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Capítulo VI. El Paraíso de la Miseria
1. -El Paraíso de la Miseria-
Capítulo VI
-¿Dónde estoy?-,-¿Qué sucedió?-, -¿Zetphilon?-. Sereb dijo impactada al despertar,
sorprendida ante esto, había un mundo totalmente diferente frente a sus ojos, un
ambiente calmado, con un brillo del sol como en la misma primavera, el piso
cubierto de pasto hasta donde la vista de Sereb podía abarcar, un cielo despejado
de un color morado brillante, era un lugar tan hermoso, era como aquel que en las
historias del reino contaban acerca de cómo era el verdadero paraíso.
Sereb olvidando todos sus temores, preocupaciones e inclusive sus tristezas,
empezó a caminar en este bello sendero, haciéndola sentir verdaderamente feliz.
Sereb mientras recorría este lugar, fue intrigada ante la aparición de un árbol con
hojas rojas, de color rojo como la misma sangre, sin embargo aun así este árbol se
podía apreciar toda su belleza, en ese momento ella decidió ir hacia este, para
poder admirarlo más cercanamente, en ese momento una extraña aparición
borrosa comenzó a aparecerse frente a Sereb, intrigada ante lo que veía decidió no
actuar al haciendo ningún movimiento extraño, poco tiempo paso y la aparición
borrosa comenzó a tomar forma, los ojos de Sereb quedaron impactados, su cuerpo
inmóvil, estaba ante la presencia de su viejo amigo, Alas del Cielo.
Sereb sin pensar mas y con lagrimas en los ojos se dirigió corriendo hacia su amigo,
pensando solamente en qué le diría al estar con él, -“hola amigo como has estado,
tenemos tanto que contarnos, tenemos tanto por qué hablar”-, a próximas de llegar
a él, Sereb vio pasar justo por debajo de ella un extraño circulo en la tierra
dirigiéndose hacia su amigo, finalmente en un abrir y cerrar de ojos el circulo se
colocó justo en el centro de Alas del cielo y una voz se escuchó diciendo –Trueno-,
en ese momento una extraña ráfaga de electricidad envolvió a alas del cielo
electrocutándolo y tirándolo en el piso, sin vida.
Sereb ante tal impacto corrió hacia él viendo a su amigo con partes del cuerpo
quemadas, en una forma tan devastadora, al llegar a él la misma voz se escucho
diciéndole, - Aléjate de esa cosa si aprecias tu vida!!-, al voltear súbitamente Sereb
al lugar donde provino la voz, vio un extraño joven de ojos dorados y cabello
plateado envuelto con una túnica, y sin pensarlo dos veces Sereb se lanzó hacia este
joven, y gritando –Enterra- con este hechizo el piso comenzó a desfragmentarse en
varios pedazos de piedra del tamaño de una cabaña cada uno, y siendo arrojados
2. ante aquel que había matado a su amigo, sin embargo el extraño personaje con
magia eléctrica rompía estas grandes estructuras de roca, al percatarse de esto
Sereb coloco una mano en el piso y la otra extendiéndola en dirección a su
enemigo, y recitando -Encierro de Atlas-, entonces de la tierra comenzó a formarse
rápidamente una gigantesca mano y con esto envolviendo a su enemigo, una vez
que Sereb lo tenía capturado dijo –Dame solo una razón una razón para no
romperte los huesos ahora mismo- y el joven al ser estrangulado y con esfuerzo dijo
–solo voltea de nuevo hacia tu “amigo”-, Sereb volteó para ver que sucedía con lo
que decía, y entonces, su amigo empezó a cobrar otra forma, mientras se colocaba
de pie, la piel comenzó a caerse de su cuerpo, dándole la forma de un humano con
varios años de descomposición, con unos ojos negros y saliendo lagrimas de sangre
a través de estos, al ver esto, Sereb perdió la concentración de su hechizo, y el mago
fue liberado, y una vez siendo así este dice –El apretón fue duro, aunque hubiera
agradecido no tanta afectividad-, al oír el comentario sarcástico del mago Sereb le
dijo en un tono alto –cállate y dime que es esa cosa!!!-, y el mago respondió –es
justo lo que trataba de decirte antes de que me atacaras, esas cosas son, las
Marionetas de la Muerte, antes en sus tiempos eran arrebatados de la vida sin
ninguna razón, haciéndolos penar por este “bello sendero” y atrayendo a sus
víctimas para hacerlas formar parte de la colección de marionetas- y Sereb
preguntó –marionetas de la muerte, quieres decir que la misma muerte es quién
está detrás de todo esto?- y el mago con una ligera negación en la cabezo dijo –No
no, la muerte no, es más un sirviente de dragones que pudo burlarse de la misma
muerte y quitándole parte de sus poderes-, Sereb algo confundida dijo –entonces
dices que fui mandada a este lugar por obra de este ser?- -así es, este sirviente al
ver una víctima que le guste, manda su espirito hacia el Sbollows, para poder
atraerla y así teniendo su completa posesión, es por eso que aquí se le conoce como
el paraíso de los muertos, es un lugar tan bello pero creado por los mismos muertos
solo para atraer a mas y mas seres, haciendo de este, el lugar más maldito que
exista para todos aquellos que han muerto y no pueden alcanzar la luz del cielo y la
verdadera calma y felicidad- dijo el mago, y Sereb dijo –entonces supongo que tu
también fuiste mandado aquí? No es cierto-, -así es- respondiendo este, -Entonces
supongo que debería de agradecerte, por … ayudarme, y te pido disculpas por la
forma en que te ataque, pero como te llamas?- y el mago contestó –no te preocupes
por lo anterior, era normal de esperarse eso, así que asunto olvidado, y por cierto
hablas con el mismo el mago de la 3ra clase del metal, el mago de la electricidad,
Ein Strahl y tu nombre?- -Ein eh? Muchas gracias y yo soy la maga de la tierra, Alas
del Cielo-.
En ese momento el árbol empezó a tirar todas sus hojas de color sangre y con ello
haciendo retumbar el piso, y no solo eso, el entorno del lugar también comenzó a
cambiar, comenzando a adquirir forma de cementerio, y todo esto ante una luna
3. gris, al ver eso los dos magos, Ein dice –al fin, ya supo que nos enteramos de su
truco así que es hora de que dé la cara-, y Sereb preguntando –de que hablas?-
,respondiendo Ein -el controlador de marionetas, por quien llevo dos años
buscándolo para poder terminar con él, y salir de este mundo, el sirviente de los
dragones-, -entonces dices que está aquí?- diciendo Sereb, -Así es Alas del Cielo, el
sirviente de dragones-
-Satachia-