1. Épica Latina
La épica es el género literario escrito en verso que narra las hazañas de un héroe en
quien se reconoce la colectividad.
El término de épica deriva del griego epos, cuyo significado primitivo es “palabra” o
“relato” y que posteriormente adquirió el de “Poema”. La influencia griega se
manifiesta también en el aspecto formal, como se refleja el uso del verso desde sus
comienzos y el del hexámetro dactílico.
Las características de la épica latina son las siguientes:
-El uso del hexámetro dactílico “salvo en el caso del Bellum Punicum de Nevio, escrito
en Saturnios”
-El comienzo de la obra con un proemio, que invoca a las musas y con un breve
bosquejo de contenido del poema.
-El uso de símiles, interrumpiendo el relato para insertar un pequeño pasaje alusivo a la
Naturaleza o a la vida animal, diversificando el relato y distrayendo la atención de los
momentos de mayor tensión.
-Los Catálogos, una exposición de una serie de datos del mismo género.
-Fórmulas: Repetición de versos típico de los primeros poemas, cuando su transmisión
era oral.
-Invocaciones, fórmulas de saludo, discursos largos.
-Digresiones dónde se narra un relato mítico
-Escenas típicas como celebraciones de sacrificios, descripción de amaneceres, etc.
En la evolución de este género literario a lo largo de la historia se distinguen tres etapas
sucesivas: La Épica Arcaica, la Clásica y la Tardía.
Épica Arcaica:
La Odusia, de Livio Andronico: Es el primer poema épico latino.
Tradicionalmente se consideró una traducción de la Odisea de Homero, pero
basándose en los fragmentos conservados, hoy en día se cree que se trata de una
interpretación personal.
Bellum Punicum, de Nevio: Narra los sucesos de la Primera Guerra Púnica, de ahí
radica la originalidad de Nevio, en la utilización de un tema contemporáneo.
Combina elementos puramente históricos con otros míticos y legendarios. Utiliza
el verso Saturnio.
2. Los Annales, de Ennio: Se convertiría hasta la creación de la Eneida en la epopeya
nacional romana. Ennio tuvo el mérito de crear una lengua poética completamente
nueva.
Épica Clásica:
La Eneida, de Virgilio: Se compone de doce libros y narra las hazañas de Eneas,
superviviente de Troya, en búsqueda de una nueva patria, llegando a suelo
italiano, donde, antes de asentarse definitivamente, habrá de librar cruentos
combates con los habitantes del lugar. La Eneida destaca en cuanto a técnica por
sus comparaciones e imágenes plagadas de plasticidad y efectismo. Utiliza
vocablos sencillos evitando toda vacuidad innecesaria, con una simplicidad que
encubre multitud de figuras, transferencias, evocaciones, armonías imitativas de
sus hexámetros y otras técnicas.
El hilo argumental de la obra gira alrededor de Eneas, que al abandonar Troya, llegan
a las costas de África por culpa de una tormenta arrojada por la ira de la diosa Juno.
Allí conoce a Dido, a quién le cuenta los tristes sucesos de la guerra de Troya y su
viaje. Dido y Eneas se enamoran, pero más tarde él la abandona para cumplir su
destino y fundar una nueva Troya, con lo que la reina se suicida. Eneas llega al Lacio,
donde antes de poder fundar la nueva patria, debe luchar contra los latinos, instigados
por Juno.
Ninguna obra latina ha ejercido tanta influencia en la literatura universal como la
Eneida de Virgilio. En su época se erigió como texto escolar y fue el arquetipo directo
de la épica posterior, influenciando a muchos autores como a Châtillon, o a Dante
Alighieri con su Divina Comedia.
Épica Tardía
La Farsalia, de Lucano: Narra la guerra civil entre César y Pompeyo con la derrota
de éste último en Farsalia. Con ella se vuelve a la tradición romana de la epopeya
histórica, alejándose de la epopeya virgiliana que era primordialmente legendaria
y mitológica.