2. viene del latín: minus tertius,
es decir, tres veces menos
“Ustedes me llaman ‘Señor
y Maestro’ y lo soy. Pues si
yo les lavo los pies a ustedes,
ustedes hagan también lo
mismo”
Ministerio
3. Por eso la liturgia es fuente de vida en cuanto es acción de la Iglesia. Así como
es obra de Cristo y de la Iglesia, la liturgia es "acción sagrada por excelencia "
(SC 7)
- que ofrece a los fieles la vida de Cristo y requiere su participación consciente,
activa y fructuosa (cf. SC 11).
4.
5.
6. Por eso, todo bautizado que
es llamado por la Iglesia a
desempeñar un ministerio.
Lo debe hacer siempre con
una actitud de humildad y
de profundo amor a Dios y a
su Iglesia, jamás buscando
su propia honra o beneficio.
Ministerio
8. van surgiendo de las
necesidades mismas de
cada comunidad.
No tiene la estabilidad de
los ministerios instituidos.
son provisionales y
comportan un compromiso
concreto y no general.
Ministerio Laicales
No instituidos
9. El ministerio de catequista en la
Iglesia presenta modalidades diversas,
por ejemplo:
Los catequistas de tierras de misión.
La figura del catequista de jóvenes.
La del catequista de adultos.
El catequista de niños y adolescentes.
El catequista para encuentros pre-
sacramentales, etc.
Catequista
10. Maestro de Ceremonias
Su función es coordinar oportunamente con
los cantores, asistentes, ministros,
celebrantes, aquellas cosas que deben decir
y hacer.
Por esto, debe conocer las leyes, los detalles
del ceremonial, la historia y las tradiciones
del Rito Romano. y así vincularlo con la
pastoral.
Deberá saber lo que cada uno debe hacer y
dónde debe colocarse en todo el momento
de la liturgia, ya que de esto dependerá en
parte la armonía de la celebración.
11. Su oficio es acompañar a las
incipientes comunidades cristianas
en los barrios o colonias a las que
no puede llegar el presbítero
(sacerdote) de manera ordinaria. Se
trata de ayudar a integrarlos y a
organizarlos.
Su ministerio litúrgico tiene que se
aprobado por el Sr. Arzobispo .
Nunca preside a una comunidad y
debe seguir las normas señaladas en
el ritual de Celebraciones
Dominicales y Festivas en ausencia
del Presbítero.
Celebradores de la Palabra
12. El párroco debe consensar a la comunidad
de manera secreta sobre la idoneidad de
los candidatos.
El ministerio es estrictamente parroquial y
dentro de los límites de la parroquia o
templo.
Para ejercer el ministerio en hospitales,
asilos, penitenciarias, etc. Se debe contar
con la acreditación de la parroquia donde
está la institución.
La formación de los ministros
corresponde al Sr. Arzobispo y al
Secretariado Arquidiocesano de Pastoral
Litúrgica.
Ministros Extraordinarios
de la Comunión
13. Este no es propiamente un ministerio como el
instituido, sino más bien, la coordinación del
ministerio bautismal que todos tenemos de
comunicar a los demás la Palabra del Señor.
Se trata de un ministerio carismático que brota
del deseo de los fieles de participar activamente
en las celebraciones.
Para la participación adecuada en la
celebración de la Misa, se debe tener un lector
por cada lectura. El salmo y la aclamación
antes del Evangelio no son lecturas, por lo
tanto, les corresponden al salmista o a cualquier
integrante de coro realizarlas.
Lectores
14. Su oficio es cantar el salmo responsorial u
otro canto bíblico en forma responsorial,
así como la aclamación antes del
Evangelio (Aleluya - Honor y Gloria) a
fin de que los fieles encuentren ayuda
oportuna para el canto y para meditación
del sentido de los textos.
Sea el cantor del salmo, dotado en el arte
de salmodiar y formado espiritualmente.
Salmista
15. Su oficio es asistir al Celebrante en las
diversas celebraciones litúrgicas
principalmente la santa Misa.
El oficio está reservado para los varones,
pero habría que consultar con el Obispo
acerca de la participación de las damas,
aunque en varias parroquias actualmente
se permite la participación de niñas.
Servicio del Altar
o Monaguillos
16. Su oficio es ayudar a la Asamblea a centrar su atención
en ciertas ideas o puntos de la celebración.
Su ministerio, debe ser discreto y evitando hacer uso
del ambón y del mismo santuario (presbiterio).
Cuando se trata de ritos a los que la Asamblea no está
habituada debe previo a la celebración catequizar al
respecto.
No son los que dicen las preces de la Oración
Universal, estas le corresponden al diacono o algún otro
fiel.
Pueden decir las intenciones de la Misa cuando está a
punto de empezar, pero no ya iniciado el canto de
entrada.
Comentadores o Monitores
17. Su oficio es un verdadero ministerio, aún
cuando se le pague, si tal oficio lo desempeña
cotidianamente y con un horario establecido.
El sacristán es el responsable del cuidado y
decoro del templo.
La sacristía no es una bodega, ni la recepción
de todos los asuntos a tratar en el templo. Su
nombre revela su naturaleza, debe ser un
lugar de recogimiento donde el presbítero se
prepare para la celebración y repose
(espiritualmente) de ella.
Por lo tanto, debe evitarse en la sacristía el
tránsito de todos los ministros y el almacén
del templo.
Sacristanes
18. La ambientación no se reduce a mantones
a ambos lados del santuario, sino a la
belleza y ornato del mismo. De sus
imágenes, de sus vitrales, de su
ventilación, de sus flores, etc.
La ambientación debe contribuir a que los
fieles centren su atención en el misterio
que se celebra y no debe distraer del
mismo.
La ambientación debe estar de acuerdo
con el tiempo litúrgico que se vive.
Durante la cuaresma no puede adornarse
con flores las iglesias, pero puede hacerse
con discreción el uso de las plantas verdes.
Ambientación
19. Su oficio es ayudar al equipo de la
sacristía a que se realice de manera
consciente y completa la colecta.
Algunos grupos parroquiales son los
que participan en esta función.
Es de alabar, que la colecta se recoja y
se presente ante el altar en la misma
presentación de los dones y no esperar
hasta el canto del Santo.
Se debe discernir si se debe utilizar un
distintivo que los acredite como tales,
sobretodo para evitar abusos.
Colectores
20. Su oficio es recibir a los hermanos en
las diferentes celebraciones litúrgicas
presentándoles los subsidios y demás
información escrita.
Tocar las campanas, según la
tradición de la Iglesia.
Orientar a los fieles acerca de los
servicios que la Iglesia presta.
Apoyar en el orden para una
fructuosa y optima celebración.
Canalizar las emergencias médicas
durante las celebraciones.
Recepción o
Ministros de Hospitalidad
21. Cantar en las celebraciones litúrgicas es
un verdadero ministerio que debe
realizarse con decoro y espiritualidad.
No está permitida la sola interpretación
musical de los cantos, sino que tienen
que se acompañados por las voces.
No está permitido el uso de piezas no
litúrgicas (aún cuando sean clásicas)
para las celebraciones litúrgicas.
Coros
Se debe moderar el uso de los instrumentos
musicales durante la primera parte del
adviento. Y en cuaresma no están
permitidos. El salmo responsorial y la
aclamación antes del Evangelio las debe
realizar un miembro del coro (salmista).
El santuario (presbiterio) no es el lugar
para el coro, sino un lugar cercano a la
Asamblea.
22. La naturaleza del canto en las
celebraciones litúrgicas es
participativo no exclusivo del cantor o
del organista. Se debe cuidar y
favorecer la participación de la
Asamblea.
Es por ello que la finalidad de los
instrumentos dentro de la
celebraciones es acompañar a la voces
que se elevan en profunda oración al
Señor.
Organistas, Músicos y Cantores
23. Este equipo ayudará al
párroco a organizar la
programación y la pastoral
concreta de la vida litúrgica
de la parroquia, en
colaboración con los
diversos ministerios.
Para cada celebración
litúrgica se contará con un
equipo que garantice la
nobleza y la sencillez de
dicha celebración.
Equipo de Liturgia
24. “En las celebraciones litúrgicas, cada
cual, ministro o fiel, al desempeñar su
oficio, hará todo y sólo aquello que le
corresponde por la naturaleza de la acción
y las normas litúrgicas.”
Constitución Sacrosanctum Concilium,
sobre la Sagrada Liturgia n. 26