Este documento discute los pros y contras de los biocombustibles. Señala que aunque los biocombustibles podrían ser una alternativa al petróleo, su producción a gran escala plantea desafíos como la competencia con los cultivos alimenticios y la deforestación. También explora varias fuentes potenciales de biocombustibles como la basura, algas y aceite de palma, pero cada una tiene inconvenientes como costos elevados o impactos ambientales. El documento concluye que encontrar una solución perfecta requiere equilibrar
2. BIOCOMBUSTIBLES, LA SEMILLA DE LA DISCORDIA
Introducción
El petróleo, el biocombustible más utilizado, es el que mueve en todo el mundo los medios de
transporte, pero hay opiniones que lo desprestigian ya que proviene de los cereales (alimento
de millones de personas de este planeta). Algún día se acabará esta energía fósil y para ello no
faltan más de 50 años; además es uno de máximos responsables del cambio climático y
calentamiento global junto con el mineral negro, el carbón.
¿Qué hemos de hacer? ¿Qué ha de hacer la sociedad? Sobretodo entra en juego la llamada
geopolítica. ¿Es decente lo que se está haciendo con el petróleo? Todos sabemos que es una
energía no renovable necesaria para los humanos pero… ¿Hasta qué punto podemos llegar?
Crítica y resumen del video
Sabemos que los biocombustibles son necesarios para los transportes y que la energía está
moviendo nuestra sociedad, pero estamos produciendo alimento agrícola (grano) que
alimentan a los pueblos para que los 4x4 y todo tipo de máquinas consumidoras del petróleo
sigan funcionando. ¿Sabemos lo qué hacemos? También hay que respetar las normas
medioambientales.
Necesitamos encontrar alguna alternativa al petróleo ya que le quedan pocas décadas de vida
y es la energía y combustible que mueve el mundo, como he dicho anteriormente. La ciencia
promete energías inagotables para el futuro pero en el presente estamos transformando
cultivos en el alimento fundamental para los automóviles.
El biodiesel y el bioetanol se obtienen de cultivos (materias primas) que alimentan a media
humanidad. Y si este combustible se está agotando, cada vez subirá su precio y será más caro
ya que es la única alternativa a los transportes. Por esto, el dilema está entre seguridad
alimenticia o seguridad energética, es decir, los combustibles pueden ser soluciones o
amenazas porque hay las consecuencias de que empieza a haber escasez alimentaria.
Eso sí, el agricultor puede sacar beneficios tanto si vende el cereal a empresas de
biocombustibles, por ejemplo de bioetanol (99,7% de alcohol) como para el propio consumo
alimenticio; cuando éste llega a estar a precio de oro, siempre que vendan al mejor postor
ganan grandes beneficios porque a veces las empresas de biocombustibles pagan menos por el
cereal a cambio de pagar por adelantado.
Si nos centramos en el tema de los vehículos, el bioetanol es el
combustible que menos gases nocivos, por lo tanto, menos
emisiones de CO2 , es en el caso de la marca Ford, la cual
vendió pocos vehículos con este tipo de motor en el último
año, cosa que muestra la poca fe de la gente en los
3. biocombustibles. En una gasolinera el bioetanol E85 es el carburante más barato porque los
biocarburantes están exentos del impuesto de hidrocarburos, en cambio, como inconvenientes
tiene que para una misma distancia consume un 20% más que la gasolina y se vende en muy
pocas estaciones de servicio. El 25% de gases de efecto invernadero están representados con
el transporte por carretera.
Estamos lejos de cumplir nuestras obligaciones con el protocolo de Kyoto, y por eso el
gobierno obliga a incorporar un porcentaje de biocarburantes que irá creciendo hasta el 10%
de bioetanol (90% de petróleo) para combatir el calentamiento global; para ello las empresas
con más margen de importación y exportación.
Perseo es un proyecto que la empresa “Imecal” ha
desarrollado en Valencia. Su objetivo es demostrar que es
posible fabricar bioetanol a partir de basura a un nivel
industrial.
La basura que es tirada a las basuras en las ciudades contiene una fracción orgánica, materia
prima, que luego es transformada en biocombustible liquido que pueden utilizar automóviles,
camiones, o cualquier otro vehículo que actualmente funciona con combustibles fósiles.
La basura llega a Perseo congelada a 10 grados bajo cero, solo la parte orgánica de los
residuos, materia prima autóctona que se puede conseguir durante el año. La basura es la
materia prima que existe.
Los biocombustibles que se producen a partir de los residuos como la basura, los deshechos
agrícolas o la paja de los cereales, pertenecen a una 2ª generación que está generando mucha
esperanza ya que no compiten con los alimentos ni colonizan tierras de cultivo. Dependen de
la tecnología, mucho más complicada y mucho más cara.
La parte orgánica de la basura entra en la planta. Lo primero que se hace es un tratamiento
para eliminar todas las partes metálicas y groseras que
quedan descartadas. La mezcla de agua y basura
orgánica es llevada a unos reactores en los cuales es
sometida a un proceso fisicoquímico para romper la
estructura de la lignocelulosa, la pared de los cuerpos
vegetales, a base de presión y temperatura. Abren
grietas, despegando la estructura rígida. Entran
moléculas que después intervienen en el proceso de la
fabricación de etanol. La última fase es el destilado, la
parte liquida será un biocombustible de gran pureza y la parte solida, la lignina: un residuo de
enorme poder calorífico, la energía que hará funcionar la planta. Por lo tanto, en Perseo nada
funciona a base de petróleo.
Para usar esta tecnología de forma masiva como alternativa a los biocombustibles fósiles,
precisaría de unas inversiones enormes ya que es un proceso caro. Plantas experimentales
como Perseo no abundan mucho en el mundo, y el tamaño de la planta de Perseo ya es semi-
industrial.
4. Los bosques de indonesia se queman, y son sustituidos
por plantaciones de palma. El aceite de palma, que ya es
utilizado en grandes cantidades en las industrias
cosmética y alimentaria, es bueno y barato para hacer
biodiesel, el 2º biocarburante mas usado en el mundo.
Causa un problema social, debido a que grandes
poblaciones sufren la destrucción de sus recursos
alimentarios con la excusa de producir el aceite de palma para hacer funcionar vehículos.
El bosque es un ecosistema que tiene miles de años de vida, una pérdida irrecuperable,
imposible de sustituir con los cultivos de palma. Este proceso puede que sea más peligroso que
seguir quemando petróleo. La deforestación supone un 18% de las emisiones de gases de
efecto invernadero. Las turberas son inmensas almacenes de carbono, que al quemarlas
liberan tanto CO2 al atmosfera que podrían suponer una amenaza climática.
Europa exige a la importación de biocarburantes una garantización de que son sostenibles.
Además de conocer su procedencia, habría que saber cuánto petróleo se ha gastado en
fertilizantes y en mover la maquinaria agrícola, cuánto en cosechar y procesar el
biocarburante. También la energía fósil que se ha invertido en transportarlo a veces de un lado
a otro del mundo, y las emisiones en el vehículo. Este seguimiento se llama “ciclo de vida de un
biocombustible”.
En el caso de España, el “Ciemat” ha realizado dos trabajos sobre el análisis del ciclo de vida
del bioetanol y del biodiesel producidos en las instalaciones españolas y con las materias
primas que se utilizan en España. Lo han comparado con la gasolina y el gasoil para saber si
gastan menos energía y emiten menos CO2. Los resultados son muy satisfactorios desde los
dos puntos de vista.
La colza, oleaginosa, produce unas semillas que tiene un contenido de grasa de 40 a 44%. El
aceite que se extrae es el que da una calidad máxima
para la elaboración del biodiesel. La cooperativa
agraria ACOR, la más importante de castilla y león, ha
construido una planta de biodiesel. Su idea es que los
socios aporten la materia prima, la colza. Es otra
alternativa a la hora de cultivar para obtener
biocombustibles.
En el proyecto de ACOR, fueron los propios
agricultores que decidieron producir biodiesel. Su fábrica está en Olmedo. Es el único
productor de biocarburante en el mundo con esta filosofía de seguir siendo agricultores pero a
la vez fabricar biodiesel. Precisan tener la máxima calidad de la materia prima, para garantizar
la máxima calidad en el producto final, el biodiesel.
5. En el laboratorio controlan tres aspectos de la semilla: las impurezas, la humedad y la materia
grasa. Estos tres parámetros determinan el precio del producto y la cantidad de biodiesel que
se puede sacar esta semilla. El problema de este proceso no es la producción de colza, sino el
escaso número de socios que apoyan a los cultivos energéticos y por lo tanto es muy probable
que tengan que importar. Su principal enemigo es el biodiesel procedente de los estados
unidos. España tiene más de 20 fábricas que producen biodiesel en todo el país.
Una 2ª generación de biodiesel es la que proviene del mar. En la superficie del océano hay un
bosque invisible, la mayor extensión verde del planeta. Son algas microscópicas, plantas que
precisan de luz y que se alimentan de CO2. Se reproducen muy deprisa, y contienen cantidades
de grasa importantes. El problema es que el proceso de cultivación y de cosechar es muy caro.
El departamento de ingeniería química de la universidad de Almería trabaja para encontrar
una tecnología barata. Han probado muchos tipos
de algas, buscando uno resistente y con grasas. Una
de las tecnologías, la tubular, proporciona mucha
superficie para que haya mucha luz. Es un sistema
cerrado y se elimina el oxigeno que no es necesario.
La población de algas se duplica cada 24 horas, y en
esa fábrica de podría producir unas 50 toneladas de
biomasa al año, consumiendo unas 100 de CO2 y
emitiendo al atmosfera poco menos de 100 de
oxigeno fotosintético. Es la fábrica más eficaz del
mundo, y el sistema es automático. El producto que
se obtiene es una biomasa de algas, liquida al
principio y una especie de pasta al final. Esta pasta
es la que se utilizara para obtener biodiesel,
perfecto en cuanto a calidad pero demasiado caro para comprar en el mercado. El reto es
abaratar los costes de producción. Hay que intentar abaratar los nutrientes, y utilizar gases de
escape de chimenea porque uno de los nutrientes más importantes es el anhídrido carbónico.
Las aguas residuales podrían aportar nutrientes más baratos.
Conclusión
Ha llegado el momento de pensar en alternativas al petróleo. La naturaleza junto con la
tecnología nos ofrece una cantidad importante de soluciones que podrían resolver este
problema tan significante de hoy en día. Cada solución conlleva ventajas e inconvenientes,
pero cabe tener en cuenta que al fin y al cabo todas las alternativas nos servirán, solo que unas
complementarán a otras y viceversa. Algunos procesos son demasiado caros, otros perjudican
aspectos importantes de otros sectores, etc. Combinando técnicas y aspectos de las diferentes
alternativas, además de la necesidad de sustituir el petróleo y de los avances tecnológicos,
este proceso de búsqueda de la solución perfecta va evolucionando y desarrollando, y cada vez
estamos más cerca de encontrarla.
6. - Dibujo en el que podemos
contemplar cómo se produce el
bioetanol a partir del maíz y
cómo al final del proceso se
emite CO2 a la atmosfera
(calentamiento global).