1. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN
UNIVERSIDAD VALLE DEL MOMBOY
DECANATO DE INVESTIGACIÓN POSTGRADO
MAESTRÍA EN CIENCIAS PARA LA EDUCACIÓN
PARTICIPANTE:
DANY ORTA
SABANETA, FEBRERO 2019.
2. FAMILIA Y TECNOLOGÍA
La tecnología ha llegado a todas las familias. La televisión, Internet, los videojuegos,
los teléfonos móviles… en definitiva, todas las pantallas audiovisuales que nos rodean
son tecnologías que ya forman parte de nuestra vida cotidiana y familiar. Pero… ¿son
buenas o malas?
No podemos responder con rotundidad a esta pregunta porque son recursos que nos
ofrecen numerosas oportunidades y, a su vez, suponen algunos riesgos. Todo
dependerá del uso, o del abuso, que se haga de ellos. Está situación se pone
especialmente de manifiesto en el consumo adolescente de las pantallas
audiovisuales. En este caso, son los padres y las madres quienes deben desempeñar
un papel fundamental en la educación de sus hijos e hijas sobre el buen uso de estos
recursos. Logrando así, que las aprovechen al máximo y minimicen los riesgos que
puedan suponer. Buscamos en primer lugar, identificar qué ventajas nos ofrecen las
pantallas y qué riesgos presentan (conocer); animar a padres y madres a establecer
normas que protejan a su familia de esos riesgos generados por un uso inadecuado de
este tipo de recursos (proteger); y, finalmente, ayudar a crear hábitos que faciliten un
uso responsable de los medios audiovisuales y las nuevas tecnologías de la
comunicación (educar).
3. LA IMPORTANCIA SOCIALIZADORA DE LA FAMILIA FRENTE A LA TECNOLOGÍA
La sociedad en la que vivimos es cada vez más compleja y, con ella, la educación
familiar se ha complicado en la misma medida. No obstante, tan alejado de la
realidad sería pensar que nuestros hijos e hijas pueden vivir en una burbuja
aislada de influencias ajenas a la familia, como creer que padres y madres no
tenemos nada que decir en su educación. Es precisamente entre esos dos
extremos donde debemos situarnos para ser más eficaces, siendo conscientes de
que:
Compartimos la educación de hijos e hijas con otros agentes.
Si en los primeros años la influencia de la familia es prácticamente absoluta, poco
a poco van incorporándose otros espacios y otras instituciones: la escuela, las
amistades, los medios de comunicación…
Cuantas más influencias externas existan, más sentido cobra la labor educativa de
la familia.
Ante esta situación, se hace necesario que la familia ocupe una posición
socializadora de referencia, mediando entre los diferentes espacios de influencia
externa y los hijos e hijas.
4. EL RIESGO DE AISLAMIENTO SOCIAL
se produce cuando el aumento de horas
dedicadas al consumo audiovisual va en
detrimento del tiempo dedicado al cultivo de las
relaciones sociales. En otros casos, las
dificultades de relación son previas,
convirtiéndose el consumo de televisión,
videojuegos o Internet, en un refugio ante esas
dificultades relacionales o de otro tipo.
5. NO PERMITAS QUE ESTO SUCEDA EN
TÚ FAMILIA.
GRACIAS POR SU ATENCIÓN.