El documento resume el proceso de predicar el evangelio en 3 partes: 1) Definiendo el problema del pecado y cómo el hombre no cumple la ley de Dios, 2) Dando la solución de unirse a Cristo a través de la fe y el bautismo para ser redimidos, y 3) La vida posterior de perseverar en santidad como un proceso que comienza en el bautismo.
2. OBJETIVOS / INTRODUCCIÓN
Aprender el proceso que se debe seguir, en líneas generales, para predicar el evangelio
de Jesús, en una forma que sea entendible al oyente.
El presente estudio tiene como propósito presentar una pauta resumida con los
principales principios del evangelio.
Marcos 16:15 “Y les dijo: «Vayan por todo el mundo y anuncien a todos la buena
noticia.”
Mateo 28:19-20 “Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones, y háganlas mis
discípulos; bautícenlas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y
enséñenles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Por mi parte, yo
estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.”
3. I. Parte 1: Definiendo el Problema.
Dado que la palabra Evangelio significa “Buena Noticia”, es necesario que en primer
lugar se defina un problema, lo anterior es muy importante ya que, el impacto de la buena
noticia se pierde del todo si primeramente no se define un problema.
Esta es una parte importante ya que generalmente se le dice a la gente que debe
acercarse a Dios pero en realidad no se le plantea exactamente el porque debe hacerlo.
La típica frase que se escucha en las personas a las cuales se les habla de Dios “yo
soy una buena persona” da cuenta de un desconocimiento del problema.
El problema se explica a continuación:
1. La Ley de Dios:
El propósito de este punto es dar a conocer la ley de Dios la cual se resume en amor a
Dios y al prójimo (mateo 22:34-40), la idea es demostrar principalmente tres puntos; (1) la
Ley de Dios es buena, (2) Aun entendiendo lo que es bueno el hombre no es capaz de
hacerlo y (3) El pecado no solo se encuentra en hacer algo malo sino también en el
pensar (sermón del monte).
Romanos 7:12 “La ley en sí misma es santa, y el mandamiento es santo, justo y
bueno.”
Mateo 7:12 “Así pues, hagan ustedes con los demás como quieran que los demás
hagan con ustedes; porque en eso se resumen la ley y los profetas.”
4. 2. El pecado:
1 Juan 3:4 “Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado
es infracción de la ley.”
Romanos 3:19-20 “Sabemos que todo lo que dice el libro de la ley, lo dice a quienes
están sometidos a ella, para que todos callen y el mundo entero caiga bajo el juicio de
Dios; porque nadie podrá decir que ha cumplido la ley y que Dios debe reconocerlo
como justo, ya que la ley solamente sirve para hacernos saber que somos
pecadores.”
El pecado es infracción de la ley (punto 1), es importante resaltar acá que el hombre al
no cumplir la Ley de Dios en un solo punto se hace infractor y por lo tanto pecador. Esto
último no significa que la Ley en si misma sea mala sino que el corazón del hombre no se
somete a la Ley de Dios, es por esto que el hombre es un pecador innato, un ser caído
desde Edén.
3. La Sentencia:
Romanos 3:23 “Todos han pecado y están lejos de la presencia gloriosa de Dios.”
La sentencia que conlleva la infracción de la Ley de Dios es la muerte espiritual. La
palabra muerte en si misma significa “separación”, por lo tanto, la muerte espiritual es un
estado de separación espiritual con Dios, esto significa estar destituido de la presencia
de Dios.
Lo anterior quiere decir que una vez fallezcamos y seamos juzgados seremos
encontrados culpables y por ende no podremos estar junto a Dios.
¿Entonces cual es el problema?, R: El hombre está bajo el
castigo que conlleva no cumplir la Ley de Dios.
5. II. Parte 2: Dando la Solución.
1. El Sacrificio:
El castigo que conlleva la violación de la Ley es muerte (separación con Dios).
Romanos 3:23 “Todos han pecado y están lejos de la presencia gloriosa de Dios.”
Santiago 1:13-15 “Cuando alguno se sienta tentado a hacer lo malo, no piense que
es tentado por Dios, porque Dios ni siente la tentación de hacer lo malo, ni tienta a
nadie para que lo haga. Al contrario, uno es tentado por sus propios malos deseos,
que lo atraen y lo seducen. De estos malos deseos nace el pecado; y del pecado,
cuando llega a su completo desarrollo, nace la muerte.”
Dios siempre aplica este castigo ya que el pecado no puede quedar impune (concepto
de justicia), es por esto que para que algún pecador quede libre del castigo de su pecado
es necesario que alguien muera en su lugar, es en este punto donde interviene el
sacrificio, el cual debe ser sin pecado y morir por nosotros, el porqué debe morir se
explica a continuación:
2. Derramamiento de Sangre:
Según las escrituras el derramamiento de sangre es útil para redimir los pecados:
Hebreos 9:22 “Según la ley, casi todo tiene que ser purificado con sangre; y no hay
perdón de pecados si no hay derramamiento de sangre.”
6. Lo anterior es así porque el castigo del pecado es la muerte y por muerte entendemos
derramar sangre. Por lo tanto, cuando se derrama sangre, interviene muerte y esta da
cuenta del pecado cometido.
Importante(1): El sacrificio muere por el culpable.
Importante(2): Cuando el sacrificio muere (derrama su sangre), podemos decir que el
castigo ha sido ejecutado, y por ende; “no hay condenación” porque el castigo ya fue
ejecutado sobre el sacrificio.
o Nota al margen: El culto ceremonial Judío estaba direccionado y/o apuntaba a
demostrar las consecuencias del pecado, la cual era, quitar una vida inocente (cordero)
para expiar la culpa de quien ofrecía el sacrificio.
3. Jesús:
Jesús es el cordero de Dios, ósea, es el sacrificio puesto por Dios para que nosotros
purifiquemos nuestros pecados en su sangre derramada en la cruz ( en su muerte), esto
último significa que esta sangre nos redime del castigo que merecíamos por no cumplir la
Ley de Dios.
El castigo que merecíamos (el castigo es la muerte) fue ejecutado sobre Jesús, el pago
nuestras faltas y por sus heridas fuimos sanados.
Debido a lo antes planteado, Jesús es el único camino que tiene el hombre para
acercarse a Dios, esto es, ser aceptado por Dios.
Hechos 4:11-12 “Este Jesús es la piedra que ustedes los constructores
despreciaron, pero que se ha convertido en la piedra principal. En ningún otro hay
salvación, porque en todo el mundo Dios no nos ha dado otra persona por la cual
podamos salvarnos.”
7. 4. Fe y Bautismo:
¿Cómo puedo ser parte del sacrificio de Jesús? R: Según las escrituras para esto hay
dos requisitos: (1) Creer, esto es; tener Fe en que Jesús vivió, murió y resucito, etc. y (2)
Bautizarse en agua para perdón de pecados.
Marcos 16:16 “El que crea y sea bautizado, obtendrá la salvación; pero el que no
crea, será condenado.”
Gálatas 3:26-29 “Pues por la fe en Cristo Jesús todos ustedes son hijos de Dios, ya
que al unirse a Cristo en el bautismo, han quedado revestidos de Cristo.”
¿Entonces cual es la solución?, R: Al unirse a Cristo en la
Fé y el Bautismo quedamos libres del castigo que
merecemos por no cumplir la Ley de Dios, por lo tanto, a
los ojos de Dios, somos santos o sin pecado, esto último
no porque no cometamos pecados sino porque la sangre
de Cristo continuamente nos limpia de ellos. Además
somos llamados a vivir una “Vida Nueva”.
8. III. Parte 3: La vida Posterior a la Conversión.
Acaso lo anterior significa que ¿podemos pecar indiscriminadamente ya que todos
nuestros pecados ya esta perdonados?. R: Obviamente que no según veremos a
continuación:
Romanos 6:1-2 “¿Qué diremos entonces? ¿Vamos a seguir pecando para que Dios
se muestre aún más bondadoso? ¡Claro que no! Nosotros ya hemos muerto respecto
al pecado; ¿cómo, pues, podremos seguir viviendo en pecado?.”
Apocalipsis 22:11 “Deja que el malo siga en su maldad, y que el impuro siga en su
impureza; pero que el bueno siga haciendo el bien, y que el santo siga
santificándose.”
Esta es la parte mas difícil de la conversión ya que implica convertirse en cristiano,
ósea, un cambio de actitud respecto de nuestra vida pasada, dejar de hacer ciertas cosas
y empezar a hacer otras. Si, es difícil, pero tenemos la certeza de que Dios nos ayuda en
cada momento de nuestras vidas para que podamos ir perfeccionándonos. Es un
proceso que acabara ya sea en nuestra muerte o cuando Cristo venga nuevamente.
Mateo 7:12 “Así pues, hagan ustedes con los demás como quieran que los demás
hagan con ustedes; porque en eso se resumen la ley y los profetas.”
Romanos 13:8-10 “Los mandamientos dicen: No cometas adulterio, no mates, no
robes, no codicies; pero estos y los demás mandamientos quedan comprendidos en
estas palabras: "Ama a tu prójimo como a ti mismo." El que tiene amor no hace mal al
prójimo; así que en el amor se cumple perfectamente la ley. ”
9. El cristiano debe distinguirse por tratar de ser una persona que viva alejada del mal, no
porque tengamos perdón de nuestras faltas deberíamos vivir en la oscuridad, más bien
debemos esforzarnos por depurar nuestras vidas de todo el mal que podamos.
Es necesario congregarse y participar de mandamientos como; el amor a Dios y al
prójimo, la santa cena, adorar a Dios con nuestra manera de vivir, etc. Esforzarnos por
hacer lo bueno. Dejar de hacer algunas cosas y empezar a hacer otras.
Cabe resaltar que pasamos a ser Hijos de Dios, es el Señor quien mirara de cerca
nuestras vidas y nos cuidara, alentará, corregirá, guiará, dará lo necesario. Se nos insta
a buscar en primer lugar las cosas celestiales y su justicia, lo demás será dado por
añadidura.
La naturaleza pecadora no es destruida o removida en el bautismo, sino hecha
potencialmente inoperativa (no hay condenación o muerte para los que están en Cristo).
Ahora bien, el que continúe inoperante (muerte espiritual) depende de nuestra
cooperación con el Espíritu Santo viviendo en nosotros. Esto quiere decir que aunque ya
somos Santos, estamos en un proceso de Santificación.
Las escrituras aseguran que cuando alguien se convierte a Jesús en arrepentimiento y
fe, es declarado justo y santo (no estamos bajo pecado ↔ muerte). Pero las mismas
escrituras también urgen a los nuevos creyentes a vivir en santidad, esto es; luchando
contra el pecado ↔ naturaleza pecadora – Rom 7 y ejercitándonos en las buenas obras.
10. CONCLUSIONES
PARA PREDICAR EL EVANGELIO ES PRIMER LUGAR DEBEMOS HABLAR SOBRE EL
PECADO Y SUS CONSECUENCIAS, ÓSEA DEBEMOS DEFINIR EL PROBLEMA QUE EL
EVANGELIO VIENE A SOLUCIONAR.
1. PROBLEMA: EL HOMBRE ESTÁ BAJO EL CASTIGO QUE CONLLEVA NO CUMPLIR LA
LEY DE DIOS. ESTE CASTIGO IMPLICA UNA SEPARACION CON DIOS (MUERTE ESP.)
2. SOLUCION: UNIRSE A CRISTO EN LA FÉ Y EL BAUTISMO NOS REDIME DEL CASTIGO
QUE MERECEMOS, ESTO IMPLICA QUE CRISTO PAGA NUESTRAS FALTAS CON SU
SANGE DERRAMADA EN LA CRUZ (MUERTE). DIOS NOS ADOPTA COMO HIJOS.
3. PERCEVERAR: ESTO IMPLICA UN CAMBIO DE ACTITUD RESPECTO DE NUESTRAS
VIDAS, ES UN PROCESO QUE COMIENZA CON EL BAUTISMO Y TERMINARA, YA SEA
EN NUESTRA MUERTE O EN LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO.
Marcos 16:15-16 “Y les dijo: «Vayan por todo el mundo y anuncien a todos la
buena noticia. El que crea y sea bautizado, obtendrá la salvación; pero el que no
crea, será condenado”
Mateo 28:19-20 “Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones, y háganlas mis
discípulos; bautícenlas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y
enséñenles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Por mi parte, yo
estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.”