1. Vocabulario filosófico
Monismo:
posturas filosóficas que sostienen que el universo está constituido por un solo arjé, causa o sustancia
primaria. Así, según los monismos materialistas, todo se reduce, en última instancia, a materia,
mientras que para los espiritualistas o idealistas (especialmente el idealismo hegeliano), ese principio
único sería el espíritu.
Dualismo:
la doctrina que afirma la existencia de dos principios supremos, increados, contornos, independientes,
irreductibles y antagónicos, uno del bien y otro del mal, por cuya acción se explica el origen y
evolución del mundo; y también, en un sentido más amplio, a las doctrinas que afirman dos órdenes
de ser esencialmente distintos, con más o menos radicalismo
Inducción:
extraer, a partir de determinadas observaciones o experiencias particulares, el principio general que
en ellas está implícito.
Deducción:
es un argumento donde la conclusión se infiere necesariamente de las premisas. En su definición
formal, una deducción es una secuencia finita de fórmulas, de las cuales la última es designada como
la conclusión (la conclusión de la deducción), y todas las fórmulas en la secuencia son, o bien axiomas,
o bien premisas, o bien inferencias directas a partir de fórmulas previas en la secuencia por medio
de reglas de inferencia.
Dialéctica:
método de razonamiento desarrollado a partir de principios.
Elemento:
en la filosofía natural antigua, cada uno de los cuatro principios inmediatos fundamentales
considerados como constitución de los cuerpos, es decir, la tierra, el agua, el aire y el fuego.
Sensible:
que siente, física y moralmente.
Inteligible:
que es materia de puro conocimiento, sin intervención de los sentidos.