1. PRIMEROS AUXILIOS
Loraine EDEN
Jefa del departamento de protección civil y prevención de accidentes del
hospital de Londres
Demon HART
Medimago titular del hospital de San Mungo y profesor emérito en el colegio
Durmstrang
Dennis GRYLLS
Medimago auxiliar del hospital de San Isidro
2. Quemaduras
Definición:
Las quemaduras son un tipo específico de lesión de los tejidos blandos producidos por agentes
físicos, químicos, eléctricos o por radiaciones.
Una quemadura grave puede poner en peligro la vida y requiere atención médica inmediata.
La gravedad de la quemadura depende de la temperatura del medio que la causó y la duración de
exposición a ésta por parte de la víctima, también está determinada por su ubicación en el cuerpo,
el tamaño de la lesión, así como la edad y el estado físico de la víctima.
Existen tres niveles de quemaduras:
Las quemaduras de primer grado:
Afectan sólo la capa exterior de la piel,
causan dolor, enrojecimiento e
hinchazón.
Las quemaduras de segundo grado:
Afectan tanto la capa externa como la
capa subyacente (por debajo) de la
piel. Provocan dolor, enrojecimiento,
inflamación y formación de ampollas.
También se denominan quemaduras
de espesor parcial.
Las quemaduras de tercer grado:
Afectan las capas profundas de la piel
y también se denominan quemaduras
de espesor completo. Pueden
provocar coloración blanquecina, oscura o carbonizada de la piel. La piel puede quedar
insensible.
NOTA: Se deben considerar como quemaduras graves aquellas que:
Las que dificultan la respiración.
Las que cubren más de una parte del cuerpo.
Las quemaduras en la cabeza, cuello, manos, pies o genitales.
Las quemaduras en un niño o un anciano.
Las quemaduras de tercer grado, independientemente de su extensión y localización.
Las quemaduras causadas por sustancias químicas, explosiones o electricidad.
Las quemaduras graves pueden ser mortales; por lo tanto necesitan atención médica lo
antes posible.
3. Atención al herido
Antes de administrar los primeros auxilios, es importante determinar qué tipo de quemadura tiene
la persona. Si usted no está seguro, trátela como una quemadura mayor. Las quemaduras graves
necesitan atención médica inmediata.
*Tratamiento Humano:
En caso de quemaduras leves y si no hay rupturas en la piel:
Deje correr agua fría sobre la zona de la quemadura o sumerja la zona en agua fría (no
helada). Mantenga la zona en el agua durante al menos 5 minutos. Una toalla limpia,
húmeda y fría también ayuda a reducir el dolor.
Calme y reconforte a la persona.
Luego de lavar o remojar la quemadura en agua, cúbrala con un vendaje estéril y seco o
con un apósito limpio.
En caso de quemaduras graves:
Proteja la quemadura de presiones o fricciones.
Envuelva a la persona con un material grueso como un abrigo de algodón o lana, una
alfombra o una manta. Esto ayuda a apagar las llamas.
Rocíe agua sobre la persona.
Cerciórese de que la persona ya no esté en contacto con materiales ardientes o
humeantes.
NO le quite las ropas quemadas que estén pegadas a la piel.
Verifique que la persona esté respirando. De ser necesario, comience a administrar
respiración artificial y RCP.
Cubra la zona de la quemadura con un vendaje estéril y seco (si lo hay) o una tela limpia.
Una sábana es suficiente si la zona de la quemadura es extensa.
No aplique ungüentos. Evite reventar cualquier ampolla causada por la quemadura.
Si los dedos de las manos o de los pies sufrieron quemaduras, sepárelos con compresas
secas, estériles y anti adhesivas.
Eleve la parte del cuerpo quemada por encima del nivel del corazón.
Proteja la zona de presiones y fricciones.
Si una lesión eléctrica puede haber causado la quemadura, No toque directamente a la
víctima. Utilice un objeto no metálico para alejar a la persona de cables expuestos antes
de comenzar a administrar los primeros auxilios.
4. También es necesario prevenir el shock(choque). Si la persona no tiene lesión en el cuello, la
cabeza, la espalda o la pierna, siga estos pasos:
Acuéstela horizontalmente.
Levántele los pies unas 12 pulgadas (30 cm).
Cúbrala con una manta o abrigo.
Continúe vigilando el pulso, la frecuencia respiratoria y la presión arterial de la persona
hasta que llegue la ayuda médica.
NOTA: Estas son algunas cosas que NO se debe realizar si la quemadura es grave
No aplique ungüentos, mantequilla, hielo, medicamentos, cremas, aceites en aerosol ni
ningún otro remedio casero en las quemaduras graves.
No respire, sople ni tosa sobre la quemadura.
No toque la piel muerta o ampollada.
No retire la ropa que esté pegada a la piel.
No administre nada a la persona por vía oral si hay una quemadura grave.
No ponga una quemadura grave en agua fría, pues esto puede causar shock (choque).
No coloque una almohada debajo de la cabeza de la persona si hay quemaduras de las vías
respiratorias, porque esto puede cerrarlas.
5. *Tratamiento Mágico:
Si bien en algunas ocasiones se puede sustituir un tratamiento por otro, en este tipo de lesiones es
recomendable que se proceda con el tratamiento tradicional humano y como un trato adicional
podemos hacer uso del siguiente remedio, el conocido ungüento para quemaduras “Burn Healing
Paste”
A pesar de la recomendación anteriormente citada podemos hacer caso omiso de la regla anterior
para uso de esta alternativa, ya que es de tratamiento inmediato, además de que es un remedio
mágico
Se trata de una especie de crema especializada en sanar lesiones de este tipo, muy práctico para
situaciones que requieran tratamiento rápido, sin embargo no sustituye el tratamiento completo
como el mencionado anteriormente, por lo que lo podríamos considerar como un simple remedio
momentáneo.
Para prepararlo se requiere de los siguientes ingredientes:
Limón
Clara de huevo
Harina de doxi
Sangre de dragón.
*Como nota curiosa el ingrediente estrella es la sangre de dragón que posee propiedades
curativas según los estudios del señor Albus Dumbledore.
El procedimiento es relativamente sencillo, consiste en mezclar el jugo de un limón (aunque en lo
personal recomiendo el uso de más de 3 limones) con la harina de doxi y la clara del huevo. Se
deben de mezclar los ingredientes tratando de que se incorporen de manera heterogénea,
cuando se forme una pasta se debe de agregar la sangre del dragón y mezclar, teniendo el cuidado
de que no se bata la mezcla y conserve su textura “espesa”.
Finalmente podemos hacer uso de nuestro ungüento en las lesiones con el cuidado de no lastimar
más de la cuenta al enfermo y dejar actuar.
*La mejora de la lesión dependerá de la gravedad de ella así como la extensión de la herida.