guarnición local denunció a los judíos el 16 de julio por "evadir con mil pretextos el servicio activo" y pedir "en forma desmedida empleos militares en retaguardia". Cuando el 29 de agosto siguiente se constituyó una nueva jefatura militar formada por Paul von Hindenburg y Erich Ludendorff, la cuestión relativa al intento de los judíos alistados de eludir el servicio en primera línea, llegó a la alta jefatura del Reichsheer, que se vio obligado a emitir el 16 de octubre de 1916, una orden para que todas las unidades militares del Reichsheer, en los frentes de lucha o en la retaguardia, censaran a todos sus integrantes judíos, de cualquier grado o especialidad, expresando cuántos de ellos realizaban funciones administrativas, cuantos combatían en el frente, y cuántos permisos o licencias se habían concedido a los soldados judíos. A Ballin (también judío), ofrecen desde agosto de 1914 sus servicios al gobierno alemán para organizar lo que considera la clave de esta nueva guerra industrial: el aprovisionamiento de materias primas. Para este fin, se reunió con el ministro de guerra Falkenhayn y le propuso organizar toda la economía nacional para ponerla al servicio de la guerra. Fue fundador y líder del Partido Democrático, representante de la gran burguesía industrial y liberal. Se oponía al socialismo, aunque apoyaba ciertas ideas de tintes socialistas, como la de que los obreros participaran en mayor medida en la dirección de las empresas. Establecida la República de Weimar, fue ministro de reconstrucción en 1921 y, al año siguiente, de Asuntos Exteriores, ministerio al cargo del cual asistió a las conferencias sobre reparaciones de guerra de Génova y Cannes, donde consiguió reducir dichos pagos. Opinaba que Alemania debería pagar lo estipulado en el Tratado de Versalles. Rathenau denigraba a los judíos que no quieren integrarse en la sociedad, refiriéndose a ellos como: "una banda de extranjeros vestidos de manera demasiado extravagante, que hacen banda aparte". El 24 de junio de 1922, dos meses después de firmar el Tratado de Rapallo, Rathenau fue asesinado en una conspiración orquestada por dos oficiales ultranacionalistas, Erwin Kern y Hermann Fischer, en el que también se vieron envueltos Ernst Verner Techow, Hans G Techow y Wille Guenther (ayudados e instigados por otros siete, algunos de ellos estudiantes) vinculados a la Organización Cónsul. Uno de los asesinos era el futuro escritor Ernest von Salomon, que había proporcionado el coche pero no había participó en el tiroteo 19
  • 20. este propósito, el Ministerio de Guerra diseñó unos cuestionarios que debían ser llenados por los comandantes de las unidades. El decreto de ejecución para proceder a recopilar la información solicitada, salió de la Jefatura del Reichsheer el 11 de noviembre de 1916, remitiendo a las diferentes unidades los cuestionarios, con la orden de devolverlos antes del 1 de diciembre. La motivación escrita del decreto señalaba el pensamiento de las autoridades: "Han llegado quejas permanentes al Ministerio de Guerra, según las cuales, un número desproporcionado de conscriptos de religión israelita está exento de servicio militar o se esfuerza en lograrlo bajo toda clase de pretextos. Según las informaciones, se debe entender que un gran número de judíos en servicio militar logran hallar un refugio lejos de la línea del frente..." "12,000 soldados judíos murieron en batalla por el honor de la patria." Hoja difundida en 1920 por los veteranos judíos alemanes en réplica a las acusaciones de falta de patriotismo. Finalmente, las dificultades para redactar el Judenzählung15 y los obstáculos de todo tipo que se encontró para su confección, hizo que no se respetara la fecha límite para devolución de cuestionarios, y el plazo concedido se prolongó hasta febrero de 1917. Pero llegado este mes, se detuvo el censo sin explicaciones oficiales de ningún tipo. Lo cierto es que la realización del censo era imposible, dado que no había autoridad militar alguna que 20 15 Censo de judíos.
  • 21. vigilase su confección asegurando la fiabilidad de sus cifras, al punto que cualquier jefe de batallón podía manipular las cifras finales. Además, la dispersión geográfica de las tropas del Reichsheer por Francia, Bélgica, Rusia, Polonia, y los Balcanes, además de las guarniciones locales alemanas, hacía que el censo abarcase un territorio muy extenso. Los resultados del censo nunca fueron publicados, pero las investigaciones realizadas después de la Primera Guerra Mundial, y en los últimos años del siglo XX concluyen que en verdad, de un total de 550,000 judíos residentes en Alemania en 1914, 100,000 prestaron servicio en el Reichsheer, siendo la décima parte de ellos voluntarios, cayendo en combate un total de 12,000 soldados judíos, un 12% del total, porcentaje muy inferior a los caídos en combate del resto del Reichsheer, del que de un total de 11.000.000 millones de soldados movilizados, causaron baja como muertos, heridos o desaparecidos 7.142.558 soldados. Un 64,9% de los soldados16. Cinco veces más. Las consecuencias de la falta de implicación judía en la guerra, se proyectaron en dos planos diferentes: en el interior de la comunidad judía, a muchos de los excombatientes judíos el rechazo que provocó en la sociedad alemana su escasa participación en los sufrimientos de la guerra, les llevó a abrazar la ideología del sionismo como una forma de responder al rechazo de los alemanes; en el exterior de la comunidad judía, a la población alemana, los judíos, que habían dirigido el esfuerzo económico bélico y los movimientos subversivos contrarios al esfuerzo de guerra durante el conflcito, y que además se habían enriquecido con los suministros industriales al Reichsheer, quedaron señalados como traidores y causantes de la derrota. En el resto de la sociedad alemana, en tanto jamás fueron publicadas cifras oficiales del Judenzählung, la falta de resultados ayudó a cimentar la creencia popular de la puñalada por la espalda cometida por los judíos, como una efectiva traición a Alemania. Una creencia que, pese a que desde 1918 abundaron los relatos y crónicas de los veteranos combatientes judíos, se extendió masivamente alcanzando incluso a las asociaciones de veteranos excombatientes, que empezaron a rechazar las solicitudes de inscripción de veteranos judíos en sus filas. 16 Simkin, John. First World War Encyclopedia. Kindle Edition. 21