1. Las normas, leyes y deberes legales que
corresponden al quehacer profesional.
Las normas se establecen bajo la profesión que se estudia o donde se elabora. Es
importante decir que las normas son las reglas básicas del juego. Es como cuando un
juego se monopolio y debe saber las bases para poder avanzar y seguir jugando. Así
pasa con el quehacer laboral porque es este caso dan ciertos criterios de
comportamiento y permite que estos generen una buena comunicación y un mejor
entorno social y cultural. No importando la carrera que se estudie, siempre se aplica
unas normas de comportamiento y de adherencia a la labor del profesional.
Por ejemplo. En la educación se basa de las normas en ciertos criterios, tales como:
hablar un lenguaje comprensible, respeto a la opinión de los demás. También se
puede destacar las normas legales. Leyes y estatutos que defienden al educador y
defienden al estudiante.
Como base fundamental, esto lleva a que la profesión nos pone las cartas sobre la
mesa y nos brinda la guía para ejercer nuestra profesión. Claro está con sus permisos
y sus clausuras. Ser libres pero sin abusar del poder que nos otorga la profesión.
Los deberes ya hacen referencia a lo que debemos hacer no solo porque la ley lo
imponga; sino porque es parte de la misma profesión. Ese deber va atado con el
“tienes que” para lograr hacer un trabajo excelente. Volviendo al tema de la
educación, un deber importante de un maestro; enseñar, sin importar las condiciones
y las reglas sociales impuestas. Otro deber del educador es servir a la comunidad,
brindar alternativas de solución a las diferentes problemáticas sociales y locales.
Las leyes se encaminan a las normas y a los deberes de un profesional. Es decir, las
leyes son intermediarias, permiten que tanto las normas como los deberes se
cumplan. Están ahí para hacer uso de su poder y poder realizar una continua auditoria
a cada entidad y a cada persona. Las leyes encaminan un solo objetivo; que se
cumplan las normas y los objetivos. Que se acarrean consecuencias duras al
incumplimiento de estos. Genera seguridad y compañía tanto con el profesional como
por la misma sociedad.