El funcionario esta desilusionado...quien le ilusionara
1. Grupo 6
Hernández Castro, Leyla
Marcos Salgado, Azahara
Muñoz González, Ruth
EL FUNCIONARIO ESTÁ DESILUSIONADO… ¿QUIÉN LE ILUSIONARÁ?...
INTRODUCCIÓN
A lo largo de este tema, trataremos el “Síndrome del funcionario”. Tal
vez, algo desconocido por muchos pero que realmente se da en nuestra
sociedad y que, nosotras mediante este trabajo, queremos dar a conocer y
explicar. En primer lugar, vamos a definir ambas palabras.
Por “síndrome” entendemos un cuadro clínico o un conjunto sintomático
que presenta alguna enfermedad con cierto significado y que por sus
características posee cierta identidad; mientras que “funcionario” es aquella
persona que desempeña un cargo público. Por lo tanto, podremos decir que el
“Síndrome del funcionario” son aquellos síntomas relacionados con una
enfermedad, que padecen los trabajadores con un cargo público.
A través de este trabajo, queremos conseguir lo siguiente: Primero,
realizar un cuestionario para conocer si realmente nos gustaría ser funcionario;
segundo, saber las opiniones que la sociedad tiene de este gremio; tercero,
conocer algunos ejemplos de los síndromes funcionariales; y, por último,
ofrecer los resultados de una investigación sobre dicho tema.
A modo de nota humorística, un chiste
que refleja el pensamiento de mucha gente
hacia los funcionarios:
DESARROLLO
Como hemos comentado anteriormente, para desarrollar este tema, nos
parece importante conocer si realmente “queremos ser funcionarios” (maestros)
o como dice mucha gente, “es muy cómodo ser funcionario”. Para ello, hemos
elaborado un pequeño cuestionario que presentamos a continuación:
1. ¿Por qué has elegido ser funcionario?
a) Creo que se merece una dignificación como profesión
b) Así no me tengo que preocupar, tendré un puesto de por vida.
c) Es mi vocación, por eso creo que se merece un trato mejor.
2. ¿Qué opinas de las oposiciones?
a) Es el mejor procedimiento de selección.
b) Es un esfuerzo, puro trámite. Tendré tiempo de sobra para vaguear el
resto de mi vida.
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2. c) Es un proceso difícil, pero es lo que me gusta y por eso pondré todo mi
esfuerzo y ganas para conseguirlo.
3. ¿Qué opinas de la jornada laboral?
a) No es tan buena como parece, hay muchas horas de dedicación.
b) Es la mejor jornada de 9 a 16.00 y encima con esas vacaciones ¡cómo
para dudarlo!
c) Es la jornada que existe, aunque siempre quedará trabajo …
4. ¿Piensas que tu futura profesión será estresante?
a) Como todas hoy en día.
b) ¿Estresante?¿Con tres meses de vacaciones?
c) Depende mucho del centro donde estés. Aunque las cosas son cada vez
más difíciles.
5. ¿Crees que los “trámites” entorpecen tu trabajo?
a) Algunas veces son innecesarios, pero hay que hacerlos.
b) La verdad que no pongo muchas ganas a la hora de rellenarlo ¡TOTAL
NADIE LOS LEE!
c) Hay que hacerlos lo mejor posible para organizarse, sino será trabajo
perdido.
LA MAYORÍA A LA MAYORÍA B LA MAYORÍA C
Te encuentras al borde de caer en ¡HORROR! ¿Estás seguro/a que
las malas costumbres del este es tu camino? ¡FANTÁSTICO!
funcionario … Piensa un poco más a que quieres Sigue tu vocación y a lo largo
No olvides que tu misión es dedicar tu futuro … del camino no olvides porque
devolverle la dignidad a la Haces un flaco favor a comenzaste …Con personas
profesión docente y por ese camino compañer@s que se dejan la piel como tú será posible la mejora
corres serios peligros. … de nuestra profesión …
Si después de realizar el test, seguimos sin tenerlo claro, es importante
conocer las distintas opiniones que circulan sobre los funcionarios públicos, ya
que esto nos puede acercar de una forma más fidedigna a la realidad que
todas las personas que son funcionarias tienen que soportar en su día a día.
AUTOR FECHA COMENTARIO
Anónimo 1 de Marzo Como funcionaria puedo asegurar que muchos de nosotros
de 2010 trabajamos con muchas ganas, y que si bien hay otros que no lo
hacen tanto, no deja de ser algo que pasa también en lo privado,
pero los funcionarios tenemos que cargar con el sanbenito que nos
han colocado, aunque incompetentes y vagos haya en todos lados.
Antonio 12 de Mayo Funcionarios hay demasiados, en cargos que se han creado en
de 2010 muchos casos para colocar al enchufado y que su preparación es
insuficiente por no decir nula. Y el colmo es que le paguemos un
sueldo considerable a unas personas que “trabajan” solo por las
mañanas, las pocas veces que están en su puesto, que quieren
2
3. más vacaciones y más días de asuntos propios. ¡¡Vivan los
funcionarios, esos vividores de nuestro país!!
Jose 14 de Julio Ser funcionario es una mierda, es tan alineante como estar en una
de 2010 cadena de montaje…siempre lo mismo. Vale que es cómodo y no
tienes a un jefe encima, pero ¿qué futuro tienes? Al final acabas
amargado viendo como los que en principio envidiaban tu puesto,
poco a poco van progresando e incluso triunfando. En
fin…encontrar la seguridad demasiado pronto es empezar a morir
antes de tiempo.
Juanan 12 de Mayo Cuando la gente viene con la cantinela de siempre les digo lo
de 2010 mismo, es tan fácil como ponerte a estudiar 12 horas diarias
durante 3 años y ya está, ya puedes tocarte los huevos el resto de
tu vida. Pero en este país es muy fácil criticar por criticar, y ya
sabemos que la envidia es el deporte más practicado.
Si después de todo, todavía nos quedan ganas de ser funcionario, es
importante conocer algunos ejemplos de los síndromes funcionariales, ya que
en un futuro podríamos ser nosotros los que dijéramos frases tipo…
Síndrome 1: Muchas veces cuando nos encontramos ante un funcionario y le
pedimos información o nos equivocamos en algún trámite, ellos nos salen con
la frasecita "estoy cansado de explicar..."
Síndrome 2: “Yo no tengo la obligación de explicar..... “. Claro pero por
desgracia nosotros SÍ tenemos la obligación de pagar los impuestos de los que
sale su sueldo.
Síndrome 3: “Nadie valora mi trabajo...”Cuando los ciudadanos/clientes,
reciben un buen trato, cordial, amable…, sí lo agradecen, y ellos no pueden
saber si soy funcionario o no.
Síndrome 4: “La verdad es que mi sueldo no es el que me gustaría”. No es
recomendable que un funcionario haga estos comentarios delante de: Parados,
becarios, empleados temporales y/o a tiempo parcial…etc.
Síndrome 5: “La verdad es que no se por qué no dejo el trabajo en la
administración y me voy a la empresa privada”. Nosotros si lo sabemos pero
por prudencia no lo decimos
Síndrome 6: "Eso lo tramita mi compañero y aunque no tenga nada que hacer
y pueda resolverlo yo, me niego a hacerlo". Aquí el culpable es el jefe del
funcionario y las victimas el compañero funcionario y el ciudadano.
Y, como el saber no ocupa lugar, es importante conocer los resultados
de investigaciones científicas acerca de las consecuencias que nos puede
acarrear el desempeño de nuestra profesión, y, para eso os detallamos los
siguientes resultados:
Un reciente estudio realizado a 3000 trabajadores ha logrado determinar
que el funcionario público español (8 de cada 10 empleados) se siente poco o
mal valorado en el puesto o cargo que desempeña y un tercio sufre estrés y se
siente desilusionado.
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4. Ese estrés se debe a la burocratización, a la jerarquía, a la mala
planificación laboral y a la falta de recursos y a la sobrecarga de trabajo, pero
sobre todo, a la falta de reconocimiento y por la baja estima que tienen los
jóvenes, mujeres y personal temporal de su puesto de trabajo. Algunas de las
consecuencias más notables del estrés son el insomnio, la irritabilidad, la falta
de ánimo y el agobio.
Motivados por esta realidad, las Administraciones han creado cursos
anti-estrés para los funcionarios que serán impartidos como mecanismo para
paliar y dar solución a este creciente problema.
El objetivo de este curso es que los funcionarios estén a gusto en su
puesto de trabajo de manera que, no sólo sean trabajadores eficaces sino
también que tengan un trato y una comunicación correcta con el ciudadano; y,
que puedan evitar sentir estrés en ocasiones de tensión o de máxima
exigencia, controlando sus emociones.
CONCLUSIONES
Creemos que es de gran importancia romper los mitos existentes acerca
de las funciones del funcionario, ya que lamentablemente, parece que la
leyenda de “vuelva usted mañana” pervive en la conciencia social o al menos
de algunos sectores, y, dado que el origen de la mala prensa de los
funcionarios viene dado por la intolerancia ciudadana, sería muy interesante
transmitir a la ciudadanía que los funcionarios no se inventan los trámites por
capricho, ni disfrutan haciendo esperar al ciudadano, ni todos son vagos…, por
lo que creemos conveniente cambiar esa percepción desde el ámbito
educativo, a través de la asignatura de Educación para la Ciudadanía, puesto
que casos como los anteriores justifican la necesidad de esta asignatura.
El quiz de la cuestión es tener en cuenta que el colectivo de
funcionarios, como todo rebaño, cuenta con sus ovejas negras, y no por eso
hay que generalizar y pensar que ser funcionario está lleno de ventajas, y
mucho menos que con una oposición se cobrará mucho, se mandará más y se
será más feliz, pese a que un puesto de trabajo estable ayuda.
Los que toman posesión de un puesto de trabajo tras la oposición, saben
o deberían saber que les esperan tiempos difíciles o al menos agridulces, ya
que podemos decir que el funcionario pasa por tres etapas: Sancho el Bravo:
que cree que domina el mundo y sabe como corregir los errores, Sancho el
Fuerte: aprende a sobrevivir entre normas y ciudadanos “quejicas”, y entre sus
propios compañeros y Sancho Panza: que se toma la vida con tranquilidad y
paciencia.
Por lo tanto nuestro trabajo consistirá en ser ESE BUEN ILUSIONADOR
que consiga ilusionar a los funcionarios y desmitificar su mala prensa.
BIBLIOGRAFÍA
http://malditasmentiras.blogspot.com/2006/08/sndromes-funcionariales.html
http://ponzonha.es/.../un-par-de-detalles-sobre-los-funcionarios/
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