1. CIUDADES PARA UN PEQUEÑO PLANETA
(ROGERS, RICHARD; 2000)
CAPÍTULO I
La cultura de las ciudades
Resumen
Por Rosario E. Camacho M.
El hombre ha evolucionado con el paso del tiempo, volviéndose más complejo y
ávido de satisfacer nuevas necesidades de comodidad y calidad de vida, lo que ha
implicado una destrucción sistemática del sistema de vida en el planeta. Sabemos
que para mantener la supervivencia humana se requiere un equilibrio entre
población, recursos y medio ambiente.
Es un llamado de atención y un reto para los arquitectos el enfrentarse a la
realidad de que son nuestras ciudades las que han provocado la crisis
medioambiental actual. La población urbana crece a un ritmo acelerado de
250.000 personas al día, lo que acelera a su vez el grado de erosión del suelo y la
contaminación del ambiente.
La Arquitectura y el urbanismo son prácticas profesionales que pueden
desarrollarse para crear soluciones y plantear formas de reducir y evitar la
contaminación, realizando buenas prácticas orientadas a la sustentabilidad y
sostenibilidad de los espacios.
Lamentablemente, la ciudad está provocando la segregación social de un mismo
pueblo y por ende una peligrosa inestabilidad. La situación se ve agravada por la
falta de empleo y la pobreza, que implícitamente conllevan a una precaria
educación, servicios sanitarios inadecuados o inexistentes y conflictos sociales.
Es cada vez más común el espacio privado completamente cerrado o cercado,
donde no existe interacción con los vecinos y la vida que se desarrolla en la calle,
limitándonos a encerrarnos entre cuatro paredes, llenas de seguridades de todo
tipo, propiciando una mayor delincuencia, y perdiendo la vida en comunidad. El
espacio público es cada vez más reducido, o en su defecto se limita a ser el espacio
residual de la conformación urbana, muchas veces adaptado para su servicio.
Las ciudades son lugares de convivencia y reunión, donde confluyen personas de
edades diferentes, así como diversas costumbres, culturas, realidades, etc. Son
valores que se deben preservar y fomentar, y sólo se pueden lograr si se canaliza la
participación ciudadana, orientada a la educación y el acercamiento a sus
necesidades, a fin de lograr políticas justas y equitativas, mejorando así su calidad
de vida.
Curitiba es un ejemplo que ha logrado solventar los problemas de crecimiento y
mantenimiento gracias a la participación ciudadana y a una gestión política
abierta. Del mismo modo, se debe aplicar y aprovechar las herramientas
2. tecnológicas en la protección del medio ambiente y desarrollo de innovadoras
formas de humanizar la ciudad.
Conclusiones Personales:
• Todos queremos mantener nuestras casas limpias y ordenadas, nadie desea
que los invitados lleguen a dejar sus desechos en ella, destrozar su
mobiliario y luego irse como si nada hubiera pasado. Pues la ciudad es
nuestro espacio familiar ampliado, donde crecemos, nos desarrollamos,
formamos familias, trabajamos y socializamos, lo menos que debemos hacer
es respetarla, cuidarla, conocerla y edificarla de manera responsable tanto a
nivel social como ambiental.
• El espacio público es el que da vida a la ciudad, sin embargo es el más
abandonado, constituyéndose muchas veces en escenario de la
delincuencia. Sin duda se requiere dar seguridad a estos espacios, no
obstante si la ciudadanía se apoderara de ellos, estos problemas
disminuirían.
• Los problemas urbanos surgen de las complejas relaciones sociales, por lo
que es menester abrir espacios de participación ciudadana, donde la
comunidad no es espectadora, sino decidora, a fin de que respalde y se
comprometa con el desarrollo de la ciudad. Educar a la ciudadanía en el
tema urbano desemboca en un sentimiento de arraigo que impulsa a ser
responsables con los actos y sus consecuencias en el entorno urbano.