1. ESTRATEGIAS METODOLÓGICAS:
La metodología empleada para impartir clases debe contar con componentes
lúdicos y creativos, lograr que el contenido académico resulte atractivo e interesante
y también es posible que estas estrategias sean parte del acontecimiento diario del salón
de clases.
Algunas ideas que se podrían considerar son las siguientes:
• Utilización de juegos de mesa adaptados: Con el apoyo de un juego de mesa en el
que se avanza espacios con una ficha (como por ejemplo Serpientes y Escaleras o Gran
Banco), se pueden cambiar las preguntas del juego (o añadirlas en caso de que no cuente
con preguntas) por las interrogantes de un cuestionario relacionado con la materia. La idea
es que el muchacho perciba ese momento como un juego y por lo tanto experimente
motivación y deseos de continuar aprendiendo de él. Se le pueden añadir componentes
extra como tarjetas que le indiquen que debe avanzar o retroceder espacios, perder
turnos, darle puntos al oponente y marcar gane de puntos para hacerlo más emocionante.
• Competencias y Trivias: la organización de actividades de índole concurso pueden hacer
de la materia algo lúdico que los estudiantes recordarán posteriormente con mayora
facilidad. Prepare tarjetas con preguntas o frases incompletas, léasela a los muchachos y
ya sea individualmente o por grupos incentívelos a contestar ya sea oralmente en el menor
tiempo posible o por escrito. Asigne puntos e incluso prepare comodines y opciones
múltiples al estilo de algunos programas televisivos.
• Sopas de letras y crucigramas: Estas actividades pueden resultar una excelente opción
por cuanto presentan y refuerzan la materia de una forma distinta a la tradicional, implica
cierto reto para los muchachos y no requiere de mucho tiempo para su elaboración.
• Rallys o juegos de búsqueda de pistas: Este tipo de juegos kinestésicos (movimiento
corporal) son muy útiles porque permiten aprender a través del movimiento y la acción.
Para ejecutar esta actividad coloque pistas o tarjetas con indicaciones en distintos puntos
del aula, de forma que, individualmente o por equipos, los muchachos tengan que ir
ejecutando algunas actividades o respondiendo preguntas. De acuerdo al contenido, los
estudiantes pueden tener que encontrar todas las pistas escondidas para ganar el rally.
• Debates: Cuando un estudiante analiza los temas académicos a profundidad generará
sus propias conclusiones y por lo tanto un aprendizaje más allá de lo memorístico. Es
posible organizar debates tomando como punto de referencia algunos temas contenidos
en el programa de estudio, de forma que uno o un grupo de los muchachos defienda un
punto de vista y el profesor u otro grupo de jóvenes defienda otro. Se puede incluso
nombrar a un jurado que tomando en cuenta los argumentos de cada parte, defina un
veredicto del juicio.
• Mapas conceptuales y mapas mentales: Algunos estudiantes requieren de estrategias
visuales para poder asimilar mejor la materia. Los mapas conceptuales son una estrategia
de aprendizaje dentro del constructivismo que produce aprendizajes significativos al
2. relacionar los conceptos. Se caracterizan por su simplificación, jerarquización e impacto
visual.
Un mapa mental es un diagrama usado para representar las palabras, ideas, tareas, u
otros conceptos ligados y dispuestos radialmente alrededor de una palabra clave o de una
idea central. Se utiliza para la generación, visualización, estructura, y clasificación
taxonómica de las ideas, y como ayuda interna para el estudio, organización, solución de
problemas, toma de decisiones y escritura.
• Animación a la lectura: En materias que requieran de comprensión lectora, se pueden
utilizar técnicas de animación a la lectura como las que se describen a continuación;
o Esta frase tiene sentido: se le solicita al estudiante que realice la lectura correspondiente
y luego se le pide que ordene frases expresadas por los diferentes personajes
mencionando a quién corresponde.
o Dramatizar o contar el final que el estudiante considera que podría tener una historia
antes de conocer su desenlace.
o Concursos de lectura, en donde a través del juego se les incentive a los muchachos a
leer correctamente. Se puede por ejemplo nombrar a un árbitro que suene un silbato
cuando escuche algún error en la lectura; y esa persona podría ir saliendo del círculo o
bien, podría asignársele alguna prueba lúdica en particular.
o Para formular preguntas de comprensión lectora se les puede introducir en globos que
deban reventar, poner a los muchachos a buscarlas, sacarlas de una bolsita, entre otras
opciones.
• Técnicas para incentivar la memorización de conceptos.
o Técnica de la cadena: Se basa en la imaginación, en crear imágenes y realizar
construcciones mentales por semejanza (se parece), por contrariedad (distinto a). Es
posible apoyarse con imágenes claras, grandes, concretas, sensoriales, cómicas e incluso
ilógicas, ya que estas características favorecerán la introyección de las mismas.
o Técnicas numéricas: Persiguen convertir los números en imágenes. Se atribuye a cada
uno de los dígitos una consonante. El número se convierte en imágen añadiendo vocales
o Utilización de mapas,utilización de tecnología y de música.
Estrategias: Técnicas que se ponen en marcha para conseguir alcanzar de forma
adecuada los objetivos y contenidos previstos.
Ejemplo de estrategias:
Planificar y organizar cuidadosamente el contenido, actividades, tutorías con
los alumnos, no dejar lugar a la improvisación, etc.
Motivar al estudiante a través de la puesta en práctica de diferentes
actividades, contenidos atractivos, multimedia, etc.
Explicar los objetivos que se pretenden alcanzar a lo largo de los diferentes
temas, módulos y curso en general, para que el estudiante sepa qué se espera
que aprenda.
Presentar contenidos significativos y funcionales, que sirvan al estudiante
para resolver problemas de la vida diaria.
3. Solicitar la participación de los estudiantes, a través de actividades de distintos
tipos y formatos.
Fomentar aprendizaje activo e interactivo. Es fundamental el rol activo del
estudiante para que sea partícipe en la construcción de su propio
conocimiento.
Potenciar el trabajo colaborativo en grupos de aprendizaje.
Evaluar formativamente el progreso, para que el estudiante tenga siempre
información de qué está haciendo bien y qué debe corregir.
Evaluación del curso, del profesor, de los materiales, etc, por parte de los
alumnos cada cierto tiempo, empleando por ejemplo la herramienta
evaluaciones (tipo encuesta) de la plataforma e-Learning.
Etc.