1. Colegio Patrona Señora de
Lourdes
“L a naturaleza del hombre es relación con el infinito”
El corazón tiene una exigencia totalizadora,
infinita. El deseo que nos constituye, no es
cualquier deseo reconducible a objetos limitados,
es precisamente el deseo de infinito , el que
alimenta nuestra vida.
2. El universo es donde el hombre ve y se pregunta
acerca de su naturaleza.
La visión del cielo estrellado ha acompañado a
miles de hombres de siglos.
3. La cultura de todos Patrona Señoralos cinco
Colegio los pueblos y de de
Lourdes
continentes ve en el cielo el espejo de su propia
naturaleza divina.
4. Es el deseo que Dios ha inscrito en
nuestro corazón y que se despierta en
el encuentro con la realidad, que nos
atrae.
5. Colegio Patrona Señora de
Lourdes
El mismo deseo, la misma curiosidad que nos hace buscar
hoy más allá , es lo que permitió a Juan y Andrés reconocer
aquella presencia totalizante, Jesús de Nazaret.
6. Pero existe otra ley, que pretende anestesiar este corazón con sus
exigencias constitutivas, o peor aún, satisfacerlo de lo finito e
inmediato, arrojándonos en una espiral de búsqueda y desesperación
del sin sentido.
7. Hace falta una presencia que nos reconstruya ,de nos devuelva el
Colegio Patrona Señora que
presentimiento, de que este infinito se ha manifestado, para que el
Lourdes
sentido de la vida fluya en relación a ese infinito.
8. Estas no son solo palabras o proclamación de ideas, aunque sean
correspondientes, sino que es una sucesión viviente de hechos , desde
Juan, Andrés y Pedro, en una cadena viva desde el primer día hasta cada
uno de nosotros.
Así se posibilita la sorpresa ante esta respuesta que sacia el corazón ,
porque siendo visible, concreta, histórica, es inconfundiblemente única
por la correspondencia que suscita,
9. Es arduo ser uno mismo hoy en día, porque el
poder ha alterado la sencillez de la naturaleza ,
la ingenuidad, y la forma original del corazón.
10. Lo que vence al poder
es la pobreza de
corazón, pero lo que
permite al hombre
existencialmente tomar
conciencia de su
corazón y afirmarlo es
un encuentro como el
de Zaqueo con Cristo.
11. La lucha contra el poder de la
cultura dominante comienza
con ser conscientes de
nuestros deseos constitutivos,
con nuestra relación con el
infinito.