1. Justicia Constitucional. Noción.
La justicia constitucional es un concepto que se refiere al sistema de control de constitucionalidad de
las leyes y actos del gobierno en un país, que se lleva a cabo a través de un órgano judicial
especializado. Su función principal es garantizar que las leyes y actos gubernamentales estén en
conformidad con la Constitución de ese país. La noción de justicia constitucional implica varios
elementos clave:
1. Supremacía de la Constitución: En un sistema de justicia constitucional, la Constitución se
considera la ley fundamental y suprema del país. Esto significa que ninguna ley ordinaria,
acto gubernamental o poder ejecutivo puede estar en contradicción con la Constitución.
2. Órgano especializado: La justicia constitucional suele ser ejercida por un tribunal o corte
constitucional específica. Esta corte está compuesta por jueces especializados en cuestiones
constitucionales y se encarga de revisar y decidir sobre la constitucionalidad de las leyes y
actos gubernamentales.
3. Control de Constitucionalidad: El órgano de justicia constitucional evalúa si las leyes y actos
gubernamentales son conformes a la Constitución. Esto puede implicar declarar la
inconstitucionalidad de una norma o acto, lo que significa que no puede aplicarse o debe ser
corregido para estar en conformidad con la Constitución.
4. Protección de Derechos Fundamentales: Uno de los principales objetivos de la justicia
constitucional es proteger los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos. Esto
significa que puede intervenir cuando se violan estos derechos a través de leyes o acciones
gubernamentales.
5. Separación de Poderes: La justicia constitucional contribuye a mantener el equilibrio de
poderes en un sistema democrático al proporcionar un control independiente sobre el poder
legislativo y ejecutivo.
6. Revisión Preventiva y Reparadora: La justicia constitucional puede llevar a cabo una revisión
preventiva (antes de que una ley entre en vigor) o reparadora (después de la entrada en
vigor) de la constitucionalidad de las leyes y actos gubernamentales.
La justicia constitucional desempeña un papel crucial en la protección de la democracia, la
preservación del estado de derecho y la garantía de los derechos fundamentales de los ciudadanos
en un país. Cada país puede tener su propio sistema de justicia constitucional, y la forma en que
opera puede variar en función de su sistema legal y constitución.
La Defensa ordinaria y la defensa extraordinaria de la Constitución
La defensa ordinaria y la defensa extraordinaria de la Constitución son dos conceptos que se
relacionan con la protección y preservación de la Constitución de un país, pero difieren en términos
de su naturaleza y alcance. Estas expresiones suelen ser utilizadas en el contexto de la justicia
constitucional y el sistema legal de un país. A continuación, se explican ambas:
Defensa Ordinaria de la Constitución:
La defensa ordinaria de la Constitución se refiere al sistema de control de constitucionalidad que
opera de manera habitual y cotidiana en un país. En este marco, existen mecanismos y
procedimientos establecidos para revisar la constitucionalidad de las leyes y actos gubernamentales
de manera regular. Algunos elementos clave de la defensa ordinaria de la Constitución incluyen:
2. 1. Tribunales Constitucionales: La constitución de un país puede establecer tribunales
constitucionales o cortes que tienen la responsabilidad de revisar la constitucionalidad de las
leyes y actos gubernamentales de manera rutinaria.
2. Revisión Judicial: Los ciudadanos, legisladores, funcionarios gubernamentales y otras partes
interesadas pueden presentar casos ante los tribunales constitucionales en busca de una
revisión de la constitucionalidad de una ley o acción gubernamental.
3. Control Preventivo y Reparador: Los tribunales constitucionales pueden llevar a cabo tanto
un control preventivo (antes de que una ley entre en vigor) como un control reparador
(después de la entrada en vigor) para garantizar la conformidad con la Constitución.
Defensa Extraordinaria de la Constitución:
La defensa extraordinaria de la Constitución se produce en situaciones excepcionales o de crisis en
las que se pone en peligro la propia Constitución y el orden constitucional del país. En estas
circunstancias, los mecanismos habituales de control de constitucionalidad pueden no ser
suficientes para abordar la amenaza. Algunos aspectos destacados de la defensa extraordinaria de la
Constitución son:
1. Suspensión de Garantías Constitucionales: En casos de emergencia, un gobierno o
autoridad puede recurrir a la suspensión temporal de ciertas garantías constitucionales o
derechos fundamentales en aras de la seguridad nacional o la estabilidad del Estado.
2. Medidas Extraordinarias: En algunos casos, se pueden tomar medidas extraordinarias, como
la imposición de estado de emergencia, para abordar amenazas graves a la Constitución y el
orden constitucional.
3. Revisión Rápida: En situaciones de crisis, las revisiones de constitucionalidad pueden ser
más rápidas y expeditas que en el proceso ordinario.
Es importante destacar que la defensa extraordinaria de la Constitución generalmente se aplica en
situaciones excepcionales y está sujeta a escrutinio para evitar abusos de poder. La implementación
de estas medidas debe estar en consonancia con los principios democráticos y los derechos
humanos.