Los principios del entrenamiento son guías que dirigen el proceso de entrenamiento de manera sistemática. Incluyen principios como la progresión gradual de la carga de entrenamiento, la especialización de los ejercicios, y la necesidad de períodos de recuperación entre sesiones de entrenamiento para lograr una adaptación óptima. También reconocen que cada persona responde de manera única al entrenamiento debido a factores como la herencia, nutrición y motivación.
2. Son guías y reglas que sistemáticamente dirigen el
proceso global de entrenamiento.
Se relacionan entre sí y garantizan la aplicación correcta
de todo el proceso de entrenamiento.
Están construidos sobre las bases de principios
pedagógicos de carácter general que condicionan
cualquier proceso de enseñanza y aprendizaje.
3. La mayoría de los autores concuerdan en varios de ellos, y
no dudan en señalar que se trata del resultado de años de
experiencia e investigación.
No tomarlos en cuenta es un pecado capital, y aquel que
no los aplique para planificar sus actividades o los
practique esta condenado al fracaso.
Aunque existen diferencias según los diferentes autores,
la bibliografía acuerda en señalar entre otros, los
siguientes principios:
4. El organismo humano funciona como un todo. Un fallo en un
órgano cualquiera desequilibra todo el sistema, por lo tanto,
es preciso....
Tener presente la evolución y el desarrollo de los distintos
sistemas (cardiovascular, respiratorio, neuromuscular...)
Desarrollar de forma simultanea y paralela las distintas
capacidades. Según sea el tipo de actividad desarrollado en la
vida diaria, convendrá dar mayor importancia a unas o a otras
5. Cada persona responde de forma diferente al mismo
entrenamiento por alguna de las siguientes razones:
a. Herencia
b. Maduración
c. Nutrición
d. Descanso y sueño
e. Nivel de condición
f. Motivación
g. Influencias ambientales
h. Edad
i. Sexo
6. Comprende la interdependencia entre
todos los sistemas y órganos humanos y
entre los proceso fisiológicos y
psicológicos. Un ejercicio, en relación con
su propia naturaleza y sus requerimientos
motores, siempre necesita de una
intervención armoniosa de varios
sistemas, por medio de varias capacidades
biomotoras y rasgos psicológicos.
Cuando los ejercicios se limitan a
desarrollar sólo una parte del cuerpo, se
provocan desequilibrios que pueden tener
efectos negativos para la salud.
7. También llamado principio del aumento progresivo de la
carga de entrenamiento o principio de la gradualidad
Este principio marca la elevación gradual de las cargas en
el entrenamiento, el aumento del volumen y la intensidad
de los ejercicios de entrenamiento realizados, la
complejidad de los movimientos, el crecimiento del nivel
de tensión psíquica.
8. La especialización, o los ejercicios
específicos para un deporte o
especialidad, llevan a alteraciones
morfológicas y funcionales
relacionadas con la especificidad del
deporte. El organismo humano se
adapta al tipo de actividad al que se
expone. Esta adaptación no es
solamente fisiológica sino que es
aplicable también a aspectos
técnicos, tácticos y psicológicos
9. Para alcanzar una adaptación óptima se debe repetir varias
veces la carga, ya que el organismo debe pasar por una serie
de modificaciones inminentes de sistemas funcionales
concretos antes de llegar a una adaptación estable.
Es preciso que exista una continuidad en la practica de
actividades físicas si queremos que nuestro organismo se
adapte al esfuerzo y mejore nuestra condición física.
10. Las actividades físicas provocan
adaptaciones en el organismo
siempre y cuando sean lo
suficientemente intensas para
suponer un esfuerzo significativo.
El efecto que produce un estímulo
(trabajo) en el organismo se concreta
en una situación de estrés (fatiga),
que genera una serie de reacciones
(síndrome de adaptación) que hacen
incrementar el nivel inicial de
rendimiento (sobrecompensación).
Toda persona tiene un punto a partir
del cual, la intensidad de un estímulo
puede producir modificaciones de
adaptación con efectos de
sobrecompensación.
11. Se requiere un cierto tiempo de
recuperación después de una
carga eficaz de entrenamiento
(sesión de entrenamiento) con el
fin de soportar una carga similar
o superior en condiciones
favorables en la siguiente sesión
de entrenamiento.