El documento argumenta que el objetivo principal de la ciencia, la innovación y la tecnología debe ser mejorar la vida humana. Se ha perdido de vista este objetivo en la obsesión por ser los primeros y por enfocarse demasiado en métricas como la velocidad, el costo y la rentabilidad. Los proyectos científicos, innovadores y tecnológicos solo valen la pena si mejoran a la humanidad y la naturaleza sin deteriorar la vida.